Caparrós dirigió esta semana un Taller de Libros Periodísticos, organizado por la Fundación Gabo y la Feria del Libro de Madrid. "Muchos de estos libros circulan en cantidades que, probablemente, comparadas con cualquier 'youtuber' son ridículas", afirma, y destaca que la novela de no ficción "tiene cabida en la actualidad".El periodista argentino se muestra contrario a lo que él llama "la ética de los resultados", hacer las cosas por el resultado que va a producir. "Yo creo que uno tiene que hacer las cosas que cree que tiene que hacer, que le gustan y que le importan, y después ya se verá", sentencia.La octava edición de ese taller de la Fundación Gabo, que ha recorrido el mundo hispano, se celebró en esta ocasión en la madrileña Biblioteca Eugenio Trías, en el céntrico Parque del Retiro de Madrid, donde se desarrolla estos días la Feria del Libro.En el taller, "cada uno de los participantes expone su proyecto, todos leemos, vemos lo que presentó y charlamos con él para proponerle cosas", explica Caparrós, ganador en 1991 del Premio de Periodismo Rey de España en la categoría de Prensa.En esta dinámica en la que "ocho personas ayudan a la novena" los ocho "talleristas tienen la oportunidad de compartir sus obras de no ficción con otros periodistas narrativos en lo que Caparrós define como "un raro ejemplo de colaboración" frente a un proceso "tan individualista" y carente de retroalimentación como la escritura.Unas sesiones, por las que ya han pasado figuras del periodismo como el español Ander Izaguirre o la mexicana Eileen Truax, que son un lugar donde Caparrós asegura encontrar "nuevas miradas" que redefinen un periodismo narrativo en el que, desde su punto de vista, es necesario "volver a buscar en la literatura otras formas de contar"."Buena parte de la no ficción que se escribe acepta un modelo un poco cristalizado, es decir, ha dejado de buscar formas nuevas (...). Yo siempre digo que ya llevamos mucho tiempo en que usamos más el resultado de ese procedimiento que el procedimiento en sí mismo. Contamos de una manera que cristalizó hace cincuenta años o sesenta", señala.Por ello, cada edición del taller es un lugar de aprendizaje también para el propio Caparrós, quien confiesa que añadió dos párrafos nuevos a un libro que publicará en noviembre gracias a una reflexión de la participante más joven y la que "tiene un libro más peculiar, más diferente"."Escucharla me lo hizo pensar y, por lo tanto, me sirvió para agregarle a algo que estaba casi terminado", explica.Para ahondar en la escritura de los libros periodísticos, en el taller se ha analizado la obra de autores tan diversos como la francesa Annie Ernaux, para abordar la introspección, los argentinos Rodolfo Walsh, Tomás Eloy Martínez, "un poquito" del español Chaves-Nogales y el propio Gabriel García Márquez.Del Nobel colombiano, Caparrós cree que "más allá de leerlo, que es de la única forma que uno aprende de la gente que escribe", la lección central es cómo alguien que "llegó a las más altas cimas de la literatura", sin embargo "nunca quiso dejar de ser un periodista, nunca quiso dejar de ser alguien que saliera por ahí a buscar información y la contara"."Creo que estuvo bien y ciertamente la pasamos bien, eso también es bueno", concluye. Recuerde conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"La literatura, siempre del lado de la libertad y de la democracia" es el título del documento, suscrito también por intelectuales de Nicaragua, Perú, México, Colombia, Argentina, Venezuela y Cuba, y que se leerá el próximo viernes en la Feria del Libro de Madrid.Belli compartirá la lectura con la escritora española Rosa Montero, el opositor cubano Yunior García y el autor venezolano Juan Carlos Chirinos.Entre febrero y marzo pasado, las autoridades nicaragüenses retiraron la nacionalidad "por traición a la patria" a más de 300 personas entre opositores y críticos a Daniel Ortega, incluida Belli.Entre los firmantes figuran Héctor Abad Faciolince, Alberto Anaut, Nuria Azancot, Valeria Correa-Fiz, Antonio Lucas, Inés Martín Rodrigo, Joan Manuel Serrat, Juan Cruz, Alfonso Mateo-Sagasta, Soledad Puértolas, Carme Riera, Germán Solís, Dani Torregrosa, Manuel Vilas, Juan Villoro, Alexis Díaz Pimienta y Fernando Iwasaki.Demandan democracia y el respeto de los derechos humanos en aquellos países "donde los regímenes totalitarios han dejado un rastro de muerte, cárcel, despojo, confiscaciones y destierro" para quienes se han opuesto a las "dictaduras"."Países donde se define a los críticos como traidores a la patria y se les condena en farsas que llaman 'juicios' sin pruebas ni derecho a la defensa -aseguran-. Países donde la ciudadanía está sometida a un régimen de terror y espionaje, se despoja a los ciudadanos de su nacionalidad, se les confiscan sus bienes, se les empuja al destierro y se les prohíbe el retorno".Son países "donde se cierran academias de la lengua y se clausuran festivales de poesía, se silencia a la sociedad civil y los medios de comunicación independientes son enmudecidos", lamentan.Y destacan la necesidad de no permitir que el olvido y la indiferencia caigan sobre estas situaciones y la de apoyar a los escritores, artistas y medios de comunicación que, desde el exilio, lo denuncian.Los firmantes animan a los escritores a trabajar activamente y de forma coordinada en esta lucha contra los abusos y las violaciones de los derechos humanos. Recuerde conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
