Con la presentación de la página web en honor a la poeta Maruja Viera (www.marujaviera.com) quién cumplirá un siglo de vida el próximo 25 de diciembre, en el marco del Encuentro de Mujeres Poetas en Roldanillo, Valle del Cauca el pasado fin de semana, que incluye un recorrido por su historia, acceso de forma gratuita a su obra en los que se incluyen libros de poesía, crónicas y ensayos, además de diversos contenidos digitales alrededor de su figura, se dio apertura a la iniciativa del Ministerio de Cultura "100 años, 100 poemas". El propósito de esta iniciativa es “incentivar en todo el territorio nacional la lectura de su poesía, resaltar su aporte a la literatura escrita por mujeres y difundir su obra entre las nuevas generaciones”, afirmó Angélica María Mayolo, Ministra de Cultura. Para ello, en una propuesta de Maratón Digital de Poesía que se llevará a cabo el mes de octubre, podrá leer alguno de los 100 poemas que eligió la poeta. "Como en un arco que se tiende desde las primeras décadas del Siglo XX hasta este Siglo XXI, los 100 años de Maruja Vieira resumen la gesta por la educación, la participación, el trabajo y la literatura escrita por mujeres" abre la página web en honor de La Mamá Grande de la poesía colombiana, quién también hace parte también de La Biblioteca de Escritoras Colombianas lanzada a principios del año con su obra ‘El nombre de antes’.Para participar podrá hacer elección de alguno de los cien títulos de los poemas elegidos por la autora y registrar su correo electrónico donde le serán enviadas las especificaciones que debe tener la grabación. Los videos serán difundidos a través de las redes sociales del Ministerio en el mes de octubre.Si quiere conocer más sobre la obra y vida de Maruja Viera puede hacerlo a través de su página web, donde también encontrará más información sobre la iniciativa "100 años, 100 poemas". Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El proyecto donde se podrá conocer parte de la tradición literaria de las mujeres de nuestro país desde la colonia hasta el siglo XX estará realizando presente en La Feria del Libro de Bogotá, después de su lanzamiento el 8 de marzo del presente año. Esta biblioteca que tiene a la escritora y Premio Alfaguara 2021, Pilar Quintana como cabeza del proyecto, iniciará su serie de eventos el 23 de abril a las 5:00 p.m. en el auditorio José Asunción Silva, con una lectura dramática de "Los hijos de ella" de la escritora Amira de la Rosa (incluida dentro de la colección) dirigida por Mario Duarte e interpretado por un elenco de actores de primer nivel. La entrada es abierta para todo el público sin inscripción previa. La franja de eventos continuará los días 25, 26, 27 de abril, donde se presentarán los libros "Tengo los pies de cabeza" de Berichá, "Mido mi cuarta y me paro por ella" de Amalialú Posso Figueroa, "Mi cristo negro" de Tersa Martínez de Varela, "Los hijos de ella" de Amira de la Rosa, "La mujer que sabía demasiado" de Silvia Galvis, "La m de las moscas" de Helena Araújo, "Mi capitán" de Flor Romero de Nohra, "El oficio de vivir" de María Mercedes Carranza, entre otros. Para el 2 de mayo finalizará la promoción del proyecto en el marco de la FilBo con un taller dirigido por Camila Charry, enfocado a docentes para conocer los títulos de la biblioteca y su implementación en las aulas de clase. Este evento es gratuito, sin embargo necesita de inscripción previa. La biblioteca está compuesta por 18 títulos que incluye los nombres de Silvia Galvis, Amira de la Rosa, Helena Araújo, Sofía Ospina de Navarro, Emilia Pardo Umaña, Emilia Ayarza, Maruja Vieira, Francisca Josefa de Castillo, Soledad Acosta de Samper, Berichá, Albalucía Ángel, Meira Delmar, Hazel Ronbinson Abrahams, Amalialú Posso Figueroa, Teresa Martínez de Varela, María Mercedes Carranza, Elisa Mújica, Flor Romero de Nohra de los cuales 11 estarán a la venta gracias a la alianza con distintas editoriales. Puede consultar la biblioteca de manera digital en la página web de la Biblioteca Nacional. Para consultar más información de los eventos recuerde visitar la página de la Feria del Libro de Bogotá.
Luchar contra el olvido inducido por el sistema patriarcal. Poner el foco en las creadoras que trataron de ignorar con el paso de los años, décadas y hasta siglos. La memoria como única fuente de resguardo frente al tiempo. La historia cultural y la tradición literaria de un país no estará jamás completa si solo hablamos sobre los hombres. Por fortuna, los tiempos en que vivimos son un respiro de reivindicación, de igualdad y por supuesto, también de divulgación y formación para las generaciones futuras.Pilar Quintana sale de un auditorio en una de las bibliotecas públicas de la ciudad que hace unos instantes estallaba en aplausos con alguna de sus palabras para jóvenes, adolescentes y niños en el marco de un concurso nacional. Es una de las figuras más representativas de la