"Rich Men North of Richmond", el título de la canción de Oliver Anthony, un barbudo pelirrojo, con ritmo de country, exuda protesta contra las élites de la primera potencia del mundo frente a la dura vida de la clase obrera que llega a duras penas a final de mes.Desde que fue publicada el 11 de agosto en YouTube, ha sido reproducida en streaming más de 17,5 millones de veces y se ha descargado 147.000 en menos de una semana, convirtiéndose en el número de la lista Hot 100 que elabora Billboard, superando a artistas consagradas como Taylor Swift, Morgan Wallen y Olivia Rodrigo.Considerada como "himno político de los obreros" por algunos medios, la canción denuncia a los "obesos que ordeñan al estado del bienestar" mientras hay gente en la calle "que no tiene nada que comer".En medio de una vegetación exuberante a sus espaldas como único escenario y un micrófono, Anthony, acompañado de una guitarra, arremete contra las políticas económicas liberales de los años 1980 que dejaron la regulación en manos del mercado, o contra el aumento de los suicidios entre los jóvenes varones estadounidenses.Tampoco deja escapar en "Rich Men North of Richmond" las diferencias entre el sur y el centro rurales y conservadores y las ciudades del este y oeste progresistas.Tanto, que la derecha y la extrema derecha, liderados por comentaristas ultraconservadores como Laura Ingraham y Matt Walsh, se han apropiado de la canción, según el New York Times.La congresista republicana por Georgia (sur), Marjorie Taylor Greene, cercana a Donald Trump y defensora de las teorías conspiracionistas, considera que la canción es un "himno de los estadounidenses olvidados desde hace tiempo por nuestro gobierno", escribió en X, antigua Twitter.Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
"No hay que echarse las manos a la cabeza, las redes funcionan así y tenemos que acostumbrarnos a ello", afirma a EFE Myriam Redondo, periodista especializada en Comunicación Internacional y Desinformación Digital, al señalar que plataformas como Twitter, en las que los bulos emergen con facilidad desde cuentas anónimas, son las que "nos habitúan al impulso" y a publicar "mecánicamente y sin pensar".Eso fue lo que pasó en la noche de este lunes, cuando empezó a circular por Twitter una información de origen desconocido que anunciaba la muerte de José Luis Perales y que inundó la red con réplicas de un dato no contrastado.Tanto que el cantante, de viaje en Londres con su familia -como habían confirmado a EFE fuentes de su entorno-, se grabó un vídeo en el que aseguraba estar "más vivo que nunca" y lamentaba que alguien con "muy mala idea" se hubiera inventado la noticia de su muerte.Según Redondo, el principal problema de este tipo de información reside en "que los medios también se sumen a la desinformación", cuando "estas son oportunidades increíbles para que los medios recuperen su identidad de entidades necesarias y fiables" ensombrecidas por una dinámica en la que "tienes que conseguir publicar algo rápido".A ello se suma, en opinión de Noemí Morejón, profesora de Periodismo en la Universidad Loyola Andalucía, el hecho de que este tipo de noticias abunden en verano, "un momento en el que existen menos noticias, más tiempo para el entretenimiento y mucho morbo".Si bien esta forma de desinformación ha aumentado considerablemente desde la irrupción de lo digital, la difusión de falsas muertes de famosos ha sido una práctica frecuente que ha dado lugar a bulos previos, como el fallecimiento inventado de Miguel Bosé, Britney Spears o Fidel Castro.El método actual seguido por los creadores de bulos es a menudo el mismo: el anuncio se produce por cuentas de Twitter que imitan a las de figuras de autoridad. Esta práctica ha hecho saltar a la fama a algunos de sus artífices más destacados, como el experiodista y profesor italiano Tommaso Debenedetti, quien, además de vender entrevistas falsas con personajes ilustres, ha sido responsable de muertes inventadas como las de J.K. Rowling, Mario Vargas Llosa o Benedicto XVI.Frente a ello, se plantean herramientas de verificación encargadas de desmentir estos bulos, como las que usa EFE Verifica, el departamento de la Agencia EFE dedicado a localizar y explicar estas noticias falsas.El protocolo comienza por la constante monitorización de las redes y la identificación de informaciones sospechosas que puedan suponer un riesgo para la sociedad y sean manifiestamente virales, ya que dar mayor difusión a bulos, aunque desmentidos, podría aumentar su radio de expansión.Tras ello, el análisis y la aclaración de la información, brindando un mayor contexto o simplemente desmintiendo las "fake news", finalizan un proceso que, según Sergio Hernández, responsable de EFE Verifica, es útil pero insuficiente y debería ir acompañado de una alfabetización mediática."Que haya jóvenes o nuevas generaciones familiarizadas con los medios no significa que estén alfabetizadas mediáticamente", subraya, ya que "uno puede conocer la herramienta pero desconocer la información que mueve ese canal" y esta alfabetización debe consistir en un proceso "más profundo y analítico" que comience en etapas tempranas de la vida y se mantenga como una constante.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte te escuchar.
X, propiedad de Elon Musk, acusó al Centro para Contrarrestar el Odio Digital (CCDH, por su sigla en inglés) de generar estudios "erróneos" que le han costado a la firma tecnológica decenas de millones de dólares, según una copia de la demanda.Sin embargo, la base legal descrita en la demanda presentada en San Francisco el lunes por la noche era que la organización violaba los términos de servicio de X en la forma en que accedía a los datos para sus informes.El director ejecutivo de CCDH, Imran Ahmed, sostuvo el martes que la medida legal de Musk es un esfuerzo por silenciar a los críticos que proviene "directamente del libro de jugadas autoritarias".Ahmed apoyó la investigación del grupo y dijo que muestra que el odio y la desinformación se están "propagando como un reguero de pólvora" en la empresa de Musk. La demanda del multimillonario pide a un tribunal que otorgue a X una indemnización en metálico no especificada y que ordene al CCDH que detenga la forma en que ha estado obteniendo datos para sus