Están creando un diccionario digital inglés-apache, uno de varios proyectos que pretende preservar idiomas indígenas en riesgo de desaparecer en Estados Unidos.Trabajan con el programa informático "Rapid Word Collection" (RWC), cuyo algoritmo escanea las bases de datos escritas y de audio del apache para encontrar palabras olvidadas, definirlas, traducirlas al inglés, pronunciarlas con el tono adecuado y grabarlas.Todo sirve para volver a la vida estos idiomas prácticamente olvidados: libros infantiles, aplicaciones para teléfonos o páginas web. Joycelene Johnson, una profesora de 68 años, y dos colegas se divierten validando la palabra "kapas" que significa papa o patata.Estas "aplicaciones de idioma escrito están bien para los estudiantes que disponen de una colección" de vocabulario y gramática en apache, explica Johnson. En las escuelas bilingües de su reserva hay "un millar de estudiantes" pero "una sola persona en clase de primaria es capaz de hablarlo con fluidez".Este taller sobre lengua apache es uno de tantos que ofrece la Conferencia Internacional para la Documentación, Educación y Revitalización de Lenguas Indígenas (ICILDER) que se celebró el fin de semana pasado en la Universidad de Indiana, en el centro de Estados Unidos.Una cuarentena de pueblos originarios procedentes de Estados Unidos, Canadá, México, Brasil, Perú y Nueva Zelanda, entre otros, se reunieron en la bucólica ciudad de Bloomington, con motivo del Día Internacional de los Pueblos Indígenas en Estados Unidos, que cuenta con 6,8 millones de nativos, el 2% de la población.Lingüistas, profesores, estudiantes, investigadores y caciques debatieron sobre la recuperación de sus idiomas orales, conscientes de la magnitud de la catástrofe.4.500 lenguas amenazadasDe entre las más de 6.000 lenguas censadas en el mundo, cerca de la mitad están en peligro de extinción y 1.500 amenazadas con su desaparición inmediata, según un estudio de 2021 del que Unesco se hizo eco en diciembre pasado.La ONG The Language Conservancy (TLC), que trabaja en la protección de medio centenar de idiomas autóctonos en Estados Unidos, Canadá, México y Australia, desarrolló el programa informático RWC para crear diccionarios con el fin de preservar este patrimonio.Con un presupuesto de tres millones de dólares procedentes de fondos públicos y privados, TLC crea regularmente talleres de grupos integrados por indígenas y lingüistas blancos.Cada grupo "registra 150 palabras al día, por lo que con diez grupos son 1.500 palabras y 15.000 cada diez días" para cada lengua, explica Wilhelm Meya, presidente fundador desde 2005 de TLC y coorganizador de la ICILDER."La tecnología nos permite salvar lenguas mucho más rápido que antes. Partiendo de cero, ahora podemos crear un diccionario en 12 meses, frente a los 20 años de antes", asegura este antropólogo estadounidense de 51 años nacido en Austria, que se define a sí mismo como un "emprendedor social", que se ha rodeado de lingüistas. Y es que el tiempo apremia.En la mayor parte de los países con pueblos originarios, las lenguas nativas se están extinguiendo rápidamente con la muerte de los últimos hablantes. Estados Unidos es el país con mayor número de lenguas amenazadas de muerte, 143 de 219, seguido de Canadá, con 75 de 94, según TLC.Antes de los europeosAntes de la llegada de los europeos hace 500 años, en el territorio estadounidense se hablaban cerca de 500 lenguas indígenas. Hoy en día, "la situación está llegando realmente a un nivel de crisis y emergencia, ya que la edad media de los últimos hablantes es de 75 años", advierte Meya.Sólo quedan "unos pocos años para registrar estas lenguas", advierte el experto, que distribuye gratuitamente sus diccionarios, libros escolares y métodos en las instituciones educativas públicas de Estados Unidos, incluyendo las reservas amerindias.Jacob Chávez, un estudiante cheroqui de 26 años, se declara "encantado" con estas nuevas tecnologías porque su lengua puede "desarrollarse" entre los jóvenes "mucho más rápido y durante más tiempo" que en el pasado.La profesora de lengua taltán Pauline Hawkins se siente "realmente emocionada y feliz de ver este diccionario" digital, después de que sus padres contribuyeron al primer diccionario en papel en la década de 1980.Sin embargo, su colega Dannielle North King, de 51 años, de la tribu chemehuevi o nuwuvi, critica el "método occidental" de transcribir su "lengua indígena oral y hablada" a la forma escrita.En 2022, Meya fue blanco de las críticas de un funcionario lakota por los derechos de autor de su trabajo de edición. "No poseemos los derechos de autor ni las direcciones IP de las lenguas sobre las que trabajamos", responde el responsable de TLC.En cuanto al riesgo de ser acusado de "apropiación cultural", Meya responde: "Si yo fuera un médico blanco con un paciente indígena, ¿se me impediría tratarle por no ser indígena?". "Las lenguas no son una cuestión racial", sino el "fundamento de la identidad, la nación y de la soberanía", zanja.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El Día de la Raza se celebra el 12 de octubre en muchos países de América Latina, así como en España. Esta fecha conmemora el encuentro entre dos mundos, el europeo y el americano, que tuvo lugar el 12 de octubre de 1492, cuando el navegante genovés Cristóbal Colón, en representación de los Reyes Católicos de España, llegó a lo que hoy conocemos como América.Sin embargo, es importante destacar que la celebración del Día de la Raza es un tema controversial y ha evolucionado a lo largo de los años. Originalmente, se estableció como el "Día de la Raza" para celebrar la herencia y la mezcla de razas y culturas que se produjo a raíz del encuentro entre Europa y América. En algunas regiones, también se conoce como el Día de la Hispanidad.Hoy en día, el término "Día de la Raza" ha sido criticado por su connotación eurocéntrica y por el impacto negativo que tuvo el contacto entre culturas en términos de la colonización, opresión y desplazamiento de poblaciones indígenas. Por lo tanto, en varios lugares, la celebración se ha transformado en una oportunidad para reflexionar sobre la diversidad cultural y étnica en América y promover la valoración de las culturas indígenas y la lucha por los derechos de los pueblos originarios. En algunos países, el 12 de octubre se celebra como el Día de la Resistencia Indígena o el Día de la Descolonización, en lugar del Día de la Raza.Desde la perspectiva crítica el peruano Anibal Quijano, la idea de raza es el instrumento de dominación social, que se produce en el comienzo de la formación de América y del capitalismo. Este criterio de clasificación social universal distribuye las identidades, por una parte, en un campo social y por el otro, geo cultural. En ese sentido, la alteridad (“Indio”, “Negro”), lo “Blanco” y “Mestizo”. Y, “América”, “Europa, “Africa”. Sobre estas bases se configuran esquemas de distribución del trabajo e intercambio, donde el poder está en el eurocentramiento capitalista.De igual forma, a esta conceptualización de raza, pensadoras latinoamericanas retoman un concepto feminista de interseccionalidad, pero lo aterrizan a Latinoamérica. Este articula las nociones de raza, género y clase, de forma situada y sugiere pensar otras formas de desigualdad propias del mundo contemporáneo, como lo plantea Mara Viveros, la nacionalidad, la religión y la diversidad funcional y la religión. No olvide sintonizar la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar
En las afueras de Pucallpa, la ciudad más grande de la Amazonía peruana, se encuentra el laboratorio Chana, una estación científica dedicada a las ciencias del lenguaje y la interculturalidad."Es un lugar de trabajo, de encuentro y de unión en el cual investigadores, estudiantes, indígenas y miembros de comunidades pueden venir y trabajar en proyectos de investigación y desarrollo social orientados a conocer mejor y preservar y revitalizar la diversidad lingüística de nuestra Amazonía", explica a EFE el fundador de Chana, Roberto Zariquiey.La sofisticación de cámaras y tecnología contrasta con las humildes paredes de madera y ladrillos de este centro, situado en la comunidad de San José de Yarinacocha y donde se investigarán las 20 lenguas indígenas que se hablan en la cuenca del río Ucayali a través de talleres, estudios y diversos programas.Por ejemplo, el programa informático en el que participa Edelvina permite conocer mejor el proceso de construcción del lenguaje shipibo, gracias a los movimientos de los ojos captados por la cámara, que indican cómo el cerebro percibe una imagen y cómo esto influye a la hora de formar una oración, pistas que ayudarán a conocer mejor esta lengua para su posterior enseñanza.La estación cuenta con el apoyo de la Pontificia Universidad Católica de Perú (PUCP), la Universidad de Zurich y el Instituto Max Planck de Alemania."Trabajar con comunidades indígenas, en este caso amazónicas, en un país como el nuestro donde hay una alta concentración de familias lingüísticas es una apuesta estratégica importante. Significa la posibilidad de conocer mejor estas lenguas, su revitalización, y al mismo tiempo fortalecer la identidad de los grupos amazónicos que las practican", indica el vicerrector de Investigación de la PUCP, Aldo Panfichi.Acercar a la academia"Está muy bien conocer, incrementar nuestro conocimiento sobre la diversidad lingüística mundial, pero por otro lado, nos interesa preservarla, promoverla. Y eso se tiene que hacer siempre en coordinación con las organizaciones locales, con las comunidades y de acuerdo a sus demandas, sus necesidades, sus intereses", indica Zariquiey.El investigador refiere que el conocimiento lingüístico es en ocasiones algo abstracto, pero este puede usarse para implementar políticas educativas y elaborar materiales educativos."Nuestro objetivo es que el conocimiento que construyamos a través de métodos de lingüística, de psicolingüística, etcétera, pueda emplearse para entender cómo los niños están aprendiendo los idiomas, cómo los adultos procesan el lenguaje, cómo son esas lenguas, qué características tienen", relata emocionado.En ese sentido, la investigación colaborativa que se desarrollará en Chana dará lugar a conocimientos para preparar mejor a profesores bilingües de la región que imparten la educación primaria en español y otras lenguas indígenas, lo que es un impacto directo en la mejora de la enseñanza de los docentes, explica Panfichi.Una verdadera colaboraciónLa lingüista Pilar Valenzuela reflexiona a las puertas de la estación que cuando se hacen investigaciones de lenguas indígenas en Perú y viene gente de fuera "lamentablemente entran con una visa de turista y llegan hasta las comunidades indígenas, se relacionan, hacen su trabajo, recogen su información y luego se van. Hacen sus tesis, se gradúan, y las publicaciones son muy técnicas, no son accesibles y listo, ya no los vemos más". "Esto más bien es extraer información del pueblo y luego los resultados nunca llegan", sostiene.Explica que hay muchas investigaciones que dan resultados muy interesantes, pero que no llegan a la gente, algo en lo que puede contribuir Chana, al ser un lugar de encuentro de investigadores que informen de lo que están haciendo y luego compartan sus resultados.Una colaboración que conjuga a las propias comunidades con universidades locales, nacionales y también internacionales y, en este sentido, Panfichi señala que ya hay varias instituciones educativas europeas y estadounidenses interesadas en la estación, porque las posibilidades de este proyecto son "enormes".El nombre de este centro hace referencia al ave chana, y Zariquiey relata que se trata de una palabra que está en todas las lenguas pano, el grupo de lenguas de esta parte de la Amazonía, y que se remonta al protopano, la madre de todas ellas."Es un ave que puede imitar los cantos de otras aves, entonces los shipibos y otros pueblos siempre han asociado al chana con inteligencia y con diversidad de lenguas. Y bueno, ese es un poco el espíritu de Chana: ciencia, inteligencia, reflexión y multilingüismo", concluye el experto.