En Medellín, 339 hombres y mujeres en privación de la libertad en el Complejo Carcelario y Penitenciario El Pedregal reciben capacitación del Instituto Tecnológico Metropolitano - ITM, en diferentes cursos de artes y oficios para formarlos como nuevos líderes constructores de paz.
En los cursos, que tienen una intensidad de 120 horas, los internos reciben formación en música, teatro, manualidades, confecciones, auxiliar de recepción y archivo, informática y digitación, técnicas de pintura y color, marroquinería, televisión y narrativa audiovisual, vivero y ornato, madera, política y justicia ciudadana, yoga y arte terapia, ecología, cuidado del medio ambiente, danza y gastronomía.
Los talleres tienen la finalidad de que estas personas desarrollen habilidades y destrezas nuevas que no solo les ofrezcan la posibilidad de aprender algo nuevo dentro de los centros, sino que hagan parte de un proceso efectivo de resignificación e integración a la sociedad, con nuevas habilidades que pueden ser usadas para generar ingresos durante y después de su estadía en los establecimientos.
“Para la Alcaldía de Medellín y la Secretaría de la No-Violencia es muy importante decirle a toda la ciudad que creemos en las segundas oportunidades. Por eso, les contamos que a las cárceles llevamos cursos de artes y oficios que les permiten a los internos reflexionar sobre su condición de vida y saber que una vez recuperen su libertad llegarán a una ciudad que cree en ellos y está dispuesta a recibirlos”, dijo el coordinador del proyecto de intervención social en cárceles, Santiago Vásquez.
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Hasta julio de 2021, en la cárcel El Pedregal se inscribieron 199 hombres en cursos de ensamble orquestal, marketing digital, marroquinería, tejido terlenca, vivero y ornato, además de 140 mujeres en cursos de yoga, técnica vocal, muñequería, vivero y ornato, y maquillaje con comunidad LGTBIQ.
Se espera que las capacitaciones en artes y oficios lleguen, al finalizar este año, a 860 participantes privados de la libertad, pospenados y sus familiares. Son 22 cursos de 120 horas cada uno y con un mínimo de 25 participantes por grupo. Todo esto tiene un componente de temas transversales y fortalece, principalmente, temáticas de paz, prevención de las violencias y restablecimiento de los derechos que capacitan a la persona para emprender un futuro en la legalidad.