literatura en Hispanoamérica y su voz una credencial de calidad. Entre búsquedas para conversatorios, fotos y firmas, logramos entablar una conversación sobre el proyecto de la biblioteca de escritoras colombianas en compañía de otra de las protagonistas de esta historia: Natalia Mejía, una de las asistentes editoriales del proyecto.Todo inició en 2017, como suele ocurrir en la mayoría de los casos, con una pregunta: ¿Cuál es la tradición literaria de escritoras en Colombia? Después de que Pilar Quintana junto a otras escritoras se unieran dentro del movimiento "Colombia tiene escritoras" para hacerle frente de forma mediática y cultural a la representación de la literatura en el país que para ese entonces en eventos como el de la Biblioteque de l’Arsenal de París, la delegación estaba conformada solo por hombres blancos. Aunque podemos rastrear un poco el origen de este proyecto con la polémica surgida en 2017 con la elección para un evento internacional de 10 escritores como representación de la literatura colombiana, ¿cuándo pasa de ser una idea a convertirse en un proyecto como tal? Pues para mí empezó cuando hubo esa polémica en redes de "Colombia tiene escritoras" y luego de esa polémica nos reunimos varias escritoras y empezamos a armar una base de datos de escritoras colombianas y eran un mundo. Y yo no había leído a casi ninguna, máximo cinco contemporáneas. Uno quejándose y diciendo que Colombia tenía escritoras y yo, ¡La propia escritora no conocía la tradición literaria de la literatura hecha por mujeres! Y empecé a recordar que en mi colegio, que tenía énfasis en literatura para las que estábamos en B, habíamos leído bastante: clásicos colombianos y de afuera, escritoras de afuera, pero no leí ninguna escritora clásica colombiana. Ahí me empezó esa inquietud, y un día estaba en un programa trabajando como contratista del ministerio con un proyecto llamado "Mujeres narran su territorio" y tuve una reunión con María Orlanda Aristizábal y vi la Biblioteca de literatura afrocolombiana y les dije: "¿Se imaginan una biblioteca de escritoras?" y María Orlanda, que es una cómplice maravillosa, que es un mujer muy pila, que se da cuenta e investiga que necesita el medio literario patinó el proyecto en el Ministerio. Se consiguió la plata y formamos un grupo editorial en la primera fase dónde estábamos: Natalia Mejía como asistente editorial, María Antonia León y yo. Hicimos la investigación y vimos que era un proyecto tan grande que entre tres personas no podíamos tomar las decisiones editoriales, si no que debíamos conformar un comité editorial donde había escritoras, editoras, gestoras culturales, libreras y personas del medio. Incluyendo dos hombres, un librero que me parecía clave, que se ha leído toda la tradición literaria de Colombia y dos, Felipe Gonzáles, el editor de Laguna que descubrimos, era la única editorial que había publicado más mujeres que hombres. Y entonces, con ese comité editorial, ya empezamos a conformar el proyecto, a ver que se necesitaba: Cuáles eran las urgencias, cómo debía ser la biblioteca, cómo debían ser los libros, qué autoras debían estar, qué libros debían estar y que no nos correspondía hacer como biblioteca de escritoras colombianas. Me pregunto empezando: ¿cómo se vendió la idea? y ¿si tuvieron algunos problemas para presentarla o simplemente todo fue muy orgánico? Todo fue orgánico. En ese momento, la directora de arte era Amalia de Pombo y le pareció divino el proyecto y nos dijo algo muy clave, que fue que las bibliotecas del Ministerio generalmente salen y se quedan en las bibliotecas y las conocen solamente los expertos, la gente que va y busca porque quiere leer literatura afro colombiana, o porque quiere leer literatura indígena colombiana o porque quiere leer a las mujeres. Ella dijo, yo no quisiera esto para esta biblioteca porque este es un proyecto muy bonito. Entonces ella hizo que hiciéramos una alianza con editoriales independientes para que los libros no se vayan solamente a las bibliotecas públicas, sino que además, circulen en el mercado y puedan ser comprados y adquirido. Ese fue un punto clave, pero yo creo que el proyecto lo que tuvo desde siempre fue aliados, no, no hubo oposición de ningún tipo. Cuando ya está la idea, ¿cómo empieza la investigación?, ¿cuáles eran los criterios de evaluación? Mira, la persona que más ha estudiado a las escritoras mujeres en Colombia es Luz Mary Giraldo. Nosotras nos leímos a toda Luz Mary, sus ensayos, sus antologías, y ahí empezamos a tener la base de datos de escritoras. Natalia y María Antonia empezaron a ver: cuántas escritoras hay vivas, muertas, etc. Teníamos la base de datos de "Colombia tiene escritoras" que Catalina Holguín que había hecho esa base de datos nos la pasó y luego, conformamos un cuerpo con este mundo de autoras. Luego con el comité editorial dijimos: "¿Qué tiene que hacer esta biblioteca?". Muy rápido