“Estamos viviendo en una vorágine de acontecimientos que son, además, muy trascendentes porque cuando se piensa que alguien pueda decir públicamente ‘vamos a sacar a todos los palestinos de Gaza para construir campos de golf’, estamos viviendo y oyendo algo que ni siquiera a Hitler se le hubiera ocurrido”, dijo en una conferencia.Padura ofreció la conferencia ‘Mil historias en La Habana’ como parte de las actividades de la Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar en la que lamentó que América vive momentos “turbios” en los que la política está dividiendo una integración cultural que han logrado los países en el continente gracias a expresiones como la literatura o la música.Padura consideró “un disparate” que Trump haya renombrado al Golfo de México, un área natural que conecta a Estados Unidos y México con el Mar Caribe, como Golfo de América.“La (música de) salsa ha logrado ser un movimiento que creó una nueva geografía para el Caribe, un Caribe geográfico donde ahora, por cierto, hay un Golfo de América no sé si ustedes saben cuál es, yo no estoy muy seguro de dónde queda (ríe) ¡qué disparate, qué disparate!”.El cubano charló con sus lectores en el paraninfo de la Universidad de Guadalajara, oeste de México, acerca de los 15 años de uno de sus libros más conocidos ‘El hombre que amaba a los perros’ y de su más reciente obra ‘Ir a la Habana’ en el que reconstruyó lo que fue la capital de Cuba y lo que es ahora.El autor aseguró que escribir de La Habana duele por todos los cambios que ha experimentado la ciudad que se encuentra en un momento distópico y agónico.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquí“Las ciudades evolucionan, crecen, tienen vida y también tienen alma, el alma de La Habana que era tan exultante, tan cultural tiene otras manifestaciones (...) y en el caso de La Habana física, de los edificios ese deterioro es muy evidente y está en un momento crítico, lo cual crea un signo de interrogación hacia el futuro de esa ciudad”, advirtió.Afirmó que hay también un deterioro cívico y moral que se manifiesta de diferentes maneras pero que es también una respuesta a la miseria que se vive en el país.“La miseria crea miserables y esto se está viendo en todo el país, especialmente en La Habana, es una pérdida de urbanidad y de lo que antes se le llamaban las buenas costumbres, eso se va perdiendo porque las estrategias de supervivencia que tiene que aplicar la gente, los obliga”, concluyó.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Shweta Besaya, de 22 años, estudia español desde 2023 y para ella escribir poesía es un modo de mejorar su castellano. "Cuando escribo, cuando estudio algo nuevo, yo trato de escribir un texto como un poema para practicar", explica.Shweta lee una de sus últimas creaciones poéticas en español, un largo poema sobre el amor en el que define este sentimiento universal con metáforas, algunas de ellas intrincadas. "Lo ha escrito para practicar con los conectores", explica uno de sus profesores, Kaustubh.Shweta reconoce que escribir poesía en una lengua que no es su idioma materno puede ser complejo. "Cuando estudio, escribo con palabras más simples. Es mi manera favorita para practicar", asegura.Para su compañero Devansh, de 21 años, que aprende español desde hace dos años y cinco meses en la sede del Cervantes en la capital india, la poesía ha sido algo que ha llegado con la lengua castellana. "No soy un lector de poesía habitualmente, pero después de aprender español yo he empezado a leer literatura y poesía también".Entre sus autores predilectos en español, Devansh cita al argentino Jorge Luis Borges, legendario cuentista, pero también autor de poesías; y al español Ángel González, fallecido en 2008.Ángel González resuena en la IndiaEl autor asturiano, galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1985, habría cumplido este 2025 cien años, y, por ello, el Instituto Cervantes de Nueva Delhi celebrará la figura del poeta ovetense con varios actos en torno a su figura, de la que es buena conocedora la directora del centro, María Gil Burman, ahijada del poeta.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíUno de los poemas más conocidos de González, 'Me basta así', fue elegido por Devansh para leerlo en su clase de español.El joven descubrió a González en uno de los estantes de la biblioteca del centro en Nueva Delhi, uno de los que cuentan con un mayor número de estudiantes en Asia, donde el español es una herramienta muy valorada en el ámbito laboral.Poesía cantadaPero no todo el mundo experimenta el placer de la poesía de la misma manera. Algunos se decantan por cantautores, contemporáneos como el español Álvaro Soler, o clásicos, como el cubano Silvio Rodríguez. Acompañar la memorización y la lectura de sus letras con sus melodías es una buena manera de practicar su español y de acercarse a la lírica.Y es que la poesía es capaz de armar políticamente a sociedades enteras, de hacer palabras con lo más inenarrable, y de acercar a hablantes alejados por miles de kilómetros."La poesía no tiene una lengua", opina Devansh, que considera que la literatura no es patrimonio de un idioma fijo. "Todos tenemos padres e hijos a los que podemos relatar lo que estamos leyendo", concluye.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La periodista y escritora Daniella Sánchez Russo fue nombrada como directora del Instituto Caro y Cuervo el pasado 8 de febrero. Sánchez ha trabajado como directora del Instutito de Lenguas de la Universidad del Norte y como directora de la coordinación de literatura del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes. Hablamos con ella sobre este cargo que representa uno de los más importantes dentro de la educación superior pública del país. ¿Cómo cree que su experiencia académica puede ser de ayuda en este nuevo cargo como directora del Caro y Cuervo?Hace más de tres años terminé mi doctorado en literatura hispanoamericana y mi recorrido de los tardíos 20 y del principio de los 30 fue sobre todo un recorrido académico, de estudio y de producción de lo académico. Yo no dejé de estudiar desde que empecé mi primera maestría en escritura creativa en la Universidad de Nueva York en el 2014 y estuve estudiando hasta el 2022, obviamente trabajando paralelamente en las universidades en las que estudiaba.Trabajé en el doctorado el tema del servicio doméstico, la historia del servicio doméstico y su reflejo en los temas de la novela latinoamericana del siglo XX. La pandemia me tomó de casualidad en Colombia y decidí quedarme. Tuve la oportunidad de regresar cuando abrían otra vez las universidades estadounidenses, pero yo sabía que yo quería trabajar en y por el país. Después se me dio la oportunidad de dirigir el Instituto de Idiomas de la Universidad del Norte, el primer cargo administrativo que tengo y me enseña lo que sé de la administración académica y universitaria, el gran reto de ese cargo, sobre todo, fue entender mi posición como líder y también cuál es mi estilo de liderazgo.Mientras estaba en la Universidad del Norte me llamó el ex ministro Juan David Correa para la coordinación de literatura del Ministerio, este cargo me empieza a enseñar el universo de lo público desde el servicio al ciudadano, cómo trabajar con otras instituciones, cómo se gestan proyectos que pueden ser ejecutados y que pueden ser viables. A partir de esto, me di cuenta que mi perfil es mixto (académico y administrativo), que se mueve en dos espacios y mi mente siempre está coexistiendo en esos dos espacios porque soy amiga de lo administrativo y de lo académico, cómplice de ambas y creo que eso le otorga un lugar especial este cargo en particular.Hablando del sector editorial y de su crisis, ¿cómo funciona la editorial del Instituto Caro y Cuervo y cómo esta crisis los afecta?Ahora mismo estamos en el proceso de repensarnos el sello editorial y el lugar de la imprenta patriótica. Ahora mismo existe el sello editorial que combina ambas, los oficios de edición del siglo XIX (la linotipia y la tipografía) y está propiamente el sello editorial.Lo primero que hice fue entablar una conversación con los equipos para saber qué se estaba publicando y después reorientar un poco el camino de ambos. En el sello editorial encontré 45 colecciones que fueron depuradas a 16 y finalmente a 6, estamos tratando de reducir el concepto de lo que publicamos.Por otra parte, decidimos que no vamos a sacar colecciones de nuevas voces de la literatura colombiana porque creo que a nosotros no nos compete ser una editorial de novedades, yo me pienso más bien la editorial del Caro y Cuervo como una editorial al servicio de la ciudadanía colombiana y de la academia y lo que hemos venido discutiendo es que el Caro y Cuervo más bien refleje el archivo de la biblioteca, que se reediten ediciones o libros que han sido muy necesarios en la historia de la academia colombiana, del estudio del español y de las lenguas nativas, por ejemplo.Con respecto al sello de la Maestría de Estudios Editoriales, también sé que los profesores tienen la intención de que los estudiantes piensen en el mundo independiente, obviamente hay muchos estudiantes que piensan en el universo comercial, pero también las posiciones en el universo de lo comercial son pocas así que tenemos que ver cómo somos productivos de otras maneras que no sean las maneras hegemónicas y creo que la maestría trabaja en conjunto con el sello para caminar en ese sentido.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquí.Hablando de la imprenta patriótica pensamos que es un universo mágico y queremos que se vuelva un laboratorio de investigación y creación para jóvenes, para personas interesadas en el arte y la edición, para editoriales independientes que tengan también una mirada hacia las artes clásicas. Además la imprenta será la herramienta para los talleres de edición comunitaria a nivel nacional.Existe la información de que los profesores del Caro y Cuervo tienen salario de investigadores, ¿esto es cierto? ¿qué se sabe de este tema?El Caro y Cuervo tiene ahora mismo cinco cargas de planta de investigadores, algunos dentro de sus funciones enseñan en las maestrías y otros no, algunos tienen un funcionamiento de investigación de tiempo completo dentro del Instituto, a veces se seleccionan proyectos de personas cuyas líneas de investigación son cercanas al Instituto Caro y Cuervo, pero que no necesariamente están dictando clase y por otro lado también tenemos profesores que están dictando clase y no necesariamente investigan.El Instituto Caro y Cuervo ahora mismo no tiene una planta docente como tal, contratamos por prestación de servicios a docentes para que dicten las clases dentro de las diferentes maestrías, lo cual no permite un escalafón docente, así que desde el año pasado se está trabajando en un proceso de modernización para que la planta docente exista.Mi prioridad, sobre todo, es que la planta docente quede en esta gestión, para ello tenemos que pasar un proyecto a diferentes instancias del estado acompañado de un escalafón docente y un régimen salarial que, si todo sale bien, nos permitiría que para el próximo año ya tuviéramos programada que va a existir y comenzar a contratar por medio de concursos públicos.¿Cuáles son los retos del Caro y Cuervo bajo su administración?Hay bastantes retos y proyectos, de algunos de esos ya hemos hablado, como toda la parte del sello editorial y la imprenta patriótica. Para mí, uno de los grandes proyectos de esta gestión es la documentación de lenguas nativas, esto se ha hecho anteriormente en el Caro y Cuervo, pero esta es la primera vez que tendremos un proyecto de inversión que va a superar los mil millones de pesos que significan el 14 % del presupuesto de inversión, entonces es un aporte significativo que estamos haciendo para la salvaguardia de las lenguas en Colombia.También tenemos que trabajar mucho en la biblioteca del Caro y Cuervo, debemos hacer una catalogación de las colecciones que están allí y de paso digitalizar este material, esa es otra de las prioridades de esta gestión para que los documentos sean más accesibles a la ciudadanía.Por otro lado, tenemos un plan de un doctorado conjunto entre la Universidad Nacional y el Caro y Cuervo en literatura y lingüística, también estamos trabajando el tema de la internacionalización ya que la oficina del Instituto en España cerró, queremos reabrirla pero en Brasil, será un proyecto de largo aliento pero de igual manera estamos trabajando en ello.¿Cómo afecta al Instituto Caro y Cuervo el cambio de administración en el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes?Lo primero me gustaría es separar esas dos personas que son el exministro Juan David Correa y la ministra Yannai Kadamani, porque los dos son personas absolutamente entregadas, inteligentes y apasionadas, pero creo que sí fue muy difícil perder al ministro Juan David Correa en el sentido que llevábamos un año y medio trabajando en las distintas direcciones bajo una línea muy clara de de proyección y de gestión.La ministra Kadamani sigue la línea del ministro Correa y creo que eso ayuda a que el traspaso sea más ligero, creo que la ministra tiene una mirada hacia la formación en escuelas, en instituciones educativas oficiales que puede fortalecer mucho al sector. Nosotros ya tuvimos una reunión con el equipo de la ministra para pensar cómo el Caro y Cuervo puede ayudar en el propósito de que la literatura llegue masivamente a los colegios públicos desde la formación a los profesores de los chicos de primaria y de secundaria acompañados de la Biblioteca Nacional y el Ministerio.