El festival Colombia Al Parque regresa tras su éxito en el 2022, los próximos 18 y 19 de marzo el Parque de los Novios en Bogotá se vestirá de fiesta para recibir esta nueva edición de uno de los festivales más importantes de la ciudad. Músicas tradicionales, folclóricas, populares y lenguajes creativos e innovadores de los nuevos tiempos se reunirán en el festival, un evento del Instituto Distrital de las Artes – Idartes, con una programación que también incluye diversas manifestaciones culturales a través de la danza, la gastronomía, el emprendimiento y actividades académicas.El Festival contará con la participación de importantes artistas provenientes de diferentes regiones de Colombia como Cali, Barranquilla, Bucaramanga, Pasto y Santa Marta. Además, ocho agrupaciones bogotanas presentarán repertorios de folclor, ritmos latinos y diversas fusiones de músicas tradicionales con géneros como el metal, el rock y el hip hop, entre otros. La cuota internacional estará a cargo de destacados músicos de Ecuador, Túnez y Reino Unido.Mauricio Galeano, director del Idartes comenta “A lo largo de sus dos décadas de historia, el Festival Colombia al Parque se ha consolidado como un punto de encuentro entre juglares, cantoras y representantes de la música colombiana con jóvenes que enriquecen y transforman nuestro folclor con propuesta arriesgadas e innovadoras; por eso invitamos a las familias bogotanas y a toda la ciudadanía, para que naveguen por Colombia en un fin de semana de cultura propia y de reconocer lo que somos”.Entre los invitados están las agrupaciones distritales Cacao Munch, Los Carrangomelos, Sonoras Mil y Ensamble Arsis, este último con una innovadora propuesta de folclor alternativo instrumental. Desde Pasto, Nariño, llega Fabuloso Sexteto Caracha con una fusión de fiestas tradicionales y tendencias urbanas, que se suma a las presentaciones nacionales de Systema Solar de Santa Marta, De Mar y Río de Cali y del cantautor Anibal Velásquez de Barranquilla, entre otros. La ecuatoriana Mirella Cesa y el DJ de origen turco-alemán Samy Ben Redjeb serán los participantes internacionales del Festival, junto con el colectivo Mestizo, conformado por destacados músicos colombianos y del Reino Unido.La programación del Festival también llegará a los territorios con la franja Bogotá como Escenario, que recogerá las costumbres y tradiciones de Colombia y América Latina a través de música ancestral y nuevas apuestas performativas y creativas de artistas locales que se presentarán en espacios no convencionales de diferentes localidades de la ciudad y en los Escenarios Moviles del Idartes.Por su parte, la agenda académica de Colombia al Parque 2023 estará enfocada en temas como el liderazgo de las mujeres a través de las músicas tradicionales, la transformación de los géneros folclóricos y populares y las diferentes manifestaciones culturales que han dejado huella en la sociedad. También se abrirán espacios de conversación alrededor de la cumbia como patrimonio inmaterial de la humanidad y el aporte de la música colombiana desde el formato vinilo, entre otros.Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
Este programa articula a la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte (SCRD), el Instituto Distrital de las Artes (IDARTES), el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural (IDPC), la Orquesta Filarmónica de Bogotá (OFB) y la Fundación Gilberto Álzate Avendaño (FUGA), a través de una gran oferta que incluya y haga partícipes a diversos actores artísticos y culturales en la construcción de una Bogotá que vive la cultura como un derecho.Esta es una invitación a explorar los alcances del fomento, es decir, pensar nuevos espacios para la co-creación, la articulación y la inclusión de distintos sectores alrededor de la cultura para reconocer territorios y comunidades como agentes de transformación locales y distritales.Este año, el programa ha tenido tres transformaciones destacadas. La primera es el cambio de Banco de Jurados a Banco de Expertos para el Sector Cultura. Las personas podrán postularse en las modalidades: “Jurado” o ”Mentor”. También se pensó una estrategia para el fomento en proyectos que tienen que ver con trabajo en género y la tercera y, podría decirse que más necesario cambio, es la depuración y consolidación más clara y sencilla de las bases, condiciones y pasos a seguir para la postulación a los estímulos. Esta parte responde a las peticiones de artistas y gestores que expresaron las confusiones que generaba el lenguaje en el que estaba diseñado el Programa de Estímulos Distritales.Para el 2023 se entregarán más de $26.000 millones en la primera fase del Programa de Estímulos, aún falta por anunciar los apoyos que se brindarán en el marco del programa Es cultura local. En esta etapa se anunciaron 160 convocatorias con un total de 2.267 estímulos.En esta edición de estímulos se hace un énfasis especial en diseñar propuestas con base en los enfoques poblacional-diferencial, de género, territorial, ambiental y de cultura ciudadana.Toda la información especifica que requiera para participar de estos estímulos puede encontrarla en la página web de la Secretaría de Cultura de Bogotá. Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Este espectáculo anunciado por la alcaldesa de Bogotá, Claudia López y la secretaria de Cultura, Recreación y Deporte, Catalina Valencia consiste en un montaje que ocupa cerca de doscientas personas en su producción, el cual nace a partir de la imagen creada por el artista Pedro Ruiz, de un árbol encima de una carreta halada por un hombre, haciendo homenaje a las y los carreteros de la ciudad, con muchos frutos como el tomate, apio, cebolla, papa acompañados de animales típicos de la región como el venado, las gallinas, colibríes. Con esta imagen el director Jimmy Rangel, director artístico; Ma Zhenghong, directora escénica y Alejandro González Puche, guionista y dramaturgo estructuraron una espectacular obra de teatro protagonizada por los actores John Alex Toro, Julián Santamaría y la actriz Jenny Lara, en la que intervienen 72 artistas nacionales entre malabaristas, bailarines, actores, trapecistas, acróbatas, entre otros, con música original de la Orquesta Filarmónica de Bogotá.“Tenemos para este año la mejor programación de Navidad que por primera vez es 100% colombiana y bogotana. A lo largo de estos 2 años y medio, que han sido difíciles, nos hemos esforzado en apoyar a los microempresarios bogotanos, a los artistas y creadores bogotanos a quienes producen arte, cultura y deporte a través de Es Cultura Local y Deporte Local y de nuestra marca Hecho en Bogotá”, resalto la alcaldesa mayor Claudia López Hernández.