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Nacieron entre hilos y telares; las tejedoras de los pueblos originarios de Argentina se han transformado en voceras del planeta. En sus artesanías, retratan las enseñanzas de generaciones de mujeres para mantener viva su cultura ancestral y dejar un pedazo de historia con cada puntada.Celeste Balero es una de ellas. Se define como cuarta generación de tejedores tradicionales de Jujuy, provincia norteña que limita con Bolivia. Trabaja las fibras de llama desde que tiene memoria y actualmente el "negocio familiar" se transformó en una comunidad donde participan 18 personas."Lo que sostiene el tejido es mucho más profundo que un saber. Es una cuestión espiritual, cargado de significados comunitarios y la herencia que nosotros recibimos tiene mucho que ver con la conexión y el equilibrio con la naturaleza", explica a EFE la joven artesana.Balero representa a "Tejedores Andinos", una colectividad que emplea las técnicas textiles de sus antepasados con telas naturales, funcionando como recordatorio catalizador de todo lo que brinda la tierra. "Tratamos de seguir recordando de las mismas maneras que lo hicieron nuestros ancestros, de manera colectiva y comunitaria", agrega.A lo largo de los años, se han adaptado de forma eficiente a la realidad tecnológica que rige el mercado actual. Más allá de la necesidad de sobrevivir, un porcentaje de las ganancias se destinan a que su comunidad continúe creciendo; así aseguran sostén emocional y económico."Plasmamos la interpretación de la naturaleza en nuestros tejidos. Somos la voz de la Tierra y a través de nosotros se puede contar ese mensaje de resistencia para que no olvidemos quién sostiene nuestra existencia", indica la joven.Muchas tejedoras han recibido el oficio de sus madres o abuelas, y aunque no lo ejerzan, Balero insiste en que las mujeres descendientes de indígenas están volviendo a las raíces para "reivindicar su poder y su feminidad a través del hacer". Algo que demostraron al participar del 'London Craft Week' este año.Algo similar sucede con Noelia Naporichi, originaria Qom de la ciudad de Castelli, en la provincia del Chaco, en el norte del país, donde se encuentran las mayores comunidades de los pueblos Tobas y Wichí. Hace un tiempo se mudó a Rosario (Santa Fe) buscando mejores oportunidades laborales y educativas, aunque se mantiene en contacto con sus cimientos natales.Junto a un colectivo de 15 mujeres indígenas, presentó por primera vez sus obras hechas en hoja de palma o carandillo, una planta nativa ancestral muy utilizada por los Qom, en las cuales trasmiten sus saberes por medio de manualidades relacionadas con el arte de la cestería.Teje con las emociones y para dar un mensaje que puede conllevar un "agradecimiento" o un "regalo de bienvenida". Con sus productos, representa el ecosistema de los territorios que habitaron sus antepasados y deja una parte de ellos en sus trabajos con la idea de que la sociedad los conozca y resguarde.Hoy, su principal materia prima está amenazada por la expansión del hombre y el cambio climático. "La hoja de palma nos da de comer, nos permite permanecer en el territorio y llevar el conocimiento del tejido hasta Buenos Aires", aclara a EFE Naporichi."Dejamos un pedazo de nuestro territorio y de nuestro saber, que viene de hace muchos años en linajes preexistentes de Argentina. Es algo hermoso para nuestro pueblo y para que sienta que no tiene un valor específico, porque es una transmisión de muchas estirpes. No es una simple cartera, es una transmutación de energía para la persona que se lo lleva", señala la mujer Qom.Chicas como Naporichi salieron de sus ciudades natales en pos de mejores oportunidades, pero siempre llevando sus orígenes consigo. De hecho, tienen hogares comunitarios construidos por ellas, que funcionan para reforzar sus conocimientos y brindarse contención ante problemas financieros o sociales.En todo esto pensó la curadora y gestora intercultural Andrei Fernández cuando agrupó recientemente en arteba, feria de arte contemporáneo anual de Buenos Aires, "el sentido migrante" del arte y "su impacto social".Oriunda de la norteña provincia de Salta, que linda con Jujuy, eligió propuestas aunadas con la voluntad de transformar los contextos de las comunidades indígenas."Esos objetos, por ser utilitarios, no tienen un valor menor que otro artístico, sino que es una forma de llevar el arte y esos conocimientos. En el caso de los ornamentales, hacen que sean parte de tu vida cotidiana de una forma mucho más directa de lo que a veces entendemos. El arte puede convivir con nosotros", afirma a EFE.Para ellas, presentarse en la feria es una manera de introducir a la gente que ignora el arte indígena y dar voz a parientes lejanos que, durante milenios, fueron obligados al ostracismo: demostrar que son parte de la rica cultura que integra Argentina.No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar
Desde que el Centro Nacional de las Artes Delia Zapata Olivella abrió sus puertas, ha sido pensado como un punto de encuentro abierto, de creación y de diálogo con los territorios y el mundo. Gran parte de su enfoque, su misión y el trabajo colectivo es con la diversidad de poblaciones colombianas. Y es justamente por esto que a partir del 9 de agosto se realizará En El Delia: el Primer Encuentro de Pueblos Originarios Abya Yala."La programación, pensada en el lema “sanar el territorio”, busca dialogar sobre la conexión sagrada entre los pueblos indígenas y la tierra, y enfatiza en la importancia de los derechos colectivos de los pueblos para la tierra y los territorios como una forma efectiva de proteger los ecosistemas críticos, las vías fluviales y la diversidad biológica", se menciona en un comunicado.Entre el 9 y el 13 de agosto, las distintas salas del CNA servirán como escenarios para colectivos culturales, encuentros de la palabra, talleres de saberes, performances e instalaciones y conciertos con trece pueblos indígenas participantes, entre ellos los pueblos Wayuú, Arhuacos, Gunadule, Murui del Amazonas, Muiscas, Emberas, Kamentsá, Wiwas, Kankuamos y más.El 9 de agosto se dará inicio al encuentro en la Plazoleta del CNA con fuego ceremonial, en el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas.Para Iván Benavides, director general del CNA: “más allá de ser simplemente un evento artístico, es hacer un reconocimiento a la cultura, los saberes, la diversidad y la importancia de estos saberes en este momento histórico de crisis, tanto por el cambio climático como por una crisis de modelo civilizatorio, y creemos que los pueblos indígenas tienen mucho que aportar”, señala.Dentro del encuentro habrá dos ensambles, uno de ellos será Danzantes del Viento, “una creación colectiva que si bien representa lo que se podría llamar una obra teatro, en la concepción de los pueblos originarios no existe tal expresión, pero sí es una traducción o puesta en escena donde hacemos una narrativa creada con ellos a partir de la palabra, la danza y la música: una gran triada donde ellos tienen mucho poder”, explica Benavides.También habrá un laboratorio creativo musical que resultará en el Ensamble Paleofuturista que, como detalla el director: “así como la experiencia con Develaciones, la obra que hicimos para la Comisión de la Verdad con artistas y colectivos culturales, esta vez habrá otro ensamble intercultural con Mucho Indio y con músicos invitados del pueblo Kicwha y del Pueblo Tubú”. Todos ellos escogidos a través de convocatoria para armar un gran ensamble.En el encuentro participarán artistas plásticos indígenas como Julieth Morales y Edinson Quiñones, con propuestas artísticas como performances e instalaciones que están proyectándose a nivel nacional e internacional. Los encuentros de la palabra han sido propuestas de sabedores y sabedoras de diferentes pueblos del territorio nacional, quienes realizan acciones de sanación a través de los saberes ancestrales.Entre las propuestas se destacan mujeres sanadoras reconocidas por el vínculo con el cuerpo y el territorio a través del canto, la danza y el tejido. Por otro lado, habrá una franja de talleres en su mayoría, propuestos y diseñados por los propios cabildos indígenas y se han hecho en conversación con organizaciones y cabildos que los representan en la ciudad de Bogotá. Como invitado especial de esta franja estará el Sabedor Gunadule Abadio Green quien ofrecerá un taller práctico sobre la semilla como sanadora de la vida."Con estos espacios y manifestaciones artísticas propias e inspiradas en los pueblos indígenas se busca acercar de manera profunda a su cosmovisión, fomentar un mayor entendimiento y apreciación de sus saberes y de la diversidad cultural de América Latina, así como generar reflexiones sobre la importancia de la conexión sagrada entre las comunidades indígenas y la tierra para contribuir a la valoración y preservación de nuestras culturas y tradiciones ancestrales", termina el comunicado. La cita es en el Centro Nacional de las Artes del 9 al 13 de agosto, si desea puede consultar la programación en este enlace. No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Mediante la cuenta @juliotzin76, el maestro del municipio Amaxac de Guerrero enseña el idioma nativo de su abuela, y busca que las nuevas generaciones valoren las raíces indígenas de su estado.El profesor compartió con EFE que durante la pandemia por covid-19 observaba a sus sobrinos grabar sus bailes graciosos, con lo que descubrió TikTok y la gran cantidad de "videos basura” en la red. Por ello, ideó un plan para subir materiales interesantes, prácticos y educativos.