Lucrecia Díaz, nacida en Búfalo, aunque pasó su niñez en Colombia, reflexiona en una entrevista sobre el trabajo profesional de un fotógrafo: "No está todavía bien valorado y, por ello, invito a la ciudadanía a consumir arte porque es lo que le da sentido a un país".La fotógrafa resalta que la irrupción de la inteligencia artificial "cambiará por completo el panorama", lo cual abrirá un nuevo debate dentro del arte y, como artistas, quizás tengan "que recurrir a realizar fotos analógicas para que nadie las pueda manipular".Lo ideal sería que esta labor "se pagara mejor y, sobre todo, para reconocer la valía, porque en Estados Unidos, hace quince años, ya te contrataban para hacer sesiones para Facebook y ahora están comenzando a contratar fotógrafos para determinadas redes, por lo que invito a todos a hacerse un buen retrato o una buena foto de familia".Retrato y fotos artísticasDíaz centra su larga trayectoria profesional en el retrato y fotos artísticas de danza o baile. "Además de mis dos grandes temas, me gusta mostrar de cerca a las personas, más allá de sus oficios", comenta.Se inició en la profesión tras fotografiar a bomberos y policías de su barrio, lo que dio como resultado "Sirviendo a la comunidad", una exposición en España."El arte nace con uno, estudié Relaciones Internacionales pero las fotos siempre han sido mi hobby, de ahí que una vez que empecé a viajar se convirtió en mi profesión después de estudiar en Chile un diplomado de fotografía, lo que hizo que en cada viaje buscara un tema distinto", explica.Entiende que es "difícil" vivir de la fotografía porque a la gente le cuesta "pagar por una buena foto". Y concreta: "hoy en día, con las redes sociales, la gente piensa que tiene que verse mejor, es decir, todo el mundo se tiene que vender en los perfiles sociales y contar con un buen fotógrafo es muy importante".No obstante, apunta que la aparición de las redes sociales "hace que todo el mundo esté en la calle haciéndose selfies o fotos con los móviles y, de hecho, los teléfonos tienen unas capacidades maravillosas que pueden hacer mejores fotos en la oscuridad que con una cámara profesional".💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Detrás del uniformeDíaz, que desde 1996 reside en España y que tiene un estudio en Madrid, se encuentra estos días en Ceuta, ciudad española en el norte de África, con motivo de su exposición Detrás del uniforme, que permanecerá abierta hasta finales de este mes y en la que se aproxima a los hombres y mujeres que sirven en las Fuerzas Armadas, desde la "intimidad y la cercanía física".La fotógrafa, que ha residido también en Alemania, Chile y Australia, subraya que su idea es "aproximarme a la persona, sacarla de su entorno, meterla en un estudio y descubrir al que está detrás del uniforme, que es alguien como tú o yo". Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Lucrecia Diaz (@lucrephoto) Con esta muestra, la autora quiere celebrar la "heterogeneidad y darles protagonismo a todos aquellos cuya profesión y finalidad son el servicio y el trabajo por los demás".El proyecto nació tras visitar Ceuta el pasado septiembre con motivo del aniversario de la fundación de La Legión española.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Esto no me preocupa en absoluto", dice Leibovitz en una entrevista. Este miércoles, Annie Leibovitz será nombrada asociada extranjera a la Academia Francesa de Bellas Artes por el fotógrafo brasileño Sebastião Salgado."Tenemos una nueva paleta de herramientas a nuestra disposición para llegar a nuevas formas de presentaciones. No hay que ser tímidos. Con cada progreso tecnológico, hay titubeos, inquietudes. Simplemente hay que dar el paso y aprender a emplearlos. La fotografía en sí misma no es real. Es arte", argumenta. "Soy una retratista, me gusta lo conceptual, el Photoshop, todas las herramientas disponibles".Pero "en el periodismo, hay un código. No puedes jugar con lo que ves. Aunque existe un punto de vista, cuando deciden de dónde tomarán la foto, en qué marco", afirma la fotógrafa de 74 años, que ha retratado a celebridades como la reina Isabel II, Barack Obama, Serena William o Kim Kardashian.Sus instantáneas de momentos históricos, como el despegue del helicóptero de Richard Nixon de la Casa Blanca en 1972, han dado la vuelta al mundo. También lleva su firma la imagen de un John Lennon desnudo abrazado a Yoko Ono.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Su carrera comenzó en 1970 con la revista Rolling Stone. Desde inicios de los 1980, Leibovitz amplió su repertorio con trabajos para Vanity Fair, Vogue y proyectos independientes. Su última obra "Wonderland", publicada en 2021, repasa cinco décadas de fotografías de moda."Un gran honor"Este miércoles, durante su nombramiento en el Palacio del Instituto de Francia, la directora editorial de la revista Vogue, Anna Wintour, le entregará su espada de académica."Es un gran honor, pero es un honor todavía más grande para la fotografía", dice Leibovitz, para quien "la Academia llegó tarde a la fotografía". "Es un arte nuevo para ella, acogió en su seno un fotógrafo por primera vez en 2004", cuenta."Me gusta estar detrás de la cámara, no delante. Pero hay un momento en que te das cuenta que hay que superar una etapa y estar allí para la próxima generación de artistas y fotógrafos. Después de más de 50 años de carrera en la fotografía, creo que encaja", afirma.La orilla del Sena donde se encuentra el Instituto de Francia le trae recuerdos a la veterana fotógrafa. "Cuando estudiaba fotografía, (el fotógrafo francés Henri) Cartier-Bresson era uno de mis héroes. Así que estar aquí, a pocos pasos del Puente Nuevo que tanto le gustaba fotografiar, significa algo para mí", confía.Mientras la artista estadounidense vivía en París con la escritora Susan Sontag, su compañera desde finales de los 1980 hasta su muerte en 2004, "pasábamos (frente al Instituto de Francia) todo el tiempo. Yo no sabía qué era este edificio. Probablemente, Susan sí", explica.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
