Venezuela recibió el récord Guinness a "la orquesta más grande del mundo" tras lograr poner en escena a miles de músicos que interpretaron la Marcha Eslava de Tchaikovsky. La marca fue alcanzada por el Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela, un programa estatal fundado en 1975 por el maestro José Antonio Abreu que dio acceso a educación musical a millares de niños de clases populares, al desplazar a Rusia que la había impuesto en 2019 con 8.097 músicos."Puedo confirmar que este intento ha sido exitoso, felicidades, Guinness World Récord como la orquesta más grande, ustedes son oficialmente asombrosos", dijo la oficial a cargo de dar el veredicto en una pantalla durante un acto en la sede de "El Sistema", como es normalmente conocido.Aunque el intento por el récord se hizo el pasado sábado en el patio de la Academia Militar de Venezuela, con unos 12.000 músicos venezolanos, los encargados de certificar la cifra reconocieron que la orquesta constó de 8.573 integrantes. "La orquesta más grande consiste de 8.573 músicos y fue lograda por el Sistema Nacional de Orquestas y coros juveniles e infantiles de Venezuela, en Caracas, el 13 de noviembre de 2021", indica el certificado de la organización Guinness.Músicos venezolanos, incluyendo niños de 12 años hasta adultos integrantes de la principal orquesta del país, la Simón Bolívar, interpretaron la Marcha Eslava dirigidos por el maestro Andrés Ascanio, de 34 años. "Es una hazaña, no solo del Sistema, sino del país", dijo entre aplausos Eduardo Méndez, director de este programa conformado por un millón de miembros en todo el país. Venezuela ya acumula varios otros Guinness, incluidas el Salto Ángel, la caída de agua más alta del mundo, o el llamado "Relámpago del Catatumbo", el sitio con mayor cantidad de tormentas eléctricas del planeta.También está el teleférico más alto del mundo, la mayor arepa y pan de jamón, comidas típicas venezolanas, y hasta las cinco coronas en el Miss Mundo son un récord en este país exportador de reinas de belleza. "El Sistema", que ha sido replicado por decenas de países, es cuna de emblemas como Gustavo Dudamel, el director musical de la Ópera de París y la Filarmónica de Los Ángeles, que envió un mensaje de felicitación a través de un video publicado en sus redes sociales.La obra de Tchaikovsky, compuesta en 1876 como himno para inspirar a los soldados rusos y serbios en la guerra con Turquía, fue tercera en el programa de ocho piezas en el concierto del 13 de noviembre. "El Sistema" ya había reunido a más de 10.000 músicos para rendir tributo al maestro Abreu cuando falleció. Presente en la ceremonia para celebrar el récord, el embajador ruso en Venezuela, Sergei Melik-Bagdasarov, felicitó al país por su "digna" victoria. "Sabemos todos que el récord anterior pertenecía a Rusia, ahora es su logro, pero compartimos con mucho gusto esta victoria", expresó el diplomático en el acto transmitido por la televisión estatal.
Chaikovski nació en Rusia, bien entrada la época de 1840. Su camino musical estuvo mediado por una ´época prolífica de creadores, siendo contemporáneo de artistas como Borodin, Mussorgsky o Rimski-Korsakov, el conocido Grupo de los cinco. Sin embargo, con un trabajo arduo el compositor logró desligarse de las formas de la época y construir un estrilo propio que lo convertiría en un referente obligado, al hablar de música. El nacionalismo imperante de la música del momento no fue nunca de su interés, por el contrario, Chaikovski se enfocó en profundizar sobre él mismo, anulando el contexto como una fuente de principal inspiración. Su corazón entonces se convirtió en el mapa y la ruta, en el medio para hablar de su compleja y atormentada personalidad hasta convertirla en sinfonía.Los primeros pasos de Tchaikovsky en el mundo de la música no revelaron un especial talento ni para la interpretación ni para la creación. Sus primeras obras, como el poema sinfónico Fatum o la Sinfonía núm. 1 "Sueños de invierno", mostraban una personalidad poco definida. De inspiración fácil, gustaba del lirismo efusivo y espontáneo, abierto a inflexiones idílicas, lo que explica el éxito posterior de sus obras tanto en su patria como en el extranjero.Quizás haya sido "El lago de los cisnes" de 1877 su primera obra de gran acogida y reconocimiento, a pesar de haber sido despreciada en el estreno. La romántica y mágica historia de amor entre Sigfrido y Odette, princesa transformada en cisne, es actualmente una de las piezas cimeras del repertorio, con números tan célebres como el Vals del acto primero, la Introducción del segundo o las danzas características del tercero.
Por más de dos siglos, músicos, historiadores y restauradores han estudiado detenidamente este misterio que hasta hoy, la ciencia no acaba de develar: el sonido del violín Stradivarius. Y no es necesario ser un experto en música para haber escuchado alguna vez que estos instrumentos son los mejores violines que jamás se hayan construido en la historia, pues su sonido es incomparable.En la actualidad, la ciencia aún no ha comprendido cómo estos instrumentos creados entre el siglo XVII y XVIII (hoy son muy escasos) son mucho mejores que los que se manufacturan en el mercado. Alrededor de esta hipótesis se han creado muchas teorías, algunas mucho más verosímiles que otras.Una de ellas es que se cree que la madera utilizada para crearlos proviene del abeto alpino que creció durante un periodo de clima inusualmente frío, lo que provocó que los anillos de crecimiento anuales estuvieran más juntos, haciendo que la madera fuera anormalmente más densa que la de los demás.Otra teoría que prevalece tiene que ver con el barniz que Antonio Stradivari utilizó, y que mezclaba un ingenioso cóctel de miel, clara de huevo y goma arábiga de árboles subsaharianos. Pero entre todas las teorías, hay una que tiene más aceptación entre la comunidad científica: el secreto está en los productos químicos utilizados para empapar la madera: bórax, zinc, cobre, alumbre y agua de cal.En 2017, un grupo de investigadores taiwaneses comparó el arce utilizado por Stradivarius con la madera de arce moderna de alta calidad. El resultado del análisis arrojó la evidencia de tratamientos químicos en forma de aluminio, calcio y cobre, entre otros elementos. Con el paso del tiempo, la descomposición de la hemicelulosa, un componente de la madera, los instrumentos de Stradivari y Guarneri utilizados en el estudio tenían un 25% menos de agua que los instrumentos modernos.El resultado de dicha investigación es contundente: entre menos humedad, más brillante es el sonido. Esta conclusión se pudo comprobar al analizar las trazas químicas conservadas en la madera de arce utilizada para fabricar las cajas de resonancia de los instrumentos de Stradivari y Guarneri. En la investigación se utilizó una rara colección de muestras de madera cremonense de abeto y arce. Ahí encontraron rastros de bórax y varios sulfatos metálicos con más de 300 años de antigüedad.