“El principal show de Navidad va a ser en la Plaza de Bolívar y se llama El árbol de la abundancia, con artistas, todos colombianos, liderarán este show, el 100% de las maquinas, vestuarios, diseños creativos es totalmente bogotano y colombiano, es la primera vez que en los talleres de cultura ubicados en la Estación la Sabana se hacen máquinas de gran formato para un espectáculo enorme como éste”, agregó.Será la primera vez en la historia de Bogotá que se construirá una escenografía interactiva con el público, en la que va a haber un muro escenográfico de 72 metros de ancho y 15 metros de alto que se ubicará en el Palacio Liévano, sobre el cual se proyectará, por primera vez, un mapping 4K de muy alto nivel, sumado a un espectáculo de pirotecnia sostenible que no generará ruido ni humo cuando explote.Aunque este show será el elemento central, estará acompañado de una Feria llamada "Bogotá es Navidad" en el Distrito Creativo Centro Internacional, dónde habrá una carpa con techo de vidrio; 72 stands; puntos de comida; programación artística con teatro, títeres, circo, música, comparsas, danza y presentaciones en vivo de artistas como Adriana Lucía; los Rolling Ruanas; la Libélula Dorada; el Baúl de la Fantasía; Compañía Trágica de Payasos; Distrito Flamenco; Milonga de la Capital; la Orquesta Filarmónica de Bogotá; Es Cultura Local con Phonoclórica, Sentimiento Colombiano, el Círculo Hip Hop, Cafrpa Circo, Ars Nova, Sonido Mestizo, Jaranatambo Live Set, Rakamandaka; Djs, como Marea, Sonique, Yabannko, Rapiz Paralela, entre otros artistas.A ello se le suma los tradicionales corredores de alumbrados en la ciudad en toda la ciudad, además de las programaciones específicas en el Jardín Botánico, los escenarios Idartes como la Media Torta, el Teatro Jorge Eliécer Gaitán, el Escenario Móvil María Mercedes Carranza, el Planetario, sus actividades de vacaciones con CREA, la Cinemateca, el Castillo de la Artes y el Teatro El Ensueño, BiblioRed y los conciertos de la Orquesta Filarmónica de Bogotá. ¿Cuándo se realizará el show navideño en Bogotá? "El árbol de la abundancia" tendrá dos funciones diarias del 15 al 23 de diciembre, a las 7:00 p.m., y a las 8:30 p.m. El 14 de diciembre se realizará una función especial para 8000 adultos mayores de los centros Vida, en alianza con la Secretaría de Integración Social. Por supuesto, no tiene ningún costo y está pensado para toda la familia. Puede consultar toda la programación para el mes de diciembre en la página de la Secretaria de Cultura, Recreación y Deporte. Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
A inicios de mes de octubre la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte (SCRD) y el Instituto Distrital de las Artes (Idartes) realizaron la apertura del Centro Cultural Manitas, ubicado en la Pilona 20 del Sistema Integral de TransMiCable, en la localidad de Ciudad Bolívar. Este centro cultural se une al Museo de la Ciudad Autoconstruida, la Biblioteca Mirador y el Centro Cultural Compartir en SumaPaz que hacen parte de la apuesta del gobierno local por mejorar la oferta cultural del sector. “Realizar la apertura de este Centro Cultural es un logro que beneficia el diálogo comunitario y que generará muchos aprendizajes para el desarrollo de la localidad, por eso es importante que se apropien de este equipamiento cultural y le den vida, que lo fortalezcan a través de sus iniciativas artísticas y culturales. Ha sido vital interactuar, escuchar y tener en cuenta el entorno y las necesidades de la comunidad y poder dar una respuesta más acertada a la ciudadanía circundante. Este espacio de la ciudad será para vivir, reflexionar, construir y compartir con otros, será un sitio de encuentro, equidad y felicidad no sólo para esta zona de Bogotá, sino para toda la ciudad”, afirma Catalina Valencia, secretaria de Cultura, Recreación y Deporte.Este centro cultural cuenta con salón de baile, salón de artes, salón de música, estudio de grabación, terraza transitable, laboratorio Artístico Montaña de Colores (pensado para la primera infancia a través del Programa Nidos - Arte de Idartes), entre otros servicios generales de información y eventos especiales pensados para toda la ciudadanía. Por su parte, Mauricio Galeano, director del Instituto Distrital de las Artes (Idartes) indica que "Esta es la Bogotá que estamos construyendo, una ciudad con espacios idóneos para el desarrollo de la sensibilidad y el pensamiento creativo de los bogotanos. En este centro comunitario el Instituto Distrital de las Artes - Idartes tendrá presencia con sus programas Nidos - arte en primera infancia y Crea, formación y creación. Así, seguiremos contribuyendo a la garantía de los derechos culturales de la primera infancia, mujeres gestantes, lactantes, padres, madres, jóvenes, adultos, personas mayores y agentes educativos". Para leer: Festival Gabo ofrecerá cinco talleres temáticos en su primera vez en BogotáEn la construcción de este espacio, se destacó el objetivo de promover la participación a través del fortalecimiento del tejido social e involucramiento de las comunidades y, para ello, se generaron espacios de reflexión y participación que brindan vocería a las comunidades dando paso a la creación de iniciativas comunes que iniciaron a partir del 2018. El Centro Cultural Manitas además contará con el Programa Crea que cuenta con 19 centros de formación artística que se enfocan en impulsar la creación de proyectos artísticos autónomos y de emprendimiento cultural que se apoyan en el uso de las nuevas tecnologías y la generación de alianzas para lograr acceso a los procesos profesionales tanto en la formación como en la inclusión de los circuitos propios del arte en la ciudad.Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Desde septiembre y hasta finales del 2022, Bogotá tendrá cuatro Circuitos de Arte y Memoria, liderados por la Línea Arte y Memoria sin Fronteras del Instituto Distrital de las Artes - Idartes en conjunto con agentes, agrupaciones, organizaciones, colectivos y público general que residan o impacten las localidades de Usaquén, Bosa, Ciudad Bolívar, Mártires, Santa Fe, San Cristóbal, Puente Aranda, Kennedy, Chapinero, Suba, Sumapaz y Usme.Los Circuitos de Arte y Memoria serán espacios de construcción de memoria desde las artes que faciliten el encuentro comunitario con el fin de unir causas comunes que abordan temas como la identidad campesina, la relación entre los contextos urbanos y rurales de la ciudad, las múltiples subjetividades de ser mujeres, la defensa y apropiación del territorio y el cuidado de las fuentes hídricas, entre otros.Algunas de las actividades que se harán en los circuitos serán cartografías sociales, actividades artísticas y culturales, encuentros interlocales e interrurales, diálogos de saberes, emprendimientos gastronómicos, procesos literarios, trueques de experiencias, escuelas de formación musical, además del Festival de Mujeres en Mártires y el Festival Semilla por la Paz en la vereda El Verjón.Diana Salavarrieta, líder de la Línea Arte y Memoria sin Fronteras del Idartes, comentó que "los cuatro Circuitos de Arte y Memoria —Agua, Rural, Mujeres y Borde— representan lo que fuimos, lo que somos y lo que seremos en comunidad. Invitaremos al público a dialogar, a ser parte de procesos de formación, creación y circulación, que permitan acceder a una oferta cultural descentralizada en la ciudad, situada en las memorias colectivas y, de esta manera, aportar a la construcción de la paz desde las artes”.Visite también: Prográmese con la Orquesta Filarmónica de Bogotá este fin de semana.Ahora bien, cada uno de estos circuitos tiene un objetivo singular y unas funciones dependiendo de su temática. En primer lugar, el Circuito Agua será un puente para reconocer la importancia de los humedales y los ríos en el barrio Aguas Claras en la localidad San Cristóbal, la vivienda de interés prioritario Plaza de La Hoja en la localidad Puente Aranda y los barrios aledaños a los humedales del Burro y de La Vaca en la localidad Kennedy.Por otro lado, el Circuito Rural promoverá el reconocimiento de las artes, la cultura campesina y la memoria rural en las Cuencas del Río Blanco y Río Sumapaz en la localidad de Sumapaz, la Cuenca Alta y Media del Río Tunjuelo en las localidades de Usme y Ciudad Bolívar, los Cerros Orientales en las localidades de Chapinero y Santa Fe, la reserva Thomas Van der Hammen y su conectividad ambiental con el humedal Torca-Guaymaral en las localidades de Suba y Usaquén y las Plazas Distritales de Mercado de San Carlos en la localidad Tunjuelito y Las Ferias en la localidad Engativá.El Circuito Mujeres presentará iniciativas artísticas lideradas o dirigidas a mujeres en toda su diversidad en las localidades de Mártires y Santa Fe, especialmente en El Castillo de las Artes, donde se realizarán distintas tomas culturales para la circulación de artistas.Y finalmente, el Circuito Borde repensará las formas en cómo el espacio se ha configurado a través de procesos de apropiación colectiva de la tierra y cómo se ha construido desde la periferia y sus montañas llenas de ladrillos en el sector de La Mariposa en la localidad de Usaquén, la Ciudadela Parques de Bogotá en la localidad de Bosa y el sector de Paraíso y Altos de la Estancia en la localidad de Ciudad Bolívar.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El encuentro, detalló el Instituto Distrital para las Artes (Idartes) de Bogotá, tendrá paneles dedicados al análisis de casos como Encanto, Euforia, Pálpito y Memoria. "Para Bogotá, realizar el Cineposium por primera vez en una ciudad de América Latina es una manifestación de confianza y respaldo de la AFCI (Asociación Internacional de Comisionados Fílmicos) y de las industrias audiovisuales a nivel internacional", expresó el gerente de Artes Audiovisuales de Idartes, Ricardo Cantor.Agregó que el encuentro "permite fortalecer que la ciudad y el país se siga viendo como un destino fílmico que ofrece beneficios y facilidades para las producciones"."Estamos emocionados de dar apertura al Cineposium en Bogotá, un espacio para el intercambio de buenas prácticas y el relacionamiento entre comisionados fílmicos, instituciones públicas y agentes del sector audiovisual con la finalidad de fortalecer a nuestras ciudades y países como ejes del desarrollo para la producción de obras cinematográficas y contenidos audiovisuales en narrativas y formatos diversos", detalló.En ese sentido, Cantor explicó que la agenda "de paneles y conversaciones girará alrededor de tres focos: Eco sostenibilidad, Perspectiva de género y el Turismo fílmico".Elección de BogotáLa AFCI eligió a Bogotá como sede de la edición 45 del Cineposium, en el que se reunirán más de 200 comisionados fílmicos y profesionales audiovisuales. Entre ellos aparecen Lisa Day, gerente de sostenibilidad de The Walt Disney Company, y Hans Dayal, quién ha sido gerente de locaciones para series como Supergirl y Minority Report.También estará Amanda Blumenthal, quién se desempeña como coordinadora de intimidad para series como Euphoria y hablará sobre su experiencia haciendo del set de grabación un lugar seguro para mujeres trabajadoras del sector audiovisual.Igualmente estará Yvett Merino, productora ganadora del Óscar por su trabajo en Encanto; Alejandra Espinosa Uribe, consultora cultural de esta película animada inspirada en Colombia, y Stefan Roesch, referente en el campo del turismo fílmico en Nueva Zelanda.Industria del cine en ColombiaLa evaluación de los efectos de la ley de fomento de la actividad cinematográfica en Colombia señala que cada empleo generado en servicios cinematográficos genera en promedio otros 2,83 en sectores como construcción, manufactura, finanzas y transporte.Igualmente, entre enero y julio de 2022, según la agencia estatal ProColombia, las exportaciones colombianas de producción audiovisual llegaron a 125,2 millones de dólares y tuvieron como principales compradores a Estados Unidos, España, Chile y Ecuador. El objetivo es mantener ese ritmo de crecimiento para superar la cifra de 183,6 millones lograda en el 2021.Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
La Línea de Arte, Ciencia y Tecnología junto al Planetario de Bogotá abren un espacio de academia e interacción con distintas obras virtuales por medio de una simulación del Planetario y del Escadão da Pampulha de Belo Horizonte, Brasil. Los participantes podrán hacer un recorrido con un avatar propio por obras de artistas nacionales e internacionales que exploran nuevos formatos y propuestas en torno a lo digital desde cualquier lugar del mundo. Carol Sabbadini, líder de la Línea Arte, Ciencia y Tecnología, menciona que “el Festival RealMix permite visibilizar proyectos y obras de artistas nacionales e internacionales que experimentan con tecnologías inmersivas, convirtiéndose en una plataforma virtual que propone otras formas de relacionamiento e interacción, a partir de la inmersividad, donde la tecnología y el arte se vuelven protagonistas. Es una oportunidad única para navegar realidades diversas y para conocer más sobre los metaversos, la realidad virtual, aumentada y las realidades