Hildegarda de Bingen (1098-1179) es una de las figuras más fascinantes del pensamiento místico medieval, cuyo legado trasciende su tiempo y nos invita a reflexionar sobre la intersección entre espiritualidad, naturaleza y creatividad. Nacida en Bermersheim, en lo que hoy es Alemania, Hildegarda fue una abadesa benedictina, mística, compositora, médica y escritora, destacando por su visión integral del cosmos y el ser humano. Su obra combina la teología, la filosofía natural y el arte, lo que la convierte en una de las primeras mujeres que dejó una marca indeleble en la cultura europea.Hildegarda es célebre por sus visiones, que comenzaron a una edad temprana y que interpretó como manifestaciones de la voluntad divina. Estas visiones fueron el pilar de su obra teológica y la llevaron a escribir libros como Scivias (abreviatura de Sci vias Domini o "Conoce los caminos del Señor"), donde describe de manera detallada sus experiencias místicas y ofrece interpretaciones sobre el plan divino. En Scivias usa un lenguaje visual potente, describiendo escenas de luz, fuego y formas celestiales, y conecta lo físico con lo espiritual de una manera casi sin precedentes en su tiempo. Cada visión no era simplemente una experiencia extática, sino una revelación con implicaciones teológicas profundas. Por ejemplo, en la visión de la Jerusalén Celestial que aparece en Scivias, Hildegarda describe una ciudad luminosa llena de armonía, un símbolo del alma redimida que alcanza la plenitud en Dios. Esta visión no solo tenía un valor contemplativo, sino que ofrecía una guía para la vida espiritual de sus contemporáneos, una forma de reimaginar el cosmos como una expresión de la voluntad divina.Lo que hace única a Hildegard es su enfoque holístico del ser humano y la naturaleza. En su obra Physica y Causae et Curae, Hildegarda explora el mundo natural desde una perspectiva que une lo científico y lo espiritual. Desarrolla una proto-medicina natural basada en las propiedades curativas de las plantas, los minerales y los elementos. Para Hildegarda, la naturaleza no es solo un objeto de estudio, sino una manifestación de la sabiduría divina. Su concepto de viriditas, una especie de fuerza vital o verdor que impulsa la vida y el crecimiento, es un ejemplo perfecto de su visión cósmica, donde la vida espiritual y la vida física están profundamente entrelazadas.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Música celestialOtro aspecto que distingue a Hildegarda de otros escritores de su época es su contribución a la música. Compuso una vasta cantidad de obras litúrgicas, entre ellas Symphonia armoniae celestium revelationum ("Sinfonía de la armonía de las revelaciones celestiales"), una colección de himnos y cantos que destacan por su belleza melódica y profundidad espiritual. Su música es un eco de sus visiones, una forma de conectar con lo divino a través del arte sonoro. En una época en que la música sacra era predominantemente masculina, Hildegarda se destaca como una de las pocas mujeres que no solo escribió música, sino que también teorizó sobre ella.Lo que realmente diferencia a Hildegarda de Bingen de otros autores de su tiempo es la amplitud de su obra y su capacidad para integrar distintos campos del saber. Mientras que muchos pensadores medievales se centraban en la teología o la filosofía, Hildegarda creó una visión interdisciplinaria que abarcaba desde la cosmología hasta la medicina y la música. Además, como mujer, su posición de autoridad dentro de la Iglesia y su influencia como escritora y consejera espiritual (escribió cartas a papas, emperadores y figuras prominentes de su tiempo) es extraordinaria. En un contexto en que las voces femeninas estaban frecuentemente silenciadas o marginadas, Hildegarda logró construir una autoridad espiritual que fue reconocida y respetada incluso por sus contemporáneos más poderosos.Hildegarda de Bingen fue canonizada en 2012 y proclamada Doctora de la Iglesia por su excepcional contribución a la espiritualidad cristiana.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