El director de orquesta levanta su batuta y la música empieza a sonar ante un público expectante, que intenta descubrir la huella de Beethoven en una melodía basada en unas cuantas notas suyas pero completada con la ayuda de la inteligencia artificial. La obra, interpretada en una sala de Lausana (Suiza) por la orquesta Nexus, está inspirada en un puñado de notas que el genial compositor alemán dejó, posiblemente fragmentos de su 10ª sinfonía y fue terminada gracias a la tecnología.En cuanto estuvo terminada, la orquesta ensayó esa pieza inédita durante un rato y, esa misma noche, la presentó en un concierto. La obra se llama BeethovANN 10.1 y fue creada gracias a un programa de inteligencia artificial. "ANN" se refiere al acrónimo (en inglés) de Red Neuronal Artificial, una de las formas de la inteligencia artificial. "No sabemos demasiado bien cómo resultará. Está esa parte un poco imprevista, pero hay que entender que no es el resultado lo que cuenta, si no el proceso", había explicado días antes a la AFP Guillaume Berney, el director de orquesta.Detrás de BeethovANN 10.1 está Florian Colombo, un violoncelista que ha dedicado largos años al proyecto de enseñarle a una máquina cómo componer siguiendo el estilo de uno de los más grandes músicos de la historia. El jueves, Florian Colombo abrió el fichero Symphonie 10.1 en una gran pantalla y, con un solo clic, generó la partitura final para la obra, que dura unos 5 minutos.Tras ello, Guillaume Berney efectuó algunos ajustes armónicos y la pieza fue presentada al público esa misma noche. Este viernes está previsto realizar una segunda representación. "Es bastante genial ver esto, es como estar en la unidad de maternidad, es un nacimiento", afirmó el director de orquesta, con las primeras hojas de la partitura en la mano. "En cuanto a lo que veo a nivel armónico, estamos más bien en la época de Beethoven, así que podemos decir que es un éxito".Durante el ensayo, Florian Colombo confesó su "emoción". "Hay un toque de Beethoven pero esto es verdaderamente BeethovANN, es algo por descubrir", apuntó. "Hay algunas cosas que están muy bien, otras que están fuera del estilo pero es agradable. Quizá le falta la chispa del genio", señaló.Colombo, investigador informático de la prestigiosa Escuela Politécnica Federal de Lausana, educó a las redes de neuronas artificiales con los 16 cuartetos de cuerda de Beethoven y sus acordes particulares, y luego le pidió que compusiera a partir de fragmentos lo que habría podido convertirse en la 10ª sinfonía. "La idea es poder apretar el botón y tener la partitura completa para la orquesta sinfónica entera, sin más intervenciones que mi trabajo previo", explicó el investigador.
En la sala, junto al piano, se ubican las violas. En la cocina, los violines. Más tarde, en un turno sucesivo, llegarán los teclados y el coro. Se trata del Principito Sinfónico, una pieza de teatro musical creada en medio del confinamiento por el covid 19, lanzada en disco el pasado 30 de julio y que desean presentar al público a partir de noviembre.El director de la orquesta, Enmanuel González, no puede esperar más. "El Principito es un proyecto hermosísimo. Fue el trabajo de la cuarentena y fue una vía de escape también, era lo único en que pensábamos. Me tiene con mucha expectativa y quiero presentarlo ya", dice impaciente.Inspirada en la novela de Antoine de Saint-Exupéry, El Principito Sinfónico es una composición original de los miembros de esta orquesta formada por más de 120 músicos profesionales venezolanos que llegaron a Argentina hace cuatro o cinco años, parte del enorme éxodo de su país. Muchos de ellos se ganaban la vida tocando en los pasillos del metro de Buenos Aires. Pero la llegada del covid 19 los sumió en "un periodo oscuro", del que ahora emergen con esta obra, refiere su director ejecutivo, Omar Zambrano. "La habíamos pensado antes de la pandemia, pero no la habíamos podido ejecutar porque requiere mucho tiempo para la composición y los arreglos. Es el resultado de muchas voluntades: los compositores, los arreglistas, los ejecutantes, el director. De a poquito se fue armando en pandemia, de a pedacitos, a medida que se flexibilizaba el confinamiento", relata Zambrano. Durante ese tiempo también crearon una escuela de música en línea, Latin Vox Academy, que permite a los músicos generar ingresos.Del trauma a la alegría"Difícilmente estaríamos haciendo lo que hacemos sin el trauma del desplazamiento y de la pandemia. El ejercicio de transformar lo malo en lo bueno es lo poderoso de lo que hacemos. Convertir el trauma en alegría es un arte", indica Zambrano. En los meses más difíciles recibieron asistencia del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) y de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM). "La pandemia del covid 19 vino a exacerbar la vulnerabilidad de la población migrante y la refugiada. La mayoría de esas personas trabajaba en el sector informal y se vio abiertamente afectada por las medidas sanitarias", expresa Juan Carlos Murillo, representante de Acnur.Pero el proyecto Latin Vox Machine "permitió que pudieran continuar trabajando y relacionándose. Es una muestra fehaciente del valor, de la determinación y de la resiliencia de las personas refugiadas y migrantes", asevera Murillo. Venezuela es, detrás de Siria, el segundo país del mundo con mayor número de desplazados, unos 5,6 millones de personas desde 2015, según la estimación de Acnur. En Argentina residen unas 185.000.La cantante Isa Ramos y el coordinador de la orquesta, César Pérez, se encargaron durante el confinamiento de contactar a los músicos para saber qué necesitaban."Creamos una red. Con familias maravillosas hicimos una colecta inmensa. Pagamos alquileres de varios chicos por varios meses. Atendimos situaciones médicas, cirugías. Y en la Navidad los niños (de los músicos) también tuvieron esa ilusión de los regalos", recuerda satisfecha Ramos."Volver a escucharnos"La violinista María Andreyna Chávez considera que la orquesta ha sido en este tiempo una "bendición" y por nada en el mundo renunciaría a los domingos de ensayo. "Es la unión, volver a vernos. Después de tanto tiempo, volver a escucharnos. Hemos sido muy bendecidos con el Principito. Nos ha dado mucho: un objetivo, un continuar, un seguir", sostiene.Zambrano la secunda y asegura que "esa dinámica de ensayar, de perseguir un objetivo artístico es un privilegio que atesoramos y compartimos. Los ensayos son más valiosos que los propios conciertos, porque es el espacio en el que ocurre el reencuentro que teníamos en Venezuela y que de pronto perdimos". Aunque muchos de ellos no se conocían antes, la gran mayoría se formó en el aclamado Sistema de orquestas infantiles y juveniles de Venezuela, donde comenzó su carrera Gustavo Dudamel, el nuevo director de la Ópera de París.
Después de una amplia y ecléctica carrera que alcanza las tres décadas, Moby se sitúa hoy en el gran salón de los pioneros de la música electrónica. Además de ser cantante y compositor, productor, activista y restaurador, ha decidido emprender una última aventura musical que se presenta bajo una luz completamente nueva. "Reprise" incluye sus pistas más conocidas en nuevos arreglos para instrumentos clásicos, con el propio Moby y una alineación estelar de colaboradores, arreglistas y expertos de todo el espectro musical.El álbum, que salió a la venta el pasado 28 de mayo, coincide con el estreno de Moby Doc (2021), un documental surrealista escrito y dirigido por Rob Bralver, narrado por el propio Moby, en el cual reflexiona sobre su vida personal y la iconicidad de su música. En el documental, Moby explora desde sus bases como guitarrista de una banda punk hasta convertirse en una super-estrella que definió por años al arquetipo de -productor de música electrónica-; de ser un hombre con problemas con las drogas a ser uno de los activistas veganos más reconocidos del mundo, su vida estará contenida en este material que contendrá entrevistas exclusivas con leyendas de la talla de David Lynch y David Bowie.Moby asumió el reto de explorar su música en clave sinfónica tras actuar, hace tres años, con Gustavo Dudamel en el Walt Disney Concert Hall, en la que fue su primera incursión en este formato. Ahora, con "Reprise", el músico neoyorkino de 55 años celebra su ingreso en el histórico sello berlinés de música clásica, el más prestigioso del mundo.Durante el anuncio, realizado en marzo de este año, compartió el primer adelanto del material, una nueva versión de su clásico ‘Porcelain’, segundo sencillo de su quinto álbum de estudio Play (1999) que lo llevó a ser un icono para la cultura pop. Contrario a las atmósferas electrónicas de la original, está tiene su base en una melodía a piano y unos violines. La voz la comparte con Jim James, líder de la agrupación My Morning Jacket.El álbum de 14 pistas incluye canciones clásicas de Moby como Porcelain, Why Does My Heart y Extreme Ways en versiones nuevas y absolutamente innovadoras instrumentadas en conjunto con la Budapest Art Orchestra, además de contar con colaboraciones llamativas que incluyen a Jim James, Víkingur Ólafsson, Gregory Porter y Kris Kristofferson.