mixtas en el contexto latinoamericano e internacional”.En cuestión de los invitados, quienes estarán representando a Colombia serán Álvaro Rodríguez, David Idrobo y Camilo Nemocón, artistas seleccionados de la convocatoria RealMix – Arte no Escadão y los invitados Diana Rico y el colectivo Johnson & Jeison. Y de invitados internacionales se tendrá a Sue Huang & Jonah King, el colectivo sueco Lundahl & Seit y la artista búlgara de nacionalidad española Eva Davidova. Además serán presentados los proyectos ganadores de la beca de creación Arte no Escadão - Arte en la Escalera de Brasil, Beatriz Bretas, Bruno Rios, Danilo Celsa, Elvys Chaves y Carlo Schiavine, Biophillick –Javier Loeza– y como artista invitado el colectivo a VJ Suave. Los distintos tipos de realidades que se presentarán en el Festival RealMix son la realidad virtual que es una experiencia en la que se puede navegar un entorno inmersivo que simula, de manera virtual, espacios y/o escenas que pueden o no ser reales.Por otro lado está la realidad aumentada es una experiencia interactiva en la que se entrelazan elementos virtuales sobre visualizaciones del mundo físico en tiempo real. Y finalmente, la realidad mixta es una experiencia interactiva de carácter híbrido, en la que se mezclan elementos de realidad aumentada y realidad virtual para generar interacciones de múltiples formas entre objetos, sujetos y mundos virtuales y reales.Toda la información y programación del festival está disponible en la página oficial del Festival RealMix. Recuerde conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El evento, que tendrá a la localidad de Ciudad Bolívar como anfitriona y es organizado por el Instituto Distrital de las Artes (Idartes) a través del programa Culturas en Común, surgió de una propuesta brasileña de 2003 en la que se hace referencia a una expresión creada para dar nombre, sentido y visibilidad a dinámicas culturales que surgen en los territorios.Julián Albarracín, responsable general del programa, considera que este diálogo "es la oportunidad para conectar saberes, experiencias y dialogar alrededor de la garantía de los derechos culturales en procesos sociales y comunitarios que se han gestado a nivel local y conectarlos con lo que ocurre a nivel nacional y con lo que ha ocurrido, especialmente en Brasil, como país invitado".La gestora territorial del programa, Natalia Muriel, aseguró que se busca crear un espacio que brinde la posibilidad de reconocer la potencia y riqueza de las localidades, de acercarse a escenarios donde ocurren prácticas comunitarias artísticas y culturales e interactuar con quienes las gestan."Es poner sobre la mesa la importancia de la construcción de políticas públicas culturales de base comunitaria para Bogotá y el país y sumar a los múltiples esfuerzos de construcción de paz", dijo.Todo esto "teniendo en cuenta que Ciudad Bolívar y la región del Urabá han conocido de frente el conflicto armado, lo cual permite que sus cultores, gestores y artistas compartan experiencias y narren cómo se puede tejer comunidad".Colectivos comunitarios La segunda edición del Diálogo Internacional Culturas reúne a 15 colectivos comunitarios de Bogotá, donde conversarán estos procesos con otros de base comunitaria de la región del Urabá, en Antioquia (noroeste), y de Brasil.Entre los invitados está el historiador y escritor brasileño Celio Turino, entre otros expertos, que dictarán talleres, conferencias, ponencias y harán recorridos territoriales para acercar a la ciudadanía y generar un intercambio de experiencias alrededor de la cultura viva comunitaria.Durante el evento se lanzará el 3 de septiembre el libro digital "Culturas en Común: re-conociendo los derechos culturales" en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán, así como será interpretada la obra de teatro "Los Casos de la Doctora Codo", que contará con la participación del elenco de la Tropa Artística Itinerante.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Ayer por medio de redes sociales la alcaldesa Claudia López dio a conocer el nombre de quien se encargará de la Secretaría de Cultura de Bogotá, la bailarina y gestora cultural Catalina Valencia, quien ha venido desarrollando el rol como directora del Instituto Distrital de las Artes- Idartes. Valencia desempeñó el rol como directora de Idartes y abrió el espacio para los eventos culturales que se han llevado a cabo en la ciudad, ahora es un gran reto asumir su puesto como Secretaria de Cultura, en su agradecimiento menciona: "desde la Secretaría de Cultura de Bogotá trabajaré por la consolidación de una política cultural para el cuidado, poniendo el foco en una gestión creativa para el fortalecimiento de un sector que hace parte del corazón de Bogotá".La nueva secretaria de cultura es licenciada en composición coreográfica y gestión cultural de la Universidad de Buenos Aires, fue asesora de la Secretaría de Educación y del Instituto de las Artes, en 2019 asesoró el diseño de la estrategia cultural y artística de la Comisión de la Verdad y consolidó espacios culturales en las localidades de Santa Fe y Los Mártires.La alcaldesa también le agradeció a Nicolás Montero, quien tenía el cargo anteriormente y mantuvo el sector cultural marchando a pensar de la pandemia, "a Nicolás Montero mi amor y gratitud por siempre. Sacamos adelante el sector de la crisis de pandemia, democratizamos el acceso e inversión cultural, lanzamos leer para la vida y fortalecimos BibloRed Bogotá, entre muchos logros. Suerte en tus nuevos proyectos!”, mencionó Claudia López en su cuenta de Twitter. Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