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El modernismo literario es una de las corrientes más influyentes en la historia de la literatura hispanoamericana. Surgido a finales del siglo XIX y consolidado en las primeras décadas del siglo XX, este movimiento supuso una ruptura con las formas literarias precedentes, caracterizándose por su esteticismo, el uso innovador del lenguaje y la búsqueda de lo exótico. Aunque el modernismo comparte ciertos elementos con otros movimientos como el simbolismo y el parnasianismo franceses, su esencia está arraigada en una identidad latinoamericana que se rebelaba contra el realismo costumbrista y el naturalismo imperantes.Esta corriente literaria nació como una respuesta a la crisis de las formas tradicionales de expresión literaria y a la influencia de la literatura europea, especialmente la francesa. El lenguaje se vuelve más elaborado y sensorial, cargado de musicalidad y simbolismo. Los temas frecuentemente exploran lo exótico, lo mítico y lo aristocrático, alejándose de la realidad inmediata para sumergirse en mundos ideales o en una melancolía decadentista.El nicaragüense Rubén Darío es considerado el padre del modernismo, especialmente por su obra Azul... (1888), que marcó el inicio del movimiento. Con su dominio de la métrica, su ritmo musical y su renovación de la poesía en lengua española, Darío estableció las bases de una nueva estética. Otras de sus obras clave incluyen Prosas profanas (1896) y Cantos de vida y esperanza (1905), donde el modernismo alcanza su máxima expresión.Aunque Darío fue su máximo exponente, el modernismo tuvo numerosos seguidores y exponentes en toda América Latina. En Argentina, Leopoldo Lugones aportó un tono más experimental con Las montañas del oro (1897), mientras que en México, Amado Nervo desarrolló una poesía de gran sensibilidad en La amada inmóvil (1922).Las escritoras modernistas, aunque a menudo opacadas en los relatos tradicionales, también fueron fundamentales para el movimiento. Alfonsina Storni, por ejemplo, adoptó elementos modernistas en sus primeros libros, como La inquietud del rosal (1916) y El dulce daño (1918), antes de evolucionar hacia una poesía de mayor contenido feminista y social.Críticas al modernismoA pesar de su impacto, el modernismo no estuvo exento de críticas. Muchos intelectuales de la época lo consideraron un movimiento excesivamente esteticista, alejado de la realidad social y política de América Latina. José Enrique Rodó, aunque influenciado por el modernismo, criticó en Ariel (1900) la tendencia escapista del movimiento y llamó a los jóvenes latinoamericanos a equilibrar la belleza con un compromiso ético y humanista.Por otro lado, autores como Miguel de Unamuno y Ricardo Palma rechazaron el lenguaje ornamental y la tendencia cosmopolita del modernismo, considerándolo una moda pasajera que alejaba a la literatura hispanoamericana de sus raíces populares. Con la llegada de las vanguardias en los años 20, figuras como Jorge Luis Borges y Pablo Neruda cuestionaron la artificialidad del modernismo y promovieron una poesía más directa y comprometida con la realidad.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquí.El impacto del modernismo en la literatura y el cineEl modernismo transformó la literatura hispanoamericana al abrir nuevas posibilidades expresivas y sentar las bases de movimientos posteriores como las vanguardias y el realismo mágico. Su influencia no se limitó a la literatura; en el cine, por ejemplo, podemos ver ecos del modernismo en la forma en que se abordan los simbolismos, la estética visual y el ritmo narrativo. Películas como La invención de Morel (1974) basada en la novela de Bioy Casares (aunque posterior al modernismo, pero influenciada por él) retoman el gusto por lo onírico y lo exótico.Obras clave del modernismoAlgunas de las obras más representativas del modernismo incluyen:Azul... (1888), de Rubén Darío: Una colección de cuentos y poemas que marcan el inicio del modernismo, con una prosa refinada y una atmósfera exótica y musical.Prosas profanas (1896), de Rubén Darío: Poemario donde el autor explora temas mitológicos y sensuales con un lenguaje innovador y rítmico.Cantos de vida y esperanza (1905), de Rubén Darío: Una obra más madura y reflexiva que introduce preocupaciones existenciales y políticas dentro del modernismo.Las montañas del oro (1897) , de Leopoldo Lugones: Un poemario experimental que mezcla simbolismo y parnasianismo, con un lenguaje ricamente ornamentado.La amada inmóvil (1922), de Amado Nervo: Poemas dedicados a una amada fallecida, con una sensibilidad intensa y un tono melancólico.La inquietud del rosal (1916), de Alfonsina Storni: Su primer libro de poesía, donde combina la influencia modernista con una voz femenina emergente y una visión introspectiva.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
“En principio no era Ana-piel, en principio era un personaje ficticio en el que la piel hablaba y se refería a la habitante de esa piel, de esa habitación como una gemela, una suerte de personalidad múltiple. Pero poco a poco ese ‘yo’ fue tocando temas que he desarrollado anteriormente”, confesó Clavel para explicar que el texto publicado por Alfaguara se inspira en muchas lecturas, entre ellas ‘El yo-piel’ (1947) del psicoanalista francés Didier Anzieu.A través de esta conversación con su epidermis y de transformarla en un personaje literario, la también creadora de ‘Las Violetas son flores del deseo’ (2007) narró que fue ahí, en la profundidad de la piel, donde pudo “reivindicar el placer como una fuerza fundacional”, que considera se tiene “muy minimizada por la religión, la moral puritana que nos dice qué es lo que está bien y lo que no en el cuerpo”.“Pareciera que hay deseos que aunque surjan dentro de ti debes negar”, esclareció Clavel, una de las pioneras -desde su encuentro con la escritura hace más de 40 años- de la labor de poner luz sobre temas tabú que atraviesan el cuerpo, como el incesto, el deseo de la niñez, el dolor y la transgresión.Cómo escribir con la piel Reflexiva y con la mirada fija en la piel de sus manos, la mexicana pronunció el refrán hindú: “El deseo que no se cumple se pudre”, y por eso “hay que buscar maneras de ritualizar el deseo y de convertirnos en paraísos propios, darle lugar al placer, lejos de la invisibilización a la que nos está orillando la virtualidad”.“Y es mediante el arte, la literatura, el psicoanálisis, la amistad, el amor con lo que se ritualiza el deseo incumplido, a través del límite y de la contención encontrar una nueva forma, una alquimia de la sombra que la convierta en una realización luminosa”, animó la literata, pues ‘Autobiografía de la piel’ fue eso para ella.La piel comparte con el cerebro la misma capa embrionaria, el ectodermo, entonces ese sentido pensante que “abarca todo el cuerpo” se puede unir a la metáfora, y ahí en esa “zona liminal donde está lo tangible y lo intangible surge la revelación de una nueva mirada, de asimilar y escribir”, sostuvo.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.En ese laberinto de más de 200 páginas donde Clavel se pierde y se encuentra, como la Alicia de Lewis Carroll, hay un sinfín de paradas, algunas visitan la relación incestuosa con la figura del padre.Otras son más visuales y reflexionan pinturas de artistas incómodos para la época, como Balthus y su cuadro ‘Thérèse revant’ (1938), que exhibe la convergencia entre la inocencia, el deseo de la infancia y el rastro inicial de la menstruación.La deshumanización a velocidad luz Con este libro, la narradora también presenta muchas expresiones de la violencia y el odio que puede sufrir la piel, como los feminicidios en México, un país con un promedio de 10 mujeres asesinadas al día.Para Clavel, en este mundo donde “nos estamos deshumanizando a una velocidad luz” entre la virtualidad, la brutalidad y la devastación natural, es necesario “regresar a lo que nos da esencia como humanidad, y eso es la cercanía entre nosotros”.Entonces, comentó, para ella, “el mayor premio” es que el lector de la ‘Autobiografía de la piel’ goce de ese contacto con su epidermis, “que perciba su propio cuerpo, el placer que tiene la piel hacia adentro y la piel hacia afuera, por lo menos desde la imaginación”.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
En 1925, Alfonsina Storni publicó Ocre, un libro que significó una ruptura con su obra anterior y marcó su consolidación como una de las voces fundamentales de la poesía latinoamericana. A un siglo de su publicación, la resonancia de Storni sigue intacta, y su poesía continúa desafiando y dialogando con las nuevas generaciones. Pero, ¿quién fue Alfonsina Storni? ¿Cómo llegó hasta Ocre y qué significó este libro en su evolución literaria?Un nombre que significa disposiciónAlfonsina Storni nació el 29 de mayo de 1892 en Sala Capriasca, Suiza, en el seno de una familia inmigrante que pronto regresó a Argentina, estableciéndose en San Juan y posteriormente en Rosario. Su infancia estuvo marcada por la inestabilidad económica y por un padre ausente y melancólico. Desde joven, trabajó para sostener a su familia: fue mesera, costurera y obrera en una fábrica de gorras. Su inquietud artística la llevó a recorrer las provincias argentinas como actriz de teatro, experiencia que le permitió sumergirse en la literatura de Ibsen y Galdós, y que, según sus propias palabras, influyó en su sensibilidad y en su concepción de la escritura.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíSu independencia y determinación se manifestaron con fuerza cuando, a los 20 años, se trasladó sola a Buenos Aires con un hijo en brazos y un puñado de versos en la maleta. Allí publicó su primer libro, La inquietud del rosal (1916), que, aunque marcado por el modernismo tardío, ya mostraba una mirada introspectiva y una voz femenina que se distanciaba de los modelos tradicionales. Obras como El dulce daño (1918) y Languidez (1920) la colocaron en el centro de la escena literaria y le otorgaron premios y reconocimientos, pero fue con Ocre que su poesía adquirió una nueva dimensión.'Ocre': la madurez de la rebeldíaPublicado en 1925, Ocre significó un giro en la obra de Storni. Atrás quedaban los últimos ecos del modernismo y los versos impregnados de lamentos amorosos. En su lugar, surgió una voz más contenida, irónica y desgarradora, capaz de cuestionar los roles impuestos a la mujer con una lucidez feroz. Los poemas de Ocre no solo exhiben una mayor libertad formal, sino que también desafían los convencionalismos de género con versos que desmontan las estructuras patriarcales y revelan el desencanto de una mujer que ha conocido el amor, el abandono y la lucha por la autonomía.En este libro, la ironía y la mordacidad se convierten en herramientas de resistencia. La voz de Storni, aunque impregnada de dolor, se niega a la resignación. Ocre es el libro de una mujer que, sin perder la ternura, ha decidido enfrentar el mundo con la dureza de la verdad.Un legado que trasciende los siglosLa obra de Storni ha sido objeto de análisis y admiración por parte de poetas e intelectuales de diversas épocas. La chilena Gabriela Mistral, quien la visitó en Buenos Aires, quedó impresionada por su inteligencia y carácter: “Extraordinaria la cabeza, pero no por rasgos ingratos, sino por un cabello enteramente plateado, que hace el marco de un rostro de veinticinco años.”Juana de Ibarbourou, la gran poeta uruguaya, recordó su primera visita a Montevideo en 1920: “Levantó una ola de admiración y simpatía… Un núcleo de lo más granado de la sociedad y de la gente intelectual la rodeó siguiéndola por todos lados. Alfonsina, en ese momento, pudo sentirse un poco reina.”Horacio Quiroga, el escritor de la selva, la incluyó en su círculo cercano y, según testimonios, le propuso abandonar Buenos Aires y seguirlo a Misiones, a lo que ella respondió con incertidumbre, siguiendo finalmente el consejo de su amigo Quinquela Martín: “¿Con ese loco? ¡No!”.Pero más allá de la admiración de sus pares, la relevancia de Storni se sostiene en la vigencia de su poesía. Ocre inauguró un camino que luego profundizaría en Mundo de siete pozos (1934) y Mascarilla y trébol (1938), donde el verso libre y la experimentación marcaron su última etapa. Su poesía feminista, su mirada crítica sobre el amor romántico y su exploración de la identidad siguen interpelando a lectores de todo el mundo.Una poeta que se adelantó a su tiempoLa vida de Alfonsina Storni estuvo atravesada por la tensión entre la fragilidad y la fuerza, la ternura y la mordacidad, la sensibilidad y la resistencia. Enfrentó el cáncer con la misma entereza con la que enfrentó la vida, y el 25 de octubre de 1938 decidió sumergirse en el mar de Mar del Plata. Su último poema, Voy a dormir, enviado al diario La Nación, es un testimonio de despedida cargado de lirismo y serenidad.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
En un encuentro con periodistas celebrado en Barcelona, Strout, que acaba de publicar Tell me everything (Cuéntamelo todo), consideró que nunca antes un presidente había actuado como Trump, "al margen de la constitución, de los jueces, sin importarle absolutamente nada, tirando, sacando a gente del departamento de justicia o del FBI, poniendo a su gente".Preguntada si la nueva situación política en Estados Unidos puede afectar a sus próximas obras, dijo que sí, porque escribe novelas que transcurren en la actualidad y no dudó en afirmar que uno de sus personajes más queridos, la gruñona Olive Kitterdige, está en este momento "aterrorizada" ante lo que puede pasar dentro de un mes, en el próximo año.Strout detalló que, antes de bloquearse por la llegada de Trump, estaba con un nuevo proyecto: "Hay que ver cómo lo hago por la situación especial de mi país, porque si haces creación contemporánea tienes que tener claro cómo enfocarlo".Avanzó que la nueva historia transcurrirá en Massachusetts, algo "completamente nuevo" -hasta ahora había ubicado sus novelas en Maine o Nueva York- y con "nuevos personajes".💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Unir a Olive Kitteridge, Lucy Barton y Bob BurgessAhondando en su nuevo título, Tell me everything, confesó que nunca había pensado en escribirlo, en unir en una misma historia a tres de sus personajes más conocidos: la irascible Olive Kitterdige, la escritora Lucy Barton y el abogado Bob Burgess.Sin embargo, mientras paseaba un día por su Maine natal, pensó que los tres personajes, desde la pandemia, vivían en poblaciones cercanas y creyó que sería "divertido" que pudieran coincidir.Cuando encontró la voz narrativa, según explicó, todo fluyó y pudo juntar a los tres personajes sin ningún problema, con sus silencios, con sus pensamientos.En este título, los personajes se encuentran en la ficticia Crosby, donde Bob Burgess acepta el caso de un hombre solitario investigado por asesinato, mientras Lucy Barton se hace amiga de Olive Kitterdige, quien a sus noventa años vive en una comunidad de jubilados y tiene muchas ganas de explicarle a la escritora historias de su pasado.Avanzó que, aunque nunca planifica "absolutamente nada" de lo que serán sus novelas, tiene claro que su Olive Kitteridge, pese haber llegado ya a los noventa, nunca morirá por su pluma.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Del 25 de abril al 11 de mayo Corferias acogerá una nueva edición de la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo) 2025, el evento literario más importante del país que este año reunirá a 500 invitados nacionales e internacionales y a 24 países participantes.Bajo el lema “las palabras del cuerpo”, en esta ocasión la feria propone una reflexión sobre el cuerpo, “el lugar donde nos ocurren cosas maravillosas como la imaginación, el lenguaje, las emociones, el placer”, explica la feria en un comunicado en el que lleva el cuerpo a una exploración desde distintas miradas.Adriana Ángel Forero, directora de la Feria por parte de la CCL dice que “el cuerpo es el primer territorio que habitamos, pero pocas veces nos detenemos a explorarlo en su complejidad. En la FILBo 2025, queremos que la literatura nos ayude a entenderlo más allá de lo biológico: como espacio de memoria, identidad y resistencia. Desde la ciencia hasta la poesía, el cuerpo es el punto de encuentro de nuestras emociones, experiencias y transformaciones sociales”.Esta cita tradicional con la literatura contará con una selección diversa de autores nacionales e internacionales, cuyas obras han marcado la literatura contemporánea en distintos géneros y enfoques.