En HJCK, hemos elegido a uno de los personajes más auténticos y representativos de la generación modernista de la cultura checa como nuestro Músico de la Semana: Leoš Janáček. Sus obras, muchas veces eran basadas en la música popular que provenía de las regiones de Moravia, particularmente de la Eslovaquia Morava y de Laquia.Nacido el 3 de julio de 1854 y siendo el noveno hijo de sus padres Jiří y Amálie Janáček,, se ganó la vida durante mucho tiempo como profesor de música. En 1919, un año después del surgimiento de la Checoslovaquia independiente, fundó el Conservatorio de Brno.Sus primeras dos óperas, Šárka y El comienzo de un romance, escritas a finales del siglo XIX, no cosecharon mucho éxito. El maestro se impuso hasta en 1904 con la ópera Jenůfa que le abrió las puertas al mundo de la música clásica mundial.Entre otras obras más destacadas de Leoš Janáček figuran las piezas orquestales, como la Sinfonietta, La Misa glagolítica y la rapsodia Taras Bulba, entre otras composiciones. Gracias a estas obras de madurez, Janáček está considerado como uno de los compositores checos más importantes, junto a Antonín Dvořák y Bedřich Smetana.Su última ópera la escribió en 1930 bajo el título "De la casa de los muertos" con libreto del compositor basado en la obra de Fiódor Dostoyevski. Janáček falleció a causa de una neumonía el 12 de agosto de 1928 en la ciudad de Ostrava.A continuación disfrute del gran especial de nuestro músico de la semana transmitido a través de hjck.com sobre la vida y obra del compositor.
El sonido de las cuerdas se eleva el viernes por la noche desde un pequeño triángulo verde en el centro del distrito de Brooklyn, viene de los instrumentos de los músicos de la orquesta filarmónica de Nueva York, lejos de su habitual sede en el Lincoln Center de Manhattan. Con la temporada de otoño cancelada y la sala cerrada debido al coronavirus, Quan Ge, Cong Wu y sus violines actúan frente a la furgoneta de la orquesta, que acertadamente se llama Bandwagon, un juego de palabras entre "tren en marcha" y "vehículo de la orquesta".La filarmónica eligió ese nuevo formato, que presenta tres veces al día los viernes, sábados y domingo, hasta mediados de octubre, para encontrarse con los neoyorquinos en las calles. Algunos pasan sin ver, pero otros se detienen a escuchar estas melodías que se mezclan con los ruidos de la ciudad, como la bocina de un camión cuyo tono coincide milagrosamente con la canción. En este momento, "es como si la ciudad fuera nuestra orquesta y que nosotros fuéramos los solistas", se maravilla Anthony Roth Costanzo, cantante de ópera y productor de esta serie de mini-conciertos "pop-up", que se apoderan de los cuatro rincones de la metrópoli sin anunciarse de antemano."En este periodo de pandemia, de cambio social, estamos explorando nuevas formas para entrar en contacto con la gente", explica el contratenor. "Tenemos que reinventar las formas de ir a los conciertos", expresa. "No se trata solo de que la gente venga a nuestra casa, a nuestro local, se trata de presentarnos al mundo y mostrar lo que la música puede hacer", añade. Además del lugar, la orquesta filarmónica más antigua de Estados Unidos (178 años) también ha ampliado su repertorio para atraer a los espectadores.En el pequeño jardín público de Brooklyn, a pocos metros de la Academia de Música de Brooklyn, los músicos, utilizando tapabocas y separados como mandan los protocolos sanitarios, terminan con la balada "Somewhere" del musical "West Side Story". Los miembros de la banda cambiaron su sobria indumentaria de la sala de conciertos por camisetas y gafas de sol y animan al público a acercarse e incluso a bailar.Anthony Roth Costanzo está a cargo de la animación entre canciones, con un micrófono en mano desde la parte trasera de la camioneta. Los conductores bajan las ventanillas para escuchar algunas notas de un arreglo de cuerdas del himno tributo de Nueva York "Empire State of Mind (Part II)" de la cantante pop Alicia Keys."Necesitamos un escenario""¡Te amo!" grita Lorri, una mujer con lágrimas en los ojos después de la seria interpretación de "Lachrimae Pavan". "Me conmovió", dice poco después, emocionada por este concierto que para ella es "un regalo del cielo". Desde el comienzo de la pandemia y el cierre de la mayoría de las salas de espectáculos en Estados Unidos, los conciertos virtuales se han multiplicado en un intento por llenar el vacío. Pero "no es lo mismo", según Cong Wu. "La música es la comunicación y necesitamos un escenario", precisa. La Filarmónica mantiene en secreto la ubicación de estas actuaciones al aire libre para evitar las multitudes y crear condiciones para una propagación de la covid-19.Pero incluso frente a unas pocas docenas de espectadores elegidos al azar, no todos ellos amantes de la música clásica, con la debida distancia "es agradable sentir la energía de la gente", se regocija el violinista. "Hubo un momento al final, cuando los violines se callaron, en el que hubo un silencio perfecto, del tipo que se escucha en una sala de conciertos", dice Anthony Roth Costanzo. "Podía sentir que la gente se ponía en contacto", afirma. "No sólo entre ellos y nosotros, sino también entre nosotros. Es tan importante en el mundo de hoy", subraya.