informes.La demanda acusa al CCDH y a su casa matriz en Reino Unido de ser "organizaciones activistas que se hacen pasar por agencias de investigación". "Musk está tratando de dispararle al mensajero que destaca el contenido tóxico en su plataforma en lugar de lidiar con el ambiente tóxico que ha creado", dijo Ahmed en un comunicado. "Musk no nos intimidará para que guardemos silencio", agregó.Desde que Musk compró Twitter por 44.000 millones de dólares en octubre pasado, el negocio publicitario de la plataforma se derrumbó debido a que los especialistas en marketing rechazaron su estilo de gestión y los despidos masivos en la empresa, que destruyeron la moderación de contenido.En respuesta, el empresario pasó a construir una base de suscriptores y un modelo de pago en busca de nuevos ingresos.Muchos usuarios y anunciantes han respondido negativamente a las nuevas tarifas de la red social por servicios que antes eran gratuitos, a sus cambios en la moderación del contenido y al regreso de cuentas de extrema derecha previamente prohibidas.En diciembre, Musk restableció la cuenta de Twitter del expresidente Donald Trump quien, no obstante, aún no ha regresado a la plataforma.X también reintegró recientemente al rapero y diseñador Kanye West, unos ocho meses después de que se suspendiera su cuenta, según informaron los medios.En octubre de 2022, West, ahora conocido como Ye, publicó una imagen que parecía mostrar una esvástica entrelazada con una estrella de David, y Musk suspendió al artista de la plataforma.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Mediante la cuenta @juliotzin76, el maestro del municipio Amaxac de Guerrero enseña el idioma nativo de su abuela, y busca que las nuevas generaciones valoren las raíces indígenas de su estado.El profesor compartió con EFE que durante la pandemia por covid-19 observaba a sus sobrinos grabar sus bailes graciosos, con lo que descubrió TikTok y la gran cantidad de "videos basura” en la red. Por ello, ideó un plan para subir materiales interesantes, prácticos y educativos.“Siempre tuve la curiosidad de aprender y hablar náhuatl, por lo que comencé a grabar videos con los números y el abecedario, es decir, desde lo básico, porque era mi sueño mantener viva la lengua originaria de mí abuela, quien me decía muchas cosas que yo no entendía. Cuando crecí me di cuenta que tan groserías y palabras con cariño”, narró.Subió sus primeros videos y recibió comentarios ofensivos, pero él se mantuvo firme y avanzó con sus clases. El docente argumentó que más de la mitad de los municipios de su estado hablan esta lengua, por lo que debe mantenerse vigente. Se acercó a una comunidad cercana que habla náhuatl para practicar, mejorar su pronunciación y su interacción. “Todo lo aprendido tenía que compartirlo, por lo que comencé a incursionar en el TikTok con fines educativos”, reiteró.Proteger los idiomas indígenas de México Los videos de enseñanza del náhuatl resultan una novedad en México, uno de los países con más población indígena de América, con más de 23 millones de personas que se asumen como tal entre un total de 126 millones de habitantes, según el último censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).De ellas, casi 7,4 millones de personas hablan alguna lengua indígena, el 6 % de la población total, con el náhuatl como la principal, con más de 1,65 millones de hablantes.En poco tiempo, Julio Hernández tiene ahora más de 167.000 seguidores, y ha logrado una comunidad de personas interesadas de diferentes estados y hasta del extranjero.“Está el clásico alumno que se interesa en todo y quiere saber más, está la persona que quiere aprender a decir algunas frases para poder comunicarse, los extranjeros tienen mucha curiosidad y los migrantes buscan conocer la lengua para el día que regresen a territorio mexicano”, expuso.El maestro enfatizó que sus tendencias se apegan a la modernidad, pero combina el entretenimiento y la enseñanza.Su mayor reto es la instalación de un Centro de Enseñanza de Lenguas Originarias en su natal Tlaxcala con la intención de fomentar la preservación de este idioma.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Threads, lanzada el miércoles a las 23H00 GMT en cien países y que funciona por el momento sin avisos publicitarios, es la amenaza más grande hasta el momento contra Twitter, propiedad de Elon Musk, debilitado ya por diferentes razones."Hagámoslo. Bienvenidos a Threads", escribió Mark Zuckerberg en su cuenta en la nueva plataforma, antes de anunciar el jueves muy temprano que "diez millones de personas se inscribieron en siete horas".El presidente de Meta se dedicó a responder a nuevos usuarios en las primeras horas que siguieron de funcionamiento de la plataforma, cuyo lanzamiento se adelantó del jueves para el miércoles. "Una cosa que es importante es el número de luchadores campeones mundiales de MMA (siglas en inglés para Artes Marciales Mixtas) en Threads", escribió al luchador estadounidense de esa especialidad Jon Jones.En su primer tuit en más de una década, Zuckerberg publicó una imagen donde se ve a un hombre araña señalando a otro, en una aparente referencia al parecido entre las dos redes sociales. Luego, de nuevo en Threads, escribió: "Va a llevar algo de tiempo, pero creo que debería haber una plataforma de conversaciones públicas con más de 1.000 millones de personas. Twitter tuvo la oportunidad de hacerlo pero no dio en el clavo. Ojalá nosotros sí".En la tienda de Apple aparece descrita como "la aplicación de conversaciones basada en texto de Instagram", una presentación que sumada a las imágenes luce similar a Twitter. "Esperamos que (Threads) pueda ser una plataforma abierta y acogedora para el debate", escribió el CEO de Instagram, Adam Mosseri. "Si eso es lo que tú también quieres, lo mejor es ser amable"."Threads es donde las comunidades se juntan para discutir todo, desde los temas que nos preocupan hoy a los que serán tendencia mañana", afirma la descripción de la aplicación en esas tiendas.El lanzamiento de Threads llega apenas cuatro meses después de que se filtraran los primeros ecos del proyecto. "Estamos pensando en una red social independiente y descentralizada para compartir mensajes escritos en tiempo real", dijo el grupo en un comunicado enviado el martes a la AFP.Un