María Victoria Kodama es uno de los cinco sobrinos que se presentaron como herederos en el expediente sucesorio en la Justicia cuando quedó vacante la sucesión por la herencia de la viuda de Borges porque la mujer falleció sin haber hecho un testamento.Kodama, fallecida el 26 de marzo pasado, a los 86 años, era propietaria de bienes muebles, inmuebles y heredera universal de Borges.La viuda de Borges era la titular de los derechos de autor de toda la obra literaria, además de ser la propietaria de todas las medallas, condecoraciones y distinciones recibidas por el escritor argentino, de manuscritos originales, de dibujos de su autoría y de su biblioteca personal (intervenida por el propio Borges), entre otros muchos bienes de altísimo valor cultural, histórico y patrimonial.La obra literaria de Borges se encuentra inscripta bajo la titularidad de Kodama, en el Registro Nacional de la Propiedad Intelectual de la Dirección Nacional del Derecho de Autor (DNDA).María Victoria Kodama sólo puede disponer y cobrar a cuenta de la sucesión hasta que salga la declaratoria de herederos, según explicó a EFE el abogado y acreedor de la viuda, Fernando Soto.Soto había pedido a la Justicia en abril pasado que se realice un inventario de los bienes de la viuda de Borges, pero hasta el momento no se ha hecho.María Kodama, que nació en Buenos Aires en 1937, conoció a Borges (1899-1986) cuando tenía 16 años y él 54, al chocar con él en la calle, a la salida de una librería. Ella le contó que iba a estudiar Literatura y él la invitó a estudiar juntos inglés antiguo, momento desde el que no volvieron a separarse.Pese a que en 1967, Borges se casó con otra mujer, Elsa Astete, María Kodama siguió viendo al escritor argentino y finalmente se unieron en matrimonio en 1986, meses antes del fallecimiento, a causa de un cáncer hepático, del escritor en Ginebra.Dos años después de la muerte del creador de "El Aleph", en 1988, María Kodama creó en Buenos Aires la Fundación Internacional Jorge Luis Borges, cuya sede alberga innumerables objetos personales.La viuda de Borges esperó hasta último momento para hacer el testamento, cuando se dispuso a hacerlo la gente de su entorno no le dio los medios para concretar el acto de última voluntad y cuando quisieron reaccionar fue tarde, porque María Kodama ya "no estaba en condiciones de poder hacer un testamento", había explicado Soto meses atrás. Recuerde conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Julio Cortázar, autor argentino conocido por sus obras innovadoras y experimentales, era un amante de los libros. Su biblioteca personal era extensa y diversa, con una amplia gama de géneros y autores. Cortázar veía su biblioteca como un espacio sagrado, un refugio donde podía sumergirse en diferentes mundos literarios y encontrar inspiración para su propia escritura. Para él, los libros eran mucho más que meros objetos, eran compañeros íntimos y fuentes de conocimiento. Cortázar solía decir: "La biblioteca es una extensión de uno mismo, una especie de tesoro personal que revela quién eres y quién quieres ser". Uno de sus libros favoritos era Ulises, de James Joyce. Cortázar se sentía fascinado por la complejidad narrativa de esta obra maestra, su estructura fragmentada y su exploración de la conciencia humana. Leía y releía cada página con avidez, maravillándose ante las múltiples capas de significado y las sutilezas lingüísticas que Joyce había tejido magistralmente. Cortázar era un apasionado de la poesía y tenía una predilección por los poemas de Arthur Rimbaud. Las imágenes vívidas y la musicalidad de sus versos lo transportaban a un mundo de sensaciones y emociones intensas. Rimbaud despertaba en Cortázar una fascinación por la rebeldía y la búsqueda de la belleza en todos sus aspectos. Este era un autor repetido en su biblioteca. En la primavera de 1993, Aurora Bernárdez, su primera esposa y albacea literaria, puso la biblioteca personal de Cortázar al cuidado de la Fundación Juan March, de Madrid. Desde entonces está allí a disposición de estudiosos y público general.Jorge Luis Borges tenía una relación única con su biblioteca personal. Después de volverse ciego, su biblioteca se convirtió en su mundo imaginario. Aunque no podía leer los libros físicamente, conocía cada uno de ellos en detalle. Borges solía afirmar que cada libro de su biblioteca era una puerta hacia otro universo, un laberinto infinito de ideas y conceptos. Para él, la biblioteca era un lugar de ensueño donde podía explorar las vastas dimensiones de la literatura sin restricciones. Borges expresó una vez: "Mi biblioteca personal es mi jardín secreto, un espacio donde el tiempo y el espacio se desvanecen, y solo existen las palabras eternas".Uno de los libros más queridos por Borges era Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra. Para Borges, la obra de Cervantes era un laberinto literario, una exploración profunda de la realidad y la ilusión, que trascendía las fronteras de la ficción. Él admiraba la figura del ingenioso hidalgo y su lucha contra los molinos de viento, símbolo de la quimera y la valentía en el enfrentamiento contra lo irreal. En su libro Lectores (1974) Borges escribió "Sé que hay algo inmortal y esencial que he sepultado en esa biblioteca del pasado en que leí la historia del hidalgo. Las lentas hojas vuelve un niño y grave sueña con vagas cosas que no sabe". Se sabe que también libros como La odisea, de Homero o Las elegías de Duino, de Rainer Maria Rilke eran libros imprescindibles en su biblioteca Gabriel García Márquez, el apremio Nobel de Literatura, también tenía una biblioteca personal notable. García Márquez valoraba enormemente la tradición literaria y la influencia de otros escritores en su trabajo. Su biblioteca estaba llena de obras clásicas de la literatura universal, pero también contenía textos relacionados con la historia, la política y la cultura latinoamericana. García Márquez creía que un buen escritor debía ser un ávido lector y consideraba su biblioteca como una fuente infinita de aprendizaje y crecimiento. Solía decir: "Un escritor sin una biblioteca es como un pájaro sin alas, carece de las herramientas necesarias para volar alto en la imaginación".El libro Veinte poemas de amor y una canción desesperada era una joya en su biblioteca. Los versos apasionados y melancólicos de Neruda resonaban en su corazón y le recordaban la belleza y la intensidad del amor y la vida. Además, García Márquez tenía una admiración especial por William Faulkner y su novela El ruido y la furia. Esta obra, que explora la decadencia de una familia sureña desde diferentes perspectivas, fascinaba a García Márquez por su estilo narrativo innovador y su exploración de la psicología humana. Faulkner inspiraba a García Márquez a desafiar las convenciones literarias y a buscar nuevas formas de contar historias.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK.