Nacido en una familia de clase media, la educación que recibió Chaikovski estaba dirigida a prepararle como funcionario, a pesar del interés musical que mostró. En contra de los deseos de su familia, decidió seguir una carrera musical y en 1862 accedió al Conservatorio de San Petersburgo, graduándose en 1865. La formación que recibió, formal y orientada al estilo musical occidental, lo apartó del movimiento contemporáneo nacionalista conocido como el «Grupo de los Cinco» conformado por un grupo de jóvenes compositores rusos, con los cuales Chaikovski mantuvo una relación profesional y de amistad a lo largo de su carrera.Mientras desarrollaba su estilo, Chaikovski escribió música en varios géneros y formas, incluyendo la sinfonía, ópera, ballet, música instrumental, de cámara y la canción. A pesar de contar con varios éxitos, nunca tuvo mucha confianza o seguridad en sí mismo y su vida estuvo salpicada por crisis personales y periodos de depresión. Como factores que quizá contribuyeron a esto, pueden mencionarse su homosexualidad reprimida y el miedo a que se revelara su condición, su desastroso matrimonio y el repentino colapso de la única relación duradera que mantuvo en su vida adulta: su asociación de trece años con la rica viuda Nadezhda von Meck. En medio de esta agitada vida personal, la reputación de Chaikovski aumentó; recibió honores por parte del zar, obtuvo una pensión vitalicia y fue alabado en las salas de conciertos de todo el mundo. Su repentina muerte a los cincuenta y tres años suele atribuirse generalmente al cólera, pero algunos lo atribuyen a un suicidio.A pesar de ser popular en todo el mundo, Chaikovski recibió a veces duras críticas por parte de críticos y compositores. Sin embargo, su reputación como compositor es hoy en día segura, y ha desaparecido por completo el desdén con el que los críticos occidentales a principios y mediados del siglo XX catalogaban su música como vulgar y falta de pensamiento. De hecho, Chaikovski está considerado actualmente como el más destacado músico de Rusia y una de las figuras más importantes de la cultura de ese país a lo largo de su historia.AmorEl escritor Aleksandr Poznanski mostró a través de su investigación que Chaikovski tuvo sentimientos homosexuales y que algunas de las relaciones más cercanas que mantuvo fueron con personas del mismo sexo. El criado de Chaikovski, Alekséi Sofrónov y el sobrino del compositor, Vladímir "Bob" Davýdov, han sido citados como intereses románticos.28Más dudas plantea la conformidad que tenía Chaikovski de su propia naturaleza sexual. Tras leer toda la correspondencia de Chaikovski, incluyendo la no publicada, Poznanski concluye que el compositor «finalmente empezó a ver sus peculiaridades sexuales como algo inevitable e incluso como una parte natural de su personalidad... sin haber sufrido ningún daño psicológico grave». También han sido publicadas secciones importantes de la autobiografía de su hermano Modest, en las cuales se refiere a esta orientación sexual de su hermano, que comprendía por ser similar a la suya. Algunas cartas que fueron suprimidas por los censores soviéticos, en las cuales Chaikovski habla abiertamente sobre su homosexualidad, han sido publicadas en ruso, así como traducidas al inglés por Poznanski. Sin embargo, el biógrafo Anthony Holden afirma que la búsqueda del musicólogo y erudito británico Henry Zajaczkowski «mediante líneas psicoanalíticas» tiende en cambio a «una inhibición severa inconsciente por parte del compositor acerca de sus sentimientos sexuales»:El musicólogo e historiador Roland John Wiley sugiere una tercera alternativa, basada en las cartas de Chaikovski. Sugiere que a pesar de que Chaikovski no sufría «ningún sentimiento insoportable de culpabilidad» sobre su homosexualidad, permaneció temeroso de las consecuencias negativas de que eso saliera a la luz, especialmente en las ramas de su familia. Su decisión de casarse e intentar llevar una doble vida fue propiciada por varios factores: la posibilidad de que se revelara su situación, la voluntad de agradar a su padre, su propio deseo de una casa permanente y su amor por los niños y la familia. A pesar de que Chaikovski pudiera haber tenido una vida activa en cuanto a romances, las pruebas sobre emplear «argot sexual y tener encuentros apasionados» son limitadas. Buscó la compañía de homosexuales en su círculo durante largos periodos, «asociándose abiertamente y estableciendo conexiones profesionales con ellos». Wiley añade, «las críticas de inexpertos en la materia sobre lo contrario, que no justifican su asunción, salvo por el periodo de [corta vida matrimonial], afirman que la sexualidad de Chaikovski incluso afectó a su inspiración profundamente, o hizo de su música una confesión idiosincrática o incapaz de comunicar contenido filosófico». Lo cierto es que el último movimiento de la Sexta Sinfonía de Chaikovski, más conocida como la Patética, refleja la progresiva desesperación del autor ante la hostilidad de su entorno social y anuncia acaso su suicidio, camuflado bajo el manto de una enfermedad autoinducida, nueve días después de su estreno.
A pesar de que en su niñez aún no sabía bailar, Alicia Alonso recuerda que en sus primeros años de vida al escuchar música cerraba los ojos y movía su cuerpo, se dejaba llevar por los movimientos que la melodía le inspirara, improvisando los primeros pasos del arte que años después la convirtió en leyenda.Así recordaba sus inicios en el ballet y su amor por la música la célebre bailarina y coreógrafa cubana, quien murió el pasado jueves a la edad de 98 años dejando tras de sí un mito inigualable en la danza iberoamericana.“Desde muy pequeña yo oía la música y enseguida me ponía a bailar lo que yo pensaba, lo que yo sentía. Yo nunca había visto ballet, pero la música siempre me ha inspirado el movimiento, la danza en sí. Cogía cualquier cosa que encontrara, un chal o por lo general unas toallas, y me ponía a moverla como si fuera el pelo. Creo que imitaba un poquito a Isadora Duncan sin saberlo, porque nunca la había visto a ella ni sabía nada, pero era lo que yo necesitaba: bailar, moverme con el cuerpo, y eso era lo que me inspiraba la música”, contó Alonso en una breve entrevista rescatada del Archivo HJCK, concedida a Radio Francia Internacional en París, en 1998, donde tras 15 años de ausencia el Ballet Nacional de Cuba presentaba dos de sus mayores creaciones: El lago de los cisnes y Giselle.Alonso nació en La Habana, Cuba, en 1921 y desde muy joven comenzó a brillar en teatros del mundo entero con su interpretación de Giselle.La artista recordaba que jamás oyó música sin sentir el baile y que acostumbraba cerrar los ojos cuando asistía a un concierto para, inconscientemente, crear y coreografiar un ballet, “viendo toda la escena, los bailarines bailando, la entrada, la salida, lo empiezo a inventar en ese momento en la imaginación. Cuando se termina la sinfonía o lo que esté escuchando de música, el concierto en general, termino agotada porque lo he bailado todo”, dijo.Muchos la recuerdan bailando en Coppelia, El lago de los cisnes, Carmen, La viuda alegre y demás piezas clásicas que han hecho la fama de la compañía Ballet Nacional de Cuba, que ella misma fundó en 1948. Sus seguidores también evocan a la bailarina como una mujer de cuello de cisne, disciplinada y temperamental como pocas, que seducía al público con sus giros virtuosos, así como una coreógrafa exigente que hacía repetir incansablemente los movimientos en busca de la perfección.Por eso su partida la semana pasada, a raíz de una dolencia cardíaca, deja un vacío enorme. No solo se marcha la única latinoamericana en ostentar el título simbólico de ‘prima ballerina assoluta’ (otorgado a las bailarinas más excepcionales), sino también se va la gran dama cubana que se codeaba con reyes, poetas y políticos.Su despedida fue en el Gran Teatro de La Habana, el mismo recinto que llenó de gloria al ballet de Cuba y que este domingo recibió el cuerpo de Alonso, que en su último acto público estuvo arrullada por música clásica, antes de partir a la eternidad.En el vestíbulo del edificio de estilo neobarroco, al lado del Capitolio Nacional, se instaló la capilla ardiente de la leyenda cubana.Hubo lágrimas, pero también rosas y acordes de violines, como aquellos que acompañaron sus fuettés y relevés.Su féretro fue cubierto con una tela de encaje y rosas blancas, y lo ubicaron a los pies de una escalinata de mármol colmada de flores. Cuatro fotos gigantes de sus mejores épocas adornaban el lugar, a donde acudieron cientos de personas en agradecimiento por su inconmensurable legado a la cultura y el arte de la isla.