llegamos a que esta biblioteca no le corresponde hacer una promoción de las autoras contemporáneas vigentes. Eso le corresponde al mercado, a las editoriales, a los lectores. La urgencia es rescatar a autoras que eran grandes autoras, autoras clásicas, que nadie ha leído. Todos en el Colegio leemos María, de Jorge Isaacs, pero nadie se lee Una holandesa en América, de Soledad Acosta de Samper, que es un libro no solo comparable a María, sino que además a mí me hubiera servido tanto leer a Soledad Acosta de Samper en el colegio, porque yo crecí con la idea de que la mujer ideal era María, una boba que no lee y obediente. En cambio, Soledad Acosta tiene una heroína de la misma época que es lectora, que no quiere casarse, que quiere trabajar, que busca el conocimiento y la libertad. Existía la sensación que a nosotros se nos había negado una parte de nuestra tradición literaria, que esta biblioteca lo que tenía que hacer era esa parte de traerla a la luz. Y estas decisiones nunca las tomamos solas, sino que a todo el comité editorial le preguntábamos quiénes tienen que estar y qué libros tienen que estar en esta biblioteca. Luego viene el proceso de cuando ya teníamos el listado de autoras. Después vino un tema difícil que es el de los derechos. Había dos autoras libres de derechos que debían estar, pero la mayoría de las autoras murieron hace menos de 80 años y entonces tenían derechos y la negociación no es tan fácil.Hubo algunas autoras a las que sencillamente no pudimos publicarlas porque no tienen herederos, otras cuyos herederos no son sus hijos, ni su sobrino, ni sus nietos, sino alguien muy lejano que no está enterado de la importancia de su tía tatarabuela o otros casos que tienen agentes que no les interesaba el proyecto. Y bueno, ¿cómo se llega al número de 18 autoras? Este número mágico, es porque las otras colecciones del Ministerio tienen 18 títulos. Entonces siempre sabíamos que era un número muy estrecho. Y al principio pensábamos era que debemos hacer más bien una colección de libros, porque son tantas autoras que como vamos a publicar solo 18. Entonces dijimos hagamos esta biblioteca de 18 y luego a ver si logramos seducir al Ministerio para que más adelante complemente la biblioteca de escritoras colombianas con una colección donde podamos meter las que se nos quedaron por fuera en una colección de antologías. ¿Cómo fue enfrentarse a la censura en un proceso de reedición? ¿Cómo fue también ese proceso de ya tener definida la obra y ver si tenía censura? Mira que teníamos una obra que salió publicada en una editorial reconocida en su momento, es una obra reciente. El heredero nos dijo "yo quiero enviarles el original de la autora" y cuando lo tuvimos nosotras cogimos las dos versiones y no podíamos creer la diferencia. Entonces, inmediatamente lo llamamos a preguntarle: "¿Qué pasó?". Pues resulta que en su momento era una obra polémica porque aunque es una obra de ficción está basada en los expedientes del proceso 8000 y fue una obra que fue sometida en su momento a censura.El manuscrito original estaba sin editar, entonces nos tocó editarlo desde el principio. La verdad, no encontramos resistencia tampoco dentro del Ministerio. Apenas yo llegué con el caso y la directora de artes, Amalia de Pombo, dijo, claro que tiene que salir el manuscrito original de la autora, entonces hubo mucho respeto en ese sentido.¿Sientes que este proyecto hubiese sido posible antes o sientes que es un proyecto muy acorde a los tiempos que estamos viviendo?Yo creo que hubiera sido imposible antes. Cuando yo empecé a publicar directamente la llamada literatura femenina era literatura menor y trataba esos temas de las mujeres como la maternidad, la casa. Y eso era visto como poco literario, de poco valor literario. Y creo que los movimientos feministas y este, como llamado boom de escritoras latinoamericanas, pues ha hecho que eso se revalúe mucho y que la maternidad sea vista como un tema con alto vuelo literario, que los temas de las que tradicionalmente han tratado las mujeres sean visto cómo literarios. Ahora en esta colección hay poemas sobre el aborto, hay mujeres dando teta, hay historias de mujeres, pero también hay historias de guerra, de todo.Hay ciertas autoras que no les gustan las antologías porque sienten eso que decías, que esa clasificación de "literatura de femenina" les baja el escalón. ¿Cómo le responde un poco la biblioteca a este tipo de posiciones? Es que no las leímos, ni en el colegio, no las leímos en la universidad, no las hemos leído porque están descatalogadas. Y esta es la posibilidad de leerlas y son autoras que necesitaban ser rescatadas, digamos, en la colección esta María Mercedes Carranza, que no necesitaba ser rescatada, pero este libro que hicimos decidimos incluirlo porque es un libro supremamente personal que hizo su hija Melibea y ella traza como el camino de su mamá hacia el suicidio. Entonces