eventual revés para TwitterMeta no había hecho una comunicación formal sobre el lanzamiento de la plataforma, que se produce apenas días después de una nueva controversia de Twitter. El sábado, el principal accionista, Elon Musk, anunció un límite en la cantidad de lecturas accesibles a los usuarios que no cayó nada bien entre tuiteros, desarrolladores y anunciantes.La decisión hace parte de un rosario de cambios que el magnate ha implementado y que han sido mal recibidos, como las nuevas reglas de verificación de cuentas a través de un pago o el despido de casi todo el personal dedicado a la moderación de contenidos. El lunes, Twitter además anunció que la extensión TweetDeck, muy popular entre los usuarios asiduos y empresas, pronto solo sería accesible a través del plan de pago y verificación.Meta optó por no ofrecer Threads en la Unión Europea hasta tanto se aclaren las implicaciones para la empresa y sus productos con base en el nuevo Reglamento de Mercados Digitales (DMA), que entró en vigencia a principios de mayo, según una fuente familiarizada con el tema.El DMA busca imponer reglas específicas a las empresas esenciales de Internet, sobre todo a Meta, para evitar prácticas anticompetitivas. No obstante, el grupo de Menlo Park (California) pretende, a largo plazo, lanzar Threads en la Unión Europea, en una fecha aún por definir, indicó una fuente cercana al tema.Plataforma de despegueMeta no oculta su estrategia para que su aplicación recién nacida crezca rápidamente, pues desde el primer momento decidió presentarla como un retoño de Instagram, que "es el producto más exitoso de la familia Meta", recuerda Pinar Yildirim, profesora de marketing de la Wharton School de la Universidad de Pensilvania. "No podían asociar este nuevo producto con Facebook, porque ese nombre ya no le gusta a nadie".Con más de dos mil millones de usuarios activos, Instagram le brinda a Threads una plataforma de despegue que soñarían los competidores más pequeños de Twitter, como Mastodon o Bluesky, u otros favoritos de ultraconservadores como Truth Social, Speak, Gettr o Gab.Así, Threads permite a los usuarios de Instagram autenticarse directamente si ya tienen una cuenta para publicar contenido en la nueva plataforma. "La ecuación es simple: si un usuario de Instagram con una cantidad significativa de seguidores, como (Kim) Kardashian o (Justin) Bieber o (Lionel) Messi comienza a publicar en Threads con regularidad, la nueva plataforma podría crecer rápidamente y creo que le seguirían los presupuestos publicitarios en un corto plazo", escribió el analista Brian Wieser en Substack.Algunas celebridades ya parecían contar con cuentas en Threads a la hora del lanzamiento, entre ellas la cantante Shakira, la modelo Karlie Kloss y el actor Jack Black.Esta tendencia podría ser todavía más preocupante para Twitter, pues la compañía basada en San Francisco ha visto cómo sus ingresos publicitarios se evaporan desde la llegada de Elon Musk.En cuanto a datos personales de los usuarios que recopila Threads, la descripción señala que se recopilarán, entre otros, los contactos y la geolocalización, y se utilizarán con fines publicitarios.Escuche lo mejor de la música clásica por la señal en vivo de la HJCK.
Threads ya se encontraba disponible el lunes en las tiendas de aplicaciones móviles de los sistemas operativos de iPhone y Android para una compra previa antes de su puesta en marcha."Threads es donde las comunidades se juntan para discutir todo, desde los temas que nos preocupan hoy a los que serán tendencia mañana", afirma la descripción de la aplicación en estas tiendas.El lanzamiento de esta aplicación coincide con un periodo de incertidumbre en Twitter desde la compra de Elon Musk en octubre, que reestructuró la compañía, despidió a miles de trabajadores y puso una barrera de pago a muchas prestaciones de la red.Meta, la matriz de Facebook e Instagram, anunció a mediados de marzo que estaba trabajando en una nueva red social cuya descripción la convertía en un competidor potencial de Twitter.Threads permitirá "conectar directamente con tus creadores favoritos y otros que aman las mismas cosas, o construir unos seguidores fieles para compartir tus ideas, opiniones y creatividad con el mundo", afirma la descripción en la tienda móvil."Estamos pensando en una red social independiente y descentralizada para compartir mensajes escritos en tiempo real", dijo el grupo en un comunicado enviado a la AFP.Justo la semana pasada, Elon Musk causó malestar entre los usuarios de Twitter al anunciar que la plataforma iba a limitar el número de mensajes que uno podía leer por día.El límite para la gran mayoría de usuarios que no pagan la suscripción era de 1.000 tuits diarios.El supuesto objetivo de esta medida es impedir que terceras empresas, especialmente desarrolladores de modelos de inteligencia artificial, usen los datos vertidos en la plataforma.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Mi primer video era el de un hombre que se suicidaba. [...] Tenía un niño de 2 o 3 años jugando al lado. Después de que el hombre se ahorcara, al cabo de unos dos minutos, entendió que algo no iba bien", cuenta el sudafricano de 30 años, antes de describir la reacción del niño."Esto me puso enfermo", dice, apuntando que las imágenes le provocaron "náuseas, vómitos". "Pero continué haciendo mi trabajo", agrega.Entre 2020 y 2023, cada día visionó centenares de videos violentos, con llamados al odio, para bloquearlos y evitar que llegaran a los ojos de los usuarios de Facebook.Trabajaba en Nairobi para Sama, una empresa californiana a la que Meta -matriz de Facebook, Instagram y Whatsapp- contrató entre 2019 y 2023 para que se encargara de la moderación de los contenidos de Facebook en África subsahariana.Por este centro de operaciones han pasado hasta 260 moderadores de varios países africanos contratados, sobre todo, por conocer numerosas lenguas locales. Trevin Brownie afirma que vio "cientos de decapitaciones", "órganos arrancados de cuerpos", "violaciones y pedopornografía al más alto nivel", "niños soldados preparándose para la guerra"..."Los humanos hacen cosas a otros humanos que nunca habría imaginado", dice. "La gente no tiene idea de los videos morbosos [...] de los que se libran", agrega.Batalla judicialTrevin Brownie