Durante mucho tiempo, la literatura ha estado dominada por voces masculinas, lo que ha llevado a una representación desequilibrada de las experiencias y puntos de vista. Al leer obras escritas por mujeres, se nos brinda la oportunidad de escuchar historias y voces que han sido marginadas o silenciadas. En el libro La guerra no tiene rostro de mujer, la Nobel de Literatura Svetlana Alexiévich escribió que la historia contada por las mujeres se da, generalmente en espacios íntimos como la cocina, y que si un día se escucharan todas sus palabras no alcanzarían las rotativas para su magnitud. En esta breve lista presentamos escritoras latinoamericanas que desafiaron normas sociales y los roles de género establecidos en su época. Se hicieron a un lugar. María Luisa Puga (1944-2004)Nacida en México en 1944, fue una escritora reconocida por su estilo único y sus perspicaces reflexiones sobre la existencia humana. Sus obras, entre las que se destacan Las posibilidades del odio y El vaso de agua, se caracterizan por una prosa rica y lírica que explora las emociones y los conflictos internos de sus personajes. A través de su escritura, Puga revela una mirada profunda y poética sobre la vida cotidiana y sus dilemas, dejando una marca duradera en la literatura latinoamericana.Marta Brunet (1897-1967)Destacada escritora chilena del siglo XX, es una figura fundamental en la literatura latinoamericana. Su obra, a menudo vinculada al realismo mágico, retrata con maestría la vida en pequeñas comunidades rurales y las luchas de las mujeres en un mundo dominado por hombres. Entre sus obras más reconocidas se encuentran Montaña adentro y Bestia dañina, que exploran temas como la soledad, la opresión y la resistencia. Brunet logra crear personajes memorables y situaciones que capturan la esencia de la experiencia latinoamericana.Josefina Vicens (1911-1988)Esta escritora mexicana es una figura literaria que merece ser descubierta y valorada. A pesar de su corta vida, su única novela publicada, El libro vacío, se ha convertido en un referente en la literatura mexicana contemporánea. Con una prosa concisa y directa, Vicens aborda la desorientación existencial y la búsqueda de significado en un mundo aparentemente vacío. Su estilo único y su mirada introspectiva le otorgan un lugar destacado en la literatura latinoamericana y una voz que sigue resonando hasta el día de hoy.Armonía Somers (1914-1994)Reconocida por su audacia y transgresión, desafió las convenciones literarias de su época. A través de sus cuentos y novelas, como La mujer desnuda y La condesa sangrienta, Somers exploró temas tabúes como la sexualidad, el poder y la subversión de roles de género. Su escritura provocadora y su capacidad para cuestionar las normas sociales establecidas la convierten en una figura relevante en la literatura latinoamericana, desafiando las expectativas y enriqueciendo el panorama literario con su voz única.Mirta Yáñez (1947)La obra de Mirta Yáñez aborda una amplia gama de temas, desde la política y la historia hasta la identidad y la sexualidad. Sus novelas, cuentos y ensayos capturan la atmósfera y los matices de la vida en Cuba, al tiempo que ofrecen una mirada crítica a los cambios y desafíos sociales que han afectado al país. Uno de sus trabajos más conocidos es la novela Sangra por la herida, una obra que combina elementos históricos y sociales con una trama apasionante y personajes memorables. En esta novela, Yáñez reflexiona sobre el período revolucionario cubano y las luchas de una generación de mujeres cubanas por encontrar su lugar en una sociedad en transformación.Silda Cordoliani (1953)Escritora venezolana que en sus relatos y novelas trata especialmente las relaciones interpersonales y las realidades sociales de Venezuela y América Latina en general. A través de su prosa cautivadora y su perspicaz observación de la vida cotidiana, Cordoliani logra sumergir a los lectores en narrativas envolventes y profundas. Algunos de sus libros que les recomendamos son Babilonia, La mujer por la ventana y Tiempo de Ratas Frías y Otras HistoriasNo olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK.
Así lo manifiesta Zambra en una entrevista durante su visita a España, donde participó en la charla "Cómo olvidar, cómo escribir" organizada por CaixaForum Madrid, donde firmará su nueva novela en la Feria del Libro de la capital."Sé que mis novelas están cerca de lo que hoy se llama no ficción, claro, pero a mí me interesa defender la ficción porque siento que hay una tendencia a quitarla, a equipararla con la mentira, y eso me parece peligroso, porque si empiezas así luego vas a castigar también los sueños, los deseos, vas a castigar la imaginación", lamenta Zambra.Por eso el autor de "Bonsái" puntualiza que "Literatura Infantil" es una ficción en la que escribe, con prosa y versos, lo que le sucedió al convertirse en padre de Silvestre en un momento en el que se vive una "dificultad generalizada de la expresión del sentimiento"."Siempre he escrito sobre lo que está sucediendo desde los 5 años, así que escribir este libro era una decisión. Escribir es una forma de estar en el mundo, vas registrando para entender, para quitarle incluso responsabilidad a los demás", matiza.Así que el lector encontrará en estas páginas una trama con el estilo ya reconocible de Zambra, donde aparece la figura del narrador poco fiable, porque la duda de si es él el protagonista o no siempre está en el aire.Consciente de que hay poca literatura sobre la paternidad contada por un hombre, Zambra explica que uno de los problemas que hay es que hemos leído a los "clásicos" como "historias de hombres, y no como historias representativas de lo humano".Por eso, este relato está lleno, sin ambages, de ternura, humor, y rabia mezclada con agradecimiento, sobre todo en las páginas donde el protagonista deja de ser padre para centrarse en su papel de hijo.Según reconoce, cuando su hijo nació suspendió lo que estaba haciendo en ese momento, que era escribir la novela "Poeta chileno" y lo hizo porque no quería que hubiera "ninguna rivalidad entre la literatura y la crianza, entre la literatura y la paternidad".Por eso esta obra se trata de una "carta de amor" hacia su hijo, hacia su yo como hijo y hacia su padre.Cuando en 2006 se publicó "Bonsái", la novela con la que el chileno se dio a conocer en España, en algunas librerías lo situaron en la sección de botánica, por eso bromea con que su nueva novela "Literatura infantil" no se coloque en la parte de infantil porque lo suyo es "una transgresión de la ficción".Eso sí, hay algo que queda claro en este libro: "Ahora sé que me interpondría entre la bala y mi hijo, pero nadie leerá aquí por qué tomé la decisión de ser padre". Recuerde conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
En una entrevista durante su visita a Guadalajara, el escritor nacionalizado salvadoreño afirmó que hablar y escribir en español es un privilegio.“Pertenecer a una de las lenguas más habladas en el planeta es un privilegio, permite que seas entendido y leído por mucha más gente que, por ejemplo, quien escribe en una lengua pequeña del este de Europa. El significado de la lengua en esos países es mucho más limitante, difícilmente se hablan fuera de esos lugares, mientras que estar con la lengua castellana le da cierta universidad a uno”, dijo.Castellanos Moya (Tegucigalpa, 1957) consideró que hablar el castellano es sinónimo de identidad global pero también una sentido de pertenencia al país donde nació, por las variaciones que el español tiene en cada territorio.“Me da una identidad mucho más global, pertenencia a una comunidad que es de cientos de millones (de hablantes). También me da pertenencia para esas cinco o seis millones de personas con las que me formé porque traigo el lenguaje de ahí, traigo ciertos giros, una visión de mundo, pero es una relación dual”, indicó.Exilio y literaturaEl narrador y periodista acude a México en la última actividad del programa de Guadalajara como Capital Mundial del Libro en la que ofreció conferencias a estudiantes y futuros narradores.El escritor conoce bien este país en el que residió en dos ocasiones como parte de una vida nómada que empezó en la infancia y que se recrudeció cuando la violencia y la guerra explotó en El Salvador.El autor de “Moronga” afirma que escribir desde el exilio que ha vivido en países como Japón, México, Alemanía y ahora Estados Unidos, donde se desempeña como profesor en la Universidad de Iowa, además de desarraigo le ha ofrecido perspectiva de la manera de vivir en Centroamérica.