La edición número 26 de Rock al Parque que se realizará en dos fines de semanas consecutivos el 26 y 27 de noviembre y el 3 y 4 de diciembre en la ciudad de Bogotá, anunció un nuevo grupo de artistas que harán parte del festival. Se trata de la selección oficial de las bandas distritales que fueron elegidas a través del Portafolio Distrital de Estímulos de Idartes en un proceso abierto en el que se inscribieron 378 agrupaciones y participaron un total de 38 en las audiciones con el banco de jurados de la entidad distrital. Junto a ellos, fueron anunciados seis artistas internacionales invitados para esta edición.Se trata de la banda de ska mexicana La Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio que celebrarán 25 años de carrera en el festival, la agrupación de fusión hip hop y música industrial Ho99o9, la cantatutora mexicana Ximena Sariñana que debutará en Rock al Parque, la banda española El Columpio Asesino, el grupo de punk británico Discharge y por último la agrupación argentina Bajofondo liderada por Gustavo Santaolalla. Por su parte, entre las bandas distritales fueron elegidas: Hello Yak, Rattus Rattus, Boca de serpiente, Las Áñez, Herejía, Lucio Feuillet, Sin Pudor, Salidos de la Cripta, Balthvs, Ursus, Ynuk, K-Rroña, Buha 2030, Sharon Tate y sus invitados, Oh'laville, Yooko, Los Niños Telepáticos, Andrés Guerrero & Las Luces, The Kitsch y El Alcalde Morcilla.“Seguimos fortaleciendo a Rock al Parque como un espacio de inclusión y de diversidad y, principalmente, como una muestra de lo que Bogotá representa como Ciudad Creativa de la Música, en un esfuerzo del distrito y de la Alcaldía Mayor por tener una ciudad en la que sus habitantes conozcan y disfruten de primera mano los nuevos sonidos y las apuestas artísticas que se gestan aquí y en otros lugares del mundo”, dice Catalina Valencia, Secretaria de Cultura.Este nuevo anuncio complementa parte del cartel que Love of lesbian, Ilegales, Batushka, Crypta, Evile, Épica, Las Ultrasónicas, Catnapp, Elis Paprika & The Black Pilgrims, Kumbia Queers , Asagraum, Francisca Valenzuela, The Warning, Frank’s White Canvas, Dat García, Rosenvinge y Crypta.Se espera que en las próximas semanas se hagan varios anuncios de invitados internacionales y nacionales, junto al cartel de las presentaciones por cada día del Festival. Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Las películas románticas de navidad son clásicos que podemos ver una y otra vez en estas fechas del año, simplemente para pasar un buen rato y creer por un momento en el milagro de la navidad. Aquí le dejamos algunas imperdibles. Love Actually (2003) Esta película británica cuenta varias historias de amor entrelazadas durante la temporada navideña en Londres. Es conocida por su elenco estelar y su enfoque cálido y humorístico.The Holiday (2006) Dos mujeres intercambian casas durante las vacaciones y terminan encontrando el amor en lugares inesperados. Protagonizada por Cameron Diaz y Kate Winslet, esta comedia romántica tiene el encanto de dos historias de amor en diferentes continentes.Serendipity (2001) La historia de una pareja que se encuentra y se enamora en una noche mágica en Nueva York, solo para separarse y dejar su destino al azar. La película juega con la idea del destino y las segundas oportunidades.The Family Stone (2005) Una comedia dramática que sigue a una mujer que visita a la familia de su prometido durante las vacaciones, solo para descubrir que no encaja exactamente como se esperaba. Aunque no es una comedia romántica tradicional, tiene una historia de amor entrañable en su núcleo.Elf (2003) Mientras que esta película es más conocida por su enfoque cómico y festivo, también incluye una linda historia de amor entre Buddy, el elfo interpretado por Will Ferrell, y Jovie, interpretada por Zooey Deschanel. Es una opción divertida y conmovedora para la temporada navideña.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Huasipungo" de Jorge Icaza es un hito literario latinoamericano, publicado en 1934, que revela la brutalidad de la opresión social en la hacienda ecuatoriana. Esta novela, impregnada de realismo y crítica social, es una denuncia feroz de las injusticias sufridas por los indígenas frente al poderoso sistema terrateniente.La trama se desenvuelve en torno a la vida de los habitantes indígenas de la hacienda, sus luchas por la supervivencia y su sometimiento a condiciones inhumanas impuestas por los terratenientes. Icaza presenta personajes complejos que representan la lucha por la dignidad y la resistencia ante la explotación despiadada.Con un estilo narrativo vívido y desgarrador, Icaza exhibe la crueldad de la discriminación social y económica, ilustrando las consecuencias devastadoras del sistema feudal en Ecuador. La obra resalta la degradación humana, la violencia y la desigualdad, dejando una poderosa impresión sobre el lector."Huasipungo" trasciende como un documento literario indispensable que visibiliza las realidades marginadas y perpetuadas en la historia latinoamericana. Su relevancia perdura en la actualidad, al ofrecer una crónica penetrante y atemporal de la lucha por la justicia social y los derechos humanos.No olvide conectarse tarde con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Leyenda Viva, el alma de un pueblo", es una película que desentraña la esencia del vallenato a través de diálogos auténticos con historiadores y músicos de la región. Revela cómo este género musical se moldeó, su origen y su proyección futura, siendo un legado arraigado en la memoria colectiva de Colombia, y que hoy conquista escenarios alrededor del mundo.Figuras como Nafer Durán, Rosendo Romero, Marciano Martínez e Ivo Díaz, junto a los historiadores Tomás Darío Gutiérrez, Julio Oñate y Jose Alberto ‘Beto’ Murgas, entre otros maestros, participan en este diálogo en el que se destaca que no es necesario ser un experto para disfrutar y aprender.‘Leyenda Viva’ se asemeja a una cátedra histórica y magistral, accesible para cualquier persona, independientemente de ser un apasionado del género musical. Relata anécdotas, como el origen de la tonada 'Amor, amor' durante la Guerra de los Mil Días, cuando soldados criollos aprendieron la canción entonada por los españoles durante la reconquista (1815 – 1816). También narra el primer encuentro del folclore vallenato en la película mexicana de 1945, 'Pasiones tormentosas', donde la actriz María Antonieta Pons baila al compás de la famosa canción ‘El caimán’ junto a Kike Mendive.Esta película es una producción de Memu(á) Films, dedicada a documentales de memoria, y Lanterna Pictures, con la colaboración de Codiscos Films, la nueva división de la disquera, respaldada por Grupo Éxito, Colombiana, Old Parr y Cine Colombia, quienes también se encargaron de su distribución en Colombia. Además, cuenta con el apoyo de Sony Music, Hohner, Spirit Music y Discos Fuentes, aliados clave responsables de los derechos musicales de la película."No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La escritora bogotana María Ospina Pizano es la ganadora del Premio Sor Juana Inés de la Cruz 2023 por su libro Solo un poco aquí, una novela que es animales y movimiento.Ospina Pizano se convierte en la segunda colombiana en obtener este prestigioso galardón luego de que Laura Restrepo lo obtuviera en el año 1997 con su libro: Dulce compañía. El premio Sor Juana Inés de la Cruz reconoce la excelencia del trabajo literario de mujeres en idioma español de América Latina y el Caribe.Aquí dejamos el discurso que dio al recibir el premio, texto en el que recuerda a Sor Juana Inés de la