es una cosa bellísima. Pero pues es que era absolutamente necesario hacerlo porque los libros de estas mujeres, si vos quieres leerlos, te toca ponerte botas de lluvia, subirme al bus, ir a la biblioteca, que me lo dejen leer ahí, en la biblioteca, preguntarle, "Oye, ¿Le podría tomar fotos para poder leer estos libros?" Entonces, pues era necesario porque necesitamos que estén. La biblioteca, está conformada por las autoras: Maruja Vieira, Francisca Josefa de Castillo, Soledad Acosta de Samper, Berichá, Albalucía Ángel, Meira Delmar, Hazel Ronbinson Abrahams, Amalialú Posso Figueroa, Teresa Martínez de Varela, María Mercedes Carranza, Elisa Mújica, Flor Romero de Nohra, Silvia Galvis, Amira de la Rosa, Helena Araújo, Sofía Ospina de Navarro, Emilia Pardo Umaña y Emilia Ayarza.La colección estará disponible en todas las bibliotecas públicas del país que irá de la mano con una estrategia de difusión pedagógica en ferias de libros, conversatorios y talleres donde se acercarán también a los profesores de colegios y universidades a los cuáles se les darán pautas para utilizarlos en sus clases. Además 11 de ellos estarán disponibles para su venta al público. Como si la belleza del proyecto por si solo no fuese suficiente, me permito citar el poema con el que cierra la nota editorial Pilar Quintana para la colección que encarna el espíritu de una biblioteca librando una cruzada contra el olvido: "El nombre de antes", de Maruja Vieira: Defenderé tu rostroy tu nombrede los añosque se acumulancomo piedras rotas.Defenderé tu voz,tus palabras,de estos largos silenciosque pesan sobre mis labios.Defenderé tu luzde esta sombra.
Hablar de mujeres que debían pedir permiso para opinar o descalzarse para ingresar al trabajo, hoy no solo produce indignación sino sorpresa e incredulidad. Pero sucedió e hizo parte de las páginas de indignidad a las que fueron sometidas las mujeres en Colombia y contra las cuales lucharon hasta ganarse el reconocimiento de la sociedad.Situaciones como no poder votar ni acceder a la universidad, o educarse solo para desempeñar labores domésticas; hasta poder ser golpeadas por el suegro o encerradas y que se les negara la alimentación, eran comunes a comienzos del siglo XX. Peor aún, todavía hoy existen episodios lamentables de maltrato hacia ellas.Es parte de lo que se podrá ver en la serieMujeres sin derecho y al derecho, coproducción de Señal Colombia y Cinex, que hace parte del Mercado de Coproducción de RTVC. Está compuesta por seis capítulos que se emitirán semanalmente cada viernes alas 9de la noche,a partir de este 29 de octubre, como antesala al Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, que se conmemora el 25 de noviembre.El documental fue dirigido porVerónica Posada Galindo, con Norma Villarreal como asesora de contenidos. Juntas revisaron durante diez años los sucesos históricos que marcaron las transformaciones sociales, políticas, económicas y culturales de las mujeres en Colombia.Verónica, la directora,no alcanzó a ver el proyecto terminado,falleció el 6 de julio de este año cuando se realizaba la edición dela serie. En cada entrega de media hora se habla de educación,economía, ruralidad, política y no más violencia. La serie recorre 100 años de luchas y avances a favor de la equidad, la democracia y la inclusión de las mujeres y se reconoce a aquellas que han emprendido esta lucha, entre ellas campesinas, líderes, poetisas, politólogas y activistas reconocidas en todo el país por sus logros.Mujeres sin derecho y al derecho, con una perspectiva histórica, política y de género, muestra cómo a través de múltiples esfuerzos y propuestas expuestas en medio de tabúes, críticas y resistencias, las mujeres colombianas han venido conquistando una valoración digna y las posibilidades constitucionales para participar dentro de los procesos sociales y políticos, que vienen dando forma y legitimidad a la democracia colombiana.
El 24 de junio de 2020 el medio Volcánicas publicó el reportaje realizado por las periodistas Catalina Ruiz-Navarro y Matilde de los Milagros Londoño denominado “Ocho denuncias de acoso y abuso sexual contra Ciro Guerra”, en el cual se dieron conocer varios testimonios anónimos contra el director de "El abrazo de la serpiente" (2015). Dentro de las acciones que tomó el director contra esta publicación, estuvo la instauración de una denuncia penal, una demanda civil y dos acciones de tutela. En una de estas últimas, la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá ordenó rectificar con la entrega de más información de contexto para cada uno de los testimonios a las periodistas. Esta ampliación fue publicada en Volcánicas en una entrega especial el 12 de mayo de 2021. El día 15 de enero del 2023, la Corte Constitucional se refirió a la tutela que pretendía retirar el reportaje publicado en 2020, como consecuencia de la protección del buen nombre, según el argumento