OraciónNada te turbe;nada te espante;Todo se pasa;Dios no se muda;la pacïenciatodo lo alcanza.Quien a Dios tiene,nada le falta.Sólo Dios basta.Gloria a Dios Padre,gloria a Dios Hijo,igual por siempregloria al Espíritu.Amén¿Quién es Santa Teresa de Ávila?Santa Teresa de Ávila, también conocida como Teresa de Jesús, fue una destacada escritora, mística y religiosa española del siglo XVI, nacida en 1515 en Gotarrendura, provincia de Ávila, España, y fallecida en 1582 en Alba de Tormes. Es una figura prominente dentro del misticismo cristiano y una de las grandes exponentes de la literatura mística en la historia de la Iglesia Católica.Teresa de Ávila es conocida por sus obras literarias, especialmente por sus libros autobiográficos y tratados espirituales. Su obra más destacada es "El libro de la vida" o "Las Moradas", escrito en 1565, donde describe su experiencia mística y su camino espiritual hacia la unión con Dios. Este libro es considerado una obra maestra de la literatura mística y ha tenido una gran influencia en la espiritualidad cristiana.Dichoso el corazón enamoradoDichoso el corazón enamoradoque en sólo Dios ha puesto el pensamiento,por Él renuncia todo lo criado,y en Él halla su gloria y su contento.Aún de sí mismo vive descuidado,porque en su Dios está todo su intento,y así alegre pasa y muy gozosolas ondas de este mar tempestuoso.💬Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.En una profesión ¡Oh qué bien tan sin segundo!,¡oh casamiento sagrado!Que el Rey de la Majestad,haya sido el desposado.¡Oh qué venturosa suerte,os estaba aparejada,que os quiere Dios por amada,y haos ganado con su muerte!En servirle estad muy fuerte,pues que lo habéis profesado,que el Rey de la Majestad,es ya vuestro desposado.Ricas joyas os daráeste Esposo Rey del cielo.Daros ha mucho consuelo,que nadie os lo quitará.Y sobre todo os daráun espíritu humillado.Es Rey y bien lo podrá,pues quiere hoy ser desposado.Mas os dará este Señorun amor tan santo y puro,que podréis, yo os lo aseguro,perder al mundo el temor,y al demonio muy mejor,porque hoy queda maniatado;que el Rey de la Majestad,ha sido hoy el desposado.Ayes del destierro¡Cuán triste es, Dios mío,la vida sin ti!Ansiosa de verte,deseo morir.Carrera muy largaes la de este suelo,morada penosa,muy duro destierro.¡Oh dueño adorado,sácame de aquí!Ansiosa de verte,deseo morir.Lúgubre es la vida,amarga en extremo;que no vive el almaque está de ti lejos.¡Oh dulce bien mío,que soy infeliz!Ansiosa de verte,deseo morir.¡Oh muerte benigna,socorre mis penas!Tus golpes son dulces,que el alma libertan.¡Qué dicha, oh mi Amado,estar junto a Ti!Ansiosa de verte,deseo morir.El amor mundanoapega a esta vida;el amor divinopor la otra suspira.Sin ti, Dios eterno,¿quién puede vivir?Ansiosa de verte,deseo morir.La vida terrenaes continuo duelo:vida verdaderala hay solo en el cielo.Permite, Dios mío,que viva yo allí.Ansiosa de verte,deseo morir.¿Quién es el que temela muerte del cuerpo,si con ella lograun placer inmenso?¡Oh! sí, el de amarte,Dios mío, sin fin.Ansiosa de verte,deseo morir.Mi alma afligidagime y desfallece.¡Ay! ¿quién de su amadopuede estar ausente?Acabe ya, acabeaqueste sufrir.Ansiosa de verte,deseo morir.El barbo cogidoen doloso anzueloencuentra en la muerteel fin del tormento.¡Ay!, también yo sufro,bien mío, sin ti.Ansiosa de verte,deseo morir.En vano mi almate busca, oh mi dueño;Tú, siempre invisible,no alivias su anhelo.¡Ay! esto la inflama,hasta prorrumpir:Ansiosa de verte,deseo morir.¡Ay!, cuando te dignasentrar en mi pecho,Dios mío, al instanteel perderte temo.Tal pena me afligey me hace decir:Ansiosa de verte,deseo morir.Haz, Señor, que acabetan larga agonía;socorre a tu siervaque por ti suspira.Rompe aquestos hierrosy sea feliz.Ansiosa de verte,deseo morir.Mas no, dueño amado,que es justo padezca;que expíe mis yerros,mis culpas inmensas.