Al compositor minimalista Philip Glass a veces le gustaba experimentar fuera de la música contemporánea que podríamos incluir en el New Age o la clásica, y se acerca a reputados músicos de otros estilos, especialmente de música tradicional, para experimentar sonoridades.Lo hizo en el álbum "Passages" al lado de Ravi Shankar, y luego en el álbum "Uakti", al lado de un grupo brasileño que maneja un combo de viento, cuerda y, sobre todo, percusión de forma magistral. Con ellos se embarcó en una obra descriptiva que recorre con sus sonoridades los ríos de Brasil.Tras estudiar con Nadia Boulanger y trabajar estrechamente con Ravi Shankar en Francia, Philip Glass viajó en 1966 al norte de la India, principalmente por razones religiosas, donde entró en contacto con los refugiados tibetanos. Se hizo budista y conocería al Dalái Lama en 1972 así como al poeta Allen Ginsberg, quien es un gran defensor de la causa tibetana.Fue su trabajo con Ravi Shankar y su percepción del ritmo aditivo en la música india, lo que le condujo a su singular estilo. Cuando volvió a Nueva York en 1967, renunció a todas sus composiciones anteriores al estilo de Darius Milhaud y de Aaron Copland y empezó a escribir piezas austeras basadas en ritmos aditivos y con un sentido del tempo influido por Samuel Beckett, cuyo trabajo descubrió componiendo para obras de teatro experimentales."The Light", es una composición suya de 1987, cuya estructura musical está inspirada en el famoso experimento de Michelson–Morley de 1887, (el resultado de este experimento constituiría la base experimental de la teoría de la relatividad especial de Einstein) una investigación sobre la velocidad de la luz, que marcó un punto de inflexión en la ciencia moderna.
En 1904 William Ramsay recibió el Premio Nobel de Química por su trabajo en la identificación de distintos gases nobles. Ramsay se convirtió en uno de los químicos más importantes del siglo pasado: sus descubrimientos aportaron nuevos elementos a la tabla periódica como el helio o el argón y sus investigaciones en la radioactividad consolidaron todo un nuevo campo de estudio.Sin embargo, lo que me importa de Ramsey no es su destacado trabajo en la química, sino su pasatiempo favorito. Desde muy joven, el escocés recorría distintos desiertos de Europa y Asia en búsqueda de yacimientos arqueológicos. Ramsey tenía un afán especial: encontrar en alguna área de Asia menor una evidencia física que le permitiera refutar el relato bíblico de Lucas. Habiendo estudiado en las famosas escuelas históricas de Alemania a mediados del siglo XIX, aprendió que el Nuevo Testamento era un tratado religioso escrito a mediados de los 200 d.C., y no un documento histórico escrito en el primer siglo. Estaba convencido de esa enseñanza. Pero quería pruebas.Entonces en 1883 decidió viajar a Éfeso, una de las doce ciudades jónicas a orillas del mar Egeo, en Turquía. Ese año hizo numerosas exploraciones hasta que un día se encontró un cilindro de mármol con inscripciones griegas. Cuando tradujeron el mensaje tallado en la roca, se dieron cuenta de varias cosas: que databa del siglo primero y que era una canción. La canción completa más antigua descubierta hasta ahora. Ramsey, que veinte años después ganaría el Premio Nobel de Química por descubrir elementos, había, también, descubierto el génesis de la composición musical.¿El tema de dicha letra era un canto de guerra? ¿A caso esas letras eran una alabanza a los dioses o a los emperadores? No. William Ramsay encontró enterrada bajo catatumbas jónicas la primera canción de amor. Unas palabras que ascendían desde el centro de la tierra hasta traspasar el desierto en orgullosos espirales, haciendo cabriolas estridentes, punteadas por cálidas modulaciones de llanto que eran como el latir de un corazón.Mientras vivas, brilla, / no sufras por nada en absoluto. / La vida dura poco, /y el tiempo exige su tributo. Es una de las estrofas de la canción que escribió Sícilo a su esposa Euterpe después de su muerte. El amor viaja en todo lo que toca el espíritu y la muerte es el principio de la creación, aunque pensemos lo contrario. Soy una imagen de piedra. / Sícilo me pone aquí, / donde soy por