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Entre los invitados destacados se encuentra la colombiana Laura Restrepo, autora de novelas que exploran las complejidades humanas, así como la puertorriqueña Yolanda Arroyo Pizarro, conocida por sus narraciones sobre migración y feminismo en el Caribe.Desde Argentina, participará el premiado escritor y poeta Andrés Neuman, ganador del Premio Alfaguara, mientras que Corea del Sur estará representada por Kim Un-su, autor del thriller literario Los planificadores, novela negra de gran impacto internacional y adaptada al cine.La literatura venezolana tendrá presencia con Arianna de Sousa-García, quien presentará su conmovedora obra Atrás queda la tierra, una novela de no ficción sobre la diáspora venezolana y el desarraigo. Por su parte, el ensayista alemán Fritz Breithaupt analizará el impacto de las narraciones en la sociedad con su libro El cerebro narrativo.Desde Europa llegarán también destacadas figuras como la germano-argentina María Cecilia Barbetta, premiada en Alemania por su producción literaria, y la escritora suiza Dorothée Elmiger, reconocida con el Premio Suizo de Literatura.El Caribe tendrá un espacio especial con la participación del poeta y narrador dominicano Frank Báez, creador del colectivo spoken word "El hombrecito". Mientras tanto, desde Uruguay, la académica y escritora Mabel Moraña hablará sobre temas de corporalidad y deseo en la literatura, aspectos que ha trabajado a lo largo de su carrera.La franja de Literatura Infantil y Juvenil contará con la presencia de figuras como la estadounidense Elise Kova, autora de Un duelo con el Lord de los Vampiros, y la italiana Susanna Mattiangeli, ganadora del Premio Andersen 2018. También se presentará el cubano Maikel Rodríguez, multipremiado por sus relatos de terror, y el argentino Luis Pescetti, reconocido con un Grammy Latino y el Premio ALIJA.Invitados desde EspañaEste evento literario, organizado por Corferias y la Cámara Colombiana del Libro (CCL), tendrá como país invitado de honor a España que llegará con la propuesta ‘Una cultura para la paz, con los otros y con el planeta’, lema del programa que organizan el Ministerio de Cultura del Gobierno de España y Acción Cultural Española (AC/E).Algunos de los escritores de gran impacto en la literatura de ese país que participarán en la FilBo 2025 son: Marta Sanz (Madrid), Premio Herralde de Novela y finalista del Premio Nadal, cuya obra indaga en la memoria y la identidad con una prosa incisiva. Clara Usón (Barcelona), autora de La hija del Este, Premio Nacional de la Crítica; su más reciente novela, Las fieras, explora una generación marcada por la violencia y el conflicto político.También asistirán Francesc Serés (Zaidín, Huesca), escritor aragonés en catalán, ganador del Premio Nacional de Literatura de Cataluña; Ismael Ramos (Mazaricos, La Coruña), una de las voces emergentes de la poesía española por la potencia de sus reflexiones sobre la identidad y el lenguaje; y Leire Bilbao (Ondárroa, Vizcaya), poeta en euskera, cuyo trabajo rescata la oralidad vasca con una mirada contemporánea. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Feria del Libro Bogotá (@filbogota)🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El próximo 23 de febrero a las 4:00 de la tarde, el Ensamble Barroco de Bogotá ofrecerá un concierto en la sede Centro del Teatro Libre como parte del cierre de su Ciclo de Conciertos: entre sinfonías y conciertos del Siglo XVIII. Este evento es una oportunidad única para que el público disfrute de la riqueza musical del período barroco, interpretada por una de las agrupaciones más destacadas en este género en Colombia.Fundado en 2013 por clavecinistas capitalinos, el Ensamble Barroco de Bogotá se ha consolidado como un referente en la interpretación históricamente informada de la música del siglo XVIII. La agrupación está integrada en su mayoría por músicos colombianos especializados en este estilo y ha trabajado con directores de renombre como Adrián Chamorro, Leila Schayegh, Aapo Häkkinen y Alfredo Bernardini.Su trayectoria incluye presentaciones en escenarios de gran prestigio, como el Festival Internacional de Música Clásica de Bogotá y el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo. Además, ha colaborado con reconocidas compañías y orquestas internacionales, destacándose por su excelencia artística.El programa del concierto en el Teatro Libre ofrece una selección de obras de compositores alemanes e italianos, con piezas orquestales y conciertos con solistas en flauta y violín.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíEl repertorio incluye la sinfonía en sol mayor FWV M: G4, de Johann Friedrich Fasch; el Concerto grosso opus 6 n°3, de Arcangelo Corelli; el Concierto para flauta dulce y violín, de Johann Gottlieb Graun; L'Estro Armónico: Concerto opus 3 n°2, de Antonio Vivaldi y la sinfonía H 659, de Carl Philipp Emanuel Bach.Los solistas invitados para esta presentación serán Julien Faure (flauta), Santiago Medina (concertino del Ensamble Barroco de Bogotá), Laura Nieto y Carlos Torres (violines), quienes garantizarán una ejecución magistral de estas piezas.Este evento, impulsado por la Beca LEP de Circulación Filarmónica Grupo de Cámara 2024, refuerza el compromiso del Ensamble Barroco de Bogotá con la difusión de la música barroca y su acceso a nuevos públicos. La invitación está abierta para los amantes de la música clásica y para quienes deseen descubrir la belleza del barroco en una tarde inolvidable de música en vivo. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Teatro Libre (@teatrolibre)🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"La representación en las artes es muy importante", dijo Quesada en entrevista en Los Ángeles, durante la promoción de su sencillo "Like a Bird", nominado a mejor canción por el drama carcelario "Las vidas de Sing Sing"."Si soy un niño viendo MTV, películas o televisión, cuando ves ahí a gente que realmente luce como tú, que viene de tu cultura, eso inspira a la siguiente generación", apuntó Quesada, oriundo de la texana Laredo, fronteriza con México y con profunda influencia latina.El también guitarrista de Black Pumas interpreta junto al cantante Abraham Alexander "Like a Bird", una poderosa balada que cierra la cinta. Aunque el dúo no tenía la mirada puesta en la temporada de premios de la industria cinematográfica cuando se sumó al proyecto, Quesada reconoce que "ser nominado a un Óscar por la canción es surrealista". "Es difícil de procesar (...) A veces me despierto y no lo puedo creer", comentó.Nominado varias veces al Grammy, y con un gramófono en el bolsillo (junto al Grupo Fantasma), el versátil músico explica que la de la Academia "es una nominación muy diferente", un reconocimiento tan particular que lo hace sentir como uno en un millón."Las vidas de Sing Sing" también está nominada en las categorías de mejor actor (Colman Domingo) y de mejor guion adaptado."Un gran honor""Like a Bird" pelea la codiciada estatuilla dorada con "El Mal" y "Mi camino", de "Emilia Pérez", "Never Too Late" ("Elton John: Never Too Late"), y "The Journey" ("The Six Triple Eight"), de la compositora Diane Warren, quien nunca ha vencido en la categoría a la cual ha sido nominada dieciséis veces.Inspirada en la trama de "Las vidas de Sing Sing", la canción encapsula de forma metafórica el anhelo por la libertad.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíLa cinta está inspirada en la historia verdadera de Divine G (interpretado por Colman Domingo), un hombre preso por un crimen que no cometió y quien encuentra una razón de vida en el grupo de teatro de la cárcel.Exprisioneros que participaron en el programa artístico, como el coprotagonista Clarence Maclin, el propio Divine G y el activista JJ Velazquez, actuaron en la película dirigida por Greg Kwedar.Para Quesada, quien dice creer firmemente en la rehabilitación a través de las artes y en segundas oportunidades, era una invitación imposible de rechazar."Si ves ahora, con los incendios en Los Ángeles, tienes reclusos combatiendo las llamas por 10 o 20 dólares al día, y luego tienen que volver a la cárcel", comentó. "¡Combaten estos incendios para (proteger) casas que no pueden ni siquiera costear!", exclamó. "Y tienes esta película sobre presos que realmente los humaniza", destacó.Sumarse al proyecto, sin embargo, fue complicado debido a su ocupada agenda, así como la de Alexander. "Era como si nunca pudiésemos coincidir en el mismo lugar. Él venía a mi estudio, pero yo me había ido de la ciudad. Luego él se iba, y yo regresaba", refirió Quesada quien trabajó en la pieza hasta el último minuto.Ganar el Óscar sería "un gran honor", admite el guitarrista, pero no de forma individual sino en el contexto de un proyecto significativo. "Somos parte de algo mayor, que es el mensaje de la película".🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
“Estos años han sido un infierno, con todo tipo de problemas; físicos, mentales, emocionales, existenciales, profesionales, y que empezaron por la pandemia”, sostuvo el compositor nacido en Panamá, que también aseguró haberse “reconstruido” tras haber estado ocho años separado de la música.Un periodo en el que Bosé fue cancelado por parte de su público, debido a sus opiniones en contra de las vacunas y los protocolos de sanidad para prevenir la covid-19, unos años que califica como “horrendos para todos” y en los que el creador de clásicos del pop como ‘Súper Superman’ (1979) aprovechó para “poner pausa” y “ordenarse a sí mismo”.“No hubiese nunca jamás tomado la decisión de volver si no hubiese sentido que estaba todo listo, encajado (...) Tomé una decisión, entre otras, que es que voy a aprender a quererme. Porque no estaba bien, nada. Estaba en una situación de una vida muy desordenada, salvaje. Ya no había diversión, no había estímulo”, confiesa a sus 68 años.Este nuevo Bosé, “reconstruido con las mismas piezas” de ese juguete perdido, volvió a anunciar un nuevo disco que todavía no ha sido lanzado al mercado, además de la ya reconocida serie ‘Bosé Renacido’ (2023) con la que el cantante se mostró como “un ser solar positivo, luminoso, lleno de fuerza, energía y saludable”.El éxito de Bosé parece no tener vigencia, pues su fama ya está agotando los boletos de esta gira que abre en México y con la que también volverá a Estados Unidos a partir de un estreno en Nueva York en el famoso teatro del Madison Square Garden y, cómo no, a España, país del que “desapareció musicalmente”.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíLa industria ya no respalda“Los artistas o personas de la calle hoy en día sí tienen bastante con colocar un tema en internet y que les de ‘likes’ suficientes para poder publicar el siguiente (...) La gente que hace música hoy es admirable porque no tienen industria que les respalde, están pillados por todos lados, despreciados”, radiografía sobre el panorama musical español.Es el escenario de “polarización” que sufre España lo que no permite a los nuevos referentes culturales comprometerse con lo que sucede en el mundo, por eso afirma "que ni saben lo que es la política". "Yo estoy convencido de que saben mucho de redes y de ‘likes’”, apuntó con ironía.Bosé augura lejanos esos tiempos de la transición democrática de la España de las décadas de 1970 y 1980, donde había “libertad de expresión absoluta”, en la que no se concebían censuras, como demuestra ‘Amante bandido’ (1984), un icono permanente en la expresión de la identidad sexual para la comunidad LGTBI en el país.Entre sus luchas por la libertad también está la gestación subrogada, método con el que tuvo varios hijos con su expareja Nacho Palau, quien le demandó por el reconocimiento de la paternidad de sus cuatro hijos, es así que Bosé ha llegado a desafiar no solo a la sociedad, sino a gobiernos con los que por su activismo “pudo influir en determinadas decisiones”. Sin embargo, a la pregunta de si faltan más símbolos como Bosé este responde: “No sé yo qué decirte chico, falta de todo en este momento”.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El año pasado nos maravillamos con "Mi amigo robot", la historia de Dog, en la que sin decir una sola palabra, conversamos sobre los lazos que construimos, el amor, el cuidado y los adioses inevitables, sobre querer y no poseer.Ahora, de nuevo sin hablar, sin una animación demasiado producida y con los animales como protagonistas, "Flow" nos lleva por un viaje hacia la belleza y también hacia los amigos que hacemos en el camino, los que incluso se convierten en familia y soporte ante la adversidad.En un futuro distópico, donde solo quedan rastros de los humanos, un gato negro de ojos color miel habita una casa donde su especie era más que querida, casi venerada. Siluetas de gatos, bocetos de este felino en cientos de hojas, gatos en lugar de gnomos en el jardín y una estatua enorme de un gato. Así es el hogar del gato que pronto se ve amenazado.En esta historia no nos cuestionamos el motivo de las inundaciones o de la desaparición de la raza humana, nos subimos en un pequeño barco para acompañar la travesía del gato, que en medio del agua se va encontrando con curiosos animales con quienes comparte un viaje hacia lo incierto y lo desconocido.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíUn gato, un chigüiro, un lémur anillado, un perro labrador y un ave recorren los vestigios de la humanidad, en un viaje atravesado por sus personalidades, asociadas con cada especie, con momentos de ternura y desafíos que mantienen la tensión durante la película.Tanto este particular grupo como los espectadores, esperamos un final amable para cada animal, sentimos empatía y la vemos a través de la mirada en animación 3D minimalista, similar a la de los videojuegos antes del hiperrealismo y la realidad virtual.Nominada a los premios Óscar en las categorías de Mejor película internacional y Mejor película de animación, “Flow” está dirigida por el cineasta y animador Gints Zilbalodis, quien además coescribió esta historia junto a Matiss Kaza y compuso la música en colaboración con el percusionista Rihards Zalupe.Desde su estreno en 2024, esta película ha ido trazando su camino hacia los Óscar y convirtiéndose en favorita. Por mencionar algunos de sus logros, fue seleccionada en la Sección Un Certain Regard del Festival de Cannes en y en la Sección Oficial en el Toronto Film Festival y en el Festival de Londres (sección Journey).En las últimas semanas, compitió en los Premios Goya a Mejor película europea, donde la ganadora fue "Emilia Peréz" y se quedó con el Globo de oro a Mejor película animada. Ahora, se enfrenta a Intensamente 2, Robot salvaje, Memorias de un caracol y Wallace y Gromit: La venganza se sirve con plumas en la categoría de animación de los Óscar.Si quiere conocer más sobre el estilo del director Zilbalodis le recomendamos Away, otra historia de aventura y fantasía donde el letón está a cargo de la dirección, música, fotografía, y guión y narra el viaje de un joven y una ave que intentan escapar de un espíritu.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Después de ocho meses de mantenimiento de rutina, el Teatro Colón de Bogotá reabre sus puertas como epicentro de la actividad cultural en Colombia. Durante este período, se llevaron a cabo tareas de conservación, incluyendo el cambio de tapetes, la revisión de humedades o la aplicación de capas de pintura. Su reapertura oficial será el 25 de febrero, dando inicio a una temporada de grandes espectáculos con La Vorágine, una ópera inspirada en la icónica novela de José Eustasio Rivera. En marzo, el teatro se transformará por completo con la llegada de Sun & Sea, la innovadora ópera-performance lituana que ha cautivado al mundo.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíLa Vorágine: una ópera sobre la selvaEl regreso del Colón comienza con el estreno de La Vorágine, una adaptación operística de la obra cumbre de la literatura colombiana. Bajo la dirección del colombiano Pedro Salazar y con música del compositor brasileño João Guilherme Ripper, esta producción es una coproducción del Centro Nacional de las Artes y La Compañía Estable. La dirección musical estará a cargo de Luiz Fernando Malheiro, una de las figuras más destacadas de la ópera latinoamericana.Esta ópera ofrece una nueva mirada a un género tradicionalmente vinculado a Europa, destacando una perspectiva latinoamericana sobre la exploración, la selva y la lucha por la supervivencia. Su estreno en el Colón marcará el cierre del ciclo "Vorágine Expandida" del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, con el cual se conmemoraron los 100 años de la novela a través de diversas creaciones escénicas. Las funciones serán el 25 y 27 de febrero, y el 1 y 2 de marzo.Sun & Sea: una playa dentro del Teatro ColónLuego del estreno de La Vorágine, el Festival NO Convencional traerá a Bogotá Sun & Sea (Sol & Mar), una aclamada ópera-performance lituana ganadora del León de Oro en la Bienal de Arte de Venecia 2019. Del 20 al 23 de marzo, la platea del Colón se transformará en una playa, donde veraneantes en trajes de baño interpretarán canciones que, con humor e ironía, abordan temas urgentes como el cambio climático, el impacto del turismo y la alienación del mundo moderno.Las entradas para ambos eventos están a la venta en este enlace de tuboleta.com y para más información puede visitar la página y las redes sociales del Centro Nacional de las Artes.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
