En un espacio urbano, retrofuturista y a la vez anacrónico, como en toda distopía, Sara Dice, narra lo que ocurre al interior de las familias escogidas para hacer cumplir la norma. Dichas familias, sus decisiones, la reacción ante el hecho de tener que ejercer como víctimas o verdugos, las votaciones para elegir a uno de los miembros, la inconformidad de los elegidos, los lutos previos y posteriores, la imposibilidad de matar fuera de la norma, son algunos de los momentos que cubre la obra. Definida por sus creadores como «una comedia negra», presenta situaciones que parecen inverosímiles, pero que se acercan tanto a la realidad que son capaces de provocar risas.
“Cuando escribí Sara Dice partí de la pregunta, ¿Quién de su familia debería morir?. Qué pasa después de que un mensajero llega a tu casa y dice "ustedes son las familias escogidas, entre ustedes deben votar y escoger quién será el sacrificado o el ejecutor". Irónicamente, me di cuenta que casi todos tenemos a alguien al que elegiríamos, eso hace que se generen unas relaciones entre tensión y humor, entre tragedia y comedia que son bastante particulares”, afirma Fabio Rubiano, actor, director y dramaturgo de la obra, que en esta temporada comparte escenario con Marcela Valencia, Liliana Escobar y Jacques Toukhmanian, quienes hicieron parte de la primera versión en el 2010 y que ahora estarán junto a nuevos y reconocidos actores como Julián Román, Juanita Cetina, Mónica Giraldo, Reina Sánchez y Javier Riveros.
Sara Dice tiene un lenguaje teatral muy diferente a otras producciones del Teatro Petra como: Historia de una oveja, Yo no Estoy loca o Labio de liebre, con la actuación siempre ligada a elementos extremos, de total calma o total violencia. Sobre el tema, Fabio comenta, “Cuando empezamos a trabajar de nuevo en el texto, descubrí que es una pieza de gran valor, que refresca nuestros lenguajes, no es una comedia en el sentido estricto, pero tiene elementos de comedia. Es una obra sencilla con pocos elementos en escena, y el público a lado y lado, con el cual creamos unos códigos de comunicación muy interesantes, tanto en el asesinato como en las escenas de violencia, que nunca son con violencia, creadas con recursos teatrales, con alteraciones de tiempo, con ciertas relaciones absurdas, sin embargo, unidas a la cotidianidad”
El director aclara que “ Sara Dice no está directamente relacionada con nuestro universo político, aunque evidentemente es política e irónica frente a una sociedad violenta”