¡Ay!, logren mis lágrimaste dignes oír:Ansiosa de verte,deseo morir.Alma buscarte has en mí Alma, buscarte has en Mí,y a Mí buscarme has en ti.De tal suerte pudo amor,alma, en mí te retratar,que ningún sabio pintorsupiera con tal primortal imagen estampar.Fuiste por amor criadahermosa, bella, y asíen mis entrañas pintada,si te perdieres, mi amada,Alma, buscarte has en Mí.Que yo sé que te hallarásen mi pecho retratada,y tan al vivo sacada,que si te ves te holgarás,viéndote tan bien pintada.Y si acaso no supieresdónde me hallarás a Mí,No andes de aquí para allí,sino, si hallarme quisieres,a Mí buscarme has en ti.Porque tú eres mi aposento,eres mi casa y morada,y así llamo en cualquier tiempo,si hallo en tu pensamientoestar la puerta cerrada.Fuera de ti no hay buscarme,porque para hallarme a Mí,bastará solo llamarme,que a ti iré sin tardarmey a Mí buscarme has en ti.No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Como parte de su segundo ciclo de cantatas, en 1724, en Leipzig, el alemán Johann Sebastian Bach compuso Herr Jesu Christ, du höchstes Gut, una cantata sacra, específicamente una cantata de iglesia, conocida en español como Señor Jesucristo, oh bien supremo.Bach, uno de los compositores más importantes del período barroco, compuso esta obra religiosa durante su primer año como Thomaskantor en Leipzig, donde fue responsable de la música en las principales iglesias de la ciudad. Para poner en contexto, Thomaskantor ó "Kantor de Santo Tomás" fue el título honorífico y cargo que tuvo el compositor alemán entre 1723 y 1750.Durante esos años, Bach fue el encargado de la educación musical y la dirección de la música en las principales iglesias de la ciudad de Leipzig, especialmente en las de Santo Tomás y en San Nicolás. Este cargo musical durante la labor de Bach fue considerado uno de los más respetados e influyentes de la Alemania protestante, participando no solo en actos religiosos y académicos, sino también en elecciones del concejo municipal y homenajes de la ciudad.“Señor Jesucristo, oh bien supremo” es una cantata de iglesia que incluye movimientos de coral, arias solistas y recitativos con un movimiento final de coral. La obra está escrita para voz solista (soprano), un coro de cuatro partes (SATB), y un conjunto instrumental que suele incluir cuerdas y continuo (órgano u otros instrumentos de bajo).Pese a que se desconoce la autoría del texto de la cantata, se sabe que está basado en el himno en el himno del mismo nombre (Herr Jesu Christ, du höchstes Gut), del poeta y teólogo Bartholomäus Ringwaldt.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.El himno original tiene un carácter de oración penitencial y de súplica a Cristo. En el mismo sentido, la cantata, en su conjunto, reflexiona sobre la relación de los devotos con Cristo, expresando arrepentimiento, confianza y gratitud por la misericordia divina.Algunas grabaciones notables de esta cantata incluyen las realizadas por John Eliot Gardiner con el grupo Solistas Barrocos Ingleses y el Coro Monteverdi, y la grabación de Karl Richter con la Orquesta Bach de Múnich.En la HJCK podrá escuchar esta obra sacra interpretada por Kurt Equiluz (tenor), Max van Egmond (bajo), el Coro de Niños de Hannover, el Collegium Vocale de Gent y el Leonhardt Consort bajo la dirección de Gustav Leonhardt🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Noche oscuraCanciones del alma que se goza de haber llegado al alto estado de la perfección, que es la unión con Dios, por el camino de la negación espiritual. En una noche oscura,con ansias, en amores inflamada¡oh dichosa ventura!,salí sin ser notadaestando ya mi casa sosegada.A oscuras y segura,por la secreta escala disfrazada,¡Oh dichosa ventura!,a oscuras y en celada,estando ya mi casa sosegada.En la noche dichosaen secreto, que nadie me veía,ni yo miraba cosa,sin otra luz y guíasino la que en el corazón ardíaAquésta me guiabamás cierto que la luz del mediodía,adonde me esperabaquien yo bien me sabía,en parte donde nadie parecía.¡Oh noche que guiaste!¡Oh noche amable más que la alborada!¡Oh noche que juntasteAmado con amada,amada en el Amado transformada!En mi pecho floridoque entero para él sólo se guardaba,allí quedó dormido,y yo le regalaba,y el ventalle de cedros aire daba. El aire de la almena,cuando yo sus cabellos esparcía,con su mano serenaen mi cuello heríay todos mis sentidos suspendía. Quedéme y olvidéme,el rostro recliné sobre el Amado,cesó todo y dejéme,dejando mi cuidadoentre las azucenas olvidado.