—Diez... Veinte... Treinta... Aquí tiene su semana, maestro Flores.—Diez... Veinte... Treinta... —contó pausadamente el viejo, estirando con fuerza los billetes que luego lió y guardó en una cartera de cuero negruzco—. Conforme, patrón, muchas gracias y hasta el lunes.—Oiga, maestro, ¿no sería posible que mañana saliera a trabajar? Quisiera que me arreglara unos estantitos en el escritorio.—Yo no trabajo en domingo.—Lo sé, don Flores, pero un día es un día... Ya está, diga que sí.—Yo trabajo toa la semana, es mi deber, es mi obligación, pero el domingo descanso. Pa eso hizo Dios el domingo; pa descansar.—Convenido. Pero por esta vez no podría...—Ya fijé que no —atajó el viejo firmemente.—Se tendrá en cuenta su buena voluntad —dijo molesto el joven.Hablaban el patrón —o sea el administrador de la hacienda— y don Santos Flores, a través de la ventana del escritorio del primero que, protegida por una reja de hierro, abría sobre el corredor.Llegaba la noche con un silencio hondo, con una paz de vida que se aquieta, buscando en el reposo pujanza para la brega del siguiente día. Diversos rumores, al turbarlo, hacían luego más profundo ese silencio: un último aletear de pájaros en busca del nido; el paso de un gañán que horqueta al hombro caminaba- hacia su puebla; el trote brioso de un caballo; relinchando por la piara; el grito de una mujer que decía: "Vení, condenao", con estridencias broncíneas en-1a voz; el ulular de una lechuza anunciadora de la noche.Con todas las gamas del azul desvanecíase el paisaje en una especie de niebla: azul verdoso los prados; azul sombra los montes; azul negro, cordilleras; azul ópalo el cielo; azul plata las estrellas.— ¿Mi güena voluntá pa servir a l'hacienda desde que nací? Bien puee tomarse en cuenta... Sesenta años tengo y ni un día e trabajo hei faltao a mi obligación. Usté lo sabe y los patrones lo saben mejor que usté hablaba don Santos sin reproche, pero con una voz íntegra que no admitía discusión.—Bueno, bueno —contestó el joven conciliadoramente—, allá usted con sus razones. Hasta el lunes.—Hasta el lunes, patrón.Era interesante el viejo carpintero, recia figura hecha en músculos que los años iban enjutando. Sólo eso y blanquear los cabellos había conseguido el tiempo, porque el cuerpo se alzaba de un firme trazo único. A hachazos parecía haber sido hecha la fisonomía resuelta, de empecinado: cuadrada la barbilla, filudas como aristas las quijadas, delgados los labios descoloridos, recta la nariz, horizontales casi las cejas, rectangular la frente amplia, cerrados de expresión los grandes ojos de iris gris acero que iban derechos en busca de la mirada del interlocutor. La voz acordaba con el resto: fría, sin modulaciones, lenta, iba buscando con tino las palabras que mejor tradujeran su pensamiento."Es como un peñasco —pensó el administrador al verlo fundirse al azul de la noche en el fondo de la alameda—. ¡Y que vaya a casarse!"2Venido de varias generaciones que nacieran y murieran en la hacienda, Santos Flores —como todos los hombres de su familia fue carpintero.Muy niño aún, ayudaba a- su padre en cuanto sus fuerzas le permitían. Las horas de solaz que para los otros chiquillos eran correrías locas a través de los potreros en busca de nidos y frutas, para Santos eran paciente trabajo de carpintería que daba por resultado una cajita, una repisa, un banco. A los diez años entro a formar, parte del personal de la hacienda como ayudante de carpintero, bajo las órdenes de su, padre.Desde entonces no se le conoció otro goce que el trabajo, ni otra distracción que salir los domingos a dar una vuelta a caballo por los caminos comunales, ni otro afecto que el cariño a sus progenitores.En la austeridad de una vida hecha de deber cumplido pasaron lentos y monótonos los años. Murió el viejo maestro carpintero y Santos lo reemplazó en el puesto.Entre los montañeses aislados de la ciudad por enormes distanciar, se conserva íntegra la tradición casi feudal del vivir de nuestros abuelos. El patrón es el señor omnipotente del cual se soporta todo sumisamente, aunque en lo hondo se lo reconozca injusto. Ese sentimiento es mudo. La primacía del señor sobre el inquilinaje la ejerce en la puebla el padre, el marido o el hermano mayor sobre el resto de la familia. Así como el patrón lega al morir cuanto posee a sus descendientes, el montañés deja a los suyos el oficio que tuviera, con algo que más aún semeja su idiosincrasia a la del señor de otros tiempos: es el hijo mayor quien lo sucede.Santos Flores reemplazó a su padre en la carpintería y en el hogar.Tenía un carácter de hierro. Los principios morales y religiosos que la madre le inculcara se modelaron en ese metal, y nunca, nada ni nadie pudo borrarlos. Mientras vivió el padre fue un obediente a su mandar, luego tomó la dirección de la familia, reducida solamente a la mama Rosario, y bien supo ésta que era el hijo tan despótico como fuera el marido.— ¿Por qué no te casai? —preguntaba a veces, tímidamente, mama Rosario.—Porque aún hay tiempo pa tener un hijo.—La Juana del molino me gusta hartazo. Es limpia y comedida y de cara no es naíta e pior. Es l'única que me gustaría pa nuera.—Entoavía no pienso en casarme.Recién cumplía Santos Flores cuarenta años cuando la mama Rosario, de una gripe, fuese al otro mundo en busca de "su finao" que según ella la esperaba en la puerta del cielo.Este golpe rompió el equilibrio de sus hábitos. Por volver a ellos, inmediatamente, Santos Flores resolvió casarse.Eligió a Juana —la que tanto le- gustaba a su madre—, una mujercita bondadosa que sólo se ocupaba en bruñir el hogar modesto, plegándose humilde a cuanto Santos decía. Siempre taciturno, jamás contrariado, adivinado en sus menores deseos, el hombre fue bueno con ella y. la hizo feliz a su modo.Lo que no podía perdonarle, y en sus raras y frías cóleras le reprochaba como falta propia, era que en vez de un Santos Segundo Flores que siguiera la tradición de maestros Flores en la hacienda, le hubiera dado, con do años de diferencia de una a otra, tres hijas que se llamaban María Juana, María, Mercedes y María del Tránsito.Cuatro años después, al dar a luz un hijo varón que nació muerto, Juana murió, sumiendo a. Santos en un dolor silencioso, tanto más hondo persistente cuanto menos se deshacía en palabras y gestos.Junto al dolor —superándolo a ratos— estaba el sentimiento de humillación que el no tener un hijo le producía. En esos momentos pensaba en casarse nuevamente. Pero la recta visión de sus deberes paternales lo hacía desistir de ese, propósito, por no darles madrastra a las niñas. Cuando estuvieran mayores...Sí, entonces, ¿por qué, no casarse y lograr el ansia del hijo?La madre de Juana quiso reclamar el cuidado de las nietas. Santos Flores cortó todo proyecto de la molinera con esta frase sin vuelta:—Mis hijas son mías y. naiden más .que yo las criará.María Juana —que tenía a la sazón diez años— tomó el trabajo de la casa. Don Santos y ella se levantaban al amanecer, aseaban la -puebla; ordeñaban la vaca, preparaban el desayuno. Cuando el padre se iba, María Juana vestía a, las pequeñas y toda la mañana se le pasaba cuidándolas juiciosamente, al par que vigilaba la olla con los porotos y tenía lista la leche para el ulpo.A mediodía llegaba don Santos. Almorzaba de prisa y al pitar la sirena volvía el hombre a su trabajo. A eso de las cinco la mujer del campero Silva venía a lavar, a tostar, a moler trigo, a hacer, en fin, todos los trabajos que María Juana no podía realizar.Y la niña se esmeraba en su papel de madrecita que a sus propios años le daba importancia y —alma de servidumbre— vivía pendiente de los deseos de los demás, tratando de imitar en todo "el modo de los grandes", seria y razonable por naturaleza, obsesionada como su padre por el cumplimiento del deber.María Mercedes —Meche familiarmente—, era en lo físico idéntica a don Santos, pero en cuanto a carácter, el polo opuesto. Risueña, parlanchina, impulsiva, caprichosa, vivía en perpetua movimiento que impacientaba al padre. Y cuanto más crecía la niña, más rudos eran los choques de ambos caracteres. El padre exigía sumisión y obediencia pasiva; la hija quería libertad y obedecer sólo a su idea. A veces la discusión subía de tono, y el padre —exasperado— le pegaba. Pero ni razones ni golpes conseguían hacerla obedecer.