“Siempre tuve la curiosidad de aprender y hablar náhuatl, por lo que comencé a grabar videos con los números y el abecedario, es decir, desde lo básico, porque era mi sueño mantener viva la lengua originaria de mí abuela, quien me decía muchas cosas que yo no entendía. Cuando crecí me di cuenta que tan groserías y palabras con cariño”, narró.Subió sus primeros videos y recibió comentarios ofensivos, pero él se mantuvo firme y avanzó con sus clases. El docente argumentó que más de la mitad de los municipios de su estado hablan esta lengua, por lo que debe mantenerse vigente. Se acercó a una comunidad cercana que habla náhuatl para practicar, mejorar su pronunciación y su interacción. “Todo lo aprendido tenía que compartirlo, por lo que comencé a incursionar en el TikTok con fines educativos”, reiteró.Proteger los idiomas indígenas de México Los videos de enseñanza del náhuatl resultan una novedad en México, uno de los países con más población indígena de América, con más de 23 millones de personas que se asumen como tal entre un total de 126 millones de habitantes, según el último censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).De ellas, casi 7,4 millones de personas hablan alguna lengua indígena, el 6 % de la población total, con el náhuatl como la principal, con más de 1,65 millones de hablantes.En poco tiempo, Julio Hernández tiene ahora más de 167.000 seguidores, y ha logrado una comunidad de personas interesadas de diferentes estados y hasta del extranjero.“Está el clásico alumno que se interesa en todo y quiere saber más, está la persona que quiere aprender a decir algunas frases para poder comunicarse, los extranjeros tienen mucha curiosidad y los migrantes buscan conocer la lengua para el día que regresen a territorio mexicano”, expuso.El maestro enfatizó que sus tendencias se apegan a la modernidad, pero combina el entretenimiento y la enseñanza.Su mayor reto es la instalación de un Centro de Enseñanza de Lenguas Originarias en su natal Tlaxcala con la intención de fomentar la preservación de este idioma.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Vito Apüshana es autor de los libros Contrabandeo sueños con alijunas cercanos (1992); En las hondonadas maternas de la piel (2010). Sus poemas han aparecido en revistas especializadas como Número (Bogotá), Casa de las Américas (La Habana), Le Poésie (París), y Americas Quarterly (New York).Miedo alijunaMañana llegarán nuevamente los aliijunay traerán más preguntas acerca de nosotros,y nada sabrán sino escuchan el silencio de nuestros muertosen cada sonido de nuestras vidas…y nada se llevarán sino cuelgan sus miedos en el interior de lasmochilas familiaresy reciban, de nuestro temblor, el asombro de la madrugada…junto al temor de los espantos.Sümüshe’e alijunaAnteena watta’a nachukuwa’a na alijunakanairuaje ko’omüinjeerü natuma nasakiijüin wanainje nnojoleerü kasain natijaain o’u wachiki müle aka nnojorülenaapajüin ko’utüin na waamakakanairuasünainwai shi’ira tü wakuwa’ipakalüirua…Je nnojoleerü kasain nalü’üjain müle aka nnojorüle nakacherüin tünamüshe’ekaa sulu’utü sususiakalüirua apüshiiJe kamüinjeena, wamüshe’enainjee…tü ainkia aa’in maaliajatkaa süma’alee sheema tü mmarülakalüirua.Oscuridad-luzVengo de recibir un cargamento de vocesenviado por Jouktai,el andariego viento del Este.Vengo de entregar, al silencio de mis mayores,un tejido de sueñossudorosos y encendidos.Ahora contemplo, entre el sol del atardecery el rostro de mi mujer,la roja celebración del estar vivoPiushi-warattüiEntushi taya sunainje apawaa wanee chiso’ui kemeeriasnuluwatala Jouktai,chi kakuwaika’i.Entushi taya sunainje apaa, kakuai’pa naatamulo’uyusekana,wanee lapü einushiiruawalatshishi sumaa warattulin.Joolu’u teiraka amüirü, nikiima ka’i ka’i,otta so’upünaa tü tawayüse,tü talataakaa ishoitakalü maain tü kataakalü o’u.Vivir-morirCrecemos, como árboles, en el interiorde la huella de nuestros antepasados.Vivimos, como arañas, en el tejido del rincón materno.Amamos siempre a orillas de la sed.Soñamos allá, entre Kashi y Ka’i, el Luna y el Sol,en los predios de los espíritus.Morimos como si siguiéramos vivos.Kataa o’u-outaaMulo’ushii waya, müin aka saa’in wunu’usüchikanainru’u tü wapüshi sümaiwajatkalüirua.Kato’una waya, müin aka saa’in alekerü, süsheke’eru’u shi’nüintü weikaa.Acheküshii waya weinshi sotpa’a tü miaasükaa.A’lapujaashii waya cha’aya, sainküin Kashikaa je Ka’ikai,suumainpa’a tü asheyuuwaakalüirua.Outushii waya müin aka katakai wo’u.Locura diariaUn aire silba, en esta noche,sobre el tronco oscurocerca de la enramada.La abuela Maachonna aseguraque es el espíritu de mi joven amigo,de Maurepa, recién muerto,que me vigila para que yo no salgadel camino abandonado…Jo’ukaijatü mamainaAsirajüsü wanee joutai jaa’u aikaa tü,jaa’uwunu’usa’a pi’uushikaaja’atou lumakaa.Jüpansaajüin tü oushuukoo Ma´achonnaJian nüsheyuu chi tatünajutü jima’ikai,tü Maurepa, outakai.Ni ´raja oo’uchi tayaa juulia toju’itajüinJulia tü apünaaushikaa jüpüne…PastoresSomos pastoresSomos los hombres que viven en el mundo de las sendas.Nosotros, también, apacentamos,también regresamos a un redil… y nos amamantan.Y somos leche del sueño, carne de la fiesta… sangre del adiós.Aquí, en nuestro entorno,la vida nos pastorea.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Venezuela y Colombia comparten una frontera común al norte de ambos países. Esta frontera es el lugar de asentamientodel pueblo indígena más numeroso que existe en las dos naciones: el wayúu. Según el Censo del DepartamentoAdministrativoNacional de Estadística (DANE) realizado en 2021, en Colombia habitan 380.460 personas autorreconocidas como wayúu, mientras en Venezuela esta población indígena es de 413.437, de acuerdo con el Censo Nacional de Estadística de 2011.La situación del territorio entre ambos países se ha caracterizado por las necesidades humanitarias que enfrenta el pueblowayúu. Históricamente, los wayúu se han enfrentado a la pobreza, la falta de medios de subsistencia y la carencia de agua potable y salud de calidad, entre otras situaciones que dificultan el desarrollo de la vida en medio de su vasto territorio desértico que ocupa25.000 kilómetros entre Venezuela y Colombia.La desatención de ambos Estados ha afectado de forma estructural y sistemática los derechos humanos de este pueblo indígena, y a ello se ha sumado la presencia de grupos armados heredados del conflicto armado en Colombia. Los pobladores son muy herméticos sobre la presencia de grupos armados (guerrilla, narcotráfico y contrabandistas) por miedo a represalias, amenazas y hostigamientos, pero se conoce la fuerte presencia del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en zonas de la Guajira. Esta guerrilla, aprovechando la vulnera- bilidad y pobreza de la población, capta a jóvenes para reclutarlos forzosamente en sus filas ohacerlos partícipes de sus negocios ilícitos.Poco han hecho los Estados para garantizar el cumplimiento de los derechos humanos del pueblo wayúu y muchos han sido losproyectos estériles para garantizar la dignidad de sus condiciones de vida. Más recientemente, la situación de derechos humanos ha empeorado por el aumento del flujo migratorio de venezolanos que han decidido marcharse de su país en vista de la emergenciahumanitaria compleja que se vive allí.Del lado venezolano, el municipio de Guajira se ubica en el noroccidente del estado de Zulia, en la frontera con Colombia, yabarca una superficie de 2.370 km2. La capital es Sina- maica y posee cuatro parroquias civiles (unidades político-territoriales en las que se dividen los municipios): Sinamaica, Elías Sánchez Rubio, Guajira y Alta Guajira.En el estado de Zulia, la Comisión para los Derechos Humanos del Estado Zulia (Codhez) se ha encargado de monitorear y documentar la situación de derechos humanos en la región, que presenta características particulares y diferenciadas con respecto a otras entidades del país: es un estado fronterizo, cuenta con una densidad de población mayor y es el hogar del pueblo indígenamás numeroso de Venezuela.Desde Codhez hemos documentado el complicado panorama de los pueblos y las comu- nidades indígenas ubicados en esta zona fronteriza. Mediante visitas, reportes, denuncias y documentación, insistimos en visibilizar la realidad de la población wayúu y llamar la atención del Estado venezolano para que asuma sus responsabilidades constitucionales de proteger los derechoshumanos de los pueblos indígenas y garantizar la permanencia de sus cosmologías y tradiciones ancestrales, que poseen un valor único para la humanidad. No obstante, esta tarea no ha resultado nada sencilla, pues, como veremos, el contexto del territorio presenta graves obstáculos y amenazas para la defensa de los derechos humanos.Como datos que ayudan a vislumbrar el panorama de la zona de Guajira en Venezuela, se destaca que el 98 % de la poblacióndel municipio se encuentra por debajo de la línea de pobreza, mientras que 86 % vive por debajo de la línea de pobreza extrema: es decir, son familias que no cuentan con ingresos para satisfacer sus necesidades más básicas.El municipio de Guajira es epicentro estratégico para el intercambio comercial, industrial y cultural entre Colombia y Venezuela, y es uno de los pasos fronterizos con mayor movilidad humana en Latinoamérica. Es el lugar donde el puebloindígena wayúu ha vivido y donde ha forjado sus costumbres familiares y referentes cosmológicos. Pese a que el territorio posee un valor ancestral, en diciembre de 2010, a través del Decreto 39583 firmado por el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, se impuso el Distrito Militar N.o 1en la Guajira venezolana, con mando central en la localidad de Paraguaipoa. Sin respetar el derecho de los pueblos indígenas a laconsulta previa y a decidir sobre sus territorios originarios, se ordenó la presencia masiva de la Fuerza Armada Nacional, lo quealteró las costumbres ancestrales de la etnia. Bajo el supuesto de atender la emergencia por lluvias en la zona, luchar contra elcontrabando y resguardar la seguridad ciudadana de la población wayúu, se impuso un cerco militar que ha sido el origen deabusos militares, ejecuciones extrajudiciales y, en general, de la pérdida progresiva de la libre determinación y autonomía de lospueblos indígenas.A esa primera ofensa en contra del territorio, en 2015 –por decisión unilateral del gobierno de Nicolás Maduro– se ordenó elcierre de la frontera y de las actividades económicas entre Venezuela y Colombia, debido a desacuerdos diplomáticos. En general, el cierre les causó una grave crisis