es demandante en uno de los tres casos abiertos contra Meta y Sama en Kenia. Ha recurrido su despido junto a otros 183 exempleados de Sama, que anunció que cesaba su actividad en la moderación de contenidos. Los demandantes reclaman una compensación por unos sueldos "insuficientes" teniendo en cuenta "el riesgo al que se exponían", y por los "daños causados a su salud mental".La ofensiva judicial empezó cuando otro extrabajador, Daniel Motaung, presentó una demanda en mayo de 2022 ante un tribunal de Nairobi denunciando unas condiciones laborales "indignas", métodos de contratación engañosos, remuneraciones insuficientes y falta de apoyo psicológico.Testimonios recabados a finales de abril entre los otros demandantes confirman los hechos denunciados por Motaung. Dos de ellos, Amin y Tigist (los nombres fueron modificados), contratados en 2019 en el primer grupo de moderadores de Sama, afirmaron que ellos respondieron a ofertas de trabajo en centros de atención telefónica.No fue hasta firmar sus contratos, con cláusulas de confidencialidad, que descubrieron que en realidad iban a trabajar como moderadores de contenidos.Amin y Tigist no dijeron nada, ni pensaron en irse. "No tenía ni idea de lo que es un moderador de contenidos, nunca había oído hablar de ello", cuenta Tigist, una etíope que consiguió el trabajo por saber hablar la lengua amhárica."La mayoría de nosotros no sabía la diferencia entre un centro de atención telefónica y un centro de moderación de contenidos", confirma Amin, que trabajaba en el "mercado" somalí."Durante la formación, le restaron importancia al contenido. Lo que nos enseñaron no era nada comparado con lo que acabaríamos viendo", añade. "Los problemas empezaron después", dice.TraumaEn sus pantallas, ocho horas al día, iban pasando contenidos, a cada cual más impactante. "Uno no elige lo que ve, llega por azar: videos de suicidios, violencia, explotación sexual de niños, desnudez, incitación a la violencia...", cuenta Amin.Tenían que dedicar una media de 55 a 65 segundos a cada video y analizar entre 378 y 458 publicaciones al día, bajo riesgo de ser llamados al orden o despedidos si iban demasiado despacio, explican.Al ser contactada por la AFP, Sama afirmó que no estaba "en condiciones" de comentar los casos en curso. Meta aseguró, en un correo enviado a la AFP, que los moderadores "en principio no tienen que evaluar un número definido de publicaciones, no tienen cuotas y no están obligados a tomar decisiones apresuradas"."Autorizamos y alentamos a las empresas con las que trabajamos a que le den a sus empleados el tiempo que necesiten para tomar una decisión", añadió.Ninguno de los tres moderadores de contenidos entrevistados por la AFP había imaginado las consecuencias que ese trabajo acabaría teniendo en sus vidas.No consultaron a ningún psicólogo o psiquiatra, por falta de dinero, pero todos cuentan que tienen síntomas del síndrome de estrés postraumático y dificultades para relacionarse con la familia y la sociedad.Trevin Brownie dice que tiene "miedo de los niños por culpa de los niños soldado", y también de los lugares atestados "a causa de todos los videos de atentados" que ha visto. "A mí me volvían loco las fiestas", cuenta. "No he ido a un club desde hace tres años. No puedo, tengo miedo", sostiene.En el caso de Amin, los principales efectos se ven en su cuerpo, que pasó de 96 kilos a "69 o 70 kg". Todos aseguran que se han vuelto insensibles a la muerte o al terror. "Mi corazón se ha vuelto de piedra", resume Tigist."Hacía falta dinero"Meta indicó que tiene "contratos claros" con todos sus socios que incluyen "la disponibilidad de asesoramiento individual, un apoyo adicional para quienes están expuestos a un contenido más difícil"."A todas las empresas con las que trabajamos les exigimos que proporcionen una asistencia las 24 horas del día, los 7 días de la semana, con profesionales formados, un servicio de guardia y el acceso a la atención sanitaria privada desde el primer día de contrato", recalcó la compañía.Según los denunciantes, el apoyo propuesto por Sama, a través de "consejeros de bienestar", no estaba a la altura y se basaba en entrevistas vagas, sin un seguimiento efectivo. Además, cuestionaron la confidencialidad de las sesiones."No era para nada útil. No digo que no estuvieran cualificados pero creo que no lo estaban lo suficientemente como para gestionar a personas que moderan contenidos", considera Amin. Pese a sus traumas, siguieron trabajando porque les "hacía falta ese dinero".Con un sueldo de 40.000 chelines (270 euros, 287 dólares) y 20.000 chelines suplementarios para los no kenianos, ganaban casi el triple del salario mínimo nacional (15.200 chelines)."Desde 2019, no tuve oportunidad de encontrar otro empleo, pese a haberme presentado a muchos. No tenía otra opción. Por eso me quedé tanto tiempo", explica Amin.SacrificioPara aguantar, los moderadores deben encontrar "mecanismos de defensa", explica Trevin Brownie. El sudafricano, a quien solían encantarle las comedias, se volcó en las películas de miedo. "Era una forma de huir de mi realidad", afirma, explicando que también desarrolló una "adicción" a las imágenes violentas."Pero uno de nuestros principales mecanismos de defensa es que estamos convencidos de la importancia de este trabajo", añade. "Yo tenía la impresión de que me estaba haciendo daño pero por una buena razón, [...] que el sacrificio valía la pena por el bien de la sociedad"."Sin nosotros, las redes sociales no pueden existir", agrega. "Nadie abriría Facebook si estuviera lleno de contenidos impactantes, de venta de drogas, de chantajes, de acoso...".Merecemos que nos traten mejor"Esto causa daños y nosotros nos sacrificamos por nuestra comunidad, por el mundo. Merecemos que nos traten mejor", apunta Tigist. Ninguno volvería a dedicarse de nuevo a ello."Mi opinión es que ningún humano debería hacer eso. No es un oficio para humanos", explica Trevin Brownie. "Francamente, me gustaría que la inteligencia artificial pudiera hacer ese trabajo".Pero, pese a los enormes avances realizados, Trevin Brownie duda que eso sea posible en un futuro próximo. "La tecnología juega y seguirá jugando un papel central en nuestras operaciones de verificación de contenidos", aseguró Meta.Hasta ahora, ninguno le había hablado a