utilizado por el director. En su fallo con la Sentencia T-452 de 2022 la magistrada Diana Fajardo Rivera, la Corte Constitucional negó esta tutela, aduciendo argumentos que tuvieron relación con la protección de la prensa, el acoso judicial y el derecho de las víctimas de este tipo de delitos de optar por mantener anónimos sus nombres como medida para evitar la revictimización. Se "(i) reiteró las premisas que han guiado la decisión de casos en los que entran en conflicto la garantía de los derechos a la libertad de expresión, por un lado, y a la honra, buen nombre y presunción de inocencia, por otro, destacando la distinción fundamental entre información y opinión, así como los deberes de veracidad e imparcialidad que son predicables del ejercicio periodístico respecto de la primera; (ii) se refirió al alcance de la protección constitucional del discurso que pretende denunciar la violencia basada en género, como herramienta democrática para defender el derecho a una vida libre de violencia de las mujeres y combatir la desigualdad estructural por razones de sexo y género; y, en dicho contexto (iii) habló sobre la validez del escrache y su relación con el periodismo feminista", puede leerse en el inicio de la sentencia. Además la Corte Constitucional agregó que: “La opinión de las periodistas no partió del vacío sino de una profunda investigación y ellas, en todo caso, no afirmaron que Ciro Alfonso Guerra Picón hubiera sido condenado o esté siendo investigado por algún delito. Por tanto, la Sala no encontró elementos para determinar que el reportaje tenía el propósito de dañar al accionante (desde el concepto de la real malicia), sino el de contribuir al debate público”.Es importante aclarar que Guerra no ha sido condenado o vinculado a ningún proceso por ninguno de estos testimonios. Sin embargo sigue en marcha una demanda que inició el director contra las periodistas en la cual exige un millón de dólares como compensación por la supuesta vulneración a su buen nombre. La Corte Constitucional también se pronunció frente a este apartado, remitiendo una copia de su sentencia al juzgado de Bogotá en el cual se está tramitando dicha demanda para ser tenido en cuenta.Según "los lineamientos fijados sobre el ejercicio abusivo del derecho de acceso a la administración de justicia y la necesidad de aplicar una perspectiva de género al resolver casos relacionados con escenarios de discriminación y violencia contra la mujer", agrega la sentencia en la que también participaron los magistrados Jorge Enrique Ibáñez Najar y Alejandro Linares Cantillo. Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Se distribuirá por todo el mundo y se rodará sobre todo en Vietnam, aunque espero que también en California. Están escribiendo el guion y se estrenará de aquí a 3 años", declara Larry Berman, autor del libro Perfect Spy (El espía perfecto) publicado en 2008 por Harper Perennial y que recientemente fue traducido al vietnamita.El autor firmó el pasado año un contrato con la productora BHD Co. para la realización del film, que será dirigido por el director vietnamita Charlie Nguyen.No muy lejos de la cafetería de la antigua Saigón (hoy Ho Chi Minh) en la que habla Berman, Pham Xuan An desempeñó durante casi dos décadas su labor de espía delante de la plana mayor de los periodistas estadounidenses y de los responsables militares, que nunca sospecharon de aquel educadísimo reportero vietnamita.La historia de An (1927-2006), una de las más fascinantes del conflicto bélico, arranca en 1956, cuando Vietnam queda dividido en dos tras la derrota de los colonizadores franceses y el Norte comunista necesita información sobre la nueva potencia extranjera que patrocina al Sur: Estados Unidos.Estancia en CaliforniaPor su habilidad para los idiomas y las relaciones personales, el veinteañero An es elegido para viajar a EE.UU. vivir allí y comprender la manera de ser y de pensar del país que ya se perfilaba como el próximo enemigo bélico del Vietnam comunista.Su aguda inteligencia y su habilidad para las relaciones humanas en un Saigón plagado de estadounidenses le permiten realizar la jugada redonda: Edward Lanslade, responsable de la misión militar de EEUU en Vietnam, se convirtió en su mentor y patrocinó su viaje a California para cursar estudios de Periodismo."Estaba oculto a la vista de todo el mundo", dice Berman, profesor emérito de la Universidad de California.Estudiante modelo, An se deja seducir en California por un estilo de vida muy distinto al de su Saigón natal, hace amigos, recibe premios por su brillantez académica y aprende todos los secretos de una forma de hacer periodismo libre de la que se enamoró para siempre.Su idilio con EE.UU. termina al cabo de dos años ("los dos mejores años de mi vida", dice en el libro), cuando sus superiores lo llaman para regresar a su país y poner en práctica los conocimientos adquiridos en su periplo