económica, social y cultural a los wayúu, por cuanto significó la ruptura con su territorio ancestral y la dificultad para ejercer sus actividades comerciales y mantener la conexión con sus familiares. Ante la ausencia estatal, se hicieron más frecuentes las denuncias del aprovechamiento de las personas indígenas pobres y personas no indígenas para redes de trata de personas, negocios ilícitos, contrabando y reclutamiento forzado de parte de grandes grupos criminales yparamilitares.La reanudación de las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Colombia, a partir de agosto de 2022, ha avivado la esperanza e incentiva a poner sobre la mesa la situación de derechos humanos de la Guajira venezolana. Aunque se reactivará oficialmente el intercambio comercial con núcleo en la Troncal del Caribe (Maracaibo-Maicao), los líderes de ambos países no han hablado sobreuna apertura de la frontera enfocada en derechos humanos, a pesar de lo apremiante que resulta el contexto en materia denecesidades humanitarias, y de la seguridad y atención a personas migrantes y refugiadas venezolanas.Hacer posible la defensa de los derechos humanos en este territorio no resulta fácil cuando se tiene en cuenta la existencia de un conjunto de restricciones, limitaciones y vulnerabili- dades a las que están sometidas las organizaciones de la sociedad civil y los defensores de derechos humanos en Venezuela. Se trata de patrones comprobados de comportamientos de hostigamiento contra las defensoras y defensores de derechos humanos por parte de las autoridades venezolanas.Hay patrones relacionados con la vigilancia y el control estatal que llegan a niveles de persecución y hostigamiento, mediante operativos de seguimiento por parte de cuerpos policiales o de inteligencia militar contra quienes realizan denuncias públicas:allanamien- tos, detenciones arbitrarias, acusaciones falsas e infundadas mediante la manipulación de los órganos de justicia, retención de equipos y documentaciones, descalificación y desprestigio contra defensoras y defensores, y precalificaciones de las organizaciones de la sociedad civil con actividades relacionadas con la delincuencia organizada y el terrorismo.La defensa de los derechos humanos: un tejido queresiste El tejido, para los miembros del pueblo wayúu, es más que una práctica cultural: es una herencia de sus ancestros y un mediopara expresar la vida como la sienten y desean. Según su cosmología, Wale’ Kerü («araña tejedora» en idioma wayuunaiki) fue quien enseñó a la mujer wayúu a tejer. Al amanecer de cada día, Wale’ Kerü tenía hechos susus («bolsos» en idioma wayuunaiki) yhamacas para el uso y servicio del pueblo wayúu.La defensa de los derechos humanos en la Guajira se ha tejido como un susu wayúu: con paciencia, hilo tras hilo, gracias al aporte de diversos Wale’ Kerü, defensores de derechos humanos, periodistas locales y liderazgos de hombres y mujeres wayúu desde sus comunidades. El objetivo ha sido documentar lo que se vive en la Guajira, como si se guardara todo en un bolso wayúu y con ello se pudieran hacer las denuncias y exigencias necesarias. Esta tarea se asume como una responsabilidad, pero tambiéncomo un riesgo que, en ocasiones, incluye represiones, persecuciones y detenciones por parte del Gobierno, así como la desprotección frente a la violencia y las amenazas de los grupos armados.Hambre y represión Los factores que inciden en la existencia de condiciones tan complejas en la Guajira son de diversas magnitudes y alcances. Las extremas condiciones de pobreza obligan a que la mayoría de los jóvenes (62 %) en edades comprendidas entre 15 y 24 años noestudien ni trabajen. No hay fuentes dignas de empleo. Los habitantes de sectores como Potrerito se trasladan hasta la frontera conParaguachón para vender agua, chicha o trabajar como carretilleros5; se trata de una zona sumamente peligrosa, controlada por mafias y delincuencia organizada. Otros se dedican a la cría de ovinos y caprinos, a la pesca, al corte de leña o al transporte enmotos. En general, existen limitados medios de vida dignos y seguros.Para comer, las familias wayúu dependen de los programas de alimentación del Gobierno nacional. El programa Mercado deAlimentos (Mercal) y las cajas CLAP (Comités Locales de Abastecimiento y Producción) fueron creados por el Gobierno para abastecer de alimentos de primera necesidad a la población, con precios de bajo costo o de manera gratuita. De acuerdo con la LeyConstitucional que regula el Comité Local de Abastecimiento y Producción, publi- cada en la Gaceta Oficial n.o 41.330, se entregauna caja de alimentos a familias compuestas por cinco personas o menos. La frecuencia de entrega de alimentos es cada quincedías, pero el 79,2 % de las familias zulianas confirmó haberlas adquirido tres o menos veces al año, de acuerdo con datos de Codhez. Además, pese a anunciarse como un programa gratuito, a las familias se les exige un pago de por lo menos 10.000 pesoscolombianos (moneda extranjera en Venezuela, pero que es de libre uso en la zona fronteriza debido a la devaluación del bolívar). La cantidad de comida entregada solo alcanza para unos cuatro días. Estos progra- mas son utilizados por voceros del Gobierno como forma de manipulación política o como instrumento para controlar el voto popular.El hambre en la Guajira no es nueva y durante el inicio del confinamiento por la pandemia el pueblo wayúu protestó por los retrasos en la llegada de los programas alimentarios prome- tidos por el Gobierno y que resultaban ser la única salvación de las familias para alimentarse durante la época de cuarentena extrema.En estas circunstancias, hubo detenciones arbitrarias y violencia policial y militar en medio de las protestas de la población, lo cual demostró la impericia y el desconocimiento de policías, militares y autoridades civiles en materia de contención sanitaria conenfoque de derechos huma- nos y atención a poblaciones indígenas. Por ejemplo, el 12 de abril de 2020 hubo varias protestas enel poblado de Guarero, en las que se reclamaba la falta de alimentos y las fallas generalizadas de los servicios públicos. LaGuardia Nacional Bolivariana (GNB) reprimió fuertemente la protesta y disparó contra la población, hiriendo con un perdigón elrostro de una lideresa wayúu. Esta agresión a una mujer wayúu demuestra el irrespeto y la grave vulneración a sus dere- chos eidentidad por parte de los funcionarios militares estacionados en territorio indígena. En la cosmología wayúu, la mujer es creadorade vida y posee autoridad especial en su familia y en la sociedad para el cuidado de las futuras generaciones, las tradiciones y lascostumbres.Las mujeres wayúu protegen la identidad wayúu y son las responsables de los ritos sagrados y el mantenimiento del bienestarfamiliar.Es muy común ver alcabalas improvisadas por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB), de las que se reportan constantes atropellos y extorsio- nes. La represión es una fórmula común para mantener el control social sobre la población. Este año documentamos, como mostraremos a continuación, un hecho que evidencia la instrumentalización del hambre y las necesidades del pueblo wayúu en favor de la obtención de votos por parte del Gobierno municipal.Uso político del hambre Heberto Ferrer, docente y líder de la Guajira, nos contó la experiencia vivida en el marco de las elecciones internas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV, partido del gobierno de Nicolás Maduro). Los habitantes de las comunidades de La Rita,Cardoncito, Caño Palajama, Botoncillo, Mamoncito, Carraiquilla y Puertecito (899 electores) fueron convocados a tal elección. El 6 de agosto de 2021, día de la instalación de las mesas electorales, los líderes indígenas denunciaron que en los centros de votación solo estabanfuncionarios adscritos a la alcaldía del municipio de Guajira, a cuyo cargo se encuentra Indira Fernández, alcaldesa en ejercicio yrepresentante del PSUV. La otra fuerza política en contienda para las primarias era el Partido Comunista de Venezuela, que notenía ningún tipo de representación. Esta injusta y abusiva situación también fue apoyada por funcionarios del Consejo Nacio- nalElectoral (CNE) y por el componente militar presente, lo que vulneró el derecho de participación de los líderes indígenas eincrementó el disgusto de las comunidades. Ante las constantes quejas de la comunidad, el centro electoral fue desmontado y lamáquina de votación fue desinstalada y retirada en una camioneta de la Alcaldía.Mientras ocurría esto, a la casa del coordinador de la mesa electoral y vocero del consejo comunal de Puertecitos llegaron 600 bolsas con alimentos CLAP para ser distribuidas solamente entre las personas que votaran por la alcaldesa: quien no lo hiciera, no tenía derecho a las bolsas. Decenas de personas wayúu se trasladaron hasta la casa del coordinador para protestar en contra de esta arbitrariedad, pues el programa de alimentación de las cajas CLAP debe distribuirse a todos por igual para garantizar la seguridad alimentaria de la población y en ningún caso debe usarse como un medio para coaccionar el voto. La comunidad estaba decidida a apoderarse de las bolsas y a que no se entregaran como instrumento para acumular votos para la alcaldesa.De acuerdo con Ferrer, los funcionarios de la Alcaldía y los integrantes de la mesa electoral se trasladaron a la casa del coordinador de la mesa electoral para resguardar las bolsas. Al ver la protesta y el descontento de la comunidad, la presidenta de la mesa (aliada de la alcaldesa) hizo una llamada telefónica y al terminar dijo: «Vámonos. Ya recogimos todo, dejémosles las bolsas a estos malditos guajiros muertos de hambre», lo que desencadenó una serie de quejas de la comunidad ante el maltrato.En estas circunstancias, se presentaron funcionarios de la Policía Nacional y fuerzas poli- ciales adscritas a la Alcaldía de la Guajira y la Gobernación de Zulia, incluyendo motorizados del Cuerpo de Policía Bolivariana del estado de Zulia y el Equipo deRespuesta Especial de la Policía del Estado (que persigue a los criminales más peligrosos). La represión en contra de la comunidad culminó en horas de la noche. A las 11:00 p. m. llegó un camión de la Alcaldía de la Guajira para llevarse las bolsas (supuestamente para venderlas), pero la presión de la comunidad logró que estas fueran entregadas a los votantes.Estos hechos también fueron reseñados por periodistas locales y medios de comunicación nacionales. «En procesos de elecciones pasados llevaban la comida y quien votaba recibía su bolsa, los habitantes de Los Puertecitos al este de Sinamaica#Venezuela #Zulia se cansaron de eso y enfrentaron a quienes hacen esa práctica, hay lesionados», denunció el periodista Lenin Danieri, vía