nadie de su trabajo, ni siquiera a su familia, a causa de las cláusulas de confidencialidad y también porque "nadie puede entender lo que vivimos". "Si la gente se entera, por ejemplo, de que he visto pornografía, me juzgarán", explica Tigist.A su esposo, le contaba poco sobre lo que hacía. A sus hijos, se lo ocultó todo: "No quiero que sepan lo que he hecho. Ni siquiera quiero que se imaginen lo que he llegado a ver", dice. Recuerde conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Las palabras ´cis´ o ´cisgénero´ son consideradas insultos en esta plataforma", escribió Musk la pasada noche en un tuit en el que se pronunciaba sobre otro asunto como es el acoso en la red. El tuit ya tenía esta mañana 167.000 "me gusta".Una usuaria aprovechó para preguntarle qué sucedía con las personas que voluntariamente se identifican así, con el prefijo "cis", a lo que respondió: "Tú llámate como quieras".El prefijo "cis" es un ejemplo más del llamado lenguaje inclusivo y es usado principalmente dentro de la comunidad LGTBI como un término que entra en lo políticamente correcto.En los últimos tiempos, y en particular desde su compra de Twitter el pasado noviembre, Musk se ha significado como gran adversario de lo que los medios conservadores definen como "ideología woke", consistente en tomar en cuenta las sensibilidades de género y raciales en una sociedad diversa.Antes de su desembarco en Twitter, Musk consideraba que la red estaba demasiado escorada hacia lo políticamente correcto y que ejercía una indebida censura contra los discursos opuestos, clamando contra lo que consideraba ejercicios de censura.La pasada semana, y en un evento organizado por Viva Technology, volvió a decirlo: "Soy un gran fan de la libertad de expresión y debemos disfrutarla tanto como sea posible, tanto como lo permitan las leyes de un país. La libre expresión es relevante cuando la gente puede decir cosas que a ti no te gusten, pues de lo contrario, eso no es libre expresión".No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Si una ley se promulga, lo repito, Twitter se compromete a respetarla", contestó el multimillonario cuando le preguntaron por la nueva normativa de la Unión Europea (UE) sobre los servicios digitales. La entrevista con Musk, que es también propietario de Tesla y SpaceX, fue grabada el viernes al margen del salón VivaTech en París.La Ley de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés) entrará en vigor el 25 de agosto e impondrá a las plataformas actuar "con prontitud" para retirar cualquier contenido ilegal so pena de multas de hasta el 6% de su facturación mundial.Twitter se retiró a finales de mayo del código de buenas prácticas de la UE contra la desinformación en internet, creado en 2018.Durante la entrevista, Musk matizó que Twitter no sobrepasará "las disposiciones legales" en materia de censura y libertad de expresión y citó la dificultad de colocar el "cursor en lo que es bueno o malo, aceptable" o no. "Sin embargo, si se promulga una ley, como la ley en democracia representa la voluntad del pueblo (...) debe ser respetada", insistió.Al ser interrogado sobre los despidos masivos en Twitter en otoño, Musk aseguró que la compañía no "redujo la actividad de moderación en sí". "La moderación la llevan a cabo unos 4.000 colaboradores (...) y el trabajo se ha mantenido más o menos igual", afirmó Musk, refiriéndose incluso a una "disminución" de los discursos de odio, lo que contradicen ciertos estudios.Musk también adelantó que es "muy probable" que su empresa de vehículos eléctricos Tesla desarrolle un proyecto "importante" en Francia. Es "muy probable que Tesla haga algo muy importante en Francia en los próximos años", declaró el multimillonario, quien se reunió con el presidente francés Emmanuel Macron.El gobernante ha dicho que quiere convencer a Musk de instalar una planta de baterías para Tesla en Francia.El empresario estadounidense también abogó por "ralentizar" la inteligencia artificial (IA) y no "detenerla", tras firmar una petición en la que se pedía una pausa de seis meses en la investigación por los riesgos que entraña para la humanidad.Musk, que fundó en marzo X.AI, una nueva empresa especializada en este campo, también dijo que prefería ser "participante" en lugar de "observador".No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
La Asociación Nacional de Editores de Música (NMPA, por sus siglas en inglés) reclama a la red social hasta 150.000 dólares por obra usada, lo que elevaría la demanda a cientos de millones de dólares."Twitter es la mayor plataforma de redes sociales que se ha negado por completo a conceder licencias de millones de canciones en su servicio", declaró David Israelite, director ejecutivo de la NMPA, en respuesta a una pregunta de la AFP."Twitter sabe perfectamente que la música es filtrada, lanzada y transmitida por miles de millones de personas cada día en su plataforma".La respuesta de Twitter a las quejas sobre los derechos de autor no ha mejorado desde que Elon Musk compró la plataforma a finales del año pasado por 44.000 millones de dólares, sostiene la demanda."Al contrario, los asuntos internos de Twitter en relación con las cuestiones pertinentes a este caso son un caos", argumenta la demanda, presentada en el estado de Tennessee.La jefa de confianza y seguridad de Twitter confirmó a principios de este mes que había abandonado la empresa, sin hacer públicos los motivos.La ejecutiva era la segunda responsable de confianza y seguridad que abandonaba Twitter desde que el excéntrico multimillonario Musk compró la plataforma y redujo la moderación de contenidos.Desde que se hizo cargo de Twitter, Musk ha despedido a la mayoría de su personal, readmitiendo cuentas canceladas, suspendiendo a periodistas y cobrando por servicios que antes eran gratuitos."Twitter se niega a poner fin a la infracción desenfrenada de música protegida por derechos de autor (...) porque sabe que la plataforma de Twitter es más popular y rentable si Twitter permite tal infracción", argumentan los demandantes.Permitir el uso de música sin licencia en las publicaciones de Twitter da a la plataforma una ventaja sobre competidores como TikTok, Instagram y YouTube, que pagan tasas a los editores de música, explican los demandantes. "Twitter alimenta su negocio con innumerables copias infractoras de composiciones musicales", añaden.