“Solo mis últimas dos novelas suceden fuera de lo que es México y Centroamérica, son personajes que recuerdan y que viven Centroamérica como un dolor que traen, como una herida, como una necesidad de olvido, como un rencor. Creo que la vida nómada lo que me ha dado es perspectiva y también me da un poco de desarraigo por supuesto”, expresó.Añadió que la distancia le ha permitido entender la fugacidad y la vulnerabilidad de los seres humanos.“Me ha permitido entender también un poco la fragilidad y la vulnerabilidad de la existencia humana, que nada es fijo, todo puede cambiar radicalmente de un momento a otro y los seres humanos tendemos a dar por supuesto que siempre vamos a estar en lo mismo. Influye también en la identidad, porque parte de la identidad se modifica con los cambios”, explicó.Necesidad de escribirTras escribir “El asco” (2007), una crítica a los procesos sociales y políticos posguerra en El Salvador, Castellanos Moya recibió amenazas que le advertían no regresar al país, un precio que el escritor considera que hay que pagar por saldar la necesidad de hablar de estos temas.“Uno escribe por necesidad de decir, cuando uno escribe no se pone a pensar, uno sabe que va a pagar un precio, pero no sabe qué precio, el destino es el que cobra. Escribo lo que tengo que escribir, entonces, un libro como ¨El Asco¨ fue una catarsis a través de una obra literaria y cuando lo escribí no me puse a pensar en las consecuencias de ello”, indicó.Este riesgo fue en parte por el trabajo que desarrolló como director del diario Primera plana en el que destapó casos de corrupción entre los empresarios y el narcotráfico, uno de los pocos momentos en los que el autor considera que su trabajo periodístico se cruzó con su labor literaria.El narrador asegura que no anhela volver al país en el que creció pues la vida en ese país y en las demás naciones Centroamericanas es y ha sido siempre muy dura.“La vida es muy dura en Centroamérica actualmente y siempre lo fue, hay momentos en que uno está ahí, apasionado por los proyectos en lo que está involucrado, por la sensación de que uno aporta, pero si uno no está en eso, la pura subsistencia es muy dura en Centroamérica, los niveles de pobreza, de desigualdad, de falta de oportunidades, por eso es que todo el mundo se quiere ir”, concluyó. Le invitamos a conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Este es un honor que me sobrepasa. Estar frente a ustedes majestades y junto a poetas y escritores que siempre he admirado es mucho para quien lee estas palabras, pero debo añadir, con miras a sosegarme un poco, que estoy lleno de España.Trataré de aclarar esta afirmación tan rotunda de quien suele evitar el énfasis al que somos tan propensos los hispanoamericanos.El idioma sería el primer vínculo, luego en consonancia con él, su literatura que he leído asiduamente, los viajes con mi esposa Milena cuyo abuelo, por cierto, era de las Canarias como ocurre a muchos venezolanos que descienden de españoles, merced a la migración que los trajo a la América Latina, hoy la desventura es inversa aunque no a causa de guerra alguna. Entre los que vinieron había muchos profesores que se incorporaron a nuestra educación; casi al llegar dieron clases en liceos y universidades del país enriqueciendo así nuestra cultura.Yo tuve tres de ellos y sufrieron un poco conmigo, pues no fui buen estudiante, sobre todo descuidé las materias científicas, lo cual lamento, pues la física cuántica, por ejemplo, ha restaurado el insondable misterio del Cosmos. Es una revolución. En suma, esa fue la mejor época de nuestra educación. En cuanto a la Universidad Central de Venezuela, también fue su período de mayor esplendor.Afortunadamente, pese a no estar bien desde hace años, sigue siendo plural, una que sea para adoctrinamiento deja de ser universidad. Aquí viene a punto la desalentadora opinión de Karl Jaspers: él afirma que no existe ninguna concepción del mundo valedera, lo cual nos deja a la intemperie, pero a la vez nos fuerza a indagar. Él tenía dos temores: uno al totalitarismo y otro a la bomba. En este tiempo, aquel avanza y esta ha crecido. Resulta paradójico, por cierto, el que las naciones más civilizadas se encuentren entre las principales fabricantes de armas. Se trata de una industria muy prospera.En el recuento, que venía haciendo debo incluir también a los amigos que este país me ha deparado, pero no podría decir todo lo que he recibido de él, pues me alargaría y deseo tocar otros puntos.Comienzo con los dos personajes, no sin preguntarme qué podría añadir a cuanto se ha escrito sobre Cervantes, cuya vida fue también una novela de aventuras. La de don Quijote puede verse como un proceso de la normalidad a la locura y de esta otra vez otra esperada normalidad, después de pasar por pruebas que al cabo lo sanarían. Con respecto a su escudero, que a mi ver, ha sido subestimado por los quijotistas, representa lo real, probablemente nuestro tiempo lo realce, ya que asistimos a una revaloración de la vida corriente, y es que también en ella está el misterio. "La realidad es más extraña que la ficción", decía Walt Whitman.La impronta del Quijote estuvo en los creyentes de la utopía que arreglaría todo y terminó en un desengaño. Es sabido que nacionalismos, ideologías y credos dividen a los seres humanos, pero en este tiempo, el mundo, gracias al desarrollo de la comunicación, debería ser cosmopolita; ya en cierto modo lo es, pero a ello se oponen los factores que he mencionado, sobre todo el nacionalismo, que según Einstein es el sarampión de la humanidad. Sin embargo, existe un ego nacional que no aceptaría semejante cambio.Séneca era cosmopolita, Goethe también, igualmente Derrida, quien parafraseando a Marx publicó un pequeño libro con este título: Cosmopolitas de todos los países, uníos.Ahora me referiré a nuestra lengua, que anda muy maltrecha, por lo que hemos de cuidarla como amadores suyos, pero no puedo señalar sus fallas, en esta ocasión, porque son demasiadas, algunas procedentes de traducciones del inglés en la televisión y en otros medios. Antes, a comienzos del siglo XX los académicos se enfadaban con los galicismos; los que se deslizan hoy en nuestro vivir son los anglicismos.Soy muy amigo de las citas porque refuerzan cuanto pienso y casi siempre vienen de alguien con autoridad. A propósito de lo dicho, usaré una de George Orwell: "el actual caos político guarda relación con la decadencia del lenguaje y ... podríamos conseguir alguna mejora si empezáramos por lo verbal". Ahora también debo señalar la limitación de la palabra: ella no es el objeto que designa, decimos fuego sin quemarnos, tampoco va al paso de la realidad. Esta cambia constantemente, pero no la palabra.Creo que puede haber llegado el momento de revisar las bases de toda la cultura, aunque no sé si al decir esto se trata de un contagio de los dos famosos personajes. Todo debería examinarse, verse, trocar la ilusión por lo real, la faena más ardua que se le ha de plantear al ser humano. Teresa, la santa, que no se consideraba como tal, antes bien, hablaba sobre ella sin piedad en sus libros, nos dejó dicho que hemos de «tomar alegremente lo sabroso como lo amargo», palabras que firmaría cualquier maestro Zen, vedantista o taoísta. Es que hay afinidades y diferencias entre los místicos de las diversas religiones. Sólo ellos podrían modificarlas, pero es necesario diferenciar esa mística de lo que Wittgenstein llama lo místico, que designa el mundo no cómo es, sino que es. También resulta útil distinguir entre pertenecer a una religión y religiosidad. Hay una anécdota en tal sentido.Alguien le preguntó a Schiller por qué no era de ninguna iglesia, y este contestó: por religión, es decir, por religiosidad.Creo que cuando el pensamiento ve su límite, aparece una apertura hacia lo indecible.