Twitter6. Asimismo, El Nacional reportó que los habitantes de Los Puerte- citos se cansaron de las promesas de los dirigentes y se enfrentaron a quienes en procesos de elecciones llevaban bolsas de comida a cambio de votos. También El Pitazo afirmó que los voceros de los consejos comunales del PSUV utilizaron las bolsas de Mercal para comprar los votos de los electores: alrededor de 23.000 familias en el municipio de la Guajira llevaban esperando tres meses este beneficio alimentario para las comunidades. Se destaca que sobre estos acontecimientos no hubo ningún pronunciamiento o comunicado oficial por parte delos representantes de la Alcaldía o la Gobernación.El día de las elecciones internas del PSUV, el 8 de agosto de 2021, la mesa electoral fue abierta con mucha lentitud y se reportó que las máquinas no funcionaban bien. Solo pudie- ron sufragar unas 150 personas y más de 400 no pudieron ejercer su derecho al voto: al final anunciaron que la alcaldesa Indira Fernández había resultado reelecta. En noviembre de 2021 fue la ganadora de las elecciones municipales.Después de estos hechos, a las personas vecinas de estas comunidades no se les ha permi- tido acceder a los alimentos de Mercal ni a las bolsas CLAP, y la Alcaldía no va hasta estos caseríos que se encuentran alejados de los poblados principales de laGuajira (Sinamaica y Paraguaipoa), lo que violenta el derecho a la alimentación de la población.Para los activistas en terreno, la instrumentalización del hambre no solo es una práctica utilizada antes de la elección de cargos políticos, sino una estrategia generalizada de control social donde la figura del Consejo Comunal juega un papel importante. Silas personas quie- ren protestar o van hasta una emisora radial a hacer una denuncia, reciben como represalia el que se les quite la caja CLAP. Por ello, la gran mayoría ha decidido guardar silencio y no arriesgarse a perder una bolsa de comida que es tannecesaria.Vivir en medio de la crisis de servicios básicos Esta realidad de hostigamiento y violación de derechos se agudiza con la falta de acceso a los servicios básicos. En 2021, en laGuajira, más del 72,3 % de los hogares presentaba serios pro- blemas de déficit de servicios público: de energía eléctrica, aguapotable, gas doméstico, aseo urbano y transporte público, entre otros. Algunos sectores han padecido hasta más de dos años sinelectricidad, como Caño Pajaima y Cardoncito. Las familias deben recurrir a pozos artesa- nales o utilizar el agua de los jagüeyes(no tratada ni potable), para lo que deben hacer extensos recorridos a pie. Se cocina en fogones con leña. Los motorizados son laprincipal forma de transporte, dado que la mayoría de las calles no están asfaltadas y los caminos son de arena y maleza(situación que empeora en temporada de lluvias por inundaciones y desbordamientos de aguas). La salud y educación sonderechos inexistentes. En el informe de Codhez sobre la situación general de los derechos humanos en Zulia (Guajira e Isla deToas), de marzo de 2022, reportamos que en el Hospital Binacional Dr. José Leonardo Fernández, de Paraguaipoa, centro desalud para la población wayúu en Venezuela, se presenta hasta un 90 % de escasez de insumos médicos y medicinas. Ellaboratorio no funciona por falta de reactivos. La unidad de imágenes está inoperativa. No hay ambulancias para traslados deemergencia, pues las dos unidades que había fueron sustraídas por funcionarios de la Alcaldía después del ca∫mbio de gestión en la Gobernación de Zulia. En este mismo informe, el personal administrativo del centro de salud denuncia que buena parte de los insumos que llegaban a este centro hospita- lario estaban escondidos y un 30 % vencidos. El hospital padece fuertes cortes de electricidad y el agua potable no llega por tubería, sino mediante un pozo artesanal.Las niñas, niños y jóvenes no cuentan con espacios óptimos de estudio. Las escuelas no tienen pupitres, mesas, sillas ni baños. Durante la primera época de la pandemia, los centros educativos fueron desvalijados y se llevaron desde los sanitarios hasta los techos. Ahora los pocos niños que asisten deben escuchar sus clases sentados en el suelo, a la intemperie. La calidad educativa habajado considerablemente y se ha afectadado por la deserción estudiantil y docente: muchos maestros migraron del país o se vieron obligados a dedicarse a otras actividades, dados los bajos salarios recibidos. Las escuelas no cuentan con programas de alimentación (las agencias humanitarias de Naciones Unidas no han llegado a estos espacios marginados), de modo que las niñas y niños no tienen alimentos en sus hogares y tampoco los encuentran en sus escuelas. El hambre, la desnutrición y la pobreza son lascompañeras diarias de la infancia wayúu.Las fallas en las comunicaciones y la obsolescencia en la tecnología complican la labor humanitaria y de defensa de derechos humanos, así como el acceso a la educación. Se estima que para 2021, en la Guajira solo 0,8 % de los hogares tenían acceso a internet y 2,2 % tenían computadores. Por estos motivos, es normal que la población pase varios días sin conexión, sin saber qué ocurre a su alrededor, y sin poder hacer públicas y visibles las carencias y vio- laciones a las que está sometida.Por otro lado, la movilización hacia y desde esta zona fronteriza es todo un reto. Uno de nuestros principales problemas es el acceso a estas comunidades por falta de transporte e inseguridad. En el trayecto hay alcabalas: unas montadas por efectivosmilitares, para inti- midar, y otras por personas involucradas con actividades delictivas o grupos armados, para controlar y vigilar alas personas que circulan por allí. Se trata de un escenario hostil, peligroso y empobrecido donde reina la impunidad y la arbitrariedad. Las personas están en un estado de desatención total por parte de los órganos gubernamentales, cuya única función efectiva se ha circunscrito a la militarización de la zona –lo que se traduce en incrementos de abusos, intimidaciones y amenazas contra la población–. Por su parte, los gobernantes se han dedicado a amedrentar a las personas si no aceptan sus imposiciones o caprichos, como se evidencia en el caso de la protesta de la comunidad Los Puertecitos que se negó a cambiar bolsas de comida por votos.Experiencias y retos de las defensoras y defensores dederechos humanos La labor de Codhez en la Guajira empezó a través de la investigación de casos y de la documentación de la situación general de derechos humanos junto al Comité de Derechos Humanos de la Guajira entre 2016 y 2017 (este comité es la organización de la sociedad civil más antigua en el estado de Zulia; se fundó en agosto de 1999 y desde entonces se dedica a promover y defender losderechos humanos del pueblo wayúu y añú).Saylin Fernández, periodista wayúu y defensora de derechos humanos, hace parte del Comité de Derechos Humanos de la Guajira desde hace catorce años. Su trabajo inició en las comunidades como periodista de calle y ese contacto hizo que conociera«el compás de realidades de la Guajira a través de los caseríos, las instituciones educativas y de salud», según nos afirmó en una entrevista realizada en noviembre de 2022. Para ella, las necesidades de la Guajira siempre han estado allí, así como la desatención del Estado, y por eso ha sido impor- tante impartir talleres de formación para las comunidades, que les permitan empoderarlas enel conocimiento de sus derechos.En alianza con las organizaciones y los defensores de derechos humanos en Zulia, se han logrado tener momentos de concertación para conservar los espacios de denuncia, la labor de documentación y salvaguardar la seguridad de los periodistas y defensores que se encuentran en terreno. Las denuncias, los llamados y las alertas ante situaciones que vulneran los derechos humanos no se publican de modo individual, sino que se hacen en conjunto con una red de organizaciones para que la información se masifique. Además de Codhez y el Comité de Derechos Humanos de laGuajira, en tal red también están la Red de Derechos Humanos del Estado Zulia (que abarca dieciocho organizaciones de derechos humanos en Zulia), la Red Leal y organizaciones nacionales como el Programa Venezolano de Educación y Acción enDerechos Humanos (Provea) y el Laboratorio de Paz.Esta estrategia ha sido efectiva para resguardar la seguridad de los activistas indígenas de la Guajira venezolana: cuando se denuncian casos por abusos policiales o militares y se revela el nombre del periodista o activista indígena involucrado, «toca correr a Colombia», como lo expresan los activistas indígenas en terreno. Por temor a represalias, es mejor cruzar la frontera hacia el país vecino hasta que la tensión desaparezca y sea seguro volver a la Guajira del lado venezolano.Adicionalmente, en la Guajira no funcionan las líneas telefónicas con la misma efectividad que en el área metropolitana deMaracaibo. La señal es intermitente y si hay fallas eléctricas la comunicación es imposible, porque la desconexión es total. Así, la mejor forma de sortear estas dificultades es teniendo un vínculo con los líderes de las comunidades indígenas e ingresar con ellos al territorio. Los choferes que nos trasladan suelen ser personas involucradas en el activismo de derechos humanos y tienen nexos con concejales y miembros del gobierno municipal de la Guajira con interés en el abordaje de las comunidades y la promoción de losderechos humanos. Estos vínculos los hemos construido gracias al trabajo de años en la Guajira y al reconocimiento de la reputación de la organización entre los líderes sociales y los activistas políticos.Para hacer el trabajo de registro y toma de videos y fotografías, llevamos los materiales del equipo de producción, pero no nos identificamos como equipo de prensa o como una organización de derechos humanos. El motivo declarado de la visita puede ser «visita a familiares» o «a escuelas» para entregar donativos de material escolar. Una vez, una comunidad nos pidió un aporte de cuadernos y útiles escolares para la donación de una escuela y tuvimos que llevarlo para facilitar el acceso a estas comunidades. Los militares que registraron el contenido del vehículo nos cuestionaron: «¿Para qué los cuadernos?», a lo que el chofer y guía dela visita contestó con sorna: «Para leer y escribir».Nuestras medidas de prevención han mostrado ser efectivas. No hemos sido amenazados en el territorio ni perseguidos porlos agentes de seguridad del Estado venezolano. En enero y marzo de 2022, nuestra organización recorrió la Guajira venezolana y pudimos contactarnos con catorce de sus comunidades, en específico en el eje foráneo de la parroquia Sinamaica. Gracias al vínculo con líderes comunitarios, pudimos conversar con familias wayúu y conocer