A mí, tan luego, hablarme del finado Francisco Real. Yo lo conocí, y eso que éstos no eran sus barrios porque el sabía tallar más bien por el Norte, por esos lados de la laguna de Guadalupe y la Batería. Arriba de tres veces no lo traté, y ésas en una misma noche, pero es noche que no se me olvidará, como que en ella vino la Lujanera porque sí a dormir en mi rancho y Rosendo Juárez dejó, para no volver, el Arroyo. A ustedes, claro que les falta la debida esperiencia para reconocer ése nombre, pero Rosendo Juárez el Pegador, era de los que pisaban más fuerte por Villa Santa Rita. Mozo acreditao para el cuchillo, era uno de los hombres de don Nicolás Paredes, que era uno de los hombres de Morel. Sabía llegar de lo más paquete al quilombo, en un oscuro, con las prendas de plata; los hombres y los perros lo respetaban y las chinas también; nadie inoraba que estaba debiendo dos muertes; usaba un chambergo alto, de ala finita, sobre la melena grasienta; la suerte lo mimaba, como quien dice. Los mozos de la Villa le copiábamos hasta el modo de escupir. Sin embargo, una noche nos ilustró la verdadera condición de Rosendo.Parece cuento, pero la historia de esa noche rarísima empezó por un placero insolente de ruedas coloradas, lleno hasta el tope de hombres, que iba a los barquinazos por esos callejones de barro duro, entre los hornos de ladrillos y los huecos, y dos de negro, dele guitarriar y aturdir, y el del pescante que les tiraba un fustazo a los perros sueltos que se le atravesaban al moro, y un emponchado iba silencioso en el medio, y ése era el Corralero de tantas mentas, y el hombre iba a peliar y a matar. La noche era una bendición de tan fresca; dos de ellos iban sobre la capota volcada, como si la soledá juera un corso. Ese jue el primer sucedido de tantos que hubo, pero recién después lo supimos. Los muchachos estábamos dende tempraño en el salón de Julia, que era un galpón de chapas de cinc, entre el camino de Gauna y el Maldonado. Era un local que usté lo divisaba de lejos, por la luz que mandaba a la redonda el farol sinvergüenza, y por el barullo también. La Julia, aunque de humilde color, era de lo más conciente y formal, así que no faltaban músicantes, güen beberaje y compañeras resistentes pal baile. Pero la Lujanera, que era la mujer de Rosendo, las sobraba lejos a todas. Se murió, señor, y digo que hay años en que ni pienso en ella, pero había que verla en sus días, con esos ojos. Verla, no daba sueño.La caña, la milonga, el hembraje, una condescendiente mala palabra de boca de Rosendo, una palmada suya en el montón que yo trataba de sentir como una amistá: la cosa es que yo estaba lo más feliz. Me tocó una compañera muy seguidora, que iba como adivinándome la intención. El tango hacía su voluntá con nosotros y nos arriaba y nos perdía y nos ordenaba y nos volvía a encontrar. En esa diversión estaban los hombres, lo mismo que en un sueño, cuando de golpe me pareció crecida la música, y era que ya se entreveraba con ella la de los guitarreros del coche, cada vez más cercano. Después, la brisa que la trajo tiró por otro rumbo, y volví a atender a mi cuerpo y al de la compañera y a las conversaciones del baile. Al rato largo llamaron a la puerta con autoridá, un golpe y una voz. En seguida un silencio general, una pechada poderosa a la puerta y el hombre estaba adentro. El hombre era parecido a la voz.Para nosotros no era todavía Francisco Real, pero sí un tipo alto, fornido, trajeado enteramente de negro, y una chalina de un color como bayo, echada sobre el hombro. La cara recuerdo que era aindiada, esquinada. Me golpeó la hoja de la puerta al abrirse. De puro atolondrado me le jui encima y le encajé la zurda en la facha, mientras con la derecha sacaba el cuchillo filoso que cargaba en la sisa del chaleco, junto al sobaco izquierdo. Poco iba a durarme la atropellada. El hombre, para afirmarse, estiró los brazos y me hizo a un lado, como despidiéndose de un estorbo. Me dejó agachado detrás, todavía con la mano abajo del saco, sobre el arma inservible. Siguió como si tal cosa, adelante. Siguió, siempre más alto que cualquiera de los que iba desapartando, siempre como sin ver. Los primeros -puro italianaje mirón- se abrieron como abanico, apurados. La cosa no duró. En el montón siguiente ya estaba el Inglés esperándolo, y antes de sentir en el hombro la mano del forastero, se le durmió con un planazo que tenía listo. Jue ver ese planazo y jue venírsele ya todos al humo. El establecimiento tenía más de muchas varas de fondo, y lo arriaron como un cristo, casi de punta a punta, a pechadas, a silbidos y a salivazos. Primero le tiraron trompadas, después, al ver que ni se atajaba los golpes, puras cachetadas a mano abierta o con el fleco inofensivo de las chalinas, como riéndose de él. También, como reservándolo pa Rosendo, que no se había movido para eso de la paré del fondo, en la que hacía espaldas, callado. Pitaba con apuro su cigarrillo, como si ya entendiera lo que vimos claro después. El Corralero fue empujado hasta él, firme y ensangrentado, con ése viento de chamuchina pifiadora detrás. Silbando, chicoteado, escupido, recién habló cuando se enfrentó con Rosendo. Entonces lo miró y se despejo la cara con el antebrazo y dijo estas cosas:💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíYo soy Francisco Real, un hombre del Norte. Yo soy Francisco Real, que le dicen el Corralero. Yo les he consentido a estos infelices que me alzaran la mano, porque lo que estoy buscando es un hombre. Andan por ahí unos bolaceros diciendo que en estos andurriales hay uno que tiene mentas de cuchillero , y de malo , y que le dicen el Pegador. Quiero encontrarlo pa que me enseñe a mí, que soy naides, lo que es un hombre de coraje y de vista.Dijo esas cosas y no le quitó los ojos de encima. Ahora le relucía un cuchillón en la mano derecha, que en fija lo había traído en la manga. Alrededor se habían ido abriendo los que empujaron, y todos los mirábamos a los dos, en un gran silencio. Hasta la jeta del milato ciego que tocaba el violín, acataba ese rumbo.En eso, oigo que se desplazaban atrás, y me veo en el marco de la puerta seis o siete hombres, que serían la barra del Corralero. El más viejo, un hombre apaisanado, curtido, de bigote entrecano, se adelantó para quedarse como encandilado por tanto hembraje y tanta luz, y se descubrió con respeto. Los otros vigilaban, listos para dentrar a tallar si el juego no era limpio.¿Qué le pasaba mientras tanto a Rosendo, que no lo sacaba pisotiando a ese balaquero? Seguía callado, sin alzarle los ojos. El cigarro no sé si lo escupió o si se le cayó de la cara. Al fin pudo acertar con unas palabras, pero tan despacio que a los de la otra punta del salón no nos alcanzo lo que dijo. Volvió Francisco Real a desafiarlo y él a negarse. Entonces, el más muchacho de los forasteros silbó. La Lujanera lo miró aborreciéndolo y se abrió paso con la crencha en la espalda, entre el carreraje y las chinas, y se jue a su hombre y le metió la mano en el pecho y le sacó el cuchillo desenvainado y se lo dió con estas palabras:Rosendo, creo que lo estarás precisando.A la altura del techo había una especie de ventana alargada que miraba al arroyo. Con las dos manos recibió Rosendo el cuchillo y lo filió como si no lo reconociera. Se empinó de golpe hacia atrás y voló el cuchillo derecho y fue a perderse ajuera, en el Maldonado. Yo sentí como un frío. De asco no te carneo dijo el otro, y alzó, para castigarlo, la mano. Entonces la Lujanera se le prendió y le echó los brazos al cuello y lo miró con esos ojos y le dijo con ira:Dejalo a ése, que nos hizo creer que era un hombre.Francisco Real se quedó perplejo un espacio y luego la abrazó como para siempre y les gritó a los musicantes que le metieran tango y milonga y a los demás de la diversión, que bailaramos. La milonga corrió como un incendio de punta a punta. Real bailaba muy grave, pero sin ninguna luz, ya pudiéndola. Llegaron a la puerta y grito:¡Vayan abriendo cancha, señores, que la llevo dormida!- dijo, y salieron sien con sien, como en la marejada del tango, como si los perdiera el tango. Debí ponerme colorao de vergüenza. Dí unas vueltitas con alguna mujer y la planté de golpe. Inventé que era por el calor y por la apretura y jui orillando la paré hasta salir. Linda la noche, ¿para quién? A la vuelta del callejón estaba el placero, con el par de guitarras derechas en el asiento, como cristianos. Dentré a amargarme de que las descuidaran así, como si ni pa recoger changangos sirviéramos. Me dio coraje de sentir que no éramos naides. Un manotón a mi clavel de atrás de la oreja y lo tiré a un charquito y me quedé un espacio mirándolo, como para no pensar en más nada. Yo hubiera querido estar de una vez en el día siguiente, yo me quería salir de esa noche. En eso, me pegaron un codazo que jue casi un alivio. Era Rosendo, que se escurría solo del barrio.Vos siempre has de servir de estorbo, pendejo me rezongó al pasar, no sé si para desahogarse, o ajeno. Agarró el lado más oscuro, el del Maldonado; no lo volví a ver más.Me quedé mirando esas cosas de toda la vida cielo hasta decir basta, el arroyo que se emperraba solo ahí abajo, un caballo dormido, el callejón de tierra, los hornos y pensé que yo era apenas otro yuyo de esas orillas, criado entre las flores de sapo y las osamentas. ¿Qué iba a salir de esa basura sino nosotros, gritones pero blandos para el castigo, boca y atropellada no más? Sentí después que no, que el barrio cuanto más aporriao, más obligación de ser guapo.¿Basura? La milonga déle loquiar, y déle bochinchar en las casas, y traía olor a madreselvas el viento. Linda al ñudo la noche. Había de estrellas como para marearse mirándolas, una encima de otras. Yo forcejiaba por sentir que a mí no me representaba nada el asunto, pero la cobardía de Rosendo y el coraje insufrible del forastero no me querían dejar. Hasta de una mujer para esa noche se había podido aviar el hombre alto. Para esa y para muchas, pensé, y tal vez para todas, porque la Lujanera era cosa seria. Sabe Dios qué lado agarraron. Muy lejos no podían estar. A lo mejor ya se estaban empleando los dos, en cualesquier cuneta.Cuando alcancé a volver, seguía como si tal cosa el bailongo. Haciéndome el chiquito, me entreveré en el montón, y vi que alguno de los nuestros había rajado y que los norteros tangueaban junto con los demás. Codazos y encontrones no había, pero si recelo y decencia. La música parecia dormilona, las mujeres que tangueaban con los del Norte, no decían esta boca es mía. Yo esperaba algo, pero no lo que sucedió.Ajuera oímos una mujer que lloraba y después la voz que ya conocíamos, pero serena, casi demasiado serena, como si ya no juera de alguien, diciéndole:Entrá, m'hijay luego otro llanto. Luego la voz como si empezara a desesperarse.