Cadenas, de 93 años, recibió el reconocimiento de manos de rey de España, Felipe VI, en la tradicional ceremonia en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, cerca de Madrid."Es urgente defender la democracia de todo lo que la acecha" y para eso hay que "recrearla", ya que la educación la ha descuidado, dijo el galardonado en su discurso."Se necesita en los países donde existe, una pedagogía que la robustezca; en los otros, que no la han conocido, es vano tratar de introducirla. Los demócratas deben pedir a voces su renovación", subrayó.El premiado recordó a Miguel de Cervantes como "un gran defensor de la libertad" y advirtió de que la lengua española "anda muy maltrecha".Este es el primer escritor venezolano reconocido con este galardón que otorga anualmente el Ministerio de Cultura de España, dotado con 125.000 euros.Los reyes de España, Felipe VI y Letizia, presidieron la ceremonia en la que el Gobierno de España estuvo representado por el ministro de Cultura, Miquel Iceta.El ministro definió a Cadenas como "un hombre de una ética e integridad radicales, tanto en su andar como en su literatura"."Estamos ante una voz comprometida, de una consecuente honestidad, que conoce las palabras exactas para defender al ser humano de los autoritarismos, de la falta de libertades y de la violación de derechos humanos", expresó Iceta.Al repasar la biografía del venezolano (Barquisimeto, 1930), destacó libros como "Intemperie" y "Memorial", ambos de 1977.Y recordó cómo en 1954, a raíz de su participación en protestas universitarias, la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez "envía" a Cadenas al exilio, a la isla de Trinidad, entonces colonia británica, hasta que en 1958, tras el derrocamiento del régimen y la instauración de la democracia en Venezuela, regresa a su tierra.El premio le fue concedido por su "vasta y dilatada obra literaria", así como por la trascendencia de un creador que ha hecho de la poesía "un motivo de su propia existencia" y la ha llevado "a alturas de excelencia", según el jurado.Cadenas tiene en su haber también el Premio Nacional de Literatura de Venezuela y en España el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana y el Internacional de Poesía Federico García Lorca-Ciudad de Granada, entre otros reconocimientos.El escritor, poeta, ensayista y profesor ha unido poesía y pensamiento a lo largo de su carrera con una obra que expresa desolación, sosiego y belleza.Su poema más famoso, "Derrota", le hizo un símbolo para muchos jóvenes de los años sesenta y se popularizó en España y América Latina.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Se saben cosas de Manuel Mejía Vallejo. Por ejemplo que comenzó a escribir desde niño y que fue su mamá la que a hurtadillas le entregó a León de Greiff La tierra éramos nosotros. Un libro escrito por su hijo y que ella, con ojos subjetivos, pero no ingenuos descubrió belleza y un universo propio que merecía más lectores. De Greiff pensó lo mismo y compartió la lectura con Los Panidas, un grupo literario al que pertenecía y que a principios del siglo XX discutían sobre literatura, filosofía y arte. Esta lectura favorable del grupo de intelectuales logró que La tierra éramos nosotros fuese publicado en el año 1945, cuando Vallejo tenía 22 años. La escritura de Vallejo se configuró en un momento violento y subversivo del país. Y eso detonó en sus narraciones la creación del universo simbólico de la provincia: códigos de montañas y montes que encerraban a los personajes en medio de ciudades nacientes. Sin embargo, podríamos decir que una de las características más reconocibles de Vallejo fue su profunda lealtad en la forma de narrar la cultura oral de Antioquia. Sus libros cantan en paisa: una lengua con el ritmo de una bestia lenta. Se ha considerado que su obra está dividida en tres momentos. La primera, desde 1945 a 1957 "es caracterizada por ficciones tradicionales", en este momento estarían en consideración La tierra éramos nosotros y Tiempo de sequía. En la segunda etapa, Vallejo sufre una innovación de su técnica en Al pie de la ciudad y El día señalado entre los años 1959 y 1964. En la última parte de su obra ya Vallejo se reconoce como un autor que ha crecido, al que el tiempo le ha hecho mella no solo a él como individuo, sino a su obra. El fenómeno de lo moderno que se disipa por toda la región latinoamericana alcanza a afectarlo. Se puede decir que La casa de las dos palmas (1988) es la culminación de su trayecto entre la juventud narrativa y su madurez. Según Juan Gustavo Cobo Borda "Dentro del amplio ciclo de la novela d e la violencia colombiana -unas setenta y cuatro publicadas entre 1951 y 1972-, la obra d e Mejía Vallejo es una de las que mejor depuran ese "inventario de muertos" y que trasciende lo testimonial hacia una reconstrucción literaria sobria". Algo importante por mencionar es que Vallejo se mantuvo siempre en la frontera de los reflectores. Es decir, su trabajo durante toda su vida fue originado desde y por Medellín. Siendo profesor durante muchos años de Literatura en la Universidad Nacional con sede en la capital del Antioquia, hasta dirigir la Red de Bibliotecas Públicas de la ciudad, Mejía Vallejo nunca fue un escritor de la centralidad. Incluso, mucha de la crítica menciona que su literatura, como mucha de sus contemporáneos, se vio eclipsada por el Nobel de Gabriel García Márquez. Sobre eso, Cobo Borda menciona: "Quizá por ello Manuel Mejía Vallejo, como Héctor Rojas Herazo, autor de una novela precursora de Cien años de soledad: Respirando el verano ( 1962), se llamaron a silencio durante largo tiempo. García Márquez , con el corpus total de su ficción, había resumido el problema en forma fulgurante . De este modo, Mejía Vallejo prefirió desviar su atención del campo y concentrarla en la ciudad: los dos millones y medio de habitantes que mu y pronto alcanzaría Medellín. Ese Medellín que , al ensancharse , había ido dejando al margen, como reductos perdidos, los viejos barrios de la prostitución y la bohemia. De la llegada, en Dota, de los emigrantes del campo". Después de 100 años del nacimiento de Manuel Mejía Vallejo, su literatura se abre como una flor sepultada el hielo. Da pistas claras sobre una época de transformación física y emocional de los habitantes de las que serían las grandes ciudades. Vallejo se concentró en el emigrante local que atravesado por el deseo se somete al desarraigo, la violencia y el desalojo de su raíz.