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Era ingenua, pero había imaginado que yo sería la persona que anunciaría la muerte de mi marido, Paul Auster. Murió en casa, en una habitación que le encantaba, la biblioteca, una habitación con libros en todas las paredes desde el suelo hasta el techo, pero también con altas ventanas que dejaban entrar la luz. Murió con nosotros, su familia, a su alrededor el 30 de abril de 2024 a las 18:58. Algún tiempo después, descubrí que incluso antes de que se llevaran su cuerpo de nuestra casa, la noticia de su muerte circulaba por los medios de comunicación y se habían publicado obituarios. Ni yo, ni nuestra hija Sophie, ni nuestro yerno Spencer, ni mis hermanas, a las que Paul quería como a sus propias hermanas y que fueron testigos de su muerte, tuvimos tiempo de asimilar nuestra dolorosa pérdida. Ninguno de nosotros pudo llamar o enviar un correo electrónico a sus seres queridos antes de que empezaran los gritos en línea. Nos robaron esa dignidad. No conozco la historia completa de lo sucedido, pero sé una cosa: Está mal.Paul nunca abandonó Cancerlandia. Resultó ser, en palabras de Kierkegaard, la enfermedad de la muerte. Tras el fracaso de los tratamientos, su oncólogo le ofreció quimioterapia paliativa, pero él dijo que no y pidió un hospicio en casa. Muchos pacientes sufren los estragos del tratamiento contra el cáncer, y algunos se curan, pero lo que el mundo de la medicina llama educadamente "efectos adversos" se convierte fácilmente en una realidad en cascada de una crisis tras otra, causada, no por el cáncer, sino por el tratamiento. Las inmunoterapias, que actúan a nivel molecular, pueden ser especialmente peligrosas. Un "efecto" puede poner en peligro la vida y exigir una intervención drástica, que a su vez provoca otro efecto potencialmente mortal, que exige una nueva intervención, y el cuerpo agredido se debilita cada vez más.Paul ya estaba harto. Pero nunca, ni con palabras ni con gestos, dio muestras de autocompasión. Su valor estoico y su humor hasta el final de su vida me sirven de ejemplo. Dijo varias veces que le gustaría morir contando un chiste. Le dije que era poco probable, y sonrió.Paul era, sobre todo, un contador de historias. Escribía muchas historias, tanto ficticias como reales, pero también le encantaba contarlas, y a veces me divertía ver cómo, cuando nos sentábamos juntos en la consulta de un médico tras otro en estos dos últimos años, se ponía en modo narrador, volvía atrás para preparar el escenario y luego avanzaba con la fascinante historia de su propia enfermedad. Yo, en cambio, soltaba preguntas concisas sobre procesos biológicos que necesitaban aclaración. Muchas veces, como esperaba, los médicos no tenían respuestas.Los dejo con la última frase de la última novela de Paul, Baumgartner. No fingiré que cuando me la leyó no sentí la gravedad de su significado. Entonces estaba enfermo, sufría fiebres todas las tardes y, aunque aún no le habían diagnosticado cáncer, yo tenía la potente sensación de que a él y a mí no nos quedaba mucho tiempo juntos, pero observen la ambigüedad, la suave ironía, el rechazo de lo definitivo, lo absoluto, lo rígido o categórico. El querido anciano de Paul ha tenido un accidente de coche: "Y así, con el viento en la cara y la sangre aún goteando de la herida de su frente, nuestro héroe sale en busca de ayuda, y cuando llega a la primera casa y llama a la puerta, comienza el capítulo final de la saga de S.T. Baumgartner".💬Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.No olvidemos que detrás de nuestros inventos técnicos y de las redes sociales hay seres humanos, que los fallos nos pertenecen, no a las máquinas, por mucho que la tecnología ayude a la simplificación. Una máquina no gritó la noticia de la muerte de Paul antes de que yo o nuestra hija hubiéramos dicho una sola palabra al respecto. Lo hizo una persona. También puede ser ingenuo por mi parte pedir amabilidad, respeto y amor en un mundo de beligerantes categorías sin aire, a las que tantos de nosotros hemos sido asignados, Paul incluido. La brutalidad de esas categorías encogen la realidad dinámica en cosas estáticas. Sustituyen la humildad del no saber por una fea certeza. Es desconcertante mirar a mi alrededor y descubrir que innumerables personas que conocieron a Paul, más y menos, a menudo menos, pontifican ahora sobre el hombre que yo amé. Bueno, que así sea. No tengo control sobre eso.Me he reído a carcajadas del estereotipo perpetrado en los medios de comunicación de este país, y a veces también en los del Reino Unido, de Paul Auster, el escritor frío, inteligente, "posmoderno" e "intelectual". Esta caricatura fabricada es tan ajena tanto a la persona como a los escritos que he conocido íntimamente durante cuarenta y tres años, y era, francamente, tan confusa para él, que simplemente no podía entender de qué se trataba. Como su testigo, amiga, amante, colega escritora y primera lectora (como él lo fue mío), sólo puedo decir que escribía desde las profundidades del sentimiento, desde los espacios de ensueño donde nacen, se desarrollan y terminan los grandes libros. No son los espacios de las convenciones prescritas, de las novelas y memorias que salen de los departamentos de escritura creativa de las universidades de Estados Unidos, resbaladizas obras de prosa bruñida que se han convertido en los equivalentes literarios de los algoritmos que "normalizan" los datos deshaciéndose de los "valores atípicos", absurdas mercancías de mercado de "relacionabilidad". ¿Qué significa esa palabra? ¿"Relacionable" con quién? Una relación requiere al menos dos personas concretas. ¿Se ha reducido la cultura de los medios de comunicación a considerar la enorme diversidad de personalidades humanas y sus historias como una sola masa? ¿No es un acto de terrible arrogancia declarar que una obra de arte es o no relacionable?Mi marido no tenía ordenador. Escribía a mano y mecanografiaba sus manuscritos en una máquina de escribir Olympia. En los últimos días de su vida, escribía cartas a nuestro nieto Miles. Su diminuta caligrafía se tambaleaba como consecuencia de un temblor causado por el tratamiento, pero tachó esas cartas hasta que perdió toda fuerza. Nuestra