¡Abrí te digo, abrí gaucha arrastrada, abrí, perra! se abrió en eso la puerta tembleque, y entró la Lujanera, sola.Entró mandada, como si viniera arreándola alguno. La está mandando un ánima dijo el Inglés.Un muerto, amigo dijo entonces el Corralero.El rostro era como de borracho. Entró, y en la cancha que le abrimos todos, como antes, dió unos pasos marcado alto, sin ver y se fue al suelo de una vez, como poste. Uno de los que vinieron con él, lo acostó de espaldas y le acomodó el ponchito de almohada. Esos ausilios lo ensuciaron de sangre. Vimos entonces que traiba una herida juerte en el pecho; la sangre le encharcaba y ennegrecia un lengue punzó que antes no le oservé, porque lo tapó la chalina. Para la primera cura, una de las mujeres trujo caña y unos trapos quemados. El hombre no estaba para esplicar. La Lujanera lo miraba como perdida, con los brazos colgando. Todos estaban preguntándose con la cara y ella consiguió hablar. Dijo que luego de salir con el Corralero, se jueron a un campito, y que en eso cae un desconocido y lo llama como desesperado a pelear y le infiere esa puñalada y que ella jura que no sabe quién es y que no es Rosendo. ¿Quién le iba a creer? El hombre a nuestros pies se moría. Yo pensé que no le había temblado el pulso al que lo arregló. El hombre, sin embargo, era duro. Cuando golpeó, la Julia había estao cebando unos mates y el mate dió la vuelta redonda y volvío a mi mano, antes que falleciera. "Tápenme la cara", dijo despacio, cuando no pudo más. Sólo le quedaba el orgullo y no iba a consentir que le curiosearan los visajes de la agonía. Alguien le puso encima el chambergo negro, que era de copa altísima. Se murió abajo del chambergo, sin queja. Cuando el pecho acostado dejó de subir y bajar, se animaron a descubrirlo. Tenía ese aire fatigado de los difuntos; era de los hombres de más coraje que hubo en aquel entonces, dende la Batería hasta el Sur; en cuanto lo supe muerto y sin habla, le perdí el odio.Para morir no se precisa más que estar vivo dijo una del montón, y otra, pensativa también:Tanta soberbia el hombre, y no sirve más que pa juntar moscas. Entonces los norteros jueron diciéndose un cosa despacio y dos a un tiempo la repitieron juerte después.Lo mató la mujer.Uno le gritó en la cara si era ella, y todos la cercaron. Ya me olvidé que tenía que prudenciar y me les atravesé como luz. De atolondrado, casi pelo el fiyingo. Sentí que muchos me miraban, para no decir todos. Dije como con sorna:Fijensén en las manos de esa mujer. ¿Que pulso ni qué corazón va a tener para clavar una puñalada? Añadí, medio desganado de guapo:¿Quién iba a soñar que el finao, que a según dicen, era malo en su barrio, juera a concluir de una manera tan bruta y en un lugar tan enteramente muerto como éste, ande no pasa nada, cuando no cae alguno de ajuera para distrairnos y queda para la escupida después?El cuero no le pidió biaba a ninguno. En eso iba creciendo en la soledá un ruido de jinetes. Era la policía. Quien más, quien menos, todos tendrían su razón para no buscar ese trato, porque determinaron que lo mejor era traspasar el muerto al arroyo. Recordarán ustedes aquella ventana alargada por la que pasó en un brillo el puñal. Por ahí paso después el hombre de negro. Lo levantaron entre muchos y de cuantos centavos y cuanta zoncera tenía lo aligeraron esas manos y alguno le hachó un dedo para refalarle el anillo. Aprovechadores, señor, que así se le animaban a un pobre dijunto indefenso, después que lo arregló otro más hombre. Un envión y el agua torrentosa y sufrida se lo llevó. Para que no sobrenadara, no se si le arrancaron las vísceras, porque preferí no mirar. El de bigote gris no me quitaba los ojos. La Lujanera aprovechó el apuro para salir. Cuando echaron su vistazo los de la ley, el baile estaba medio animado. El ciego del violín le sabía sacar unas habaneras de las que ya no se oyen. Ajuera estaba queriendo clariar. Unos postes de ñandubay sobre una lomada estaban como sueltos, porque los alambrados finitos no se dejaban divisar tan temprano. Yo me fui tranquilo a mi rancho, que estaba a unas tres cuadras. Ardía en la ventana una lucecita, que se apagó en seguida. Te juro que me apuré a llegar, cuando me di cuenta. Entonces, Borges, volví a sacar el cuchillo corto y filoso que yo sabía cargar aquí, en el chaleco, junto al sobaco izquierdo, y le pegué otra revisada despacio, y estaba como nuevo, inocente, y no quedaba ni un rastrito de sangre.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La mujer rotaLunes 13 de septiembre. Las Salinas.Extraordinario decorado el de este bosquejo de ciudad abandonada en los confines de un pueblo y al margen de los siglos. Bordeé la mitad del hemiciclo, subí por las escalinatas del pabellón central: contemplé largo rato la sobria majestad de estas construcciones edificadas con fines utilitarios y que nunca sirvieron para nada. Son sólidas, son reales: sin embargo, su abandono las transforma en un simulacro fantástico: uno se pregunta de qué. La hierba tibia, bajo el cielo de otoño, y el olor de las hojas muertas me aseguraban que no había abandonado este mundo, pero había retrocedido doscientos años atrás. Fui a buscar unas cosas en el auto; extendí una manta, almohadones, puse la radio a transistores, y fumé mientras escuchaba Mozart. Detrás de dos o tres ventanas polvorientas adivino presencias: sin duda son oficinas. Un camión se detuvo ante uno de los portones, unos hombres abrieron, cargaron bolsas en la parte trasera del vehículo. Ninguna otra cosa ha alterado el silencio de esta siesta: ni un visitante. El concierto terminado, me puse a leer. Doble sensación de extrañamiento: me iba muy lejos, a orillas de un río desconocido; alzaba la vista y volvía a encontrarme en medio de estas piedras, lejos de mi vida.Porque lo más sorprendente es mi presencia aquí, la alegría de esta presencia. La soledad de este regreso a París me atemorizaba. Hasta ahora, a falta de Maurice, las niñas me acompañaban en todos mis viajes. Creí que iba a echar de menos los entusiasmos de Colette, las exigencias de Lucienne. Y resulta que me es devuelta una calidad de alegría olvidada. Mi libertad me rejuvenece veinte años. A tal punto que, cerrado el libro, me puse a escribir para mí misma, como a los veinte años. Nunca dejo a Maurice sin apenarme. El congreso dura solamente una semana y, sin embargo, mientras íbamos en auto desde Mougins hasta el aeródromo de Niza, tenía la garganta anudada. El también estaba emocionado. Cuando el altoparlante llamó a los pasajeros para Roma, me abrazó fuertemente: "No te mates con el auto. —No te mates en el avión." Antes de desaparecer, volvió una vez más la cabeza hacia mí: en sus ojos había una ansiedad que me ganó. El despegue me pareció dramático. Los cuatrimotores alzan vuelo lentamente, en un largo hasta la vista. El jet se arrancó del suelo con la brutalidad de un adiós.Pero pronto empecé a alegrarme. No, la ausencia de mis hijas no me entristecía: al contrario. Podía conducir tan rápidamente, tan lentamente como quería, ir adónde deseaba, detenerme cuando me daba la gana. Decidí pasar la semana vagabundeando. Me levanto con la luz. El auto me espera en la calle, en el patio, como un animal fiel; está húmedo de rocío; le seco los ojos y atravieso alegremente el día que comienza a solearse. A mi lado está el bolso blanco con los mapas Michelin, la Guía Azul, libros, un cardigan, cigarrillos: es un compañero discreto. Nadie se impacienta cuando pregunto a la patrona de la hostería su receta del pollo con cangrejos.Está por caer la noche pero todavía está tibio. Es uno de esos instantes conmovedores en que la tierra está tan de acuerdo con los hombres que parece imposible que todos no sean felices.Martes 14 de setiembreUna de las cosas que encantaban a Maurice es la intensidad de lo que él llamaba mi "atención a la vida". Durante esta breve intimidad conmigo misma, se ha reanimado. Ahora que Colette está casada, Lucienne en Norteamérica, tendré tiempo para cultivarla. "Vas a aburrirte. Deberías conseguir un empleo", me dijo Maurice en Mougins. Insistió. Pero, por el momento, en todo caso, no tengo ganas. Quiero vivir por fin un poco para mí. Y aprovechar con Maurice esta soledad de dos de la cual tanto tiempo estuvimos privados. Tengo un montón de proyectos en la cabeza.Viernes 17 de setiembreEl martes llamé por teléfono a Colette: estaba con gripe. Protestó cuando le dije que volvía enseguida a París, Jean-Pierre la cuida muy bien. Pero yo estaba inquieta, regresé ese mismo día. La encontré en cama, muy enflaquecida; tiene fiebre todas las noches. Ya en agosto, cuando la acompañé a la montaña, su salud me inquietaba. No veo la hora de que Maurice la examine y me gustaría que consultara a Talbot.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíAquí estoy, con otra protegida a mi cuidado. Cuando dejé a Colette, el miércoles después de cenar, el tiempo estaba tan agradable que fui en auto hasta el Quartier Latin; me senté en las mesas de la vereda, fumé un cigarrillo. En la mesa de al lado estaba una chiquitina que devoraba con los ojos mi paquete de Chesterfield; me pidió un cigarrillo. Le hablé; eludió mis preguntas y se levantó para irse; alrededor de quince años, ni estudiante ni prostituta, me intrigaba; le propuse llevarla a su casa en auto. Se negó, vaciló, y terminó por confesar que no sabía adónde ir a dormir. Por la mañana se había escapado del Centro en el cual la había alojado la Asistencia Pública. La tuve en casa dos días. Su madre, más o menos retardada, su abuelo, que la detesta, han renunciado a sus derechos sobre ella. El juez que se ocupa de su caso le ha prometido enviarla a un Hogar adonde le enseñarán un oficio. Mientras tanto, vive "provisoriamente" desde hace seis meses en esa casa de la cual no sale nunca —salvo el domingo para ir a misa, si quiere— y donde no le dan ninguna tarea para hacer. Están allí, unas cuarenta adolescentes, materialmente bien cuidadas, pero que languidecen de aburrimiento, de desgano, de desesperación. Por la noche, se le da a cada una un somnífero. Se las arreglan para no tomarlo y guardarlo. Y un buen día, se tragan de golpe toda la reserva. "Una fuga, una tentativa de suicidio: es lo que hace falta para que el juez se acuerde de una", me dijo Marguerite. Las fugas son fáciles, frecuentes, y si no duran mucho tiempo no acarrean consecuencias.Le juré que removería cielo y tierra para conseguir que la transfieran a un Hogar y se dejó convencer para regresar al Centro. Yo hervía de cólera cuando la vi franquear la puerta, cabizbaja y arrastrando los pies. Es una hermosa jovencita, nada tonta, muy gentil, y que no pide otra cosa que poder trabajar: le están masacrando su juventud; a ella y a millares de otras. Mañana hablaré por teléfono al juez Barron.¡Qué duro es París! Aun en estos pegajosos días de otoño, esa dureza me oprime. Esta noche me siento vagamente deprimida. Hice planes para transformar la pieza de las chicas en un living más íntimo que el escritorio de Maurice y la sala de espera. Y me doy cuenta de que Lucienne ya no vivirá nunca más aquí. La casa estará tranquila, pero muy vacía. Me atormento sobre todo por Colette. Felizmente, Maurice regresa mañana.Miércoles 22 de setiembreÉsta es una de las razones —la principal— por las cuales no tengo ninguna gana de atarme a una tarea: difícilmente soportaría no estar totalmente a disposición de quienes me necesitan. Paso casi todo el día a la cabecera de la cama de Colette. Su fiebre no baja. `No es grave", dice Maurice. Pero Talbot pide que le hagan análisis. Ideas aterradoras me pasan por la cabeza.El juez Barron me recibió esta mañana. Muy cordial. El caso de Marguerite Drin le parece lamentable: y hay millares parecidos. El drama es que no existe ningún lugar para alojar a estas niñas, no hay personal capaz de ocuparse de ellas adecuadamente. El gobierno no hace nada. Entonces, los esfuerzos de los jueces, de las asistentes sociales se estrellan contra una pared. El Centro donde se encuentra Marguerite no es más que un lugar de tránsito; al cabo de tres o cuatro días, hubieran debido mandarla a otra parte. ¿Pero adónde? No hay nada. Las niñas se quedan allí, donde no se ha previsto nada para ocuparlas en algo ni para distraerlas. Así y todo, tratará de encontrar un lugar, en algún sitio, para Marguerite. Y va a recomendar a las asistentes del Centro que me autoricen a verla. Los parientes no han firmado el papel que los privaría definitivamente de sus derechos pero no se trata de que nuevamente se hagan cargo de la niña; ellos no lo desean y también para ella sería la peor solución.Salí de Tribunales irritada contra la incuria del sistema. El número de delincuentes jóvenes aumenta; y no se encara otra medida que redoblar la severidad.Como me encontraba ante la puerta de la Sainte-Chapelle, entré, subí por la escalera de caracol. Había turistas extranjeros y una pareja que contemplaba los vitrales, tomada de la mano. En lo que a mí respecta, no miré muy bien. Nuevamente pensaba en Colette y me inquietaba.Y me inquieto. Imposible leer. La única cosa que podría aliviarme sería conversar con Maurice: no estará aquí antes de la medianoche. Desde su regreso de Roma pasa las veladas en el laboratorio con Talbot o Couturier. Dice que se están acercando al objetivo. Puedo comprender que lo sacrifique todo a sus investigaciones. Pero es la primera vez en la vida que tengo una gran preocupación sin que él la comparta.Sábado 25 de setiembreLa ventana estaba a oscuras. Me lo esperaba. Antes —¿antes de qué?—, cuando por excepción yo salía sin Maurice, al volver había siempre un rayo de luz entre las cortinas rojas. Yo subía los dos pisos corriendo, tocaba el timbre, demasiado impaciente como para buscar mi llave. Subí sin correr, metí la llave en la cerradura. ¡Qué vacío estaba el departamento! ¡Qué vacío está! Evidentemente, puesto que no hay nadie adentro. Pero no, de costumbre, cuando regreso a casa reencuentro a Maurice, aun en su ausencia. Esta noche las puertas se abren ante habitaciones desiertas. Las once. Mañana se sabrán los resultados de los análisis y tengo miedo. Tengo miedo, y Maurice no está aquí. Ya lo sé. Es preciso que sus investigaciones lleguen a su fin. Así y todo, estoy enojada con él. "¡Te necesito y no estás aquí!" Tengo ganas de escribir estas palabras sobre un papel que dejaría a la vista en el vestíbulo, antes de irme a acostar.…Regué las plantas; empecé a arreglar la biblioteca y me detuve. Me sorprendió su indiferencia cuando le hablé de instalar este living. Tengo que confesarme la verdad; siempre deseé la verdad, si la obtuve es porque la quería. ¡Pues bien! Maurice ha cambiado. Se ha dejado devorar por su profesión. Ya no lee. Ya no escucha música. (Me gustaba tanto nuestro silencio y su rostro atento cuando escuchábamos Monteverdi o Charlie Parker.) Ya no nos paseamos juntos por París y los alrededores. Ya casi no tenemos verdaderas conversaciones. Empieza a parecerse a sus colegas que no son más que máquinas de hacer carrera y ganar dinero. Soy injusta. El dinero, el éxito social, se mata de risa de eso. Pero desde que, en cuenta de mi opinión, hace diez años decidió especializarse, poco a poco —y eso es precisamente lo que yo temía— se ha empobrecido. Incluso en Mougins, este año, me pareció lejano: ávido por reencontrar la clínica y el laboratorio; distraído y hasta moroso. ¡Vamos!, mejor decirme a mí misma la verdad hasta el fin. En el aeródromo de Niza sentía el corazón oprimido a causa de esas opacas vacaciones que dejábamos detrás. Y si en las salinas abandonadas conocí una felicidad tan intensa fue porque Maurice, a cientos de kilómetros, volvía a serme cercano. (Curiosa cosa un diario: lo que uno calla es más importante que lo que anota). Se diría que su vida privada ya no le concierne. La primavera pasada, ¡con qué facilidad renunció a nuestro viaje por Alsacia! Sin embargo, mi decepción lo afligió. Le dije alegremente: "¡La curación de la leucemia bien merece algunos sacrificios!" Pero, antes, para Maurice la medicina significaba personas de carne y hueso que había que aliviar. (Estaba tan decepcionada, tan desamparada durante mi permanencia en Cochin, por la fría benevolencia de los jefes de sala, por la indiferencia de los estudiantes: y en los hermosos ojos melancólicos de ese externo encontré una angustia, una rabia semejantes a las mías. Creo que lo amé desde ese instante.) Tengo miedo de que ahora para él, sus enfermos no sean sino casos. Saber le interesa más que curar. Y hasta en sus relaciones con quienes lo rodean se vuelve abstracto, él, que era tan vivaz, tan alegre, tan joven a los cuarenta y cinco años como cuando lo encontré… Sí, algo ha cambiado puesto que escribo acerca de él, de mí, a sus espaldas. Si él lo hubiera hecho, me sentiría traicionada. Éramos, el uno para el otro, una absoluta transparencia.Aún lo somos; mi cólera nos separa: le será fácil desarmarla. Necesitaré un poco de paciencia: después de los períodos de agotamiento viene la bonanza. El año pasado también trabajaba frecuentemente por las noches. Sí, pero yo tenía a Lucienne. Y, sobre todo, nada me atormentaba. Bien sabe él que en este momento no puedo leer ni escuchar discos, porque tengo miedo. No dejaré ninguna nota en el vestíbulo, pero hablaré con él. Al cabo de veinte —veintidós— años de casamiento, uno concede demasiado al silencio: es peligroso. Pienso que me he ocupado demasiado de las chicas todos estos últimos años: Colette era tan apegada y Lucienne tan difícil. Yo no estaba tan disponible como Maurice podía desearlo. Hubiera debido hacérmelo notar en lugar de lanzarse a trabajos que ahora lo alejan de mí. Tenemos que explicarnos.Medianoche. Tengo tanta prisa por verlo, por ahogar esta cólera que todavía protesta dentro de mí, que dejo los ojos clavados en el reloj de péndulo. La aguja no avanza: me exaspero. La imagen de Maurice se deshace; ¿qué sentido tiene luchar contra la enfermedad y el sufrimiento si uno trata a su propia mujer con tanta despreocupación?Eso es indiferencia. Dureza. Es inútil rabiar. Basta. Si los análisis de Colette son desfavorables, mañana voy a necesitar de toda mi sangre fría. Entonces debo tratar de dormir.Domingo 26 de setiembreAsí que ocurrió. Me ocurrió.