Cruz y hace una alusión al bosque como manto protector de la vida.Por «un territorio igual de hospitalario al bosque»Respetadas Licenciada Marisol Schulz Manaut, Directora General de la Feria Internacional del Guadalajara, Maestra Carmen Beatriz López Portillo, Rectora de la Universidad del Claustro de Sor Juana, y respetados miembros del jurado, Doctoras Sara Poot Herrera y Diana Sánchez y Doctor Daniel Centeno. Estimadas personas de la audiencia que están hoy acompañándonos:Muchas gracias por su presencia. Para mí es un honor enorme estar en la maravillosa FIL de Guadalajara por primera vez y con motivo de esta ocasión tan especial. Quiero empezar celebrando los treinta años que cumple este premio apoyando a las mujeres que escriben y reconociendo el deseo, el deber, la urgencia de contar, de indagar, de filosofar que Sor Juana Inés de la Cruz encarnó hace varios siglos, y que hoy sigue siendo urgente defender. Un premio que durante tres décadas ha defendido la literatura como lugar desde el que se trenzan las preguntas más complejas y se desafía a aquellos que están convencidos de la simpleza y la obviedad del mundo.Cuando recibí la llamada con la noticia de que lo había recibido, yo iba caminando por una calle antigua del centro de Madrid, un barrio que aún conserva edificios de ese extraño y accidentado y fascinante y barroquísimo fin del siglo XVII, que fue precisamente la época que le tocó vivir a Sor Juana. Un barrio donde seguramente algunas personas alcanzaron a leerla mientras ella aún vivía, cuando su fama y sus escritos ya llegaban desde el otro lado del Atlántico. A pocas cuadras de allí, muy cerca del Palacio Real de Madrid, que fue construido con los expolios de América y donde aún se elogia sin vergüenza la conquista y se silencian sus violencias, hay una estatua de Sor Juana que siempre me ha conmovido. Es quizás el único monumento que existe en honor a ella en España. Y me emociona que esa estatua de ella esté allí, mirando con rigor al horizonte, con pluma y papel en mano, en medio de tanta estatua de patriarca constructor de imperios, de tanta mujer reducida a alegoría o a figura mitológica, de tanto hombre a caballo deseoso de mandar y de ocupar. Cuando recibí la noticia de este premio, que además era el día en que cumplía yo los años aproximados que tuvo Sor Juana cuando murió, sin saber bien qué hacer con la alegría, peregriné unas cuadras hasta la estatua para darle las gracias, como buscando urgentemente un ritual y un cuerpo. Me costó treparme al pedestal, pero mi hijo de diez años lo escaló con entusiasmo y pudo dejar a nombre mío una flor en la mano de piedra. Una pareja de irlandeses nos miró, perpleja. Oí que se preguntaban por la estatua. Y como me cuesta renunciar a mi vocación docente, me metí en su conversación sin haber sido invitada y les conté sobre ella.Cómo no hacerle aquí un homenaje a la brillante poeta, dramaturga y filósofa, que ha sido mi maestra por muchas décadas y que también ha sido la de mis estudiantes que la leen en mis clases de la universidad, más de tres siglos después de que la obligaran a dejar de escribir. Cómo no agradecerle por siempre recordarnos, entre muchas cosas, que, aunque haya tantos mecanismos erigidos para subordinar y excluir a las mujeres de la cultura y la política, de la vida social y de la conversación pública, existe una red milenaria de pensadoras e intelectuales que siempre han usado la palabra y la acción para revelar la complejidad del mundo. Quisiera entonces hoy empezar dándole gracias por las enseñanzas, por la vitalidad de sus ideas, por su profunda erudición y osadía, por su empeño, desde los márgenes, en aquello que ella misma llama “poner bellezas y riquezas al entendimiento”. Por el compromiso de pensar sosegadamente y de defender el rigor de las ideas. Por ese ejemplo.En la famosa carta conocida como la “Respuesta a Sor Filotea de la Cruz” que Sor Juana envió en 1691 a su confesor, el obispo de Puebla, la escritora hace una defensa brillante de su vigorosa labor intelectual en un momento en que los hombres de la iglesia comenzaban a recriminarle por escribir sobre teología, ciencia, filosofía y estética, por tejer versos y obras teatrales, por reflexionar sobre la misoginia misma que buscaba silenciarla. En esa carta maravillosa Sor Juana reclama los derechos de la mujer a ser educada y a educar, defiende la posibilidad de disentir de los hombres que ostentan el poder y se inserta en una extensa genealogía de mujeres que han participado en la vida pública e intelectual del mundo a través de la política, la filosofía, la poesía, la educación, la teología y el arte, desde la antigüedad hasta sus días.Pero para mí, quizás, lo más original, lo más transgresor de esa carta, es la forma en que Sor Juana insiste en que, aunque quieran silenciar a las mujeres, aunque quieran representarlas como irracionales o viciosas o débiles de entendimiento, aunque intenten prohibirles escribir, excluirlas de las universidades o relegarlas al hogar o al rezo, nunca será posible privar a nadie de lo que ella llama “el deseo de saber”. Consciente de que la iglesia está a punto de decretar su silencio, Sor Juana explica que, aun sin libros en mano y sin acceso a la pluma, la reflexión profunda y paciente —que para ella está íntimamente ligada al ejercicio del deseo— nunca frenará su rumbo, pues esta excede el territorio de la letra y los espacios donde se ejerce el poder. Sor Juana le anuncia así a su confesor que ella siempre va a filosofar, con o sin su venerada biblioteca, con o sin su pluma, pues todo lo que ella encuentra en su caminar cotidiano es materia fértil, territorio deslumbrante en el que surgen las preguntas e ideas más profundas sobre el mundo. En vísperas de la censura fatal, Sor Juana anuncia, desafiante, que “nada se ve sin reflexión, nada se oye sin consideración, aun en las cosas más menudas y materiales”. Insinúa que mientras esté viva, en la cocina o en el patio del convento o donde sea, siempre estará filosofando.Al cuestionar la idea de que el ámbito intelectual institucionalizado es el único espacio para el pensamiento, al poner en duda esa dimensión que por tanto tiempo (y aún hoy) muchos han querido delimitar como un lugar de alianzas e interlocución masculina, Sor Juana sugiere que las restricciones que emergen de las jerarquías tradicionales del patriarcado, aunque contundentes y dañinas, siempre serán insuficientes. Nunca se podrá doblegar el deseo y la posibilidad de reflexión que emerge de la experiencia vital y cotidiana del cuerpo, de nuestros recorridos por los caminos. Esta bulle y crece y se