siempre, / señal de eterno recuerdo.El Epitafio de Sícilo, como nombraron la pieza, es un templo del corazón. Esa roca es el pecho de un hombre que ha perdido a su amada. Una escribe para saber donde está y una canta para saber dónde queda el corazón. El corazón de Sícilo, como el de Euterpe, se convirtió en mármol.El epitafio fue conservado en un museo de Esmirna hasta que se perdió durante el Holocausto de Asia Menor entre 1919 y 1922 tras la destrucción de la ciudad. Una ciudad en ruinas entierra un corazón enamorado. Años más tarde, en ese mismo lugar donde las ruinas fueron casa, encontraron la base con la última línea del texto borrada, en poder de una mujer del pueblo que la usaba para apoyar una maceta. Ningún destino habría sido más apropiado que eso: unas flores sobre un canto de despedida.Esta no es la historia de un nobel de química. Tampoco de un descubrimiento arqueológico. A esas letras, que se juntaron y formaron un pregón contra la muerte, solo les queda la textura del tiempo, que es la de la eternidad. Todas esas palabras no hablan de Sícilo y Euterpe, sino de la intemperie, el pánico, la fragilidad, el fin y el principio de todo, el profundo malestar y amor por la vida.¿Quiere escuchar El Epitafio de Sícilo interpretado en griego por un hombre y una mujer? ¿Quiere conocer cómo el sonido se convirtió en música? Bienvenidos a Máster Class, en este espacio hablaremos de música y de historia, pero sobre todo del tiempo. Este texto es un acompañante al nuevo podcast de HJCK Radio y El Espectador que podrán escuchar en www.elespectador.com
El largometraje, que fue dirigido por Óscar y Tito Catacora, fue seleccionado por un comité conformado por especialistas del sector cinematográfico nacional, propuestos por los gremios cinematográficos e instituciones educativas.En el caso de los premios Óscar, que otorga la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos, la cinta peruana buscará alcanzar una nominación en la categoría de Mejor Largometraje Internacional.En ese sentido, el Ministerio de Cultura informó que la lista corta de películas en carrera por estos premios será anunciada el 17 de diciembre próximo.El largometraje peruano, que se estrenó en los cines nacionales, a nivel comercial, el 4 de abril de 2024 y se mantuvo seis semanas en cartelera, también competirá por ser uno de las nominados en la categoría de Mejor Película Iberoamericana de los Goya, una lista que se conocerá también en diciembre próximo.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.El Ministerio de Cultura explicó que solo actúa como facilitador del proceso de selección de la cinta que representa al país, pero no cuenta con integrantes en el comité, por lo que no tiene voto en el proceso de selección.En el caso de Yana-Wara, el ministerio recordó que recibió uno de los premios de los Estímulos Económicos que otorga el Concurso nacional de proyectos de largometrajes de ficción en lenguas originarias de 2018. De forma adicional, recibió estímulos económicos para su distribución en 2023.Yana Wara, fue el segundo largometraje del director peruano Oscar Catacora, quien falleció mientras lo rodaba en una localidad remota de la región sureña de Puno, por lo que esta fue concluido por su tío Tito Catacora.Narra la historia trágica de una niña de 13 años que enfrenta la adversidad y la violencia de género en los Andes, en una aproximación a este mundo que rompe la barrera ente el mito y la realidad, muestra la distancia cultural y la falta de acceso para entender cómo se percibe la realidad en las comunidades más alejadas del territorio peruano.En mayo pasado, Tito Catacora declaró que "en este país llamado Perú existen varias naciones" y que la obra busca mostrar "que el ser humano es cada vez más egocéntrico y piensa que la naturaleza está para dominarla y explotarla".🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