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La feria, que se celebrará del 25 de abril al 11 de mayo, tendrá como eje temático "las palabras del cuerpo", una invitación a ver el mundo "desde diversas perspectivas como la experiencia femenina, la diversidad sexual, la discapacidad, la violencia, la equidad, el pensamiento, el tiempo, la migración y el placer, entre otros"."El cuerpo es el primer territorio que habitamos, pero pocas veces nos detenemos a explorarlo en su complejidad. En la FILBo 2025, queremos que la literatura nos ayude a entenderlo más allá de lo biológico: como espacio de memoria, identidad y resistencia", afirmó la directora de la feria en la Cámara Colombiana del Libro (CCL), Adriana Ángel Forero.Con respecto a la participación española como país invitado de honor, el programa preparado por el Ministerio de Cultura del Gobierno de España y Acción Cultural Española (AC/E) estará centrado en "una cultura para la paz, con los otros y con el planeta"."La paz no se reduce a la ausencia de guerra, a una tregua entre violencias. La paz es también un deseo de entendimiento, una voluntad de negociación de diferencias y desacuerdos, un horizonte de aspiración a la convivencia y un compromiso de cuidado del entorno natural que compartimos", manifestó el comisario designado por España para esta edición de la FilBo, Antonio Monegal, citado en el comunicado.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí. Tradición y lengua comúnSegún Monegal, Premio Nacional de Ensayo 2023, la próxima edición de la FilBo "no es una conversación sólo entre Colombia y España sino entre todos los países que compartimos lenguas comunes, tradiciones literarias, espacios culturales e historia"."Como en cualquier conversación, cada uno aporta sus experiencias, sus imaginarios, su memoria, desde miradas distintas de cada país", agregó Monegal.La representación española en la FilBo incluye a algunos de los escritores de gran impacto en la narrativa, la poesía y el ensayo que reflejan "la diversidad que caracteriza a su literatura actual".Entre esos autores destacan Marta Sanz, Premio Herralde de Novela y finalista del Premio Nadal, cuya obra indaga en la memoria y la identidad con una prosa incisiva, y Clara Usón, autora de 'La hija del Este', Premio Nacional de la Crítica, cuya más reciente novela, 'Las fieras', explora una generación marcada por la violencia y el conflicto político.También estarán Francesc Serés, ganador del Premio Nacional de Literatura de Cataluña; Ismael Ramos, una voz emergente de la poesía española por sus reflexiones sobre la identidad y el lenguaje, y Leire Bilbao, poeta en euskera, cuyo trabajo rescata la oralidad vasca con una mirada contemporánea.Otros autores internacionales invitados son Laura Restrepo (Colombia), Yolanda Arroyo Pizarro (Puerto Rico), Andrés Neuman (Argentina), Kim Un-su (Corea del Sur), Arianna de Sousa-García (Venezuela), Fritz Breithaupt (Alemania), Dorothée Elmiger (Suiza), Frank Báez (República Dominicana) y Mabel Moraña (Uruguay). Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Feria del Libro Bogotá (@filbogota)🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El mundo de la cultura en Colombia lamenta la partida de Beatriz Caballero Holguín, una figura polifacética que dejó una huella indeleble en la literatura, el teatro y el cine del país. Su fallecimiento, ocurrido este 12 de febrero, marca el fin de una era en la que su creatividad y dedicación enriquecieron el panorama artístico nacional.Nacida en Bogotá el 27 de septiembre de 1948, Beatriz fue hija del renombrado escritor Eduardo Caballero Calderón y de la periodista Isabel Holguín Dávila. Desde temprana edad, estuvo inmersa en un ambiente cultural que moldeó su vocación artística. Su formación académica la llevó a estudiar en Inglaterra y Francia, donde profundizó en literatura y arte, sentando las bases para una carrera multifacética.En la década de 1970, Beatriz se destacó en el mundo del teatro de títeres, dirigiendo el Teatro del Parque Nacional en Bogotá y fundando el grupo Biombo Latino. Su pasión por esta forma de expresión la llevó a organizar el Primer Festival Nacional de Títeres, consolidando su papel como pionera en este ámbito.Su incursión en la literatura infantil y juvenil resultó en obras emblemáticas como "Un Bolívar para colorear" (1985) y "Las siete vidas de Agustín Codazzi" (1994), donde combinó rigor histórico con narrativas accesibles para jóvenes lectores. Además, en "Papá y yo" (2004), rindió un sentido homenaje a su padre, ofreciendo una visión íntima de su vida y legado.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.El cine también fue un espacio donde Beatriz dejó su impronta. Participó en la adaptación cinematográfica de "Caín" (1984), basada en la novela de su padre, y colaboró en filmes como "Con su música a otra parte" (1984) y "María Cano" (1990), aportando su talento como guionista y asesora literaria.Tras la noticia de su fallecimiento, instituciones y personalidades del sector cultural se manifestaron para despedir a la artista, entre ellos el Instituto Caro y Cuervo, el Ministerio de las Culturas, Biblored y distintas editoriales con las que colaboró.Juan David Correa, exministro de las Culturas escribió en su cuenta de X: “Beatriz Caballero era entusiasta, comprometida, creativa y una mujer que trabajaba día y noche en sus títeres, sus libros y las obras de quienes la precedieron, que cuidó con amor, como otra gran obra”.Su vida estuvo marcada por la cercanía con figuras destacadas del arte colombiano, incluyendo a sus hermanos, el pintor Luis Caballero y el escritor Antonio Caballero. Tras el fallecimiento de Luis en 1995, Beatriz se dedicó a preservar y difundir su obra, consolidando su legado en la historia del arte nacional. De hecho, en su más reciente libro Luis, hermano mío (2022) recopila las memorias de la vida de su hermano.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La literatura precolombina es un pilar fundamental en la construcción de la identidad cultural latinoamericana. Sus mitos, narraciones y formas poéticas han trascendido el tiempo y continúan influyendo en la literatura contemporánea, tanto en el contenido como en las estructuras narrativas y estilísticas.Las civilizaciones precolombinas, como los mayas, aztecas e incas, dejaron un vasto acervo de relatos que han sido transmitidos a través de la tradición oral. Obras como el Popol Vuh, el Rabinal Achí y los Comentarios Reales de los Incas han servido de base para la reinterpretación de mitos en la literatura actual. Escritores como Miguel Ángel Asturias en Hombres de maíz y José María Arguedas en Los ríos profundos han utilizado estos relatos ancestrales para construir sus propias narrativas, integrando elementos míticos y cosmogónicos en sus obras.Los valores, creencias y cosmovisiones de las culturas indígenas han permeado las obras de autores contemporáneos. La conexión con la naturaleza, la dualidad entre el bien y el mal y la espiritualidad son elementos recurrentes en novelas y poesías actuales. Autores como Elena Garro en Los recuerdos del porvenir y Juan Rulfo en Pedro Páramo han bebido de estas tradiciones para tejer relatos en los que el tiempo cíclico y la relación entre los vivos y los muertos son fundamentales.El uso de metáforas, imágenes poéticas y la musicalidad en la prosa son características heredadas de la literatura precolombina. La poesía náhuatl, por ejemplo, con sus metáforas sobre la fugacidad de la vida, ha inspirado a poetas como Octavio Paz y Ernesto Cardenal. 💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.En la narrativa, la experimentación con estructuras no lineales y la multiplicidad de voces recuerdan las narraciones indígenas que combinaban realidad y mito sin una separación rígida.La literatura precolombina sigue viva en la producción literaria latinoamericana. Su influencia no solo se manifiesta en la recuperación de mitos y leyendas, sino también en la experimentación estilística y en la visión del mundo que transmiten los autores contemporáneos. En este sentido, la literatura de América Latina no es solo una continuación de la tradición occidental, sino un espacio en el que las raíces indígenas siguen nutriendo y transformando las letras del continente.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Hablar de Ricardo Bada es adentrarse en el universo de un escritor, periodista y crítico cultural cuya pluma afilada ha transitado por los laberintos de la literatura, el periodismo y la música con una irreverencia lúcida. Nacido en España en 1939, pero con un alma cosmopolita, Bada cultivó una carrera marcada por la agudeza, la ironía y un compromiso inquebrantable con la palabra bien escrita.La biografía de Ricardo Bada está teñida de múltiples escenarios. Si bien nació en España, su trayectoria lo llevó a Alemania, país donde desarrolló buena parte de su carrera profesional. Su experiencia en el exilio voluntario no solo lo convirtió en un observador privilegiado de la cultura europea, sino que también le permitió forjar un estilo que dialoga con lo mejor de la literatura y el pensamiento universal.Desde muy joven, su interés por la literatura lo llevó a sumergirse en el universo de escritores como James Joyce, Julio Cortázar y Jorge Luis Borges, autores que han dejado huella en su manera de entender el arte de narrar. Su relación con la literatura latinoamericana es particularmente profunda, y ha sido un divulgador incansable de sus grandes exponentes.El Ricardo Bada periodista En el campo del periodismo, Bada ha sido colaborador de diversos medios de comunicación, entre ellos el prestigioso diario alemán Die Zeit y publicaciones en español como El Espectador y El Malpensante. Bada fue colaborador de la HJCK en la década de 1990, enviaba crónicas desde Alemania para la Revista Dominical en las que hablaba de temas literarios, por ejemplo, el Premio Nobel de Literatura a Toni Morrison en 1993. Otro de los momentos memorables de Bada en la HJCK fueron sus crónicas sobre Julio Cortázar en el aniversario número diez de su fallecimiento, el periodista visitó su tumba y relató historias sobre el escritor. También consiguió el sonido del contestador que tenía el argentino en su casa. Uno de los aspectos más notables de su trabajo era su capacidad para conectar la literatura con la actualidad. Sus ensayos y artículos están impregnados de referencias literarias y musicales que enriquecen su análisis de la realidad contemporánea. Además, su conocimiento enciclopédico de la cultura le permitió abordar temas con una perspectiva amplia y siempre perspicaz.Bada recopiló sus obras en distintos libros, por ejemplo, Crónicas de mi generación, publicado en el 2010, es una colección de textos en los que reflexiona sobre el devenir cultural y político de su generación, con una mirada aguda y desmitificadora.Por otro lado, también publicó Taller de narrativa (2005), un texto en el que comparte su visión sobre la escritura y el oficio de narrar, con un enfoque práctico y lleno de referencias a los grandes escritores que han marcado su trayectoria.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El 12 de agosto de 2022, Salman Rushdie fue apuñalado en Chautauqua, Nueva York, mientras se preparaba para dar una conferencia sobre libertad de expresión. Su agresor, Hadi Matar, de 24 años, lo atacó con un cuchillo, causándole heridas graves que resultaron en la pérdida de la visión en un ojo y daños en un brazo.El ataque se relaciona con la fatua emitida en 1989 por el ayatolá Ruhollah Jomeiní, líder supremo de Irán, quien ordenó su asesinato por considerar que su novela Los versos satánicos era blasfema. Publicada en 1988, la obra es una narración que mezcla realismo mágico y literatura poscolonial, incluyendo una representación ficcionalizada del profeta Mahoma, lo que generó una fuerte reacción en sectores del islam radical.¿Qué es una 'fatua'?Una fatua es un pronunciamiento legal o religioso emitido por un erudito islámico en respuesta a una consulta sobre la sharía (ley islámica). Aunque en términos generales no tiene carácter obligatorio ni es necesariamente una condena de muerte, en algunos casos ha sido utilizada como una sentencia para justificar persecuciones o castigos extremos. En el caso de Salman Rushdie, la fatua fue emitida el 14 de febrero de 1989 y además se ofreció una recompensa por su asesinato, lo que desencadenó una ola de amenazas y ataques no solo contra Rushdie, sino también contra personas asociadas a la publicación del libro.Aunque el gobierno iraní se ha distanciado oficialmente de la fatua en algunos momentos, la sentencia nunca fue formalmente revocada y organizaciones iraníes han seguido respaldándola con recompensas económicas. El ataque de 2022 contra Rushdie demuestra que la amenaza seguía vigente más de tres décadas después de su emisión.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Desde la emisión de la fatua, Rushdie vivió bajo protección del gobierno británico y enfrentó amenazas constantes. La publicación del libro también provocó ataques contra traductores y editores. En 1991, Hitoshi Igarashi, el traductor japonés, fue asesinado en Tokio. Ettore Capriolo, el traductor italiano, fue atacado en Milán, pero sobrevivió. En 1993, William Nygaard, editor noruego, recibió varios disparos, aunque también logró sobrevivir. El ataque de 2022 reavivó el debate sobre los límites de la libertad de expresión y la censura religiosa. Rushdie había reducido sus medidas de seguridad en los últimos años, lo que facilitó el atentado.Otros escritores han sido atacados por razones similares. En 2004, el cineasta y escritor holandés Theo van Gogh fue asesinado en Ámsterdam tras dirigir Submission, un cortometraje crítico con el trato a las mujeres en el islam. La guionista, Ayaan Hirsi Ali, recibió amenazas de muerte y tuvo que exiliarse.La persecución contra escritores también ha ocurrido en regímenes autoritarios. En 2006, la periodista rusa Anna Politkóvskaya, crítica del Kremlin y de la guerra en Chechenia, fue asesinada en Moscú. En 2015, en Bangladés, varios escritores y blogueros secularistas fueron asesinados por grupos extremistas.El ataque a Salman Rushdie muestra que la censura y la violencia contra escritores continúan siendo un problema global. A pesar de las amenazas, Rushdie publicó en 2024 Cuchillo, un libro donde relata el atentado que sufrió. Su caso evidencia los riesgos que enfrentan los escritores en contextos de intolerancia y radicalismo.