propaga, como las raíces de los árboles, a pesar de la misoginia, con o sin acceso a los espacios del poder donde se tiende a censurar, como todavía vemos hoy en tantos lugares, el pensamiento hondo y la palabra insólita.Mi abuela, mi madre y muchos perros y perras me enseñaron desde la infancia aquello que Sor Juana luego hiló de forma tan hermosa en su carta, cuando la leí de adulta. En los bosques de las montañas donde crecí, en el altiplano cundiboyacense de la cordillera oriental de los Andes colombianos, en la región de Simijaca, Cundinamarca, donde está mi corazón, bosques que todavía frecuento en el peregrinaje de la migrante que soy, “nada se ve sin reflexión, nada se oye sin consideración”, para usar las palabras de Sor Juana. Ha sido en ese territorio de árboles, maizales y parcelas campesinas donde he convivido con perros y he aprendido a escuchar aves e insectos, enredaderas y musgos, líquenes y follaje, y las historias de la gente que allí cultiva, hila y pastorea. Ha sido en esos caminos donde lentamente se fue gestando esta novela.Narrar las mudanzas a las que sometemos o que hacen voluntariamente los animales más que humanos, habría sido imposible sin los años de deambular por las sendas rurales y los atajos de muchos de esos montes, sin la errancia que me dio haber nacido en una familia de mujeres caminantas, exploradoras de caminos muy antiguos, que me enseñaron que desde esas cuestas andinas y en presencia de otros seres, era urgente otear el mundo. Ese trasegar por bosque y pantano, antecede y es el sustrato de las ideas, como diría Henry David Thoreau, como de otra forma también lo expresó Arguedas y como también me enseñó mi abuela. María Negroni dice que escuchar otros ruidos es el motor implícito de la escritura. Para mí esos otros ruidos, son voces de otros seres más que humanos, de follajes y lluvias y vientos, y también son más que ruidos. Son otros olores y sonidos y movimientos de un mundo habitado por muchas especies. Este libro es un intento, aunque sé que limitado, imperfecto y lleno de paradojas, de bajarle el volumen a las voces humanas y a sus fantasías de dominio sobre el mundo, para que resuenen otras en el espacio siempre insuficiente, pero también siempre amplio, de la página escrita. En la pausa del camino, he buscado en la ficción un territorio igual de hospitalario al bosque, desde el cual preguntar cómo es la vida soberana de seres más que humanos que nos miran desde otras alturas y desde otras ontologías de espacio y tiempo. Para abordar ese misterio y reconocer nuestras limitaciones para comprenderlo.En mi vaivén de dos décadas entre Colombia y Estados Unidos, que es a donde terminé migrando, el acto de deambular por bosques y habitar el mundo rural a pie me ha dado una de las pocas certezas que tengo: que al estar situados en comunidades más que humanas nuestras vidas, y también nuestras errancias y nuestros errores, nuestras búsquedas de morada, siempre se cruzan con las de otros seres. Como bien lo expresa Dona Haraway, una de nuestras obligaciones como gente que comparte el mundo con seres más que humanos es tener curiosidad sobre lo que estos hacen, sienten, piensan, sobre cómo miran y en qué momento se cruzan nuestras miradas con las suyas. De hecho, creo que en cualquier consideración sobre lo que constituye un hogar humano, o su brevedad, en cualquier reflexión sobre los modos en que trazamos los caminos, está presente la pregunta ética y política de a qué otros animales desplazamos y a cuáles dejamos quedarse, de cuáles resisten y de cómo lo atestiguan, es decir la pregunta de quién es el huésped y quién es el anfitrión y cómo se complica esa distinción. Las tradiciones indígenas de las Américas llevan siglos insistiendo en que el devenir humano tiene que dar cuenta de otros seres vivos, que esto es digno de nuestra reflexión, de nuestra consideración, para usar de nuevo las palabras de Sor Juana. ¿Cómo tenemos en cuenta o los ignoramos? ¿Qué les debemos? ¿Cómo reconocemos su dignidad de testigos? ¿Cómo atestiguamos su vida, su sufrimiento, su resistencia, su soberanía? ¿Cómo se topan sus miradas con las nuestras? ¿Cómo abordamos las formas en que su existencia, más amenazada hoy que nunca por culpa nuestra, nos marca y nos conmueve? ¿Cómo encontrar su mirada y reconocerlos como actores y acompañantes puede ampliar las formas de la política? Honrando el legado de tantos pensadores y pensadoras que por siglos se han ocupado de estas preguntas, mi novela es un intento por pensar en todo esto, lejos de una tradición que insiste en la superioridad del orden humano y su racionalidad, cuando lo humano es precisamente una red de dependencias entre especies.He querido en este libro cuestionar la fantasía antropocéntrica de que otros seres vivos son irrelevantes o inferiores o deben estar siempre al servicio de las lógicas humanas, como la lógica de la propiedad privada, de la ganancia y del estado nación con sus fronteras. Como bien lo han notado las pensadoras ecofeministas, los discursos que presuponen la superioridad humana sobre lo que se ha sabido llamar la “naturaleza,” están íntimamente ligados a las nociones patriarcales de la jerarquía de género que fueron precisamente las que silenciaron a Sor Juana. He querido descentrar lo humano poniendo en el centro de la ficción a unas perras abandonadas, a una tángara escarlata que migra del noreste de Estados Unidos a los bosques altoandinos de Colombia, a un puercoespín pequeño de uno de esos bosques cuya especie se encuentra en vías de extinción, a un escarabajo recién salido de los fondos de esa tierra, animales más que humanos cuyas vidas inevitablemente se cruzan con las nuestras, pero que, desde su alteridad, se rehúsan a ser simplemente humanizados. En el proceso de indagar sobre el movimiento y el sufrimiento de estos seres, sobre lo que podría constituir para ellos un hogar, he querido preguntar sobre las maneras en que estos hacen reclamos a los humanos y sus tecnologías, y viceversa, aunque, como nos recuerda Haraway, esos reclamos nunca sean simétricos.Porque todas las especies están situadas históricamente, tenemos una responsabilidad de comprender la historia como más que humana. Hablar del trabajo, del afecto, del juego, de la vida comunitaria, de la política, de la guerra, de las relaciones de género, de la creación de fronteras políticas, requiere de una mirada que dé cuenta de que las sociedades y redes que tejemos están determinadas por los cruces entre especies. ¿Cómo se puede, si no, entender la historia de un país como Colombia, donde se talan bosques para llenarlos de vacas, donde se