The Last of the Sea Women (Las últimas mujeres del mar) cuenta la historia de la comunidad matriarcal haenyeo, cuyos miembros se sostienen económicamente pescando en la isla surcoreana de Jeju, utilizando únicamente trajes de buzo, máscaras, aletas, cestas y anzuelos.La comunidad, declarada patrimonio cultural inmaterial de la Unesco en 2016, existe desde hace siglos, pero está en peligro, ya que muchas de las mujeres tienen ahora 60, 70 o incluso 80 años."Buscaba historias de mujeres... Quería historias de su resiliencia. Y cuando oí hablar de este proyecto a (la directora) Sue, pensé: 'Esto es exactamente lo que estoy buscando'", dijo Yousafzai en una entrevista junto a la directora coreano-estadounidense Sue Kim."Cuando veo las historias de las haenyeo, me inspiran sobre las posibilidades y las capacidades que las mujeres tienen en sus cuerpos, en sus mentes", agregó la activista de 27 años, que es una de las productoras de la película.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Mujeres impresionantesEn los años sesenta, 30.000 mujeres haenyeo extraían del mar desde caracoles hasta pulpos para mantener a sus familias. Hoy, ese número se ha reducido a 4.000.La película muestra a las mujeres hablando sobre su difícil trabajo, que implica aguantar la respiración bajo el agua hasta dos minutos, e incluye bellas imágenes submarinas de ellas en plena labor.Además explora cómo intentan revivir su cultura mediante la formación y la promoción de su trabajo en redes sociales, y cómo trabajan juntas para evitar la sobrepesca."Las conocí cuando era una niña y me impresionaron mucho, porque son muy seguras de sí mismas y audaces", explicó Kim, que debuta en la dirección de largometrajes."Son impresionantes. Son físicamente ágiles, hábiles y fuertes, y defienden el medio ambiente y se preocupan por la próxima generación", añadió.Cuando era adolescente, Yousafzai sobrevivió en 2012 a un intento de asesinato por parte de los talibanes por su campaña a favor de los derechos educativos de las niñas. En 2014, a los 17 años, fue galardonada con el Premio Nobel de la Paz.La activista firmó un acuerdo con Apple TV+ en 2021 para promover contenidos centrados en mujeres y niñas y ha creado su propia productora."Contar historias ha formado parte de mi activismo, y creo que necesitamos crear plataformas y oportunidades para que las niñas y las mujeres reflexionen sobre el mundo tal y como lo ven", dijo Yousafzai.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
En Colombia, como en el mundo, los nombres de grandes ciudades y pueblos están acompañados por un sobrenombre que les otorga cierta mística, las describe y nutre el sentido de pertenencia de sus habitantes. Varios de ellos aluden a la infraestructura o el clima del lugar, tenemos “la ciudad de la eterna primavera”, “la Atenas Sudamericana”, “la ciudad de los parques” y hasta “la sucursal del cielo”, por mencionar algunas, pero hay una que ha hecho del arte su sinónimo, Ibagué, “la capital musical de Colombia”.Con fiestas y eventos culturales, Ibagué celebra un legado musical que día a día reivindica los ritmos tradicionales del país y en especial de la cordillera central, este año, por ejemplo, celebró la edición 38° del Festival Nacional de la Música Colombiana y la número 50° del Festival Folclórico Colombiano. Y se sumó la quinta edición del Ibagué Festival, llevado a cabo entre el 5 y el 8 de septiembre, con alrededor de seis mil asistentes a los conciertos, talleres y actividades que celebraron a los artistas nacidos en esta región.“Se trata de resignificar y llenar de contenido actual la vida musical de la ciudad y del departamento. Es necesario implementar una política musical integral que fortalezca y estimule los procesos musicales de lo urbano y lo rural, de lo popular y lo académico, de lo tradicional y lo contemporáneo, de la industria y el mercado musical, así como de la formación, la investigación y la circulación, para consolidar y proyectar con claridad y fuerza hacia el mundo, la voz propia de la región y su singularidad sonora”, aseguró Alejandro Mantilla, director artístico del festival.Los cuatro días del Ibagué festival tuvieron como punto central el llamado a los músicos oriundos de esta tierra, a aquellos que llevan su talento por el mundo, por el país y a quienes hacen parte del talento local haciéndole honor al título que ostenta la ciudad.