¿Quién fue San Juan de la Cruz?San Juan de la Cruz, cuyo nombre secular era Juan de Yepes Álvarez, nació en Fontiveros, España, en 1542. Fue un destacado místico, poeta y sacerdote católico, conocido por su papel fundamental en el desarrollo de la literatura mística española del siglo XVI, así como por su asociación con Santa Teresa de Jesús en la reforma de la Orden de los Carmelitas. Sus obras, en particular sus poemas líricos y sus escritos teológicos, lo han consagrado como una de las figuras más importantes de la literatura española y de la espiritualidad cristiana.Juan de Yepes Álvarez se unió a la orden carmelita en 1563, adoptando el nombre de Juan de San Matías. Durante este tiempo, conoció a Santa Teresa de Jesús, con quien compartía una visión reformista de la orden. Juntos, establecieron los cimientos de lo que más tarde se conocería como los carmelitas descalzos, una rama reformada de la orden carmelita que enfatizaba la vida contemplativa y la austeridad.La obra literaria de San Juan de la Cruz es eminentemente espiritual y poética. Entre sus escritos más famosos se encuentran "La Noche Oscura del Alma", "Cántico Espiritual" y "Llama de Amor Viva", obras que exploran las profundidades de la experiencia mística y el camino hacia la unión con Dios. Sus poemas, caracterizados por su intensidad lírica y su riqueza simbólica, han sido objeto de estudio y admiración a lo largo de los siglos.San Juan de la Cruz fue también un ferviente defensor de la contemplación como camino hacia la unión con lo divino, y sus enseñanzas teológicas influyeron en la espiritualidad cristiana posterior. Fue canonizado como santo por el papa Benedicto XIII en 1726 y proclamado Doctor de la Iglesia por el papa Pío XI en 1926.💬Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquí.Llama de amor vivaCanciones del alma en la íntima comunicación, de unión de amor de Dios. ¡Oh llama de amor viva,que tiernamente hieresde mi alma en el más profundo centro!Pues ya no eres esquiva,acaba ya, si quieres;¡rompe la tela de este dulce encuentro!¡Oh cauterio suave!¡Oh regalada llaga!¡Oh mano blanda! ¡Oh toque delicado,que a vida eterna sabe,y toda deuda paga!Matando. muerte en vida la has trocado. ¡Oh lámparas de fuego,en cuyos resplandoreslas profundas cavernas del sentido,que estaba oscuro y ciego,con extraños primorescalor y luz dan junto a su Querido!¡Cuán manso y amorosorecuerdas en mi seno,donde secretamente solo morasy en tu aspirar sabroso,de bien y gloria lleno,cuán delicadamente me enamoras!Entréme donde no supeEntréme donde no supey quedéme no sabiendo,toda ciencia tracendiendo.IYo no supe dónde entraba,pero cuando allí me visin saver dónde me estabagrandes cosas entendíno diré lo que sentíque me quedé no sabiendotoda sciencia trascendiendo.IIDe paz y de piedadera la sciencia perfecta,en profunda soledadentendida vía rectaera cosa tan secretaque me quedé balbuciendotoda sciencia trascendiendo.IIIEstava tan embebidotan absorto y ajenadoque se quedó mi sentidode todo sentir privadoy el espíritu dotadode un entender no entendiendotoda sciencia tracendiendo.IVEl que allí llega de verode sí mismo desfallescequanto sabía primeromucho baxo le parescey su sciencia tanto cresceque se queda no sabiendo,toda sciencia tracendiendo.VCuanto más alto se suvetanto menos se entendíaque es la tenebrosa nuveque a la noche esclarecíapor eso quien la sabíaqueda siempre no sabiendo,toda sciencia tracendiendo.VIEste saber no sabiendoes de tan alto poderque los sabios arguyendojamás le pueden vencerque no llega su sabera no entender entendiendotoda sciencia tracendiendo.VIIY es de tan alta excelenciaaqueste summo saber,que no ay facultad ni scienciaque la puedan emprenderquien se supiere vencercon un no saber sabiendo,yrá siempre tracendiendo.VIIIY si lo queréis oýrconsiste esta summa scienciaen un subido sentirde la dibinal esenciaes obra de su clemenciahazer quedar no entendiendotoda sciencia tracendiendo.Coplas del alma que pena por ver a DiosVivo sin vivir en míy de tal manera espero,que muero porque no muero.En mí yo no vivo ya,y sin Dios vivir no puedo;pues sin él y sin mí quedo,este vivir ¿qué será?Mil muertes se me hará,pues mi misma vida espero,muriendo porque no muero.Esta vida que yo vivoes privación de vivir;y así, es continuo morirhasta que viva contigo.Oye, mi Dios, lo que digo:que esta vida no la quiero,que muero porque no muero.Estando ausente de ti¿qué vida puedo tener,sino muerte padecerla mayor que nunca vi?Lástima tengo de mí,pues de suerte persevero,que muero, porque no muero.El pez que del agua saleaun de alivio no carece,que en la muerte que padeceal fin la muerte le vale.