fumigan químicos letales para producir y erradicar las drogas ilícitas, donde se dragan ríos y se destrozan vidas para sacar oro y metales, donde hay gente valiente que a diario cuestiona y resiste todo esto, cómo abordamos esa historia sin al menos preguntarnos por la forma en que perciben, sienten, sufren y resisten esto los seres más que humanos que también la habitan? ¿Cómo son testigos ellos de los conflictos que causamos, como, por ejemplo, de un enfrentamiento armado que los exila, de una bomba que explota en el lugar a donde han parado a descansar (como les pasa, por ejemplo, a los millones de aves migratorias que cruzan Israel y Palestina en estos meses), o de una protesta pública que les nubla el cuerpo con gases lacrimógenos? ¿Cómo viven el estallido de los cohetes que Elon Musk alegremente hace explotar sobre sus bosques? Estas consideraciones, que para muchos pueden ser banales o minúsculas, tienen para mí una gran urgencia. Están en el centro de la historia, no son sus márgenes. Creo que la literatura, desde un lenguaje diferente al de las ciencias, debe estar allí para abordarlas.No podría terminar hoy sin hacer un breve homenaje a un pájaro que detonó la escritura de este libro hace ya más de una década. Un ave migratoria deslumbrante, cuya especie mora temporalmente en los bosques en los que crecí en Colombia y en los que ahora vivo en Estados Unidos, que de milagro encontré una mañana de 2008 en el balcón del apartamento de Bogotá al que yo había llegado a vivir temporalmente. Un ave pequeñita de cuerpo escarlata y alas negras que pasa parte del año en los Andes y la otra en el noreste de Estados Unidos, lugar del cual yo también hacía poco había llegado. Esa visita tan extraña de un pájaro que parecía paralizado en un día de abril en el que debía seguir su vuelo hacia el hemisferio norte con otros millones más, despertó en mí una enorme curiosidad. Una fascinación por la migración de los pájaros y sus viajes continentales y una obsesión por cómo atestiguan el mundo desde otras dimensiones espaciales y sensoriales, por cómo burlan nuestras fronteras y nuestros deseos egoístas de delimitar el mundo. Una curiosidad para la que creo que ya me había preparado mi vida de caminante de bosques.¿Cómo le habría ido a esa ave valiente que finalmente recuperó el vuelo y escapó de mi balcón? Ojalá que haya llegado a su bosque del norte, pero nunca lo sabré. ¿Qué rutas continentales habrá tomado y por cuántos otoños y primaveras habrá ido de norte a sur y de sur a norte? ¿Habrá durado su vida una década entera, que es lo que podría vivir un ave de su especie, o mucho menos? ¿Cuáles aguas que bebió estaban limpias y cuáles envenenadas? ¿Qué bosque encontró robusto y defendido y cuál diezmado? ¿Viven algunos de sus hijos y descansan en este momento del invierno septentrional en algún bosque andino? Tenemos que seguir hablando de los pájaros, de los territorios que ellos y tantos otros seres claman heroicamente y a pesar nuestro como morada. De los bosques y la vida que sostienen, que son la comunidad y el camino, la memoria del mundo y su conciencia. De la gente que los recorre y los defiende. De la soberanía de unos seres que son tan marginales en los espacios del poder, pero que sostienen la esperanza y la posibilidad del futuro.Quiero terminar agradeciendo a todos los perros y perras, y a todas las personas que me ha acompañado y acogido en estos años de escritura. A Salomé Cohen, mi brillante y generosa editora, a las editoriales que han publicado mis libros, a la universidad de Wesleyan donde enseño y a mis estudiantes, que son mis maestros, a la FIL de Guadalajara y a la Universidad del Claustro de Sor Juana, a Laura Niembro y al resto del equipo que ha hecho posible que yo esté hoy aquí. Un especial agradecimiento, también, al jurado que me honra enormemente, al elegir este libro entre muchas obras de escritoras valientes, que creen, como lo hizo Sor Juana, en el acto de conmover y de irritar para contar los enredos del mundo y sus misterios, para revelar, sosegadamente, los otros ruidos. Muchísimas gracias.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El galardón, dotado con 20.000 euros (cerca de 22.000 dólares), está considerado el reconocimiento público más alto a un compositor o compositora viva de la comunidad iberoamericana, según informó este lunes la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) de España en un comunicado.Tania León (1943, La Habana), ganadora de un Premio Pulitzer de Música en 2021 y del Premio Kennedy Center Honors en 2022, fue galardonada por "su experiencia artística que se proyecta como paradigma de comprensión y diálogo intercultural", según indicó el jurado.Junto a ello, el jurado reconoció "los exilios externo e interno que, como cubana en los Estados Unidos, han marcado su producción compositiva de alto reconocimiento internacional, así como a su posición como ser humano ante las coordenadas vitales por las que ha discurrido su trayectoria”."Siempre he sido fiel a mi filosofía. Me crié en una familia que tenían orígenes muy diferentes, crecí en una especie de pequeñita Naciones Unidas", explicó la ganadora quien aseguró tener "esa semilla mental de que el mundo debería ser igual para todos y no enfatizar tanto en las diferencias".Con más de 40 obras de cámara, orquestales, vocales y multitud de óperas, su forma de crear ha conseguido elevar la música latina en Nueva York: "Europa es la semilla de la composición, y en Estados Unidos se conocía muy poco la carrera de composición latinoamericana", precisó la artista.Su música se caracteriza por un estilo moderno de carácter cosmopolita, a la vez complejo y expresivo, basado en la incorporación de prácticas rítmicas derivadas de la diáspora latinoamericana, fusionadas con técnicas europeas en el Caribe, recordó la SGAE.Además, su obra siempre se ha marcado por su gran compromiso político. A través de la música se ha enfrentado al rechazo y a la misoginia, explicó la organización."Siempre he sido de perseguir mis propuestas y cuando me decían que no, no me dejaba amedrentar: Les daba la espalda y continuaba mi camino", dijo ella al respecto.León se fue de Cuba a los 24 años para emigrar a Estados Unidos. Afincada en Nueva York desde 1967, no pretendía dedicarse a la composición sino que su sueño era ser concertista y se formó como pianista, pero acompañó al coreógrafo Arthur Mitchell en el proyecto del Dance Theater of Harlem” y comenzó así "una de las carreras más brillantes y prolíficas de la composición en Latinoamérica", destacó la SGAE.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.