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Uno de los artistas más destacados de la ciudad, reconocido por sus baladas de amor es el cantautor Santiago Cruz, encargado del concierto de apertura, que junto a la Orquesta sinfónica juvenil del Conservatorio de Ibagué y la Orquesta sinfónica del Conservatorio del Tolima, hicieron del Museo Panóptico de la ciudad un escenario para hablar de gratitud y reconciliación.“Es un sueño cumplido venir a tocar a mi ciudad con músicos del Conservatorio del Tolima, del Colegio Amina Melendro (Conservatorio de Ibagué), con profesores, en un lugar que es uno de los símbolos más hermosos y potentes de la transformación que tanto necesita este país, este panóptico que es motivo de orgullo para nosotros”, dijo Cruz antes de tocar frente a sus paisanos.En medio de las multitudes, tanto que quienes no lograron entrar al evento por un breve momento apelaron a los gritos y la fuerza, el artista dio un concierto sinfónico bajo la batuta del director Germán Gutiérrez, en el que no solo interpretó sus canciones más conocidas como Cuando regreses y Baja la guardia. También hubo un espacio para interpretar Te doy las gracias, que en esa ocasión dedicó a su tierra, e Hijos del calvario, dedicada a las víctimas del conflicto armado y que en 2022 Cruz, junto a la Comisión de la Verdad presentó en su ciudad antes víctimas del conflicto armado de la región.Tras la apertura, las jornadas del festival transcurrieron en medio de músicos de la diáspora que armonizaban la ciudad con un formato de música en las calles donde se presentaron artistas como Afro Fresh, Juliana Valdiri, Phonoclórica, el Cuarteto León Cardona y Tres Palos Ensamble.En simultáneo, músicos locales y de todo el país que visitaron la ciudad, asistieron a clases magistrales, talleres y conversatorios con artistas locales e invitados internacionales. El violinista Samuel Jiménez, por ejemplo, impartió una clase de técnicas y herramientas del violín y desde Francia, el Cuarteto Hermés brindó un taller a maestros sobre música de cámara.También, los escenarios musicales, la geografía de la ciudad y las vías de acceso fueron uno de los temas principales en un conversatorio dedicado a la diáspora musical del Tolima, en el que participaron Santiago Cruz, Jona Camacho, Ana Ospina, Germán Gutierréz, Samuel Jiménez y Juan Felipe Loaiza, todos músicos que han llevado su talento a otras ciudades del mundo.El festival tuvo como escenarios principales el panóptico, el Conservatorio del Tolima y el Teatro Tolima, lo que trae a colación la conservación y mantenimiento de los escenarios dispuestos para acoger las presentaciones musicales.La Concha Acústica dedicada al dueto de los maestros Darío Garzón y Eduardo Collazos, durante los últimos años ha sido la gran ausente de este tipo de eventos debido al deterioro y abandono en el que se encuentra. Sin embargo, se espera que la para la próxima edición del Festival Folclórico Colombiano esté en condiciones de recibir alrededor de cinco mil espectadores, según lo anunciado por la alcaldesa Johana Aranda el pasado 2 de julio en rueda de prensa.El jazz y la diversidad artística en IbaguéA los pasillos, bambucos y torbellinos que con su ritmo sacudieron los ocobos de flores rosadas y lilas se sumaron otros géneros que invitaron a públicos diversos a disfrutar de la música. Pasando por música clásica, rap, dancehall y un espacio especial para el jazz, el festival ofreció música para todos los gustos.“Uno de los rasgos diferenciales del Ibagué Festival es su apuesta por el encuentro entre las músicas y las demás expresiones artísticas. Es un diálogo intertextual entre lenguajes que articulan con autonomía sus estéticas, sus técnicas y sus formas expresivas”, aseguró Mantilla.Los hermanos Pimienta ambientaron el panóptico con La Etnnia que llenó el escenario de energía urbana y rap que, junto a las presentaciones de artistas locales como Afro Fresh y Phonoclórica, llevaron los ritmos locales a otros géneros y regiones.Por otro lado, el jazz estuvo presente a lo largo de los cuatro días, con la presentación del libro Kind of Blue, del periodista y melómano Juan Carlos Garay, y con la participación especial de la banda originaria de Nueva Orleans, Luisiana, los New Orleans Jazz