Este mes la programación del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo estará llena de conciertos y obras magníficas, entre estos dos espectáculos imperdibles, la obra Juguetes Rotos de la directora argentina Carolina Román y el concierto de la Sinfónica Nacional de Colombia junto al Tambuco Ensamble de Percusión.En primer lugar, la directora y dramaturga argentina Carolina Román presenta su obra Juguetes Rotos por Producciones Rokamboleskas, una compañía de teatro española. Estas funciones hacen parte de la programación de España país invitado de honor en el Teatro Mayor. Juguetes Rotos narra la historia de una amistad entre Mario, un joven que abandona su pueblo, y Dorin, una transexual del mundo del espectáculo. Mario trabaja en una peluquería y Dorin lo lleva a enfrentarse a sus sueños de ser mujer. En este espejo en el que Mario se mira también se refleja un mundo de purpurina peligroso y revelador.Este proyecto propone una reflexión sobre la identidad sexual y sobre el mundo no-binario de España de las décadas de 1960 y 1970, en contrapunto con el del presente. En este entramado social muchas personas se vieron gravemente afectadas por un sistema que no los admitía ni reconocía más allá de los escenarios y la prostitución.Producciones Rokamboleskas nace de la mano de Fabián Ojeda (Premio Max 2017) y Nacho Guerreros, dos profesionales con una amplia trayectoria en las artes escénicas. Desde 2017 su actividad principal es la producción, coproducción y producción en gira de obras teatrales, apostando por la profesionalización del sector escénico en España y la calidad de los espectáculos.Carolina Román es dramaturga, actriz y directora. En Buenos Aires cabalgó entre sus estudios de periodismo en la Universidad de Buenos Aires y el teatro. Sus maestros más influyentes fueron Raúl Serrano, Alberto Félix Alberto y Augusto Fernández, entre otros. Junto a sus hermanas creó el Videoclub del Ángel, un proyecto especializado en cine de autor con el que organizaron modestos ciclos por el territorio.Las funciones serán el viernes 16 y sábado 17 de junio a las 8:00 p.m., la boletería está entre $55.000 y $80.000, la puede adquirir en la página web del teatro.Por otro lado, la Orquesta Sinfónica Nacional estará junto a Tambuco, uno de los ensambles de percusión más reconocidos en México (y el mundo) y a la directora inglesa Catherine Larsen Maguire.Tambuco interpretará junto a la Orquesta la pieza Metal de tréboles del también mexicano Javier Álvarez, una obra que a través de su discurso sonoro evoca a la naturaleza e impulsa a los músicos a explorar formas alternativas de tocar sus instrumentos. Esta obra y las otras tres que componen el programa, serán dirigidas por Catherine Larsen-Maguire, quien durante 10 años se desempeñó como Principal de fagot de la Komische Oper en Berlín, para después dedicarse de lleno a la dirección.Para abrir y cerrar la noche, la Orquesta interpretará dos obras del compositor estadounidense Aaron Copland, compositor clásico norteamericano por excelencia, quien además tenía un particular atractivo por la música latinoamericana. Para iniciar la velada, Three Latin American Sketches, una obra que se caracteriza, en palabras del compositor, “por sus melodías, ritmos y temperamento espontáneo y jovial”, y Rodeo: Four Dance Episodes, la versión sinfónica construida por el mismo compositor del ballet bajo el mismo nombre, en la que presenta fragmentos inalterados de conocidas melodías americanas. Completa el repertorio, Huapango, de José Pablo Moncayo, obra muy reconocida y de gran colorido que retrata la música popular de la zona de Veracruz en el Golfo de México.El concierto será el miércoles 28 de junio a las 8:00 p.m., la boletería va desde los $25.000 hasta los $80.000 y está disponible en la página del Teatro Mayor.Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
En "Bramidos de agua dulce" (Escarabajo, 2020), la poeta conversa con el río Sinú, cuyas aguas serpentean a lo largo de la ciudad de Montería, en el Caribe colombiano; en su obra, el río adquiere vida propia y se convierte en un personaje central que, con cada corriente, lleva consigo los lamentos de la muerte y la violencia que asolan a las mujeres trans de esa urbe.A través de sus versos, la autora plasma algunas "experiencias aterradoras", pero también la resiliencia y lucha que vivieron estas mujeres hace más de 40 años: "Ante el temor de ser arrestadas y torturadas por la Policía, las mujeres trans que ejercían la prostitución en la época (...) preferían lanzarse al río Sinú"."Contar estas experiencias de vida desde una voz travesti, que es mi propuesta política, es controlar la narrativa de lo que se dice de nosotras", declara enfática a EFE Bárcenas, quien asegura que históricamente han sido interpretadas por personas cisgénero, heterosexuales y blancas que "terminan perpetuando lo que significa ser trans".Poesía en "clave travesti"Según la poeta, su "propuesta política" permite asumir el dominio de la narrativa en torno a las mujeres trans, que ha sido relegada al ámbito de la marginación, el sufrimiento y el trabajo sexual: "Me parece injusto" y, en su lugar, aboga por reivindicar nuevas perspectivas de "ser travesti"."La 'clave travesti' trata de posicionar la experiencia de vida de una mujer negra trans en la poesía", explica la escritora de 25 años, quien asegura que esta inclusión "no suele suceder en la literatura" porque "el canon literario es racista y transfóbico".En este contexto, Bárcenas reconoce que dichas experiencias se están convirtiendo en un nicho altamente lucrativo en la actualidad. A pesar de ello, la autora destaca que el reconocimiento y valoración de sus palabras y obras literarias son el mayor obstáculo que ha tenido que enfrentar.Escritura que abre horizontesEl contexto familiar y el entorno conservador en el que creció la poeta "no estaban preparados para comprender y aceptar" su identidad, lo cual generaba miradas opresoras y prejuiciosas hacia su persona y su cuerpo. Por lo que la colombiana encontró, desde temprana edad, un refugio íntimo y seguro en la escritura que le permitía plasmar sus sensaciones, experiencias y dar voz a su cuerpo en tránsito que ella describe, metafóricamente, como "florecer".La escritura también le dio conciencia del poder de la palabra y la expresión poética; fue una herramienta que le permitió forjar otro futuro, alejándose de los estereotipos limitantes que la sociedad asigna a las personas trans como "la prostitución, la peluquería o la calle". "La poesía me salvó porque me pude agenciar otro destino", explica Bárcenas, quien señala que no le parece negativo que sean prostitutas o peluqueras, sino que eso "sea lo único que la sociedad quiera que seamos".Dignificación y reconocimiento permanenteA propósito del Día Internacional del Orgullo LGBTI, que se celebra el 28 de junio, Bárcenas destaca que "la dignificación de las vidas trans va más allá de una celebración temporal y requiere cambios estructurales en diversos ámbitos".La activista enfatiza en la importancia de contratar a personas trans y brindarles espacios de manera continua: "Una verdadera inclusión implica tener en cuenta a las personas trans todo el tiempo, lo cual les proporcionaría la estabilidad económica tan necesaria en sus vidas porque aún enfrentan obstáculos para acceder a empleos, espacios culturales y académicos que no han sido diseñados con su inclusión en mente".La monteriana señala que durante esta celebración se percibe como "la cuota trans" y reflexiona sobre cómo muchas instituciones instrumentalizan la imagen de las personas trans en lugar de brindarles una participación genuina.Aunque le genera conflicto, también reconoce que esta situación puede ser una oportunidad para abrir camino a otras mujeres trans y ampliar su representación en diversos escenarios. "Ser reconocida como una travesti que pudo transformar su realidad y abrir nuevos horizontes para otras mujeres", así le gustaría a Flor ser recordada por sus hermanas travestis y por la sociedad.