sobre su realidad. Estas comunidades fueron Los Puertecitos (300 familias), Mamoncito (20 familias), Karaipia (30 familias), Los Cardoncitos (200 familias), La Rita (160 familias), El Botoncillo (140 familias), Alewajirrawa (100 familias), Caimare Chico (280 familias), Bloque 6 (60 familias), Los Campiones (50 familias), Los Hermanitos (50 familias), Arizona (40 familias), Campo Alegre (150 familias) y Campo Alegre II(80 familias).Vimos mucha pobreza. No solo por la carencia de medios de subsistencia –el pueblo wayúu se vio seriamente afectado en sus actividades comerciales con el cierre de la frontera–, sino también en el acceso a servicios públicos domiciliarios y en la falta de oportunidades para los niños y jóvenes wayúu. Estas comunidades no tienen acceso a agua potable, electricidad y mucho menosescuelas funcionales que permitan impartir clases en condiciones dignas.Pasados casi diez meses desde la visita de Codhez al eje foráneo de la Guajira, la situación allí se ha agudizado: los índices de pobreza, desatención y protección estatal continúan, y el padecimiento por las múltiples carencias y precariedades se vive a diario. Además, los peligros y riesgos para defender los derechos en esta zona se han incrementado, debido al aumento de la presenciamilitar y la proliferación y el crecimiento de grupos armados.También visitamos el sector Virgen del Carmen, en Paraguaipoa, particularmente una infraestructura de una base de misionesque quedó abandonada por la Alcaldía de la Guajira y que fue rescatada por la comunidad hace cuatro años para la atención de niños en edad escolar. Pudimos conversar con las madres wayúu que viven a diario las dificultades para garantizarles a sus hijoseducación de calidad y alimentación.Entre Codhez y otras organizaciones de derechos humanos venezolanas hemos adelan- tado varias campañas, como #8AccionesPorLasMujeres, promovida en marzo de 2022. Esta campaña evidenció la falta de políticas públicas en alimentación, salud y educación que afectan de manera diferencial a las mujeres wayúu y cómo los casos de abuso sexual a niñas y mujeres wayúu se mantienen en la impunidad. Lo anterior ocurre porque no hay un sistema de denuncia judicial efectivo y con enfoque interseccional que atienda a las mujeres víctimas, dada la lengua que hablan, las características del territorio (se deben recorrer largas distancias para ir hasta las oficinas policiales a denunciar), y la vulnerabilidad y situación de pobreza en queconviven, entre otros aspectos.La unión de las organizaciones de la sociedad civil que defendemos los derechos humanos en la frontera es esencial parapromover la conservación de los derechos de las mujeres wayúu.Oportunidades y recomendaciones A pesar de los inconvenientes, las múltiples necesidades y la situación sistemática de violación de derechos humanos en la región, seguimos motivados a continuar con nuestra labor de exigirle al Estado venezolano el cumplimiento de sus obligaciones. En este sentido, de forma general, consideramos que el incremento de nuestras medidas de seguridad (autocuidado y autoprotección), el resguardo de nuestra base de datos e información, la implementación de formas seguras de movilización y la ampliación de nuestras fuentes de financiamientos continuos y comprometidos que permitan garantizar nuestra sostenibilidad son algunas delas medidas que deben tomarse a corto plazo para afianzar nuestro trabajo como defensoras y defensores de derechos humanos.En términos comunitarios, es necesario crear espacios de confianza y acercamiento con las comunidades, especialmente con líderes y lideresas wayúu. Tradicionalmente, los líderes wayúu son una figura de ejemplo e influencia en sus comunidades; se tratade personas que conservan el patrimonio cultural wayúu a través de la tradición oral, el respeto a su cosmología y las enseñanzas desus prácticas de diálogo y construcción de paz como lo dicta su sistema de justicia propio. Así, establecer nexos respetuosos con ellos nos permitirá ampliar el ámbito de intervención para una defensa más efectiva.En caso de lograrse lo anterior, se potenciarían dos aspectos: en primer lugar, se aumentaría la presión que puede hacerse ante lasinstancias gubernamentales para priorizar la atención de temas relacionados con la seguridad e integridad de las personas, y laasignación de recursos suficientes para mitigar la emergencia humanitaria compleja entre estas comunidades indígenas; y, en segundo lugar, se facilitaría la labor humanitaria, pues tendríamos el respaldo de los repre- sentantes de estas etnias, lo que se traduce en una mayor protección yseguridad para nosotros. Esta integración de los defensores de derechos humanos con las comunidades indígenas haría viable no solo mostrar y documentar las vulneraciones de los derechos humanos de los integrantes de estos pueblos, sino ejercer una labor de acompañamiento para que las víctimas de estas vulneraciones sean escuchadas en varios ámbitos (regional, nacional e internacional) y para que sus necesidades sean identificadas y atendidas de forma prioritaria.Con relación a los espacios nacional y regional, le recomendamos al Gobierno, en todos sus niveles, la aplicación de programasde capacitación y formación para sus componentes policiales y militares (incluso con la colaboración de organizaciones de lasociedad civil) en el respeto de los valores humanitarios y la integridad personal y laboral de las defensoras y defensores de derechoshumanos, así como en la valoración, el respeto y el resguardo de la idiosincrasia y cultura indígenas. Esta formación debe afianzarsebajo la perspectiva de los derechos humanos y el enfoque de género.En términos generales, con relación a afectaciones a los defensores de derechos humanos en Venezuela, se recomienda eliminar toda forma de persecución y hostigamiento contra ellos; abstenerse de cultivar un discurso ofensivo, estigmatizante y criminal; eliminar cualquier forma de obstáculo o restricción para su operación en el terreno (especialmente, en cuanto a temas relacionados con el acceso a financiamientos y registro y actualización de su condición jurídica); investigar, procesar y sancionar a personas y funcionarios militares, policiales o cualquier otro funcionario, responsables de violaciones a los derechos humanos de las defensoras y defensores; y reconocer, con respeto, la labor desempeñada por ellos.En cuanto a espacios internacionales, dado que hablamos de zonas fronterizas, es impor- tante crear redes de alianzas entre organizaciones venezolanas apostadas en esta zona y organizaciones colombianas; incluso, resulta determinante la participación de organizaciones internacionales de otras latitudes (interesadas en temas indígenas, de migración y fronteras), en especial cuando haya oportunidades de entendimiento y consenso sobre medidas comunes que requieran ser diseñadas e implementadas.Es importante el financiamiento a través de proyectos a mediano y largo plazo que promue- van el empoderamiento en la exigencia de derechos humanos de las comunidades indígenas y también en asistencia legal y sistematización de la documentaciónde violaciones a los derechos humanos con enfoques de incidencia en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos y el Sistema Universal de Derechos Humanos, de modo que se puedan promover mayores voluntades políticas que incidan en políticas públicas de atención binacionales.Se sugiere la creación de un Observatorio de Derechos Humanos para la Guajira, debido a la relevancia del territorio wayúu en el análisis de la situación geopolítica, económica y social de Venezuela y Colombia.Por otro lado, desde estas alianzas internacionales, es necesario profundizar en la inclusión del enfoque de género en los diseñosde la protección. Previo a ello, se requiere un estudio para puntualizar los riesgos a los que estamos sometidas las defensoras encontextos indígenas y fronterizos con fuerte presencia militar y de grupos armados. Estos diseños de protección deben abarcar a los defensores de derechos humanos nativos, en quienes se articula su condi- ción de defensores e indígenas; tales medidas deben adaptarse a las tradiciones y costumbres del pueblo o comunidad indígena al que se pertenezca (en nuestro caso, al pueblo wayúu).En otras palabras, toda medida de protección que se diseñe y pretenda implementarse en este contexto indígena y fronterizo debetener un enfoque diferenciado e intersectorial.A su vez, es importante que desde los países que conforman la Unión Europea se hagan esfuerzos políticos que le insistan al Gobierno venezolano y a las agencias humanitarias ins- taladas en terreno sobre la necesidad de hacer diágnosticos reales y actualizados acerca de la situación de la Guajira en materia de desnutrición y seguridad alimentaria, tasa de escolari- dad, tasa de empleo, cobertura de servicios domiciliarios, cobertura de internet y otros datos esenciales. Esto permitirá implementar políticasacordes a sus necesidades, so pena de que se desborde la emergencia humanitaria que atraviesa este pueblo.Por último, en cuanto a espacios organizacionales, hay que decir que en Codhez siem- pre hemos propiciado la protección del espacio cívico, la divulgación y los reclamos ante casos de vulneraciones contra organizaciones de la sociedad civil o contra susdefensoras y defensores, pero las limitaciones materiales y humanas son un reto. A veces, la insuficiencia presupuestaria impide el buen desarollo de las actividades; otras razones para tal impedimento se relacionan con situaciones de inseguridad personal o riesgos a nuestra integridad física, moral o psíquica. De igual forma, el estrés de las defensoras y defensores –por acoso, miedo, hostigamientos, amenazas o cansacio– puede ser un detonante para el retraso o la eventual paralización de las actividades planificadas. Por lo tanto, como última recomendación, consideramos importante promover espacios deacompañamiento psicosocial al equipo de Codhez y a los defensores de derechos humanos en la Guajira venezolana, tanto demanera individual como colectiva.A pesar de las difitultades descritas, seguimos esforzándonos y nos corresponde registrar y documentar cualquier tipo de hecho oincidente que implique una violación de los derechos humanos de los defensores. Para ello, estimulamos las alianzas con otras organizaciones defensoras de los pueblos indígenas en esta parte del país, tales como el Comité de Derechos Humanos de la Guajira y los amigos de Radio Fe y Alegría, con quienes tratamos de avan- zar hacia la visibilización de la difícil situación de los pueblos y las comunidades indígenas del estado de Zulia, con especial énfasis en la complicada realidad del pueblo wayúu. Paraesto requerimos refuerzos y acciones coordinadas con organismos y agencias nacionales e internacionales, en forma de apoyologístico y financiero para garantizar nuestro resguardo y seguridad en el marco de las labores de defensa. ***Este relato hace parte del libro Frontera común: luchas por los derechos humanos, producido por Civil Rights Defenders con el apoyo de la Embajada de Suecia en Colombia.