Vipers. Con el ritmo de canciones de Fats Waller, Con Conrad, Duke Ellington, entre otros músicos aclamados en el jazz, acompañaron el inicio y el cierre del festival, además de liderar dos de los talleres para músicos en el Conservatorio del Tolima.César Augusto Zambrano, el maestro homenajeado en su natal IbaguéTras una presentación magistral del Cuarteto Hermès, visitantes desde Francia, el sábado fue, sin duda, el día más emotivo del evento, en el que se rindió homenaje al maestro César Augusto Zambrano, por parte de la Fundación Salvi, principal organizadora del festival.Al maestro, músicos, amigos y organizadores le agradecieron su compromiso indeclinable con el desarrollo cultural y educativo de su región. Pues, por destacar algunos hitos, Zambrano es el fundador del Concurso Internacional de Violín Frank Preuss, de la orquesta sinfónica, el coro y el doble cuarteto de la Universidad del Tolima, del coro de cámara de la ciudad de Ibagué, del sistema coral infantil y la dirección musical de la Fundación Musical de Colombia.Además, el homenaje contó con un concierto de sus obras en el que se destacó la presentación de la rapsodia Señora del paisaje, un homenaje a Leonorcita Buenaventura, conocida como la “novia de Ibagué”, artista amante de su ciudad a la que le dedicó su obra.“Esto es soñar con los ojos abiertos, nunca hice música para esperar estos reconocimientos tan calurosos y sinceros. Ha sido un camino de dedicar una vida a servir, a acercarse a la gente y siempre trabajar para que todo lo que sea importante para la música también sea importante para toda la gente”, agradeció Zambrano.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Desde el 25 de julio se está llevando a cabo la celebración de los 500 años de la fundación de la ciudad de Santa Marta, algunos sectores de la ciudad no estuvieron de acuerdo con las declaraciones del ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes, Juan David Correa, quien habló acerca de conquista y esclavitud."Para nosotros, por Santa Marta no entró la civilización, ni la religión fue un bien para el país, ni el idioma castellano fue un bien para el país", afirmó el ministro, quien agregó: "Para nosotros, lo que va a ocurrir no es una celebración (...) Hubo un enfrentamiento y una colonización, y eso nos hace pensar en las personas que estaban en el territorio antes de que esas otras llegaran".El alcalde de Santa Marta, Carlos Pinedo Cuello, contestó a sus palabras por la red social X, donde mencionó: “desde Santa Marta rechazamos con firmeza las desafortunadas declaraciones del Ministro de Cultura, Juan David Correa, quien ha mostrado una grave falta de respeto hacia nuestra ciudad, su historia y su gente. La celebración de los 500 años de Santa Marta no es solo un evento local; es un hito de importancia nacional e internacional. Menospreciar los aspectos históricos de nuestra fundación es una ofensa no solo para los samarios, sino para todos los colombianos”.La Academia de Historia del Magdalena también se pronunció al respecto: "esta Academia celebrará la hispanidad y seguirá destacando de la ciudad su historia, su papel importante como puerto principal para la exploración y conquista de los territorios internos y lo que históricamente representó para el Reino de España".💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.En el 2020 se instauró la ley 2058 en la que se decreta a la Nación como partícipe de la celebración del Quinto Centenario de Fundación de la Ciudad de Santa Marta, “ La Nación hace un reconocimiento al Distrito Turístico e Histórico de Santa Marta, declarado patrimonio cultural de la Nación por ser la ciudad sobreviviente más antigua fundada por España en América del Sur y en razón a su riqueza biogeográfica y ecológica, a su diversidad cultural con presencia de los pueblos indígenas Kogui, Arhuaca, Arzaria, Chimila y Wayúu y de población afrocolombiana”, se lee en esta ley.Correa hizo alusión a esta ley y presentó una nueva carta en la que vuelve a mencionar la colonización y la participación de las comunidades en el quinto centenario: “entre otras cosas esa comisión no ha vuelto a sesionar porque uno de sus artículos fue demandado