¿Qué muerte habrá que se igualea mi vivir lastimero,pues si más vivo más muero?Cuando me pienso aliviarde verte en el Sacramento,háceme más sentimientoel no te poder gozar;todo es para más penarpor no verte como quiero,y muero porque no muero. Y si me gozo, Señor,con esperanza de verte,en ver que puedo perdertese me dobla mi dolor;viviendo en tanto pavory esperando como espero,muérome porque no muero.¡Sácame de aquesta muertemi Dios, y dame la vida;no me tengas impedidaen este lazo tan fuerte;mira que peno por verte,y mi mal es tan entero,que muero porque no muero.Lloraré mi muerte yay lamentaré mi vida,en tanto que detenidapor mis pecados está.¡Oh mi Dios!, ¿cuándo serácuando yo diga de vero:vivo ya porque no muero?No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El 7 de octubre de 2012 el papa Benedicto XVI declaró santa a Hildegarda de Bingen, una de las mujeres más influyentes de la Edad Media. Los campos en los que dejó un legado no fueron pocos, aunque en ese entonces no se hablaba de feminismo, sus palabras sobre el placer y la libertad de las mujeres hacen que se considere como una de las precursoras del movimiento.Además, tuvo injerencia como médica, filósofa, escritora, poeta, compositora, teóloga, profetisa e incluso asesora política en un contexto en el que las mujeres no eran consideradas un agente político y su participación en la sociedad estaba limitada por la religión y las leyes.Nacida en el Sacro Imperio Romano Germánico (hoy Europa Occidental y Central) en el año 1098, Hildegarda creció en una familia noble que desde muy pequeña la ofreció al monasterio benedictino de Disibodenberg, donde recibió educación religiosa y formación en varios campos del conocimiento de la época.Desde niña, la joven religiosa comenzó a experimentar visiones místicas, que serían interpretadas como revelaciones divinas. Esta condición, más su talento para la escritura y la música se desarrollaron permitiéndole producir obras que tuvieron la religión y la mística como centro.A sus 38 años, fue elegida madre superiora del monasterio de Rupertsberg, cerca de Bingen, convirtiéndose así en una líder espiritual y comunitaria influyente. En su gestión, fundó monasterios y conventos, llevando su enseñanza por la región, cuando estaba prohibido que las mujeres predicaran, pues se consideraba a las mujeres como el sexo débil, indigno de proclamar el mensaje de Dios.Hildegarda afirmó haber tenido visiones desde una edad temprana. Estas visiones, según ella, provenían de Dios y la inspiraron en su música, escritos y prácticas espirituales. Sus experiencias místicas influyeron profundamente en su vida y obra, y escribió extensamente sobre ellas en sus libros.“Hasta los 15 años tuve muchas visiones, y explicaba algunas de las cosas que veía a otros, que me preguntaban con asombro de dónde podían venir esas cosas. Yo también me lo preguntaba y durante mi enfermedad pregunté a una de mis cuidadoras si ella también veía cosas parecidas. Cuando me contestó que no, me embargó un gran temor. A menudo, en mi conversación, explicaba cosas futuras, que veía como presentes, pero, al notar la sorpresa de mis oyentes, me volví más reservada”, documenta National Geographic sobre las habilidades de la santa.En el campo de la medicina hizo contribuciones significativas. Escribió tratados sobre hierbas medicinales, nutrición y prácticas de curación, basadas en sus visiones y en el conocimiento médico de la época.