El pasado 19 de julio el presidente Gustavo Petro designó a Leonor Zalabata como embajadora de Colombia en la ONU. Es la primera vez que una mujer indígena ocupa el puesto. Esto significa un hito en temas de representación y resistencia, sobre todo porque Zalabata ha sido una ardua defensora de los derechos humanos, y su propia experiencia como víctima ha sido primordial en su trabajo. El contexto violento en el que creció la impulsó a luchar por los derechos de su comunidad y los pueblos indígenas colombianos, su trabajo se signó en temas de salud pública y resignificación del territorio en la Sierra Nevada de Santa Marta. Leonor Zalabata fue una de las representantes por los pueblos indígenas que se presentó para la Asamblea Constituyente de 1991, en la que defendió los derechos de los pueblos originarios en la nueva constitución. Después hizo parte de la toma a la Conferencia Episcopal en 1996, hecho histórico para las comunidades pues con ello lograron eliminar el adoctrinamiento católico a los indígenas. La hermana mayor, como la llaman en su comunidad, ha tejido redes de acompañamiento y ha defendido su territorio de la guerra, dialogó con las extintas FARC en el mandato de Andrés Pastrana y decidió no cesar las conversaciones por la paz luego de ese periodo. "La violencia en Colombia no tiene una sola dimensión, tiene varias. Si se solucionaran los problemas sociales no habríamos llegado a este punto en el que estamos", dijo Zalabata en entrevista con Caracol Radio. También menciona que es imposible que en los territorios sagrados ocurran masacres y se derrame sangre. En la Organización Nacional Indígena de Colombia han enunciado el trabajo de Zalabata como representativo y significativo, su fuerza como mujer y activista ha dado frutos para todas las comunidades de la Sierra Nevada."Son más de 200 años de vida republicana, donde el sistema de Colombia ha sido muy duro contra las culturas diferentes a la hegemónica (...) Antes de que llegaran los conquistadores ¡esto era indígena!", comentó en una entrevista a la AFP. Esta mujer atravesada por el conflicto ha resurgido del fuego y de la opresión sistemática a su pueblo, ha trabajado décadas para defender lo que les corresponde como comunidades originarias, Zalabata ha sido y seguirá siendo el puente para que los indígenas dejen de ser estigmatizados y violentados, es quien ahora llevará el mensaje de la paz y la reconciliación al mundo hostil y hegemónico. "Poder respirar aire puro, tener agua, tener animales, equilibrio ecológico. Yo creo que eso es lo que Colombia podría lograr a través de los indígenas", concluyó en entrevista. Leonor Zalabata es una de las miles de mujeres indígenas que dedican su vida a proteger sus comunidades y a defender los derechos que les corresponden, llevando siempre la sabiduría y el tejido ancestral en la espalda, caminando en medio del mundo violento y abanderando la paz. Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
La vigésimo sexta edición de la muestra, organizada por la Cámara Departamental del Libro de La Paz (CDLLP), se inauguró en un acto al que asistieron el presidente del país, Luis Arce; el alcalde paceño, Iván Arias; el embajador de España en Bolivia, Francisco Javier Gassó, y el cónsul general de Chile, Fernando Velasco, entre otros invitados.La inauguración estuvo marcada por la música del guitarrista boliviano Piraí Vaca y una interpretación de la típica danza de la morenada a cargo de una tropa de cholitas, las emblemáticas mujeres aimaras de La Paz, junto a la Banda Municipal "Eduardo Caba", quienes recorrieron los pasillos de la feria contagiando alegría.La expectativa es acoger a unos 100.000 visitantes en once días de feria, con más de 400 actividades culturales y unos 160 expositores de todo el país, explicó a Efe el presidente del directorio de la CDLLP, David Pérez Hidalgo.Poder femenino"Estamos alineados con el Año de la Despatriarcalización y de la Lucha contra la Violencia hacia la Mujer. La mujer empoderada va a estar muy presente", indicó Pérez y explicó que de la treintena de autores invitados, "el 70 % son mujeres en una diversidad de géneros" literarios.El homenaje al aporte femenino a la literatura también se refleja en los nombres elegidos para las cuatro salas donde se llevarán a cabo las actividades feriales.Una lleva el nombre de la líder minera Domitila Barrios, cuyo testimonio de lucha está plasmado en el libro "Si me permiten hablar...", publicado en 1978 por la brasileña Moema Viezzer.La segunda sala se llama Feminiflor, como la revista boliviana con enfoque feminista publicada entre 1921 y 1923, y la tercera lleva el nombre de la poeta Emma Villazón.La sala cuatro se denomina Ateneo Femenino, por un grupo de jóvenes mujeres de clase media-alta que fue clave para desarrollar propuestas que desafiaban posturas conservadoras a principios del siglo XX en Bolivia.Además de las mujeres, la feria también tendrá espacios para la narración en idiomas originarios, a propósito del Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas.También se resaltará el valor de las juventudes para la literatura por los "nuevos lenguajes tecnológicos" y por las "ideas de los nuevos paradigmas que pregona esta generación", dijo Pérez en el acto inaugural.Invitados especialesPor primera vez la feria tiene una ciudad invitada, Iquique, en pos de fortalecer los "lazos de hermandad" que vinculan a esa urbe del norte chileno con La Paz mediante un diálogo "a través de las artes, la cultura y la literatura", indicó la CDLLP.La institución invitada de honor es el Centro Cultural de España en La Paz (CCELP), que en mayo pasado cumplió una década de funcionamiento, algo que, según Pérez, "hay que celebrarlo"."El CCELP siempre fue un participante muy activo, nunca nos ha negado el apoyo en todas las ferias que hemos tenido", destacó.A su turno, el embajador español resaltó que el CCELP no está dedicado "a la promoción de la cultura propia", sino que ha crecido "apoyando a los creadores, a las industrias culturales bolivianas y paceñas"."El enfoque de la cooperación cultural de España es muy claro, la cultura es un factor de desarrollo, es un elemento que permite el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que contribuye inmensamente a reducir la pobreza y las desigualdades", remarcó Gassó.Por ello, la acción cultural española apunta al intercambio, al fomento de la diversidad y al encuentro de culturas, agregó.Los participantes Entre los autores invitados están los españoles Álex Chico, Tirso Priscilo Vallecillos, Laura Freixas, Ana Flecha, Blanca Riestra, María Lois y Álex Ayala y desde Chile llegarán Óscar Contardo, Yosa Vidal, Romy Jones, Juan Malebrán, Jonathan Guillén, Juan José Podestá y la poeta mapuche Daniela Catrileo.También participarán los argentinos Anna Franco, Elsa Osorio y Daniel Benchimol, la uruguaya Fernanda Trías, el italiano Silvio Mignano, el alemán Robin Kiera, el venezolano Manuel Llorens, la mexicana Chary Gumeta, el ecuatoriano Xavier Oquendo y la cubana Katiuska Blanco.El país anfitrión estará representado por las laureadas escritoras Liliana Colanzi, Magela Baudoin y Giovana Rivero, la comunicadora Quya Reyna y la artista plástica, narradora de la tradición oral indígena y directora del Museo de Etnografía y Folclore, Elvira Espejo.La feria se efectuará en el Campo Ferial Chuquiago Marka, en el sureño barrio de Bajo Següencoma, hasta el próximo 14 de agosto.Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
Según Graham Sadler (estudioso de la música francesa): "Un melómano francés del siglo XVIII seguramente se sorprendería de la escasa atención prestada a Mondonville en nuestro siglo. Se trataba de un hombre que ocupaba algunos de los cargos musicales más prestigiosos de Francia, un hombre que, en su apogeo, era considerado casi igual a Rameau como compositor de ópera y muy superior a él en el ámbito del motete.Sin embargo, hasta los últimos años las representaciones modernas han sido raras. Una razón de este abandono es que la música de Mondonville no siempre parece especialmente interesante en la página. Sin embargo, en la interpretación cobra vida de una manera sorprendentemente directa". Les fêtes de Paphos se representó por primera vez en la Académie Royale de Musique de París el 9 de mayo de 1758 y fue un éxito popular. Así disfrutó de veintinueve representaciones consecutivas y, aunque sólo se revivió el tercer acto, la popularidad del conjunto nunca estuvo en duda.Les Fêtes de Paphos, aunque se describe en la portada como un ballet heroico, se clasifica mejor como una ópera-ballet.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Aquí el argumento y acción de este primer acto:Marte, el dios de la guerra, decide seducir a Venus, pero primero debe deshacerse de Adonis, el rival a quien Venus ama. A pesar de las protestas de Venus, Adonis con un grupo de cazadores va a destruir un monstruo temible que aterroriza al vecindario, pero él mismo resulta herido de muerte. Cuando exhala su último suspiro, Venus lo transforma en una anémona. Marte, no contento con la muerte de su rival, desea destruir la flor, pero el propio Júpiter interviene para devolverle la vida a Adonis. Marte se va, amenazando con que las furias de la guerra lleguen hasta el cielo. Venus y Adonis, junto con las Ninfas y las Gracias, celebran su amor.Podrá escuchar la obra completa en la nueva edición de Canto y Música Coral este domingo, 5 de mayo a las 9:00 p. m. por la señal en vivo de la HJCK.