ante la Corte Constitucional (Sentencia C- 189 de 2022) por las comunidades negras, afrodescendientes, raizales y palenqueros por considerar que se había vulnerado sus derechos de participación. La corte tuteló sus derechos y determinó que ellos también integrarían la comisión, la cual se hizo extensiva a los pueblos indígenas, reconociendo de esta manera el lugar fundamental en esta historia.En esta carta el ministro resalta que no debe ser una celebración sino una conmemoración sin dejar de revisar el pasado y el comienzo de la fundación de la ciudad: “pensar en una conmemoración, 500 años después, es entonces un gesto de reconocimiento hacia pueblos indígenas y afrodescendientes que no sólo resistieron largos siglos de colonización, sino que también durante gran parte de la República han hecho esfuerzos para no ser condenados a habitar en los terrenos de la otredad”.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"No hay una estrategia, yo le llamo (a la política lingüista del Gobierno) un proceso confeti: hago aquí un concurso de poesía en náhuatl, aquí publico una novela en zapoteco (...) Pero no hay una estrategia integral", explica Aguilar, quien se muestra crítica con las políticas de protección de las lenguas indígenas por parte del presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador (2018-2024).Para la lingüista es significativo que el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas "cuente con tres veces menos presupuesto que lo que contó en 2021 la oficina para promover el béisbol", lo que en su opinión deja a las claras la falta de voluntad política al respecto.En el gabinete que ha anunciado la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, quien asumirá el próximo 1 de octubre, Aguilar sí ve algunos signos más positivos de cara al próximo sexenio. "Ahora con Claudia hay personas cerca que, creo, podrían influir para hacer una política lingüística necesaria", afirma la escritora.La pérdida de lenguas originarias en MéxicoSegún explica Aguilar, actualmente en México existen 68 lenguas distintas, que a su vez se subdividen en matices regionales creando hasta 365 sistemas lingüísticos diferentes, lo que muestra la riqueza lingüística del país, que no obstante se ha visto enormemente deteriorada, especialmente tras la independencia mexicana de España en 1821."Se calcula que para 1820 aproximadamente entre el 65 % y el 70 % de la población hablaba una lengua indígena y en la actualidad es el 6,1 %", asegura la escritora.Aguilar achaca esta enorme reducción a la construcción nacional de México, ya que parte del proceso de creación del Estado-nación es la disolución de las diferencias identitarias, principalmente las lenguas."En el caso de México la idea fue imponer la lengua de una minoría criolla que era la que hablaba castellano, como única lengua (...) básicamente para construir la idea de una identidad mestiza era importante que dejaran esas identidades y esas pertenencias a pueblos y naciones que no eran del Estado mexicano", explica.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.La propia Yásnaya, cuyo idioma natal es el mixe (lengua originaria del occidental estado mexicano de Oaxaca), ha experimentado en primera persona la pérdida paulatina de su lengua."Siempre digo que es muy triste ver en primera fila cómo va muriendo tu lengua", expresa la escritora, al asegurar que el proceso de deterioro de estas lenguas es más notorio entre la población joven."Si ves la tasa de transmisión, claramente ves que la población infantil ya no está jugando entre ella en mixe", señala la lingüista, que ve una gran diferencia entre niños y adultos de la tercera edad, entre quienes todavía abunda la comunicación en mixe.En opinión de Aguilar, la protección y conservación de las lenguas prehispánicas pasa por una menor intervención del estado en la educación de las comunidades indígenas."Pasa por la autonomía, que los pueblos (originarios) puedan tener sus propios sistemas educativos", sostiene la escritora, que defiende el derecho de las comunidades indígenas a la autogestión en este y otros aspectos sociales y políticos.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.