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Desde la creación en el año 2001, el Ciclo Rosa se reafirma cada año como la apuesta por la diversidad, como el puente para una transformación en las estéticas y narrativas de la creación audiovisual, que se mueven entre los distintos géneros cinematográficos, los múltiples formatos estéticos y las diversas maneras de narrar y representar el cuerpo, la sexualidad y el género mediante lo audiovisual.El Ciclo Rosa se ha convertido en un espacio alternativo para la muestra audiovisual y la discusión alrededor de la visibilidad LGBTIQ+. Por el Ciclo han pasado figuras significativas de la creación e investigación audiovisual nacional e internacional y se ha promovido la emergencia de nuevas formas de representación de los géneros y las sexualidades en su diversidad y complejidad.La edición del 2023 está conformada por una Muestra Internacional curada por Cédric Succivalli, crítico de cine y programador italiano, ha sido jurado en festivales como San Sebastián y el Festival de Cannes (jurado de la Palma Queer), entre otros. Succivalli propone 5 programas con un rango ecléctico de voces queer que lo han impresionado profundamente durante los últimos años. Esta muestra estará acompañada por su curador y presentará títulos: Lobo y perro, Fire at the Lake, The Lost Boys, Errante corazón, Exalted Mars, entre otros.La Muestra Nacional es resultado, por primera vez, de una convocatoria pública donde se recibieron más de 60 obras audiovisuales de todos los formatos y duraciones, provenientes de todo el territorio nacional. La muestra se compone de un largometraje: Clara y tres programas de cortometrajes: Fuerza salvaje, Afectos disidentes y Feminidades construidas.Además, el Programa Furia presentará películas que suspendan momentáneamente las convenciones sociales y permitirá que se avive la pasión por encima de la razón. Los personajes de Furia son complicados, difíciles de entender, rabiosos e inmorales, en esencia, queer. Por otro lado, en el Foco Jorge Cadena, intimidad y rebeldía, un recorrido entre lo personal y lo colectivo, lo introspectivo y lo político de este cineasta colombiano radicado en Suiza, los asistentes podrán ver una serie de cortometrajes que ha realizado en la última década, en un ir y venir constante entre su origen en el Caribe colombiano y su mirada extranjera en el mundo. Presentado por Swiss Films.Para complementar la agenda de películas se tendrán dos estrenos Internacionales: Medusa Deluxe de Thomas Hardiman y Lingua Franca de Isabel Sandoval. En estrenos nacionales: Wërapara de Claudia Fischer, Petit mal de Ruth Caudeli y Anhell69 de Theo Montoya.Esta edición tendrá la segunda versión de la Toma Rosa que se llevará a cabo del 9 de junio hasta el 1 de julio en la Galería de la Cinemateca de Bogotá, los días jueves, viernes y sábados. La Toma Rosa es un espacio para la juntanza y la circulación de propuestas interdisciplinarias vinculadas a diferentes prácticas artísticas en el marco del Ciclo Rosa, como una forma de apropiación de la Cinemateca por parte de todos los ciudadanos. Esta versión reunirá 13 artistas que fueron seleccionados a través de una invitación pública, quienes proponen un viaje por actividades literarias, audiovisuales, escénicas (circo, música, teatro, performance) de diseño gráfico, de artes plásticas y de Artes vivas.Ricardo Cantor, gerente de Artes Audiovisuales del Idartes, comenta “el Ciclo Rosa llega a su edición 22, y se ha convertido -como un rito- en un lugar de encuentro y conversación alrededor de las narrativas de representación y autorepresentación queer a través del cine y el audiovisual y su encuentro con otras prácticas artísticas y culturales como el performance, la literatura, la música, las artes visuales y la danza. En 2023, con un panorama internacional, el programa furia, el foco de Jorge Cadena, estrenos nacionales e internacionales sumado a 3 componentes convocados por invitaciones públicas: muestra nacional, la toma rosa y diálogos ciclo rosa junto con la exposición GenIA, El Cine & Yo con Daniela Maldonado y el Laboratorio Cuerpo Cyborg-Tecnogénero ensamblamos -como en un collage- una amalgama de lenguajes, estéticas y relatos que indagan en la expresión y las disidencias del género, del afecto y del amor.”Este año en la Sala E se realizará la Exposición GenIA: exploraciones inmersivas y con inteligencia artificial en clave de género, esta se basa en las posibilidades de intersección entre la tecnología y la identidad de género. Las obras realizadas y presentadas por la ciudadanía exploran estos temas desde una perspectiva descolonial, transfeminista, transterritorial, que reflexionan sobre la ética, la autonomía, la justicia y la dignidad; utilizando herramientas de inteligencia artificial para crear experiencias particulares. La exposición contará con visitas guiadas en inglés y español.Del 15 junio al 3 de agosto se realizará Laboratorio cuerpo cyborg-tecnogénero, en la Cinemateca de Bogotá y en el Castillo de las Artes, un encuentro de 16 sesiones los días lunes y jueves, el ingreso es libre con inscripción previa. El 28 de junio para participar en Lecturas de película - Reflejos de violetas en el turbio estanque: Inventario personal del cine homosexual debe hacer inscripción previa.El Ciclo Rosa tendrá una sesión especial de El Cine & Yo con Daniela Maldonado, lideresa comunitaria y activista social del sector poblacional trans de la ciudad de Bogotá, esta actividad de entrada libre, será el 21 de junio a las 7:00 p.m.Del 21 al 28 de junio se llevarán a cabo los Diálogos Ciclo Rosa, un espacio que abre y amplía conversaciones colectivas en torno a narrativas y disidencias del afecto. La selección de estos encuentros llegaron a través de invitación pública, en la que se recibieron propuestas con múltiples formas y formatos (talleres, ponencias, estudios de caso, material de archivo, mesas redondas, proyección y conversación, lecturas performativas, conversatorios, paneles, testimonios, entre otros)Durante los días del Ciclo Rosa se lanzarán las convocatorias para el Premio Dunkel Rosa 2023 y el 4° Laboratorio de Escrituras Audiovisuales Queer.Para más información puede consultar toda la agenda del Ciclo en la página web de la Cinemateca de Bogotá. No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK.