estadounidense.Corresponsal de los grandes mediosDe vuelta en Vietnam ejerce de corresponsal para la agencia Reuters, la revista Time y el New York Herald Tribune, se convierte en el periodista vietnamita más respetado y en la referencia de algunos grandes reporteros estadounidenses, que se nutren a menudo de su información, que solía ser veraz.Al tiempo que proporciona esa información a los periodistas y despacha con altos dirigentes del destacamento estadounidense, An proporciona a su bando mensajes escritos en tinta invisible y camuflados en rollitos comestibles que dejaba siempre bajo el mismo árbol y que una vendedora ambulante recoge para hacerlo llegar a dirigentes del Vietcong.Con ese sistema proporcionó información vital al bando comunista, entre la que Berman destaca la que permitió a las fuerzas revolucionarias una contundente victoria en Ap Bac en 1962 y la ofensiva del Tet, que en 1968 supuso un punto de inflexión en la guerra para la victoria comunista definitiva siete años después.Fue entonces cuando se desveló el papel de An para asombro de las decenas de estadounidenses que le habían tratado y con quienes había trabado una amistad que parecía sincera.En los últimos días de abril de 1975, antes de la caída de Saigón, el propio An ayudó a escapar a Estados Unidos en helicóptero a algunos amigos vietnamitas que, de haberse quedado, hubieran sufrido las represalias del régimen victorioso."Era el momento en que se podía quitar su máscara, pero después de tantos años, se había convertido en su propia máscara", afirma Berman, quien conoció a An por casualidad en Saigón a principios de este siglo y con quien mantuvo largas conversaciones hasta su muerte por enfisema pulmonar en 2006.Castigado por el régimen vietnamitaTras la victoria comunista An fue ascendido a general, pero pagó con 18 meses en un campo de reeducación su ayuda al enemigo y su ignorancia en teorías marxistas y con nueve años de arresto domiciliario su atrevimiento de decir que el sistema económico que los comunistas querían implantar era un fracaso."An desde el principio fue un nacionalista acérrimo y un comunista por obligación", apunta Berman.Con su sempiterno cigarrillo en los labios o los dedos (se enganchó al tabaco en Estados Unidos y fumó cinco paquetes al día durante más de medio siglo), An pasó los últimos años de su vida viviendo una vida modesta junto a su familia y sus adorados perros en Saigón con la pena de que el régimen no le permitiera regresar de visita a Estados Unidos.Sin embargo, tuvo la satisfacción de participar activamente en el deshielo de las relaciones de Vietnam y EE.UU. en los años noventa y de ver cómo su hijo ejercía de intérprete para el presidente de EE.UU George W. Bush.Expectante por ver cómo se plasma su libro en el cine, Berman expresa medio en broma una última duda sobre la historia, de la que sabe que An solo contó una pequeña parte."¿Cómo sé si mi libro no fue el último gran trabajo del espía Pham Xuan An?". Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Figurativo y expresionista", el artista afirma: "La forma es el pretexto para poder contar el carácter del personaje. Captar su personalidad, sus inquietudes; ese es el material que yo tengo para después pasar a la arcilla y poder representarlo”.Nacido hace 57 años en Córdoba (centro) y radicado en Buenos Aires, comenzó su carrera en las artes a los 38, momento que define como su "segundo nacimiento".Hoy, dos décadas más tarde, es uno de los escultores con mayor obra expuesta en el espacio público del país suramericano y con muchos encargos privados, en el país y el exterior.Emerge el escultorPropietario de una empresa de cartelería publicitaria, la severa crisis económica y social que afectó a Argentina a finales de 2001 le obligó a buscar otras opciones: "Realmente no sabía cómo salir, sin darme cuenta de que estaba en mis manos, que estaba en mí", explica el artista.En aquella etapa, Benavídez decidió retomar el dibujo, actividad para la que, explica, siempre tuvo una cualidad natural. Fue mediante esa impronta aplicada a la arcilla que descubrió y dio vida al escultor."Me di cuenta que hasta el último día de mi vida iba a estar con un pedazo de arcilla en mi mano, que fluía, podía jugar con ella y generar esto que se ha generado en todo este tiempo de trabajo", manifiesta.Uno de los primeros concursos que Benavídez ganó fue para erigir una estatua de más de tres metros de la cantante Mercedes Sosa: "Luego empezaron a sucederse llamados y licitaciones", explica.Eva Perón, Juan Domingo Perón, Raúl Alfonsín, Diego Maradona... "Me ha tocado hacer muchos personajes destacados de la cultura y del deporte", comenta.Entre sus obras están el monumento a Ástor Piazzolla en Mar del Plata, ciudad natal del bandoneonista y compositor, y la estatua de Eva Perón en Los Toldos, localidad bonaerense donde nació la "abanderada de los humildes".El artista es autor