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Hildegarda, una artista inspirada por DiosScivias, escrita entre 1141 y 1152 es considerada la principal obra de Hildegarda, donde relata la historia del cristianismo a partir de la inspiración divina. Su obra se caracteriza por estar llena de simbolismo y metáforas, describiendo sus experiencias místicas y las interpretaciones que les dio.Continuando con la temática religiosa, también escribió sobre teología y doctrina cristiana; hizo comentarios sobre pasajes bíblicos, tratados sobre la naturaleza de Dios y la creación, así como discusiones sobre temas doctrinales y espirituales.Otro de sus escritos conocidos es Causas y Curas, en el que aborda temas relacionados con la salud, la enfermedad, las hierbas medicinales y las prácticas terapéuticas de su tiempo.Hildegarda mantuvo correspondencia con figuras eclesiásticas prominentes de su época, así como con líderes políticos y nobles. Sus cartas proporcionan una visión única de su pensamiento y personalidad, así como de los eventos y preocupaciones de su tiempo.Pontífices y emperadores de distintos territorios europeos acudían a ella en busca de consejo espiritual y hasta predicciones de futuro. “En sus casi 400 cartas que sobreviven, hay desde humildes penitentes pidiendo curas para sus males hasta reyes en pos de asesoramiento político”, de acuerdo con la BBC.La alemana también fue una virtuosa de la música clásica. Compuso música sacra, incluidos himnos, obras dramáticas, antífonas y responsorios, que reflejaban sus visiones espirituales y religiosas. La mayoría de su música está escrita en un estilo monódico, con una sola línea melódica y es notable por su belleza y complejidad.Considerada una de las primeras compositoras conocidas de Europa, la artista también llevó a la música su mística y devoción abordando temas como la alabanza a Dios, la devoción a la Virgen María, la santificación de la naturaleza y la lucha entre el bien y el mal.Sus composiciones son interpretadas y grabadas por numerosos coros y ensambles de música antigua en todo el mundo. Su drama musical medieval Ordo Virtutum, compuesto hacia 1151 representa la lucha entre las virtudes y el alma humana y es considerada una de las primeras óperas de la historia. O Ecclesia y O viridissima virga son dos de sus antífonas más reconocidas dedicadas a la Virgen María.Pionera del feminismoEn su labor como madre superiora, en 1150, fundó una comunidad femenina independiente de San Disibodo, cerca de Bingen, y en 1165 dirigió un nuevo monasterio cerca del Rhin, algo inédito para la época. Si bien en el siglo XII las comunidades se regían por el Decreto de Graciano, que prohibía a las mujeres predicar, Hildegarda realizó cuatro campañas de predicación en las que clérigos, nobles y ciudadanos se reunían para escuchar sus sermones, según registró National Geographic.Como superiora se destacó por ejercer autoridad y liderazgo sobre las comunidades monásticas, desafiando los roles de género tradicionales de su época. Su capacidad para dirigir y administrar instituciones religiosas fue notable en un momento en que las mujeres tenían poco acceso al poder y la autoridad.A lo largo de sus escritos, Hildegarda abogó por el respeto y la dignidad de las mujeres. En sus visiones y enseñanzas espirituales, enfatizó la importancia de reconocer el valor intrínseco de todas las personas, independientemente de su género. Además, en su obra médica, proporcionó consejos sobre la salud y el bienestar específicamente dirigidos a las mujeres.Con su obra Causas y Curas se convirtió en la primera mujer en hablar abiertamente sobre el placer de las mujeres. “Cuando la mujer se une al varón, el calor del cerebro de ésta, que tiene en sí el placer, le hace saborear a aquél el placer en la unión y eyacular su semen. Y cuando el semen ha caído en su lugar este fortísimo calor del cerebro lo atrae y lo retiene consigo, e inmediatamente se contrae la riñonada de la mujer, y se cierran todos los miembros que durante la menstruación están listos para abrirse, del mismo modo que un hombre fuerte sostiene una cosa dentro de la mano”, escribió en ese entonces.Además, escribió en sus obras sobre el origen del mundo quitó a Eva como la única responsable de la elección de desobedecer a Dios y cometer el pecado original, por el contrario, habló sobre la vulnerabilidad inherente a la condición humana a la que también estuvo sujeto Adán.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