—Sos pior que macho —decía don Santos:—Pior que yo es usté. ¿Por qué no m'eja ir a jugar con los chiquillos e don Silva?—Ya t'ije que no.—Es que yo l'igo que voy no más...—Vos m'andái buscando las manos.—Si quere pegarme aquí me tiene —y se lo quedaba mirando, desafiadora, con sus ojos de acero tan semejantes a los del padre, que unos parecían reflejo de los otros.Eran luchas que sumían a María Juana en un mar de estupores. Para ella, llevarle la contraria a don Santos era algo horrendo y, aunque le dolieran como recibidos en carne propia los golpes dados a Meche, encontraba muy naturales aquellas palizas.María del Tránsito —la Tatito— era un pobre ser de timidez que vivía en perpetuo sobresalto de desagradar, un ser de recogimiento únicamente se encontraba tranquila al estar sola, y que en presencia de don Santos transpiraba de angustia, no sabiendo qué hacer de su persona para disimularse. Las riñas de su padre con Meche la aterrorizaban hasta el punto de desmayarse cuando llegaban a hechos.Ya más grandes, empezaron a asistir a la escuela: juiciosa y aprovechada María Juana; díscola, pero admirable de comprensión, cuando se interesaba por el tema, Meche; opaca en su medianía Tatito, que sólo cobraba vida e inteligencia en la clase de religión.Al correr el tiempo se acentuaron en ellas sus diferentes personalidades, y al cumplir dieciocho años, María Juana era una agradable muchacha, atrayente por la bondad que emanaba de ella, óptima dueña de casa, hábil tejedora de lamas y choapinos, seria, humilde y, como su padre, rígida en sus principios y aferrada al deber.Meche seguía siendo la desesperación de todos, pues a sus características de niña agregaba ahora una coquetería endiablada que traía locos a los mozos de la hacienda. Mas tenían que contentarse con mirarla de lejos al pasar frente a la casita: conociéndola a fondo y temiendo una aventura que le costara la honra, tanto don Santos como María Juana la vigilaban estrechamente.—El que venga a las derechas que hable conmigo —decía don Santos.La pequeña vivía en éxtasis desde que hiciera la primera comunión en Curacautín. La religión fue un sedante para su angustia. Suave y opacamente desprendida de toda pasión humana, se le iban los días rezando, arreglando altares, mirando estampas.La pubertad le trajo innumerables trastornos físicos. La anemia roía su pobre cuerpecillo endeble, desmayos y vértigos la asediaban periódicamente y a tanto llegó su flacura que don Santos se asustó y, acompañado por la abuela molinera, fue con la niña a Victoria a consultar médico. .Siguiendo un régimen alimenticio muy nutritivo alternado con remedios, sin hacer otra cosa que hilar, pasaba Tatito días enteros sentada en un sillón, tirando de la hebra mecánicamente, muy delgada, muy blanca, señoril en su pose arcaica, toda ojos visionarios la cara comida por la enfermedad, extraña en aquel medio de rostros rudos, de figuras recias, de almas roqueñas.Una mañana don Santos las llamó a su pieza luego de desayunar, y pausadamente, con voz resuelta y expresión cerrada, dijo:—Ustedes ya están grandes y una madrastra no las irá hacer sufrir. Yo quero casarme y ya tengo palabreá a la Chabela Rojas. Ya está too arreglao. A mediados del otro mes será el casorio.Las muchachas lo oían estupefactas y un mismo impulso las hizo protestar.—Pero... —alcanzó a decir Tatito, abriendo enormes los ojos.— ¿Se quere casar? ¿Usté se quere casar? —dijo María Juana.— ¡Ja! ¡Ja! —rió Meche, insultante—. Se quere casar con la Chabela... El veterano templándose y mientras las hijas encerrás a canidao pa que naiden las vea. ¡Ja! ¡Ja!—Cállate —ordenó el viejo.—No quero. ¿Por qué voy a callarme? Si es pa morirse e la risa. ¡La Chabela es de la mesma edá que la María Juana!—Ya t'ije que te callaras.—Y yo dije que no quería callarme na... La Chabela Rojas e madrastra e nosotras. ¡Qu'irrisión más grande!—Ustedes serán las honrás. Ella es muy señorita y muy güena y. too se lo merece.— ¿La Chabela se lo merece too? ¿Usté está malo e la cabeza? Bien pue ser que le haigan hecho tomar alguna cosa... La Chabela Rojas muy señorita... Predúnteselo al patroncito... él le pegaría el señorío...—Eso sí que no te lo aguanto. Cállate o te costará caro.—No me callo... aunque me pegue... Predúnteselo tamién a don Fanor, el sobrino del señor Rodríguez. Predúnteselo... ¡Ay!... ¡Ayayaycito!— ¿No te querís callar? ¿No te querís callar?—Predúnteselo a los dos. ¡Ay! ¡Ay! ¡Ayayay!—Toma... Toma...Mala bestia...—Taitita lindo... ¡Por Diosito! —gentil, implorando, María Juana— Mi Señor, la va a matar... ¡Ay! Creo en Dios Padre... —musitaba Tato, alba como un lienzo y a punto de desmayarse.—Mala bestia la Chabela, qu'es una perdía —un bofetón más fuerte alcanzó a Meche en la boca y dando un traspié cayó de lado, sangrando abundantemente por la nariz.—Me vis acriminar —dijo el viejo, pesaroso.María Juana acudía a la otra, a Tatito, que había caído desmayada sobre la cama.—Vos tenis la culpa —prosiguió don Santos, dirigiéndose a Meche, que en el suelo, arrodillada, sollozaba convulsa—, me volvís loco con tus porfías. Con ésta creo que no quedrás más leución. El casorio es pa media-dos del otro mes. No hay güelta. Y no pongan malas caras y prepárense p'arreglar la casa. Hay mucho qui'acomodar pa recebir a la nueva señora. Ya lo saben.Cuando el viejo salía, Meche se irguió y dijo frenética:—Si usté se casa con la Chabela me voy puerta afuera. ¡Por ésta sé lo juro! Ya lo sabe.No contestó don Santos. Bien sabía que la última palabra era siempre de la rebelde. Pero mala hasta el punto de inventar una calumnia no la imaginaba. ¿De dónde sacaría las feas historias que achacaba a Chabela? Le amargó el día el saetazo de la frase: "Predúnteselo al patroncito. Predúnteselo..." Tanto le hería, tanto lo hacía sufrir, que en la tarde, al ir a ver a Chabela al despacho donde vivía con sus padres, le contó el incidente, taladrándola con sus ojos de acero.La muchacha lo oyó tranquila, sonrió mimosa y dijo:—Puras envidias. Cosas piores ha d'inventar la Meche pa que no se case conmigo.Y el viejo volvió a la confianza por obra de los ojos que tan serenos y verídicos parecían. Además su amor —un amor que llegara callado, tomándolo íntegro y sin vuelta— no pedía sino que le adormecieran recelos.Meche trató en otra ocasión —cuando tuvieron que dejar a la novia el dormitorio que ellas ocupaban, la pieza más espaciosa de la casita— de volver a su protesta de macho taimado que se niega a dar vueltas a la noria, por el solo placer doloroso de recibir una paliza que lo haga más consciente de su esclavitud.Fue su último grito de rebelión. Desde entonces hasta el día del matrimonio cosió, hiló, tejió, ayudó en todo a la par que las otras, en los preparativos que se hacían rumbosamente.Don Santos parecía haberlas olvidado. Absorto en sus pensamientos, sólo salía de su mutismo para dar breves órdenes. Además, lo veían poco. Almorzaba y comía en el despacho. Llegaba a acostarse. Se levantaba al alba, desayunaba servido por María Juana; revisaba la labor hecha por las muchachas el día anterior, hacía algunas hacía algunas indicaciones y se iba, tras de mirarlas muy fijo con sus ojos agudos como puñales.