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Hari Matar, un estadounidense de origen libanés de 27 años que gritó "Palestina libre" al entrar al tribunal del condado de Chautauqua, en la localidad de Mayville (norte de Nueva York), está acusado de intento de asesinato y agresión.El acusado, detenido en el lugar del ataque, asestó al autor de Hijos de la medianoche una docena de puñaladas en el rostro, el cuello y el abdomen el 12 de agosto de 2022, que le provocaron la pérdida de un ojo y le llevaron a debatirse durante semanas entre la vida y la muerte.El fiscal de distrito Jason Schmidt contó que Rushdie acababa de tomar asiento para dar una conferencia en el anfiteatro de Chautauqua a unas 1.000 personas el día del ataque."Un hombre joven de complexión media que llevaba una mascarilla de color oscuro (...) apareció por la parte trasera del teatro", dijo Schmidt. "Una vez en el escenario, aceleró a toda velocidad". Matar "clavó el cuchillo en el Sr. Rushdie con fuerza, eficacia y velocidad una y otra vez (...) golpeando y acuchillando la cabeza, el cuello, el abdomen y la parte superior del muslo" del escritor.Según Schmidt, Rushdie levantó las manos para defenderse, pero permaneció sentado tras recibir varias cuchilladas. Deborah Moore Kushmaul, empleada del centro cultural, dijo al jurado que recogió el cuchillo utilizado, que según ella tenía una hoja de 15 centímetros, y se lo entregó a la policía. "Pude ver sangre, pude ver cómo la gente se amontonaba. Nuestro público, muchos de los cuales eran ancianos, gritaba", dijo. "Mi principal preocupación era que pudiera haber una bomba en las bolsas, que pudiera haber otro atacante", sostuvo.El atacante estuvo "peligrosamente cerca" de matar a Rushdie, afirmó Schmidt. Apuñaló al escritor en el ojo derecho con tal fuerza "que seccionó el nervio óptico". Asimismo, su nuez de Adán fue parcialmente lacerada y su hígado e intestino delgado alcanzados. "Su presión arterial era baja: perdió mucha sangre", dijo el fiscal.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.¿Ataque al islam?El escritor británico-estadounidense nacido en India hace 77 años y residente en Nueva York no estuvo presente este lunes en el juicio, pero se espera que suba al estrado para declarar.Desde que su obra Los versos satánicos fue declarada blasfema en 1989 por el entonces líder supremo de Irán, ayatolá Ruhollah Jomeini, quien decretó una fetua (edicto religioso) en la que pedía a los musulmanes del mundo matar al escritor, éste ha recibido amenazas de muerte.Irán ha negado cualquier vínculo con el agresor, pero aseguró que el único que tiene la culpa del incidente fue Rushdie. Matar, quien se ha declarado inocente del intento de asesinato, fue también acusado en julio por un tribunal federal de proporcionar apoyo y recursos al movimiento chiíta libanés Hezbolá, vinculado a Irán, y que respaldó la fetua.Una de las abogadas de Matar, Lynn Schaffer, advirtió que los fiscales tratarían de presentar el caso como "sencillo", "abierto y cerrado". "Asumen cosas sobre el Sr. Matar que afectan a la forma en que investigan", dijo.En la pequeña localidad de Mayville, junto al lago Chautauqua que la separa de la frontera canadiense, se ha congregado una nutrida presencia de medios de comunicación para seguir el juicio.El equipo de defensa de Matar solicitó un aplazamiento del caso, ya que su abogado principal ha sido hospitalizado, pero el juez David Foley lo denegó.Dos páginasMatar, que vestía camisa azul y hablaba frecuentemente con su equipo legal de cinco miembros en la ornamentada sala del tribunal, declaró tras ser detenido al New York Post que sólo había leído dos páginas de la novela de Rushdie, pero que creía que el autor había "atacado al islam".El escritor contó en la obra Cuchillo, publicada en abril del año pasado, cómo superó el ataque y mantiene una conversación imaginaria con su verdugo, cuyo nombre no menciona, sobre sus creencias y motivaciones.Hasta el ataque de Matar, Rushdie había sido víctima de más de media docena de intentos frustrados de asesinato. Tras vivir con escolta durante varios años y escondido en Londres, Rushdie se instaló en Nueva York en el 2000 y desde entonces llevaba una intensa vida social. El juicio prosigue este martes.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La excelencia en la reflexión sobre el hispanismo y el latinoamericanismo tiene una nueva oportunidad de ser reconocida. La Iberoamericana Editorial Vervuert, en colaboración con el Instituto Cervantes, ha abierto la convocatoria para la IV edición del Premio de Ensayo Hispánico Klaus D. Vervuert, un galardón que destaca por su compromiso con la investigación rigurosa y original en el ámbito de las humanidades y las ciencias sociales.Este premio busca reconocer una obra inédita que aborde alguna de las múltiples disciplinas vinculadas con el hispanismo y el latinoamericanismo, desde la literatura y la crítica hasta la historia, la sociología y la antropología. El ganador verá su trabajo publicado en una de las colecciones de la editorial, asegurando una difusión académica y cultural de alto nivel.Bases del concursoLos interesados deberán presentar un ensayo inédito con una extensión máxima de 350 folios, en español o inglés, acompañado de un índice, un resumen y una bibliografía. Además, el proceso de postulación exige el envío de la obra en formato digital junto con una plica que garantice el anonimato del autor hasta el fallo del jurado.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.La evaluación de las obras estará a cargo de un jurado compuesto por reconocidos académicos y representantes de instituciones como la Asociación Internacional de Hispanistas, el Ibero-Amerikanisches Institut de Berlín y la Universidad Complutense de Madrid.El plazo para la recepción de manuscritos finaliza el 30 de junio de 2025, y el fallo del premio se comunicará posteriormente a través de medios oficiales y plataformas de las instituciones organizadoras.Un reconocimiento a la investigación en humanidadesEl Premio de Ensayo Hispánico Klaus D. Vervuert no solo impulsa la producción intelectual en el ámbito del hispanismo, sino que también refuerza el compromiso de la Iberoamericana Editorial Vervuert con la difusión de estudios académicos de alta calidad. La obra ganadora será publicada en formato impreso y digital, asegurando su impacto en la comunidad investigadora.Para más información sobre las bases y el proceso de envío, los interesados pueden visitar el sitio web de la editorial.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Desde muy corta edad, quizá desde los cinco o seis años, supe que cuando fuese mayor sería escritor. Entre los diecisiete a los veinticuatro años traté de abandonar ese propósito, pero lo hacía dándome cuenta de que con ello traicionaba mi verdadera naturaleza y que tarde o temprano habría de ponerme a escribir libros.Era yo el segundo de tres hermanos, pero me separaban de cada uno de los dos cinco años, y apenas vi a mi padre hasta que tuve ocho. Por ésta y otras razones me hallaba solitario, y pronto fui adquiriendo desagradables hábitos que me hicieron impopular en mis años escolares. Tenía la costumbre de chiquillo solitario de inventar historias y sostener conversaciones con personas imaginarias, y creo que desde el principio se mezclaron mis ambiciones literarias con la sensación de estar aislado y de ser menospreciado. Sabía que las palabras se me daban bien, así como que podía enfrentarme con hechos desagradables creándome una especie de mundo privado en el que podía obtener ventajas a cambio de mi fracaso en la vida cotidiana. Sin embargo, el volumen de escritos serios, es decir, realizados con intención seria, que produje en toda mi niñez y en mis años adolescentes, no llegó a una docena de páginas. Escribí mi primer poema a la edad de cuatro o cinco años (se lo dicté a mi madre). Tan sólo recuerdo de esa “creación” que trataba de un tigre y que el tigre tenía “dientes como de carne”, frase bastante buena, aunque imagino que el poema sería un plagio de “Tigre, tigre”, de Blake. A mis once años, cuando estalló la guerra de 1914-1918, escribí un poema patriótico que publicó el periódico local, lo mismo que otro, de dos años después, sobre la muerte de Kitchener. De vez en cuando, cuando ya era un poco mayor, escribí malos e inacabados “poemas de la naturaleza” en estilo georgiano. También, unas dos veces, intenté escribir una novela corta que fue un impresionante fracaso. Ésa fue toda la obra con aspiraciones que pasé al papel durante todos aquellos años.Sin embargo, en ese tiempo me lancé de algún modo a las actividades literarias. Por lo pronto, con material de encargo que produje con facilidad, rapidez y sin que me gustara mucho. Aparte de los ejercicios escolares, escribí vers d’occasion, poemas semicómicos que me salían en lo que me parece ahora una asombrosa velocidad -a los catorce escribí toda una obra teatral rimada, una imitación de Aristófanes, en una semana aproximadamente- y ayudé en la redacción de revistas escolares, tanto en los manuscritos como en la impresión. Esas revistas eran de lo más lamentablemente burlesco que pueda imaginarse, y me molestaba menos en ellas de lo que ahora haría en el más barato periodismo. Pero junto a todo esto, durante quince años o más, llevé a cabo un ejercicio literario: ir imaginando una “historia” continua de mí mismo, una especie de diario que sólo existía en la mente. Creo que ésta es una costumbre en los niños y adolescentes. Siendo todavía muy pequeño, me figuraba que era, por ejemplo, Robin Hood, y me representaba a mí mismo como héroe de emocionantes aventuras, pero pronto dejó mi “narración” de ser groseramente narcisista y se hizo cada vez más la descripción de lo que yo estaba haciendo y de las cosas que veía. Durante algunos minutos fluían por mi cabeza cosas como estas: “Empujo la puerta y entró en la habitación. Un rayo amarillo de luz solar, filtrándose por las cortinas de muselina, caía sobre la mesa, donde una caja de fósforos, medio abierta, estaba junto al tintero. Con la mano derecha en el bolsillo, avanzó hacia la ventana. Abajo, en la calle, un gato con piel de concha perseguía una hoja seca”, etc., etc. Este hábito continuó hasta que tuve unos veinticinco años, cuando ya entré en mis años no literarios. Aunque tenía que buscar, y buscaba las palabras adecuadas, daba la impresión de estar haciendo contra mi voluntad ese esfuerzo descriptivo bajo una especie de coacción que me llegaba del exterior. Supongo que la “narración” reflejaría los estilos de los varios escritores que admiré en diferentes edades, pero recuerdo que siempre tuve la misma meticulosa calidad descriptiva.Cuando tuve unos dieciséis años descubrí de repente la alegría de las palabras; por ejemplo, los sonidos v las asociaciones de palabras. Unos versos de Paraíso perdido, que ahora no me parecen tan maravillosos, me producían escalofríos. En cuanto a la necesidad de describir cosas, ya sabía a qué atenerme. Así, está claro qué clase de libros quería yo escribir, si puede decirse que entonces deseara yo escribir libros. Lo que más me apetecía era escribir enormes novelas naturalistas con final desgraciado, llenas de detalladas descripciones y símiles impresionantes, y también llenas de trozos brillantes en los cuales serían utilizadas las Palabras, en parte, por su sonido. Y la verdad es que la primera novela que llegué a terminar, Días de Birmania, escrita a mis treinta años pero que había proyectado mucho antes, es más bien esa clase de libro.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíDoy toda esta información de fondo porque no creo que se puedan captar los motivos de un escritor sin saber antes su desarrollo al principio. Sus temas estarán determinados por la época en que vive -por lo menos esto es cierto en tiempos tumultuosos y revolucionarios como el nuestro-, pero antes de empezar a escribir habrá adquirido una actitud emotiva de la que nunca se librará por completo. Su tarea, sin duda, consistirá en disciplinar su temperamento y evitar atascarse en una edad inmadura, o en algún perverso estado de ánimo: pero si escapa de todas sus primeras influencias, habrá matado su impulso de escribir. Dejando aparte la necesidad de ganarse la vida, creo que hay cuatro grandes motivos para escribir, por lo menos para escribir prosa. Existen en diverso grado en cada escritor, y concretamente en cada uno de ellos varían las proporciones de vez en cuando, según el ambiente en que vive. Son estos motivos:1. El egoísmo agudo. Deseo de parecer listo, de que hablen de uno, de ser recordado después de la muerte, resarcirse de los mayores que lo despreciaron a uno en la infancia, etc., etc. Es una falsedad pretender que no es éste un motivo de gran importancia. Los escritores comparten esta característica con los científicos, artistas, políticos, abogados, militares, negociantes de gran éxito, o sea con la capa superior de la humanidad. La gran masa de los seres humanos no es intensamente egoísta.Después de los treinta años de edad abandonan la ambición individual -muchos casi pierden incluso la impresión de ser individuos y viven principalmente para otros, o sencillamente los ahoga el trabajo. Pero también está la minoría de los bien dotados, los voluntariosos decididos a vivir su propia vida hasta el final, y los escritores pertenecen a esta clase. Habría que decir los escritores serios, que suelen ser más vanos y egoístas que los periodistas, aunque menos interesados por el dinero.2. Entusiasmo estético. Percepción de la belleza en el mundo externo o, por otra parte. en las palabras y su acertada combinación. Placer en el impacto de un sonido sobre otro, en la firmeza de la buena prosa o el ritmo de un buen relato. Deseo de compartir una experiencia que uno cree valiosa y que no debería perderse. El motivo estético es muy débil en muchísimos escritores, pero incluso un panfletario o el autor de libros de texto tendrá palabras y frases mimadas que le atraerán por razones no utilitarias; o puede darle especial importancia a la tipografía, la anchura de los márgenes, etc. Ningún libro que esté por encima del nivel de una guía de ferrocarriles estará completamente libre de consideraciones estéticas.3. Impulso histórico. Deseo de ver las cosas como son para hallar los hechos verdaderos y almacenarlos para la posteridad.4. Propósito político, y empleo la palabra “político” en el sentido más amplio posible. Deseo de empujar al mundo en cierta dirección, de alterar la idea que tienen los demás sobre la clase de sociedad que deberían esforzarse en conseguir. Insisto en que ningún libro está libre de matiz político. La opinión de que el arte no debe tener nada que ver con la política ya es en sí misma una actitud política.Puede verse ahora cómo estos varios impulsos luchan unos contra otros y cómo fluctúan de una persona a otra y de una a otra época. Por naturaleza -tomando “naturaleza” como el estado al que se llega cuando se empieza a ser adulto- soy una persona en la que los tres primeros motivos pesan más que el cuarto. En una época pacífica podría haber escrito libros ornamentales o simplemente descriptivos y casi no habría tenido en cuenta mis lealtades políticas. Pero me he visto obligado a convertirme en una especie de panfletista. Primero estuve cinco años en una profesión que no me sentaba bien (la Policía Imperial India, en Birmania), y luego pasé pobreza y tuve la impresión de haber fracasado. Esto aumentó mi aversión natural contra la autoridad y me hizo darme cuenta por primera vez de la existencia de las clases trabajadoras, así como mi tarea en Birmania me había hecho entender algo de la naturaleza del imperialismo: pero estas experiencias no fueron suficientes para proporcionarme una orientación política exacta. Luego llegaron Hitler, la guerra civil española, etc.