¿De qué envidia no soy blanco? ¿De qué mala intención no soy objeto? ¿Qué acción hago sin temor? ¿Qué palabra digo sin recelo? Las mujeres sienten que las excedan, los hombres que parezca que los igualo; unos no quisieran que supiera tanto, otros dicen que había de saber más, para tanto aplauso; las viejas no quisieran que otras supieran más, las mozas que otras parezcan bien, y unos y otros que viese conforme a las reglas de su dictamen, y de todos puntos resulta un tan extraño género de martirio cual no sé yo que otra persona haya experimentado. ¿Qué más podré decir ni ponderar?, que hasta el hacer esta forma de letra algo razonable me costó una prolija y pesada persecución no por más de porque dicen que parecía letra de hombre, y que no era decente, con que me obligaron a malearla adrede y de esto toda esta comunidad es testigo. 💬 Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquí.Mis estudios no han sido en daño ni perjuicio de nadie, mayormente habiendo sido tan sumamente privados que no me he valido ni aun de la dirección de un maestro, sino que a secas me lo he habido conmigo y mi trabajo, que no ignoro que el cursar públicamente las escuelas no fuera decente a la honestidad de una mujer, por la ocasionada familiaridad con los hombres y que ésta sería la razón de publicar los estudios públicos; y el no disputarles lugar señalado para ellos, será porque como no las ha menester la república para el gobierno de los magistrados (de que por la misma razón de honestidad están excluidas) no cuida de lo que no les ha de servir; pero los privados y particulares estudios ¿quién los ha prohibido a las mujeres? ¿No tienen alma racional como los hombres? ¿Pues por qué no gozará el privilegio de la ilustración de las letras con ellas? ¿No es capaz de tanta gracia y gloria de Dios como la suya? ¿Pues por qué no será capaz de tántas noticias y ciencias que es menos? ¿Qué revelación divina, qué determinación de la Iglesia , qué dictamen de la razón hizo para nosotras tan severa ley?V. R. quiere que por fuerza me salve ignorando, pues amado Padre mío, ¿no puede esto hacerse sabiendo? Que al fin es camino para mí más suave. Pues, ¿por qué para salvarse ha de ir por el camino de la ignorancia si es repugnante a su natural? ¿No es Dios como suma bondad, suma sabiduría? Pues, ¿por qué le ha de ser más acepta la ignorancia que la ciencia? Sálvese San Antonio con su ignorancia santa, norabuena, que San Agustín va por otro camino, y ninguno va errado. Pues ¿por qué es esta pesadumbre de V. R. y el decir "que a saber que yo había de hacer versos no me hubiera entrado religiosa, sino casádome?" Pues, Padre amantísimo (a quien forzada y con vergüenza insto lo que no quisiera tomar en boca), ¿cuál era el dominio directo que tenía V. R. para disponer de mi persona y del albedrío (sacando el que mi amor le daba y le dará siempre) que Dios me dio?Y así le suplico a V. R. que si no gusta ni es ya servido favorecerme (que eso es voluntario) no se acuerde de mí, que aunque sentiré tanta pérdida mucho, nunca podré quejarme, que Dios que me crio y redimió, y que usa conmigo tantas misericordias, proveerá con remedio para mi alma que espera en su bondad no se perderá, aunque le falte la dirección de V. R., que del cielo hace muchas llaves y no se estrechó a un solo dictamen, sino que hay en él infinidad de mansiones para diversos genios, y en el mundo hay muchos teólogos, y cuando faltaran, en querer más que en saber consiste el salvarse y esto más estará en mí que en el confesor. ¿Qué precisión hay en que esta salvación mía sea por medio de V. R.? ¿No podrá ser otro? ¿Restringiese y limitase la misericordia de Dios a un hombre, aunque sea tan discreto, tan docto y tan santo como V. R.?¿Quién fue Sor Juana Inés de la Cruz?Sor Juana Inés de la Cruz fue una destacada poeta, escritora y erudita mexicana del siglo XVII. Nacida en 1651 en San Miguel Nepantla, en el territorio que hoy es parte de México, fue una figura clave en la literatura y la cultura de la época colonial en América Latina.Sor Juana fue conocida por su aguda inteligencia y su pasión por el conocimiento desde una edad temprana. Ingresó al convento de las Carmelitas Descalzas en la Ciudad de México en 1667, donde pasó la mayor parte de su vida en reclusión religiosa. A pesar de su vida monástica, se destacó como una de las figuras más prominentes del Siglo de Oro de la literatura en español.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.