Con libreto en alemán de Hugo von Hofmannsthal, Arabella se estrenó el 1 de julio de 1933 en el Sächsisches Staatstheater de Dresde, con Clemens Krauss dirigiendo a su esposa, la soprano rumana Viorica Ursuleac, que interpretó el papel protagonista.
Esta ópera de Richard Strauss, fue la última colaboración con el libretista, tras seis piezas en total. "Arabella", si bien tuvo una gran recepción del público general y ha tenido grandes presentaciones como la de Eleanor Steber en 1955 en el Metropolitan Opera de Nueva York o en 1962 con Monserrat Caballé en Barcelona, dentro del repertorio del compositor alemán no es común que esta pieza sea representada en la actualidad.
La ópera se sitúa en la ciudad de Viena, en 1860. Allí el conde Waldner, ex capitán de caballería es un jugador apasionado, pero bastante desafortunado; cuando las deudas finalmente lo abruman, se muda con su esposa Adelaide y sus dos hijas (Arabella y Zdenek) a un elegante hotel donde intenta mantener una imagen de nobleza y riqueza mientras trata desesperadamente de recuperar su fortuna en las mesas de juego.
En el primer acto, en su suite de hotel, Adelaide está consultando a un adivino sobre el futuro; le dicen que Arabella conocerá a un hombre rico pero que la hija menor pondrá en peligro el matrimonio. Adelaide espera que Arabella se case con Elemer, Dominik o Lamoral, todos ellos son condes y todos han estado tratando de ganarse el corazón de la hermosa condesa, aunque con poco éxito.
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El teniente, sin dinero, Matteo está enamorado de Arabella, pero sus sentimientos siguen sin ser correspondidos y ha comenzado a contemplar el suicidio. Zdenka, que está enamorada de Matteo sin darse cuenta, siempre insta a su hermana a escuchar las propuestas de amor del teniente, mientras mantiene vivas sus esperanzas enviándole cartas de amor que ella escribe en nombre de Arabella.
Pero Arabella está esperando al ‘hombre adecuado’, confiada en que el destino algún día lo llevará hasta ella de manera bastante inesperada. Recientemente, cuando salió a caminar, sintió por primera vez en su vida que se había cruzado con este hombre; en la calle vio a un extraño que parecía haber venido de lejos y cuya mirada la había perturbado profundamente.
Este extraño es, de hecho, Mandryka, un rico terrateniente de Croacia y sobrino de uno de los viejos amigos de Waldner en el ejército. Waldner le había enviado a este último una fotografía de Arabella con la esperanza de que el rico anciano se enamorara de ella y le pidiera su mano en matrimonio. Pero el anciano está muerto y es su heredero Mandryka quien ha perdido el corazón por la imagen y viene a Viena para casarse con la joven. El conde está encantado de aceptar sus planes, especialmente porque el yerno potencial le ofrece dinero de su bolsa rebosante. La nobleza vienesa celebrará el martes de carnaval esa noche, con el baile de cocheros y allí serán presentados Mandryka y Arabella. La historia terminará desarrollándose bajo el deseo de la condesa, que espera que su hija Arabella encuentre un marido rico; dado que no hay suficiente dinero para criar a dos niñas de una manera acorde con su posición, en una trama que mezcla el amor y el interés económico.
Podrá escuchar el domingo a las 9:00 p.m. en Canto y música coral esta ópera interpretada por Otto Edelmann, Ira Malaniuk, Lisa della Casa, Hilde Gueden, George London, Anton Dermota, Waldemar Kmentt, Eberhard Wächter, Harald Prögïhöf junto a la Orquesta Filarmónica de Viena bajo la dirección de Sir George Solti en nuestra señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
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