también del Paseo de la Gloria, una serie de esculturas en la Costanera Sur de la capital argentina, que homenajea a los máximos exponentes del deporte nacional.Allí lucen en resina, entre otros, el baloncestista Emanuel Ginóbili, los tenistas Guillermo Vilas y Gabriela Sabatini, el golfista Roberto De Vicenzo y el quíntuple campeón mundial de automovilismo, Juan Manuel Fangio.También estaba el futbolista Lionel Messi, pero de su escultura actualmente solo queda una bota, tras ser vandalizada varias veces.MaradonaAunque no conoció personalmente al '10', Benavídez es autor de muchas obras escultóricas que representan al futbolista.En 2006, un amigo llevó de regalo al 'Pelusa' varias creaciones del artista, y la respuesta de Maradona no se hizo esperar: "Decile al escultor que me encanta lo que está haciendo y que todo lo que 'Diego' toca se convierte en oro", dijo.Catorce años más tarde, en 2020, el artista plástico fue el encargado de concretar uno de los más imponentes monumentos en homenaje al ídolo, entonces recientemente fallecido.Ubicada frente al estadio Madre de Ciudades, de la capital provincial de Santiago del Estero (norte), con cinco metros de altura y dos toneladas de peso, la estatua de bronce representa a un 'Diego' de pie, con sus brazos en jarra, desafiante, sacando pecho y con la pelota en la zurda."Ya no hacía falta contarlo a él en sus habilidades, eso ya estaba, ahora teníamos que contar esa personalidad, ese carácter", explica el escultor sobre la representación elegida. "Realmente se logró, pero fue un gran desafío", agrega.El 3 de junio de 2021, antes del partido contra Chile por las eliminatorias mundialistas, la selección argentina inauguró la obra, situación en que Benavídez pudo compartir unos instantes con 'La Pulga'."Cuando nos vamos alejando, él (Messi) se da vuelta y mira el monumento. Yo estaba a su lado y le digo: 'Prepárate, pichón, porque van a venir muchas de las tuyas', se reía, nos saludamos y se fue".Entre sus proyectos, Benavídez anhela poder contar mitos y leyendas de Argentina que surcan el territorio de norte a sur: "Tenés tantas historias para contar en cada una de las provincias, hay muchísimo material. Si contamos lo nuestro creo que va a ser algo único, inédito para el mundo", exclama."Empezar a jugar y hacer volar nuestra imaginación con todo ese mundo mágico que ha pasado en nuestra tierra. Ese sería un gran desafío para esta nueva etapa", concluye el escultor. No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Este nuevo 'tour' arrancará el 23 de junio y hará parada en siete ciudades en las que la cantante y compositora repasará su nuevo álbum y los grandes éxitos de sus más de dieciséis años de carrera.La artista, de padre español y madre puertorriqueña, es toda una celebridad en Latinoamérica y Estados Unidos, y ahora se propone conquistar al público español con su música reivindicativa, baladas pegadizas y ritmos tropicales.Un público distintoEl pasado año hizo un breve periplo por España que resultó ser todo un éxito, por eso ahora volverá con una gira más extensa y un nuevo 'show'."Siempre hay nervios por saber si la gente irá a comprar boletos para un concierto, por eso el 'sold out' (todo vendido) en España fue súper reconfortante y tengo muchas ganas de volver", explica la autora de éxitos del pop latino como 'Duele menos', 'Alguien', "Agüita e coco", 'Confieso', 'Soy yo' o 'Para siempre'.Recuerda Kany García que el primer concierto que dio el pasado año en Sevilla (España) fue "clave" para conocer el lenguaje, los gustos y las preferencias del público español, muy diferente del latino. Por eso, aunque el repertorio es casi siempre el mismo en todos los países que visita, intenta adaptar el tipo de espectáculo a las particularidades de cada uno.En Colombia, por ejemplo, sube al escenario y apenas puede hablar con el público, ya que hay tal nivel de "pasión y entrega" que éste lo único que quiere es que interprete "una canción tras otra".Los españoles, en cambio, "quieren que les hables, que les cuentes, es un público que tiene hambre de escuchar", y eso, que "maravilla" a Kany García, requiere toda una preparación previa.Su último disco"El amor que merecemos", el octavo disco de estudio de la artista, es una fusión de baladas, música pop y canciones bailables que incluye duetos con los españoles Alejandro Sanz y Rozalén, dos "amigos" con quienes canta 'Muero' y 'Justito a tiempo'.La ganadora de seis Grammy Latinos ha colaborado anteriormente con cantantes españoles como Dani Martín, Leiva, Melendi o Vanesa Martín, y reconoce que le "encantaría trabajar en algún momento" con otros como Aitana o Macaco, que "están haciendo cosas increíblemente maravillosas".De su último álbum asegura que es "el menos íntimo y personal", ya que lo ha compuesto con otra gente, aunque es el proyecto en el que más se ha atrevido a dar sus propias opiniones."Es un disco muy arraigado