Bautizada la estatua imposible, "es una obra creada por cinco maestros diferentes que nunca habrían podido colaborar en la vida real", afirma a la AFP Paulina Lunde, portavoz de Sandvik, la empresa que diseñó esta escultura gracias a tres programas diferentes de IA.De acero inoxidable, mide 150 centímetros de alto y pesa 500 kilos. Esta expuesta por el museo de Tecnología de Estocolmo y representa a una mujer, cuya mitad del cuerpo debajo del busto está cubierta por una especie de túnica y lleva un globo -hecho de bronce- en su mano izquierda.La idea era crear una mezcla entre los estilos de cinco escultores que marcaron cada uno su época: Miguel Ángel (Italia, 1475-1564), Auguste Rodin (Francia, 1840-1917), Kathe Kollwitz (Alemania, 1867-1945), Kotaro Takamura (Japón, 1883-1956) y Augusta (Estados Unidos, 1892-1962)."Algo en su apariencia hace sentir que no fue creada por un ser humano", señala Julia Olderius, una responsable de innovación dentro del museo.El espectador puede percibir la musculatura inspirada en Miguel Ángel, mientras que la mano recuerda a las creadas por Takamura.Para lograrlo, los ingenieros de Sandvik alimentaron el programa con abundantes imágenes de esculturas creadas por estos artistas. La inteligencia artificial propuso luego varias imágenes en 2D que, según ella, reflejaban el sello de cada uno de estos escultores."Estas imágenes en 2D fueron incorporadas por nuestros ingenieros en un modelado 3D y, a partir de ahí, nos concentramos en la fabricación", destaca Lunde.¿Pero es arte, o más bien una hazaña técnica? "Creo que es arte", afirma Olderius, que considera que esta apreciación le corresponde al público.Sobre la cuestión más general de la irrupción de la IA en este campo, muestra el mismo optimismo. "No hay que tener miedo de lo que la IA hace con la creatividad, el concepto, el arte y el diseño", juzga. "Simplemente hay que adaptarse a un nuevo futuro", donde la tecnología tiene un lugar de pleno derecho en la creación y el diseño, añade. No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Qué se dicen a sí mismos los personajes que son reconocidos por tener siempre las palabras precisas. En esta temporada de Fragmentos intentaremos, a través de la lectura, pararnos en las palabras íntimas de escritores, poetas y chefs. Ellos y ellas escribieron diarios que hablan, sobre todo, de una suerte de incomodidad con el mundo y de la forma en la que entendían la ficción y sus creaciones.Siempre es difícil escoger fragmentos para leer, en medio de la cantidad abrumadora que se produce todos los días, al parecer el tiempo nunca es suficiente para leer lo que queremos. Sin embargo, nos impulsa la idea de conocer los recuerdos y pensamientos personales de algunas de las figuras que a través de su trabajo creativo fueron reconocidos y estudiados.En pasadas temporadas de Fragmentos hemos cruzado por ensayos, poemas e historias de terror. Cada una traía consigo una pregunta sobre las narraciones y la forma en la que se insertan en nuestras tradiciones literarias, la pregunta de la quinta temporada de Fragmentos está relacionada con una curiosidad sobre los rastros que deja la vida cotidiana en la escritura. El texto que abre este ciclo es La conciencia uncida a la carne, el segundo volumen de los diarios de Susan Sontag, que abarcan desde 1964 a 1980. En el fragmento que elegimos es un diálogo complejo de Sontag consigo misma sobre su propia madre. Su relación emboscada por la rabia y el cansancio. En el texto, Sontag se refiere a la belleza de su mamá como una maldición y, al mismo tiempo, la única virtud que logró reconocerle honestamente. Otra de las invitadas a Fragmentos será la poeta y escritora Sylvia Plath, considerada una de las cultivadoras del género de la poesía confesional: "Buenas noches, dulce princesa. Todavía funcionas por tu cuenta; sé estoica; no te dejes dominar por el pánico; atraviesa este infierno hasta llegar al amor de la primavera, generoso, dulce, desbordante", escribió Plath en sus Diarios. En nuestra lectura estará Diarios, de Fernando Pessoa: "De hecho, soy un náufrago. Así pues, me confío a mí mismo. ¿A mí mismo? ¿qué clase de confianza hay en estas líneas? Ninguna. Vuelvo a leerlas y me duele el corazón al darme cuenta de lo pretenciosas que son, de cuánto se parecen a un diario literario". Uno de los textos que serán leídos en esta temporada será Confesiones de un chef, del cocinero Anthony Bourdain. En este libro Bourdain confirma su premisa: "para mí, la comida siempre ha sido una aventura", y acompaña el lector a través de una vida llena de anécdotas: desde sus modestos inicios trabajando como lavaplatos en un bar de Provincetown hasta la cocina del Rainbow Room en el Rockefeller Center o los traficantes de droga del East Village.Haruki Murakami, Gabriel García Márquez y unos personajes que dejaremos como sorpresa serán los protagonistas de esta nueva temporada del podcast para quienes disfrutan que les lean. Esperamos que esta sea una oportunidad para conocer nuevas historias o arrancar en el mundo de la lectura. Nunca es tarde para leer junto a nosotros. Los esperamos desde el 13 de junio a las 6:00 p.m. a través de nuestra señal en vivo y en todas las plataformas de streaming.