Hablamos con la docente Catalina González, docente del programa de diseño de modas de la Universidad ECCI. El diseño de modas, no solo inspirado en las tendencias, lo que está de moda digámoslo así, sino en el bienestar de ciertas poblaciones que tienen unas dificultades determinadas y hablamos de las mujeres que han sufrido cáncer de seno y que ustedes han pensado, no solo qué ropa les sirve, sino cómo apoyarlas. Quisiera que me hablaras de este proyecto. Este proyecto básicamente se centra en desarrollar una cartilla como asesoría de imagen para este tipo de mujeres que han sufrido cáncer de mama que han pasado por una mastectomía radical. Esta cartilla está enfocada en todo lo que es el análisis de su imagen, de enfrentarse nuevamente a lo que son ellas después de este tipo de cirugías. Hablamos sobre el uso de maquillaje, el uso de prendas y adicional a eso contamos también con un apoyo a nivel de psicología para enfrentar todas estas barreras que se tienen a nivel de autoestima y de encontrar nuevamente su rol en la sociedad.Catalina, a veces uno piensa que la ropa es solo ropa y ya y lo hemos hablado con la profesora Alexandra que es la directora de diseño de modas aquí en la ECCI, pero en estos casos la ropa también suple un tema de autoestima y también sirve para decirle a la mujer que no está incompleta. Porque luego de una mastectomía pues ya sabemos la cosas que hay frente al espejo y cuán duro nos puede dar ese reconocimiento. Buscamos que con las prendas que ellas tienen en su guardarropa se sientan seguras y proyecten su nueva imagen a partir de esta cirugía. Entonces, la idea es que no es un un prototipo que nos va a llenar ese vacío porque muchas mujeres pueden utilizar prótesis hay otras que deciden no utilizarlas, la idea es que esas prendas ellas las lleven con poder, con empoderamiento, por ese motivo es importante el apoyo psicológico porque se trabaja desde la parte interna hacia la parte externa y así mismo poder proyectar esa nueva imagen.💬Síganos en nuestro canal de WhatsApp aquí.Cuénteme de las prendas, pues sabemos que otras universidades también habían repensado. El tema sobre brasieres, por ejemplo, prendas íntimas, ¿cómo se diseñan estas prendas, qué tienen de particular?Bueno pues conozco de un prototipo que se elaboró que es un brasier, pues es un tejido especial para el proceso de cicatrización para ayudar en ese en postoperatorio y en ese proceso pues nosotros intentamos también desarrollar algunos prototipos de prenda, pero encontramos fue esa debilidad a nivel psicológico, a nivel emocional, que las mujeres necesitaban retomar nuevamente su imagen. El tema de la cartilla, ¿cómo lo elaboraron, cómo fue ese proceso? Bueno actualmente estamos en la prueba de aplicación con las mujeres y a partir de toda esa asesoría esperamos sacar como tal el resultado que es la cartilla. La cartilla básicamente sería: si tienes este tipo de piel puedes utilizar este tipo de prendas, los colores que puedes utilizar son estos... a nivel de accesorios a nivel de maquillaje. Incluso hay un estudiante que también está trabajando con nosotros sobre el tema de la colorimetría para este tipo de mujeres porque las mujeres cuando se enfrentan a quimioterapias o después de un postoperatorio su piel tiende a ponerse un poco más pálida, entonces la idea es que por medio de estos colores de las prendas se realce nuevamente su color natural.¿Cuál es el futuro de este proyecto? ¿Cómo se lo imaginan desde la ECCI?Estamos en conversaciones con el Instituto Nacional de Cancerología porque ellos son los que nos van a dar esa población donde vamos a aplicar realmente esta cartilla y ya a partir de ese estudio de la evaluación que ellas mismas nos hagan. La idea es empezar a replicarlo a otras comunidades, a otras instituciones que puedan colaborarnos con esta población.Catalina yo quisiera que me contarás sobre tu experiencia personal en este proyecto. No como una mujer, también una diseñadora. Impacta, impacta bastante. Darse una cuenta todo lo que puede llegar a dañar a nivel psicológico y a nivel físico este tipo de condiciones de salud, adicional a esto tener un poco más de conciencia, como lo decías al inicio, la moda no es solamente las prendas, la tendencia, sino darle un sentido social a esa prenda, a ese color que vamos a usar de temporada que realmente permita que esa mujer que lo tiene se proyecte y se afiance nuevamente como un rol femenino en la sociedad.Más allá de las mujeres también es un proyecto para las familias. Creo que es una posibilidad para apoyar a su mamá, a su abuela, a su tía, su hermana o a una misma ,una mejor amiga. Se vuelve casi que un impacto más grande que la única persona. No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Spencer Throckmorton, dueño de esta galería del este de Manhattan, cuenta que en 1977 compró una foto de Frida a su sobrina-nieta Cristina sin apenas conocerla y desde entonces ha recorrido el mundo sumando más y convirtiéndose en un experto sobre su vida y obra, incluso descubriendo títulos perdidos.Con su perro descansando a los pies, abre un grueso monográfico de Taschen en el que ha colaborado y muestra las imágenes de dos cuadros que halló: Congreso de los pueblos por la paz (1952) y otro sin firmar: "el ultimísimo" de su vida y "premonitorio", dice, pues el cabello de la pintora, que fue cremada, luce en llamas."Simplemente me enamoré de Frida", resume el galerista, especializado en fotografía latinoamericana y que buscaba fotos tomadas por el padre de la fotografía mexicana Manuel Álvarez Bravo cuando se topó con su retrato de Frida posando con una esfera, que despertó su interés en la exponente del surrealismo.Throckmorton, que pronto aparecerá en un documental sobre Frida al que ha cedido fotos, asegura que la fotografía fue muy importante para esta, pues empezó a pintar retocando las fotos de su padre, el fotógrafo Guillermo Kahlo, a los 8 años, y gracias a él aprendió a posar como lo hizo para numerosos fotógrafos.Nombres como Fritz Henle, Lucienne Bloch, Bernard Silberstein, Leo Matiz o Nickolas Murray, este último su amante, retratan a Frida seria, sonriente, desinhibida, fumando, mostrando sus cuadros y posesiones, y feliz junto al muralista Diego Rivera, probablemente el hombre de su vida, con el que se casó dos veces.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Entre las rarezas a la vista en la sala, hay tres pequeñas fotos de Frida tomadas por Edward Weston que esconden secretos: la artista dibujó en su reverso pies, manos, ojos y lágrimas; también hay una foto sin firmar en la que Frida, Diego y sus amigos observan un eclipse solar en 1932.Throckmorton va divulgando precios a un marchante interesado -50.000 dólares esta foto, 60.000 aquella- pero asegura que le cuesta despedirse de las obras, por lo que mantiene una selección personal "única" en la que cuenta con fotos tempranas de Frida, con dos y tres años, y tardías, en su lecho de muerte.Y vaticina que seguirá coleccionando fotografías de Frida, de quien le fascina, sobre todo, su "intelecto", revela.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Todo el disco está recorrido por la idea de la madurez de la cantante en el ámbito de los vínculos sentimentales, en un momento en el que sabe lo que quiere, como muestra, por ejemplo, en Training season, donde enumera una serie de sus requisitos para establecer una relación."¿Eres alguien que puede darme eso? No quiero tener que enseñarte; si no eres tú, házmelo saber porque la temporada de entrenamiento ya acabó", canta la artista en este sencillo, que sirvió de anticipo del álbum junto a Houdini e Illusion."Escribir estas canciones es una forma de terapia para mí; escribir tus pensamientos y convertirlos en melodía para que otra gente los consuma me hace sentir vulnerable", dijo en una entrevista publicada dos días antes del estreno por Apple Music.Acorde al títuloDua Lipa cumple lo que promete con el título del disco, y lo hace desde la carátula del álbum —en la que aparece relajada en una piscina observando cómo un tiburón nada a su lado— hasta en su propia página web, donde llama a "registrarse para el optimismo".El concepto que da nombre al álbum le llegó a través de un amigo, quien, durante una entrevista, le dijo que lo que el mundo necesitaba era optimismo radical."Es la idea de seguir pese a los golpes y no dejar que nada te desanime por mucho tiempo", expresó la artista en la conversación con el DJ Zane Lowe, algo que califica como una "parte fundamental del proceso de crecer y madurar".Este optimismo radical que la artista defiende va más allá de las relaciones amorosas y pasa por amistades y otros tipos de vínculos, a los que Dua Lipa mira "en perspectiva", un término que para ella equivale a la madurez emocional.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí."Pienso mucho sobre emociones, sentimientos, pensamientos… sobre cómo me hace sentir a mí y a otras personas cuando escuchan una canción", razonó.Evolución y crecimientoEn los aproximadamente cuarenta minutos de Radical Optimism de Dua Lipa, la artista se abre más que nunca, en un momento en el que considera que ha encontrado su voz y ese sentido de la felicidad en el que "lo que te corresponde, será para ti".Esta evolución se puede percibir en especial en las dos canciones que cierran el disco.En Maria, la cantante de origen albanokosovar agradece a quienes forman parte del pasado y de los que se aprende —"Te lo debo, el mayor cariño siempre tiene una razón, yo también soy mejor por las personas a las que perdí"—, mientras que en 'Happy for you' también se alegra de cómo alguien que estuvo en su vida está feliz junto a otra persona."No habría sido capaz de escribir esa canción en mis primeros discos porque creo que no había crecido suficiente como persona o como artista para ver cómo alguien a quien quería pasaba página", dijo sobre esta última.Destino, GlastonburyEste verano, Dua Lipa actuará en el Mad Cool en Madrid el 10 de julio y en el NOS Alive de Lisboa el 12 de julio.Días antes, el 28 de junio, encabezará el cartel del festival de Glastonbury, en la localidad británica del mismo nombre y al que dedica la mitad de sus pensamientos diarios, como reconoció en una entrevista para la BBC.De hecho, lo califica como su barómetro, con el que mide si una canción merece estar en el álbum al compararla con cómo sonaría en el festival.En Radical Optimism, la artista deja de lado algunos ritmos electrónicos por ordenador para sustituirlos por instrumentos en directo, logrando lo que ella definió como "pop alternativo, pero con un toque psicodélico"."Por fin estoy en un momento de mi carrera donde me siento muy segura de mí misma; me ha costado mucho llegar hasta aquí", aseguró en la BBC la artista.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La vorágine, la obra de José Eustacio Rivera que cumple 100 años. Un libro vivo es el nombre de este especial en el que participarán nuestros oyentes y lectores de todo el país y donde buscamos que la selva, la belleza y el amor, sean jugados al azar. En el especial que realizaremos en la HJCK tendrá nuevo contenido editorial, realizaremos una nueva temporada de nuestro podcast Fragmentos en la que leeremos la novela, con diferentes voces de nuestros oyentes. También tendremos un video que realizamos junto a la Biblioteca Nacional hablando con un experto en la novela con quien hicimos una exploración al manuscrito y a la historia de Rivera.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Lo que escucharán a continuación es la voz de la docente Ana Isabel Juagiboy, perteneciente a la población kamsá de El Valle del Sibundoy, en Putumayo. No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.