Harry Styles se convirtió en mi hogar

Harry fue uno de esos artistas que me gustaban de adolescente, canté y me aprendí todas las canciones de su banda hasta que decidieron separarse; en mi cuarto posaban sus caras y en muchas ocasiones sanaron molestias que tuve en esos años. Ese niño que se presentó al concurso que todos vimos en algún momento, creció, evolucionó y se dejó llevar por el instinto que estuvo reprimido por años.

Su carrera en solitario se convirtió en mi himno para dar el paso a lo que sería mi vida adulta, sus dos primeros álbumes Harry Styles y Fine line me sacaron lágrimas y me pusieron a bailar como niña de cinco años en medio de la habitación. Puede que esta conexión que tengo con su música y con él mismo sea absurda e inmadura, sin embargo, me salvó cuando pensé que todo estaba perdido.

"No te preocupes por eso, todo va a estar bien, todo estará bien", dijo en alguna entrevista en medio de las promociones para Fine Line , su segundo disco, esto se volvió en un mantra para cuando creí que se me derrumbaba la vida a pedazos y él, sin saberlo, logró salvarme del abismo.

No dormí bien pensando en cómo sería este nuevo encuentro con la música de aquel que mueve corazones en todo el mundo, presioné play y las trece canciones empezaron a reproducirse en orden, el orden que Harry decidió. Al principio bailé como si estuviera en una fiesta disco en los años 70's, luego me transportó a su cocina y hablamos toda la noche, paseamos en carro hasta el fin del mundo, me mostró sus más profundas tristezas y yo le enseñé las mías, me dejó con el vacío de alguien que pudo haber sido nuestro amor de la vida, pero no me sentí desamparada porque sé que así él no lo sepa tiene un inmenso poder en este cuerpo y alma que se mueven con su voz hace diez años.

Me senté en la sala que él dispuso para mí, en silencio, solo escuchando lo que tenía que decirme, ahí, como una estatua me quedé esperando a que terminara de cantarme, algunas gotas saladas se derramaron por mi rostro y cuidadosamente él las secó con su voz mientras soltaba frases de Matilda , una de sus nuevas canciones. "Matilda, hablas del dolor como si todo estuviera bien, pero sé que te sientes como si un pedazo de ti estuviera muerto dentro", me canta como si lo supiera todo.

Harry dijo que este álbum había sido lo más libre desde que hace música y no me queda la menor duda, la autenticidad que refleja por fin está brillando, eso que estuvo reprimido por tantos años sale a la luz y lo vemos en los escenarios regando felicidad, paz, destellos de vida.

Él hizo que esta alma perdida encontrara un camino y dejara de correr por todos lados pensando en que acabaría fatal, estos ojos que lo verán en unos meses emanarán lágrimas de agradecimiento por ese extraño que llegó a mi vida para darle un vuelco y decirme que vale la pena quedarse.

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