Éstos y otros acontecimientos de 1936-1937 habían de hacerme ver claramente dónde estaba. Cada línea seria que he escrito desde 1936 lo ha sido, directa o indirectamente, contra el totalitarismo y a favor del socialismo democrático, tal como yo lo entiendo. Me parece una tontería, en un periodo como el nuestro, creer que puede uno evitar escribir sobre esos temas. Todos escriben sobre ellos de un modo u otro. Es sencillamente cuestión del bando que uno toma y de cómo se entra en él. Y cuanto más consciente es uno de su propia tendencia política, más probabilidades tiene de actuar políticamente sin sacrificar la propia integridad estética e intelectual.Lo que más he querido hacer durante los diez años pasados es convertir los escritos políticos en un arte. Mi punto de partida siempre es de partidismo contra la injusticia. Cuando me siento a escribir un libro no me digo: “Voy a hacer un libro de arte”. Escribo porque hay alguna mentira que quiero dejar al descubierto, algún hecho sobre el que deseo llamar la atención. Y mi preocupación inicial es lograr que me oigan. Pero no podría realizar la tarea de escribir un libro, ni siquiera un largo artículo de revista, si no fuera también una experiencia estética. El que repase mi obra verá que aunque es propaganda directa contiene mucho de lo que un político profesional consideraría inmaterial. No soy capaz, ni me apetece, de abandonar por completo la visión del mundo que adquirí en mi infancia. Mientras siga vivo y con buena salud seguiré concediéndole mucha importancia al estilo en prosa, amando la superficie de la Tierra. Y complaciéndome en objetos sólidos y trozos de información inútil. De nada me serviría intentar suprimir ese aspecto mío. Mi tarea consiste en reconciliar mis arraigados gustos y aversiones con las actividades públicas, no individuales, que esta época nos obliga a todos a realizar.No es fácil. Suscita problemas de construcción y de lenguaje e implica de un modo nuevo el problema de la veracidad. He aquí un ejemplo de la clase de dificultad que surge. Mi libro sobre la guerra civil española, Homenaje a Cataluña, es, desde luego, un libro decididamente político, pero está escrito en su mayor parte con cierta atención a la forma y bastante objetividad. Procuré decir en él toda la verdad sin violentar mi instinto literario. Pero entre otras cosas contiene un largo capítulo lleno de citas de periódicos y cosas así, defendiendo a los trotskistas acusados de conspirar con Franco. Indudablemente, ese capítulo, que después de un año o dos perdería su interés para cualquier lector corriente, tenía que estropear el libro. Un crítico al que respeto me reprendió por esas páginas: “¿Por qué ha metido usted todo eso?”, me dijo. “Ha convertido lo que podía haber sido un buen libro en periodismo.” Lo que decía era verdad, pero tuve que hacerlo. Yo sabía que muy poca gente en Inglaterra había podido enterarse de que hombres inocentes estaban siendo falsamente acusados. Y si esto no me hubiera irritado, nunca habría escrito el libro.De una u otra forma este problema vuelve a presentarse. El problema del lenguaje es más sutil y llevaría más tiempo discutirlo. Sólo diré que en los últimos años he tratado de escribir menos pintorescamente y con más exactitud. En todo caso, descubro que cuando ha perfeccionado uno su estilo, ya ha entrado en otra fase estilística. Rebelión en la granja fue el primer libro en el que traté, con plena conciencia de lo que estaba haciendo, de fundir el propósito político y el artístico. No he escrito una novela desde hace siete años, aunque espero escribir otra enseguida.Seguramente será un fracaso -todo libro lo es-, pero sé con cierta claridad qué clase de libro quiero escribir.Mirando la última página, o las dos últimas, veo que he hecho parecer que mis motivos al escribir han estado inspirados sólo por el espíritu público. No quiero dejar que esa impresión sea la última. Todos los escritores son vanidosos, egoístas y perezosos, y en el mismo fondo de sus motivos hay un misterio. Escribir un libro es una lucha horrible y agotadora, como una larga y penosa enfermedad. Nunca debería uno emprender esa tarea si no le impulsara algún demonio al que no se puede resistir y comprender. Por lo que uno sabe, ese demonio es sencillamente el mismo instinto que hace a un bebé lloriquear para llamar la atención. Y, sin embargo, es también cierto que nada legible puede escribir uno si no lucha constantemente por borrar la propia personalidad. La buena prosa es como un cristal de ventana. No puedo decir con certeza cuál de mis motivos es el más fuerte, pero sé cuáles de ellos merecen ser seguidos. Y volviendo la vista a lo que llevo escrito hasta ahora, veo que cuando me ha faltado un propósito político es invariablemente cuando he escrito libros sin vida y me he visto traicionado al escribir trozos llenos de fuegos artificiales, frases sin sentido, adjetivos decorativos y, en general, tonterías.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El hijo del escritor, Álvaro Vargas Llosa, publicó este domingo en su cuenta de la red social X imágenes con el premio Nobel en dicho penal, como parte de su ruta por distintos lugares que inspiraron sus obras en la capital del país andino."Penal de Lurigancho y alrededores, escenarios (cruciales) del último capítulo de 'Historia de Mayta'", indicó el hijo del escritor. Adjuntó una foto de ambos en la que Vargas Llosa aparece con un bastón y otras del penal de Lurigancho.'Historia de Mayta' versa sobre la vida del trotskista Alejandro Mayta, quien intentó protagonizar una revolución en 1958 y tras ser detenido en varias ocasiones pasó al anonimato.Sobre este libro, Vargas Llosa señaló en 1996, que era la novela "de mayor complejidad técnica que había escrito (...) la más refinada y audaz".La visita del autor al penal forma parte del recorrido que el premio Nobel está haciendo de escenarios de sus novelas en los últimos meses.Hace un mes, visitó una calle de Lima en la que sucede parte de una de sus obras más célebres, 'La ciudad y los perros' (1963) y en diciembre fue, también con su hijo, al Colegio Militar Leoncio Prado, que fue el escenario principal de la misma novela, la primera del autor.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Días antes, el 28 de noviembre, ambos volvieron a visitar el local limeño en el que estaba instalado el bar 'La Catedral', que inspiró su célebre novela 'Conversación en La Catedral', publicada en 1969 y considerada una de las grandes novelas de la historia.A lo largo de su obra, Lima fue siempre un personaje, más que un escenario, en la obra literaria de Mario Vargas Llosa.La última vez que Vargas Llosa se dejó ver en público fue el pasado octubre, cuando asistió al teatro para ver junto a su familia una adaptación de su obra '¿Quién Mató a Palomino Molero?'.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Los nicaragüenses homenajearon a Rubén Darío, considerado el 'Príncipe de las letras castellanas', con ofrendas florales, poesía y danzas en diferentes puntos de Nicaragua, principalmente en el "Parque de los Poetas", en la ciudad de León, 90 kilómetros al noroeste de Managua, que albergó los actos oficiales.La actividad en León comenzó en la Casa Museo Archivo Rubén Darío, y tras un recorrido por las calles de esa ciudad, continuó en el 'Parque de los Poetas'.La Asamblea Nacional celebró una sesión especial en León en conmemoración, dijo, al 109 aniversario del "paso a la inmortalidad del insigne poeta universal Rubén Darío". "Hoy le rendimos todos los honores a nuestro héroe nacional en su 109 aniversario de su tránsito a la eternidad", dijo la alcaldesa de León, Guissela Lacayo, durante la sesión especial parlamentaria."Un día como hoy, 6 de febrero, pero de 1916, entregó su vida al Creador. Su legado como poeta, periodista y diplomático nicaragüense prevalece por su compromiso sociopolítico y su postura antiimperialista", destacó la alcaldesa, que catalogó a Darío como el "máximo exponente del modernismo literario en lengua española".Por su lado, la Alcaldía de Managua celebró en el parque central una gala artística y cultural en homenaje al 109 aniversario del "paso a la inmortalidad del Príncipe de las Letras Castellanas Rubén Darío"."Hoy estamos celebrando la eternidad de Darío. Hoy nace a la eternidad y en León sesiona la Asamblea Nacional de Nicaragua y se colocan ofrendas al padre y maestro mágico Rubén Darío", comentó, por su parte, la vicepresidente de Nicaragua, Rosario Murillo, designada recientemente como "copresidenta" por unas reformas constitucionales.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíLas diferentes universidades de Nicaragua también rindieron homenaje a Darío con una exposición sobre su vida y su obra. Asimismo, se colocaron ofrendas florales en la Catedral de León, donde descansan los restos del bardo nicaragüense, y en otros parques.Félix Rubén García Sarmiento (1867-1916), conocido como Rubén Darío, trascendió por obras como 'Azul' (1888), 'Prosas Profanas' (1896) y la considerada más trascendental ´Cantos de vida y esperanza´(1905).'A Margarita Debayle', 'Lo fatal', 'Marcha triunfal', 'Sonatina', 'Los motivos del lobo', 'Momotombo', 'A Colón' y 'Oda a Roosevelt', están entre los poemas más emblemáticos y que más se conocen del nicaragüense.Los restos de Rubén Darío se encuentran bajo un león triste esculpido en mármol, junto con el escudo de Nicaragua, en el interior de la 'Real e Insigne Basílica Catedral de León' o 'Catedral de la Asunción', en el noroeste del país, Patrimonio de la Humanidad de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Descubierto tras la muerte de la autora estadounidense en un mueble archivador junto a su escritorio, 'Notes to John' es un diario en el que Didion describe las sesiones con su psiquiatra, unos apuntes que recoge y están dirigidos a su esposo, John Gregory Dunne.'Apuntes para John' comienza en diciembre de 1999, poco después de que la escritora empezara su terapia con un psiquiatra tras haber pasado "unos años difíciles" e incluye conversaciones fundamentales sobre temas que desarrolló en sus obras tardías.Las sesiones iniciales se centraron en el alcoholismo, la adopción, la depresión, la ansiedad, la culpa y las desgarradoras complejidades de la relación con su hija Quintana. Los temas mutaron hasta abarcar su trabajo, que le resultaba difícil mantener durante períodos prolongados.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíHubo discusiones sobre su propia infancia –malentendidos y falta de comunicación con su madre y su padre, su temprana tendencia a anticipar la catástrofe– y también se aborda la cuestión del legado.El lanzamiento será simultáneo al de Estados Unidos, bajo el sello Knopf y con una tirada inicial de 250.000 ejemplares.Según su director editorial, Jordan Pavlin, el libro contiene la "precisión, inteligencia extrema y agudas percepciones" de la autora de 'El año del pensamiento mágico' ('The year of magical thinking'), pero también aparece una Didion "como nunca la habíamos visto: abierta, vulnerable, en lucha contra las emociones más intensas".🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El Fondo de Cultura Económica anunció que hasta el próximo 3 de abril estarán abiertas las inscripciones para participar en la convocatoria Tierra Adentro Sur que llama a los autores menores de 35 años de Colombia, Argentina, Chile y Perú a postular sus novelas inéditas, donde se elegirá una para ser publicada en la colección Tierra Adentro del Fondo de Cultura Económica en junio de 2025.Las novelas que se postulen deben haber sido escritas originalmente en español y tener un único autor o autora, no se tendrán en cuenta novelas en colaboración. Tenga en cuenta que el premio o compensación que recibirá la novela será la publicación en la colección antes mencionada. “Las novelas seleccionadas en los cuatro países serán anunciadas a la vez a través de las páginas web de las subsidiarias, y circularán en todo el ámbito del Fondo de Cultura Económica a nivel global”, aclara el comunicado del centro.El texto inédito deberá contar con una extensión mínima de 80 páginas y máxima de 250 páginas, configurada para su impresión en formato A4, y presentarse en letra Times New Roman de 12 puntos, con márgenes de 2.5 cm por los cuatro lados, interlineado 1.5, párrafo justificado a izquierda y derecha; y con folios en números arábigos consecutivos desde la primera hasta la última página.Entre las aclaraciones que hace el fondo es importante destacar que la decisión sobre la elección de la novela será inapelable, la convocatoria podrá ser declarada desierta y que el autor de la novela escogida firmará un contrato regular con el Fondo de Cultura Económica de su país, donde se puntualizará el pago de derechos de autor que recibirá cuando corresponda.💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquíLos resultados de la convocatoria se darán a conocer en las páginas web de cada una de las subsidiarias el próximo 7 de mayo de 2025.Para enviar su obra tenga en cuenta los siguiente pasos:Enviar un correo a las siguiente dirección, según corresponda el país:Argentina: tierraadentroar@fce.com.arColombia: tierraadentrocol@fce.com.coChile: tierraadentrocl@fcechile.clPerú: tierraadentrope@fceperu.com.peEn todos los casos el asunto del correo deberá ser “Convocatoria Tierra Adentro Sur”. Allí debe adjuntar dos archivos, uno en formato Word y otro en formato PDF, de la siguiente manera:1. El archivo Word contendrá la obra, que deberá ser firmada con seudónimo. La obra no podrá incluir o insinuar de ninguna forma el nombre del autor/a. Cualquier propuesta que haga evidente el nombre real será rechazada sin posibilidad de apelación.2. El archivo PDF contendrá la información personal del autor/a y deberá mencionar el nombre de la obra y el seudónimo utilizado. Asimismo, incluirá sus datos personales: nombre completo, fecha y lugar de nacimiento, teléfono celular, correo electrónico, domicilio; y una semblanza de máximo 800 caracteres con espacios. Consulte aquí los detalles de las bases de la convocatoria. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Fondo de Cultura Económica Colombia (@fcecolombia)🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.