ayudante y querida amiga, Jen Dougherty, descifró los textos después de que yo los hubiera fotografiado, y los mecanografió para él. Quería que fuera su último libro. En un arrebato de determinación, consiguió terminar una carta y redondear su texto, pero el manuscrito no es largo. Con esa carta terminó su vida de escritor.Las historias de Paul viajan. A diferencia de gran parte de la literatura publicada en Estados Unidos, su obra no es parroquial. Aunque creció y floreció sobre todo en su propio terreno -una infancia en Nueva Jersey, una pasión constante por el béisbol, un amor por la tradición y la historia de Estados Unidos-, su obra se ha traducido a más de cuarenta idiomas. Hace años perdimos la cuenta exacta. Es muy querido en América, Europa, Oriente Medio, Japón, Corea y recuerdo haber visto su cara en la portada de lo que creo que era el Esquire chino. Su escritura traspasa fronteras porque, aunque sus novelas y memorias se visten con los ropajes de sus épocas y lugares particulares y la mayoría de las veces se desarrollan íntegramente en Estados Unidos, los huesos de sus historias abordan cuestiones que van mucho más allá de cualquier aquí y ahora. ¿Qué significa estar vivo? ¿Cómo podemos los seres humanos cegados encontrar un camino a seguir cuando estamos atrapados por nuestras propias limitaciones perceptivas? ¿Qué es un acto moral? Y una y otra vez, ¿cómo sigue adelante la gente tras la terrible pérdida de un ser querido? Es una pregunta excelente. ¿Cómo lo hacemos?No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
'El proceso' es una de las novelas más aclamadas del siglo XX que, nada más aparecer en 1925, tras la muerte de Kafka, fue admirada por escritores como Thomas Mann y elogiada por grandes pensadores como Walter Benjamin, Adorno o Hannah Arendt.El epílogo que completa esta nueva edición explica el origen biográfico de la obra y proporciona una visión panorámica de sus múltiples interpretaciones y resonancias, explicó este jueves Arpa.Esta novedosa traducción es obra del filósofo y germanista Luis Fernando Moreno Claros, que sigue fielmente los manuscritos originales de Kafka y recrea su estilo tan característico.Josef K., un ciudadano corriente, se despierta una mañana en presencia de unos misteriosos funcionarios que han ido a detenerlo a la pensión en la que reside.Le interrogan y le comunican que se le permite seguir con su vida diaria a pesar de estar detenido y, a partir de ahí, se ve envuelto en un proceso judicial laberíntico cuyo inexplicable entramado intentará desentrañar.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Para ello tendrá que adentrarse en el enigmático mundo del 'tribunal', una instancia omnisciente que todo lo domina desde las sombras.Con este argumento, 'El proceso' se ha interpretado como la novela que mejor simboliza la alienación y el desamparo del hombre moderno: un ser perdido en una maraña de burocracia absurda, anonadado ante la fuerza de un poder abstracto que lo somete, y que se ve abandonado a su desesperación en medio de un mundo falto de cordura, o simplemente condenado a existir y morir sin haber dado un sentido a su vida.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
“Al final los festivales lo que consiguen es crear una especie de pequeña ciudad, una ciudad efímera durante unos días en los que tiene que poner a disposición de miles de personas todas las necesidades básicas para favorecer un desarrollo sostenible”, destacó en una entrevista Paula Ráez, consultora de cultura y sostenibilidad de la Asociación Española de Festivales de Música y Gabeiras & Asociados.En 2023 se celebraron en España cerca de mil festivales en un negocio que generó casi 580 millones de euros, según los datos del Anuario de la Música en Vivo. Un sector en el que uno de los principales objetivos es reducir su impacto y cumplir, entre otros, con los compromisos adquiridos en la Agenda 2030 de desarrollo sostenible de la ONU.Un desafío que ya se traduce en mejoras significativas como el descenso del 75% con respecto a 2022 en el uso de plásticos o una reducción de las emisiones medias por persona y día, según el estudio de la británica Greener Future, una de las principales certificadoras y asesoras de sostenibilidad en festivales.“Se ha avanzado bastante. Cada vez son más los festivales que se suben a este carro. Creemos que el carácter transformador de la cultura puede contribuir directamente a favorecer un desarrollo más sostenible de los territorios, más responsables”, añadió Ráez.Pero también se unen los propios músicos, con bandas como Radiohead o Coldplay que ya exigen conciertos de “carbono neutro” y en los que haya una gestión responsable de los residuos.En este sentido, Coldplay logró emitir con su última gira mundial “Music Of the Spheres” hasta un 47% menos de CO2 en comparación con la de 2016-2017 gracias al uso de baterías y vehículos eléctricos, reducción de plásticos o el uso en sus escenario de materiales sostenibles como el bambú, según el informe publicado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí. Empresas y promotores, unidos“Los festivales son pequeñas ciudades donde se pueden llevar a cabo pruebas movilidad, de suministro o de alimentación”, destacó a EFE Ignacio Asensi, responsable de patrocinio de Endesa, empresa que entró en 2023 en el mundo de la música para aportar soluciones en emisiones, transporte eléctrico, concienciación ambiental o uso de materiales sostenibles.De este modo, el pasado verano lograron que el festival Cruïlla de Barcelona fuera el primero en España con un suministro energético cien por cien renovable.“La sostenibilidad es algo que está absolutamente integrado en nuestro negocio. Sumarte al entorno local y ver las problemáticas o las necesidades que tienen. Por ejemplo, ahora en Cataluña sería muy interesante poder hacer algo en torno al agua, la utilización correcta del agua”, asegura.Otro de los sectores clave para minimizar la huella de los festivales es el de las bebidas, que suponen el 60% del patrocinio total, con marcas obligadas a ofrecer materiales reutilizables y una gestión de residuos sostenible.“Todo lo que se hace tiene un filtro de sostenibilidad. Tenemos que ser muy estrictos con este tipo de problemas. En general hay una buena cultura de los asistentes o en la convivencia de los propios festivales con la ciudad. Es un impacto muy positivo”, añade el Content Manager de Vibra Mahou, David Pejenaute.