Este mes la programación del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo estará llena de conciertos y obras magníficas, entre estos dos espectáculos imperdibles, la obra Juguetes Rotos de la directora argentina Carolina Román y el concierto de la Sinfónica Nacional de Colombia junto al Tambuco Ensamble de Percusión.En primer lugar, la directora y dramaturga argentina Carolina Román presenta su obra Juguetes Rotos por Producciones Rokamboleskas, una compañía de teatro española. Estas funciones hacen parte de la programación de España país invitado de honor en el Teatro Mayor. Juguetes Rotos narra la historia de una amistad entre Mario, un joven que abandona su pueblo, y Dorin, una transexual del mundo del espectáculo. Mario trabaja en una peluquería y Dorin lo lleva a enfrentarse a sus sueños de ser mujer. En este espejo en el que Mario se mira también se refleja un mundo de purpurina peligroso y revelador.Este proyecto propone una reflexión sobre la identidad sexual y sobre el mundo no-binario de España de las décadas de 1960 y 1970, en contrapunto con el del presente. En este entramado social muchas personas se vieron gravemente afectadas por un sistema que no los admitía ni reconocía más allá de los escenarios y la prostitución.Producciones Rokamboleskas nace de la mano de Fabián Ojeda (Premio Max 2017) y Nacho Guerreros, dos profesionales con una amplia trayectoria en las artes escénicas. Desde 2017 su actividad principal es la producción, coproducción y producción en gira de obras teatrales, apostando por la profesionalización del sector escénico en España y la calidad de los espectáculos.Carolina Román es dramaturga, actriz y directora. En Buenos Aires cabalgó entre sus estudios de periodismo en la Universidad de Buenos Aires y el teatro. Sus maestros más influyentes fueron Raúl Serrano, Alberto Félix Alberto y Augusto Fernández, entre otros. Junto a sus hermanas creó el Videoclub del Ángel, un proyecto especializado en cine de autor con el que organizaron modestos ciclos por el territorio.Las funciones serán el viernes 16 y sábado 17 de junio a las 8:00 p.m., la boletería está entre $55.000 y $80.000, la puede adquirir en la página web del teatro.Por otro lado, la Orquesta Sinfónica Nacional estará junto a Tambuco, uno de los ensambles de percusión más reconocidos en México (y el mundo) y a la directora inglesa Catherine Larsen Maguire.Tambuco interpretará junto a la Orquesta la pieza Metal de tréboles del también mexicano Javier Álvarez, una obra que a través de su discurso sonoro evoca a la naturaleza e impulsa a los músicos a explorar formas alternativas de tocar sus instrumentos. Esta obra y las otras tres que componen el programa, serán dirigidas por Catherine Larsen-Maguire, quien durante 10 años se desempeñó como Principal de fagot de la Komische Oper en Berlín, para después dedicarse de lleno a la dirección.Para abrir y cerrar la noche, la Orquesta interpretará dos obras del compositor estadounidense Aaron Copland, compositor clásico norteamericano por excelencia, quien además tenía un particular atractivo por la música latinoamericana. Para iniciar la velada, Three Latin American Sketches, una obra que se caracteriza, en palabras del compositor, “por sus melodías, ritmos y temperamento espontáneo y jovial”, y Rodeo: Four Dance Episodes, la versión sinfónica construida por el mismo compositor del ballet bajo el mismo nombre, en la que presenta fragmentos inalterados de conocidas melodías americanas. Completa el repertorio, Huapango, de José Pablo Moncayo, obra muy reconocida y de gran colorido que retrata la música popular de la zona de Veracruz en el Golfo de México.El concierto será el miércoles 28 de junio a las 8:00 p.m., la boletería va desde los $25.000 hasta los $80.000 y está disponible en la página del Teatro Mayor.Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
En "Bramidos de agua dulce" (Escarabajo, 2020), la poeta conversa con el río Sinú, cuyas aguas serpentean a lo largo de la ciudad de Montería, en el Caribe colombiano; en su obra, el río adquiere vida propia y se convierte en un personaje central que, con cada corriente, lleva consigo los lamentos de la muerte y la violencia que asolan a las mujeres trans de esa urbe.A través de sus versos, la autora plasma algunas "experiencias aterradoras", pero también la resiliencia y lucha que vivieron estas mujeres hace más de 40 años: "Ante el temor de ser arrestadas y torturadas por la Policía, las mujeres trans que ejercían la prostitución en la época (...) preferían lanzarse al río Sinú"."Contar estas experiencias de vida desde una voz travesti, que es mi propuesta política, es controlar la narrativa de lo que se dice de nosotras", declara enfática a EFE Bárcenas, quien asegura que históricamente han sido interpretadas por personas cisgénero, heterosexuales y blancas que "terminan perpetuando lo que significa ser trans".Poesía en "clave travesti"Según la poeta, su "propuesta política" permite asumir el dominio de la narrativa en torno a las mujeres trans, que ha sido relegada al ámbito de la marginación, el sufrimiento y el trabajo sexual: "Me parece injusto" y, en su lugar, aboga por reivindicar nuevas perspectivas de "ser travesti"."La 'clave travesti' trata de posicionar la experiencia de vida de una mujer negra trans en la poesía", explica la escritora de 25 años, quien asegura que esta inclusión "no suele suceder en la literatura" porque "el canon literario es racista y transfóbico".En este contexto, Bárcenas reconoce que dichas experiencias se están convirtiendo en un nicho altamente lucrativo en la actualidad. A pesar de ello, la autora destaca que el reconocimiento y valoración de sus palabras y obras literarias son el mayor obstáculo que ha tenido que enfrentar.Escritura que abre horizontesEl contexto familiar y el entorno conservador en el que creció la poeta "no estaban preparados para comprender y aceptar" su identidad, lo cual generaba miradas opresoras y prejuiciosas hacia su persona y su cuerpo. Por lo que la colombiana encontró, desde temprana edad, un refugio íntimo y seguro en la escritura que le permitía plasmar sus sensaciones, experiencias y dar voz a su cuerpo en tránsito que ella describe, metafóricamente, como "florecer".La escritura también le dio conciencia del poder de la palabra y la expresión poética; fue una herramienta que le permitió forjar otro futuro, alejándose de los estereotipos limitantes que la sociedad asigna a las personas trans como "la prostitución, la peluquería o la calle". "La poesía me salvó porque me pude agenciar otro destino", explica Bárcenas, quien señala que no le parece negativo que sean prostitutas o peluqueras, sino que eso "sea lo único que la sociedad quiera que seamos".Dignificación y reconocimiento permanenteA propósito del Día Internacional del Orgullo LGBTI, que se celebra el 28 de junio, Bárcenas destaca que "la dignificación de las vidas trans va más allá de una celebración temporal y requiere cambios estructurales en diversos ámbitos".La activista enfatiza en la importancia de contratar a personas trans y brindarles espacios de manera continua: "Una verdadera inclusión implica tener en cuenta a las personas trans todo el tiempo, lo cual les proporcionaría la estabilidad económica tan necesaria en sus vidas porque aún enfrentan obstáculos para acceder a empleos, espacios culturales y académicos que no han sido diseñados con su inclusión en mente".La monteriana señala que durante esta celebración se percibe como "la cuota trans" y reflexiona sobre cómo muchas instituciones instrumentalizan la imagen de las personas trans en lugar de brindarles una participación genuina.Aunque le genera conflicto, también reconoce que esta situación puede ser una oportunidad para abrir camino a otras mujeres trans y ampliar su representación en diversos escenarios. "Ser reconocida como una travesti que pudo transformar su realidad y abrir nuevos horizontes para otras mujeres", así le gustaría a Flor ser recordada por sus hermanas travestis y por la sociedad.