a cómo veo mi música en este momento, muy cercano a lo que deseo ofrecer como propuesta. Lo siento como un álbum muy mío", asegura García."El amor que merecemos" incluye canciones lentas y otras "muy latinas", pero también temas "de justicia social", sello de identidad de Kany García, un referente del feminismo y el colectivo LGTBI.Y es que la artista, que estuvo casada con un hombre, hizo pública hace siete años su relación con su entrenadora personal y actual esposa, Jocelyn Trochez. Fue de las primeras figuras públicas femeninas en Latinoamérica en salir del armario.Kany García tiene otra historia personal peculiar: es hija de Antonio García, un sacerdote español que colgó los hábitos al enamorarse de Shela de Jesús -la madre de Kany- en Puerto Rico. Estuvieron 47 años juntos, hasta la muerte del exsacerdote en 2017.La cantante y guitarrista recuerda que su padre "tenía muy claro" que quería que sus hijos sintiesen que eran "50 por ciento españoles y 50 por ciento puertorriqueños". "Desde niños veníamos de visita a España, es parte de mi cultura y tengo aquí familia. Lo siento como un país muy mío", afirma.Por eso, porque "para un artista no hay nada más satisfactorio que tener éxito en su propio país", España es su asignatura pendiente. Su próximo objetivo a alcanzar. No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Me interesaba poner ese espejo de la guerra civil mientras vemos cómo una simple disputa entre dos hombres puede agrandarse en algo cada vez peor", ha dicho durante un encuentro virtual con un reducido número de periodistas.Casi quince años después de debutar en el cine con la comedia criminal "Escondidos en Brujas", McDonagh tenía ganas de volver a reunirse con los irlandeses Colin Farrell y Brendan Gleeson. "Nos ha costado, pero lo logramos", apunta.Nueve nominacionesAsegura que guardaba muy buenos recuerdos de aquel primer rodaje del que nació una amistad que han mantenido a lo largo de estos años. "La película se ha convertido en una obra de culto y pensamos que sería genial juntarnos de nuevo, pero no para repetir lo que hicimos, sino para algo nuevo"."The Banshees of Inisherin" ha conseguido nueve nominaciones a los Óscar, incluidas las de mejor película, director y guion original; además, Colin Farrell luchará por la estatuilla al mejor actor protagonista, y Gleeson y su compatriota Kerry Condon por las de mejor actor y actriz de reparto respectivamente.Ambientada en una pequeña isla frente a la costa oeste de Irlanda, la película cuenta la historia de dos amigos de toda la vida, Pádraic (Farrell) y Colm (Gleeson), a partir de la decisión del segundo de poner fin de forma abrupta e inesperada a esa amistad.Pádraic, ayudado por su hermana Siobhán, se esfuerza por reconstruir la relación y se niega a aceptar la negativa de su amigo, creando una tensión creciente entre ambos que tendrá consecuencias trágicas.McDonagh cuenta que estaba atravesando una situación personal de ruptura cuando escribió el guion, pero no quería verse solo como víctima. "Me interesaba entender también la perspectiva del que deja la relación; en el guion quedó en una proporción 60-40 a favor de Colin, pero tras hablar con Brendan lo llevamos a 51-49".Drama y humorSobre el tono del filme, asegura que le resulta imposible renunciar al humor, por serio que sea el tema. "Es una historia triste, pero sabía que si se quedaba en eso sería difícil de ver y lo cierto es que el humor me viene de forma natural siempre que escribo".Su anterior película, "Tres anuncios por un crimen" (2017), también combinaba drama y humor, en aquel caso para una historia de venganza protagonizada por la estadounidense Frances McDormand. Logró seis nominaciones y ganó dos Óscar, a mejor actriz (McDormand) y mejor actor de reparto (el también estadounidense Sam Rockwell).McDonagh comenzó su carrera en el teatro, de donde conserva el gusto por trabajar con actores y el peso que da a los personajes. Se dio a conocer en 1996 con la obra teatral "La reina de la belleza de Leenane", primera entrega de una trilogía que le valió el reconocimiento unánime de la crítica como renovador del "teatro de la crueldad".Hoy afirma que se siente más cómodo haciendo cine. "Siempre he adorado el cine, desde adolescente, pero nunca pensé que podría permitirme hacerlo, es genial formar parte de esta comunidad y aportar cosas que no sean historias de superhéroes".Reconoce que el tema de dejar un legado, que aborda en "The Banshees of Inisherin" a través del personaje de Gleeson, es algo en lo que ha pensado, pero tampoco le obsesiona."Legado es una palabra grande, uno quiere aportar algo bueno y me siento en una posición privilegiada para hacerlo, pero no es que sienta que debo dedicar cada minuto de mi vida a ello, creo que puedes ser una persona feliz y amable y también hacer películas como esta", asevera. Recuerde conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.