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Yo tenía ocho años. En aquel momento de mi vida, nada me importaba más que el béisbol. Mi equipo era el New York Giants, y seguía las actividades de aquellos hombres de gorra naranja y negra con la devoción de un verdadero creyente. Incluso ahora, al recordar ese equipo que ya no existe, que jugaba en un estadio que ya no existe, soy capaz de recitar los nombres de casi todos los jugadores. Alvin Dark, Whitey Lockman, Don Mueller, Johnny Antonelli, Monte Irvin, Hoyt Wilhelm. Pero ninguno era tan grande, tan perfecto ni tan digno de veneración como Willie Mays, el incandescente Say-Hey Kid.Aquella primavera me llevaron a mi primer partido de liga. Unos amigos de mi padre tenían asientos de tribuna en el Polo Grounds, y una noche de abril fui con mis padres y sus amigos a ver a los Giants contra los Milwaukee Braves. No sé quién ganó, no recuerdo un solo detalle del partido, pero sí recuerdo que, cuando acabó, mis padres y sus amigos se quedaron charlando en sus asientos hasta que todos los espectadores se hubieron marchado. Se nos hizo tan tarde que tuvimos que cruzar el campo y salir por una de las puertas centrales, que era la única que estaba abierta. Y dio la casualidad de que esa salida estaba justo debajo de los vestuarios de los jugadores.En el momento en que nos acercamos a la puerta, atisbé a Willie Mays. No había duda alguna de que era él. Se trataba de Willie Mays en persona, ya sin el uniforme del equipo, vestido con ropa de calle a menos de tres metros de mí. Conseguí que mis piernas me llevaran hacia él, y a continuación, haciendo acopio de todo mi valor, hice que las palabras me salieran de la boca:—Señor Mays —le dije—, ¿podría firmarme un autógrafo?Mays debía de tener unos veinticuatro años, pero fui incapaz de llamarle por su nombre de pila.Su respuesta a mi pregunta fue brusca pero amigable.—Claro, chaval —dijo—. ¿Tienes un lápiz?Recuerdo que estaba tan lleno de vida, hasta tal punto rebosaba juventud y energía, que no dejaba de dar saltitos mientras hablaba.💬Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Pero yo no llevaba lápiz, de modo que le pedí a mi padre si podía prestarme el suyo. El tampoco llevaba. Ni mi madre. Y resultó que los demás adultos tampoco.El gran Willie Mays seguía allí, mirándome en silencio. Cuando quedó claro que no había nadie en el grupo que llevara nada con lo que escribir, se volvió hacia mí y se encogió de hombros.—Lo siento, chaval —dijo—. Si no tienes lápiz, no puedo firmarte un autógrafo.Y salió del estadio perdiéndose en la noche.No quería llorar, pero las lágrimas empezaron a caerme por las mejillas, y no pude hacer nada para impedirlo. Y lo peor fue que seguí llorando en el coche hasta que llegamos a casa. Sí, estaba abatido, decepcionado, pero también irritado conmigo mismo por no ser capaz de controlar las lágrimas. No era ningún crío. Tenía ocho años, y se suponía que un muchacho de esa edad no debía llorar por algo así. No sólo no tenia el autógrafo de Willie Mays, sino que tampoco tenía nada más. La vida me había puesto a prueba, y yo no había sabido dar la talla.Después de aquella noche, comencé a llevar un lápiz conmigo allí donde iba. Adquirí la costumbre de no salir de casa sin antes asegurarme de que llevaba un lápiz en el bolsillo. No es que planeara hacer nada con él, pero no quería que me cogieran otra vez desprevenido. En una ocasión ya me habían pillado con las manos vacías, y no iba a permitir que eso volviera a pasarme.Cuando menos, los años me han enseñado esto: si llevas un lápiz en el bolsillo, hay bastantes posibilidades de que algún día te sientas tentado a utilizarlo.Como me gusta decirles a mis hijos, así es como me hice escritor.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Paul Auster, nacido el 3 de febrero de 1947 en Newark, Nueva Jersey, fue un autor estadounidense cuyo trabajo significó uno de los paradigmas de la literatura norteamericana contemporánea. A lo largo de su carrera, Auster fue aclamado por su habilidad para explorar temas complejos como la identidad, el azar y la soledad a través de una prosa distintiva y evocadora.💬Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Uno de los aspectos más destacados de la obra de Paul Auster fue su famosa "Trilogía de Nueva York", compuesta por las novelas "Ciudad de cristal" (1985), "Fantasmas" (1986) y "La habitación cerrada" (1986). Esta trilogía, considerada una obra maestra del género posmodernista, fusionó elementos del thriller, la metaficción y la filosofía existencialista para crear una narrativa absorbente que desafió las convenciones literarias tradicionales.Auster fue conocido por su estilo de escritura conciso y reflexivo, así como por su uso magistral de la estructura narrativa fragmentada y la voz narrativa ambigua. Sus personajes a menudo se encontraban en mundos enigmáticos y laberínticos donde la realidad se entrelazaba con la fantasía, lo que invitaba al lector a reflexionar sobre cuestiones fundamentales de la vida y la experiencia humana.Además de su trilogía más famosa, Auster produjo una amplia gama de obras que abarcaban novelas, ensayos, poesía y memorias. Entre sus obras más destacadas se encontraban "El libro de las ilusiones" (2002), "Brooklyn Follies" (2005), "4 3 2 1" (2017) y "Diario de invierno" (2012). En cada una de estas obras, Auster demostró su maestría para tejer historias complejas y profundamente humanas que resonaban con los lectores a nivel emocional e intelectual.El trabajo de Auster fue destacable por su capacidad para capturar la esencia de la condición humana en todas sus complejidades y contradicciones. Su enfoque introspectivo y su exploración de temas universales como el destino, el azar y la búsqueda de significado consolidaron su lugar como uno de los escritores más influyentes de su generación.Auster falleció el martes 30 de abril a los 77 años después de padecer cáncer de pulmón. A lo largo de su carrera, fue galardonado con numerosos premios y reconocimientos, incluyendo el Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 2006. No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.