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Desde la creación en el año 2001, el Ciclo Rosa se reafirma cada año como la apuesta por la diversidad, como el puente para una transformación en las estéticas y narrativas de la creación audiovisual, que se mueven entre los distintos géneros cinematográficos, los múltiples formatos estéticos y las diversas maneras de narrar y representar el cuerpo, la sexualidad y el género mediante lo audiovisual.El Ciclo Rosa se ha convertido en un espacio alternativo para la muestra audiovisual y la discusión alrededor de la visibilidad LGBTIQ+. Por el Ciclo han pasado figuras significativas de la creación e investigación audiovisual nacional e internacional y se ha promovido la emergencia de nuevas formas de representación de los géneros y las sexualidades en su diversidad y complejidad.La edición del 2023 está conformada por una Muestra Internacional curada por Cédric Succivalli, crítico de cine y programador italiano, ha sido jurado en festivales como San Sebastián y el Festival de Cannes (jurado de la Palma Queer), entre otros. Succivalli propone 5 programas con un rango ecléctico de voces queer que lo han impresionado profundamente durante los últimos años. Esta muestra estará acompañada por su curador y presentará títulos: Lobo y perro, Fire at the Lake, The Lost Boys, Errante corazón, Exalted Mars, entre otros.La Muestra Nacional es resultado, por primera vez, de una convocatoria pública donde se recibieron más de 60 obras audiovisuales de todos los formatos y duraciones, provenientes de todo el territorio nacional. La muestra se compone de un largometraje: Clara y tres programas de cortometrajes: Fuerza salvaje, Afectos disidentes y Feminidades construidas.Además, el Programa Furia presentará películas que suspendan momentáneamente las convenciones sociales y permitirá que se avive la pasión por encima de la razón. Los personajes de Furia son complicados, difíciles de entender, rabiosos e inmorales, en esencia, queer. Por otro lado, en el Foco Jorge Cadena, intimidad y rebeldía, un recorrido entre lo personal y lo colectivo, lo introspectivo y lo político de este cineasta colombiano radicado en Suiza, los asistentes podrán ver una serie de cortometrajes que ha realizado en la última década, en un ir y venir constante entre su origen en el Caribe colombiano y su mirada extranjera en el mundo. Presentado por Swiss Films.Para complementar la agenda de películas se tendrán dos estrenos Internacionales: Medusa Deluxe de Thomas Hardiman y Lingua Franca de Isabel Sandoval. En estrenos nacionales: Wërapara de Claudia Fischer, Petit mal de Ruth Caudeli y Anhell69 de Theo Montoya.Esta edición tendrá la segunda versión de la Toma Rosa que se llevará a cabo del 9 de junio hasta el 1 de julio en la Galería de la Cinemateca de Bogotá, los días jueves, viernes y sábados. La Toma Rosa es un espacio para la juntanza y la circulación de propuestas interdisciplinarias vinculadas a diferentes prácticas artísticas en el marco del Ciclo Rosa, como una forma de apropiación de la Cinemateca por parte de todos los ciudadanos. Esta versión reunirá 13 artistas que fueron seleccionados a través de una invitación pública, quienes proponen un viaje por actividades literarias, audiovisuales, escénicas (circo, música, teatro, performance) de diseño gráfico, de artes plásticas y de Artes vivas.Ricardo Cantor, gerente de Artes Audiovisuales del Idartes, comenta “el Ciclo Rosa llega a su edición 22, y se ha convertido -como un rito- en un lugar de encuentro y conversación alrededor de las narrativas de representación y autorepresentación queer a través del cine y el audiovisual y su encuentro con otras prácticas artísticas y culturales como el performance, la literatura, la música, las artes visuales y la danza. En 2023, con un panorama internacional, el programa furia, el foco de Jorge Cadena, estrenos nacionales e internacionales sumado a 3 componentes convocados por invitaciones públicas: muestra nacional, la toma rosa y diálogos ciclo rosa junto con la exposición GenIA, El Cine & Yo con Daniela Maldonado y el Laboratorio Cuerpo Cyborg-Tecnogénero ensamblamos -como en un collage- una amalgama de lenguajes, estéticas y relatos que indagan en la expresión y las disidencias del género, del afecto y del amor.”Este año en la Sala E se realizará la Exposición GenIA: exploraciones inmersivas y con inteligencia artificial en clave de género, esta se basa en las posibilidades de intersección entre la tecnología y la identidad de género. Las obras realizadas y presentadas por la ciudadanía exploran estos temas desde una perspectiva descolonial, transfeminista, transterritorial, que reflexionan sobre la ética, la autonomía, la justicia y la dignidad; utilizando herramientas de inteligencia artificial para crear experiencias particulares. La exposición contará con visitas guiadas en inglés y español.Del 15 junio al 3 de agosto se realizará Laboratorio cuerpo cyborg-tecnogénero, en la Cinemateca de Bogotá y en el Castillo de las Artes, un encuentro de 16 sesiones los días lunes y jueves, el ingreso es libre con inscripción previa. El 28 de junio para participar en Lecturas de película - Reflejos de violetas en el turbio estanque: Inventario personal del cine homosexual debe hacer inscripción previa.El Ciclo Rosa tendrá una sesión especial de El Cine & Yo con Daniela Maldonado, lideresa comunitaria y activista social del sector poblacional trans de la ciudad de Bogotá, esta actividad de entrada libre, será el 21 de junio a las 7:00 p.m.Del 21 al 28 de junio se llevarán a cabo los Diálogos Ciclo Rosa, un espacio que abre y amplía conversaciones colectivas en torno a narrativas y disidencias del afecto. La selección de estos encuentros llegaron a través de invitación pública, en la que se recibieron propuestas con múltiples formas y formatos (talleres, ponencias, estudios de caso, material de archivo, mesas redondas, proyección y conversación, lecturas performativas, conversatorios, paneles, testimonios, entre otros)Durante los días del Ciclo Rosa se lanzarán las convocatorias para el Premio Dunkel Rosa 2023 y el 4° Laboratorio de Escrituras Audiovisuales Queer.Para más información puede consultar toda la agenda del Ciclo en la página web de la Cinemateca de Bogotá. No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK.
Bautizada la estatua imposible, "es una obra creada por cinco maestros diferentes que nunca habrían podido colaborar en la vida real", afirma a la AFP Paulina Lunde, portavoz de Sandvik, la empresa que diseñó esta escultura gracias a tres programas diferentes de IA.De acero inoxidable, mide 150 centímetros de alto y pesa 500 kilos. Esta expuesta por el museo de Tecnología de Estocolmo y representa a una mujer, cuya mitad del cuerpo debajo del busto está cubierta por una especie de túnica y lleva un globo -hecho de bronce- en su mano izquierda.La idea era crear una mezcla entre los estilos de cinco escultores que marcaron cada uno su época: Miguel Ángel (Italia, 1475-1564), Auguste Rodin (Francia, 1840-1917), Kathe Kollwitz (Alemania, 1867-1945), Kotaro Takamura (Japón, 1883-1956) y Augusta (Estados Unidos, 1892-1962)."Algo en su apariencia hace sentir que no fue creada por un ser humano", señala Julia Olderius, una responsable de innovación dentro del museo.El espectador puede percibir la musculatura inspirada en Miguel Ángel, mientras que la mano recuerda a las creadas por Takamura.Para lograrlo, los ingenieros de Sandvik alimentaron el programa con abundantes imágenes de esculturas creadas por estos artistas. La inteligencia artificial propuso luego varias imágenes en 2D que, según ella, reflejaban el sello de cada uno de estos escultores."Estas imágenes en 2D fueron incorporadas por nuestros ingenieros en un modelado 3D y, a partir de ahí, nos concentramos en la fabricación", destaca Lunde.¿Pero es arte, o más bien una hazaña técnica? "Creo que es arte", afirma Olderius, que considera que esta apreciación le corresponde al público.Sobre la cuestión más general de la irrupción de la IA en este campo, muestra el mismo optimismo. "No hay que tener miedo de lo que la IA hace con la creatividad, el concepto, el arte y el diseño", juzga. "Simplemente hay que adaptarse a un nuevo futuro", donde la tecnología tiene un lugar de pleno derecho en la creación y el diseño, añade. No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.