"Una chispa de curiosidad, la de pensar que si el mar se muere, nos morimos todos", expresa la fotógrafa por videoconferencia aprovechando que está en tierra firme, en Turín (Italia), preparando una exposición en la que muestra la riqueza del mundo acuático sobre el que giran su vida y su carrera.Mittermeier, que es la única fotógrafa mexicana que ha trabajado para la revista National Geographic en Estados Unidos, sumerge a los espectadores de "Photographer" en las azules aguas de las Bahamas y les explica la importancia de las praderas submarinas que intenta proteger a través de su ONG, Sea Legacy.El programa acompaña a Mittermeier y su marido, el también fotógrafo de fauna salvaje Paul Nicklen, en una misión de la ONG para retratar a las ballenas, delfines o tortugas bahameños que se ven amenazados por la extracción petrolera en alta mar, contar sus historias y llegar al público."Con mis imágenes, como fotógrafa, a mí me interesa muchísimo crear una narrativa y me ha inspirado siempre el trabajo del Dr. Martin Luther King, que no empezó su discurso diciendo que tenía una pesadilla, sino un sueño, y quiero que mis fotografías pinten ese sueño", relata.En ese sentido, señala que es importante buscar esas narrativas para recordar problemas como la crisis climática y la extinción pero "sin dejar que la gente se deprima, dando inspiración y esperanza".💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Más mujeres que transmitan detrás de la cámaraSu propia historia personal dio un giro gracias a la fotografía, puesto que estudió ingeniería bioquímica y se especializó en explotación de recursos marinos, lo que le causó una "angustia tremenda" cuando conoció la "devastación" que provocan las industrias pesqueras y de acuicultura."Empecé a tomar fotos y qué bueno que me salieron bien, porque se convirtió en carrera", cuenta Mittermeier, que reconoce "una falta enorme de representación latina y representación femenina" en la fotografía y espera inspirar a otras mujeres a tomar una cámara porque, como reitera en la serie, las mujeres tienen "superpoderes"."La habilidad que tenemos las mujeres de contar historias que están llenas de conexión, emoción... Es un ingrediente necesario para lograr cualquier cambio y lo necesitamos tras la cámara", sostiene.La activista, que atesora un momento en el que mantuvo la mirada con una ballena franca en aguas del sur de Australia, asegura le queda mucho por aprender en fotografía, pese a ser una fuera de serie, porque su meta es retratar "la relación del ser humano y el mar desde el punto de vista del océano".En cuanto al activismo por la defensa de los océanos, reivindica el poder individual, aportar un grano de arena para crear más áreas marinas protegidas, proteger e incluso "dar derechos a las ballenas", detener el flujo de plásticos al mar y "repensar la extracción industrial de biomasa marina, que no puede seguir"."Si queremos seguir viviendo en el planeta Tierra, necesitamos un mar vivo que produzca el 50 % del oxígeno que respiramos, y nos toca a todos hacer nuestra pequeña parte. Desde usar menos plásticos hasta por quién votamos, que nos ayude a salir de la pesadilla de los hidrocarburos", reivindica.No olvide conectarse con la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Paolo Roversi es conocido por sus fotos con polaroid y la superposición de colores, un estilo onírico que evoca, a menudo con imágenes borrosas, la ropa, los cuerpos o los rostros de los modelos."Sé que vivo en la duda, pero me gusta dudar. Estimo que las dudas son creadoras. Las certezas son puertas cerradas, lo bloquean todo", explicó Roversi, de 76 años, en entrevista con la AFP.Su estilo se fue desarrollando a través de tanteos, e incluso de errores de revelado. "Algunos diseñadores quieren ver sus ropas de manera nítida, por supuesto. Pero otros aceptaron mi imprecisión como algo poético e interesante, algo que le da otro perfume a los vestidos", añadió.Entre esos diseñadores que se rindieron a la magia de Roversi están algunas de las marcas más prestigiosas del mundo de la moda, como el japonés Yohji Yamamamoto, Dior o Comme des Garçons, con los que ha trabajado durante décadas. O estrellas como el modisto John Galliano, o Catalina, la princesa de Gales, en 2021."Me sorprendió la resonancia mundial de esa foto (...) Fue muy agradable trabajar con ella, una persona muy simpática y disponible", recuerda. "Hasta la hice bailar en un momento. Bailaba y fue muy bonito, se sentía libre", añadió el fotógrafo.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Roversi es un admirador declarado de los pioneros de la fotografía del siglo XIX. Retratistas que hacían posar durante largos segundos, incluso minutos, a las personas que se ponían delante de su cámara."Una pose larga le da tiempo al alma para surgir. Y le da al azar el tiempo de intervenir" explica el fotógrafo en una de las paredes de la exposición.Es la primera vez que el Palacio Galliera, sede del Museo de la Moda de París, abre sus puertas para exponer a un fotógrafo vivo. En total son cerca de 140 obras en color y blanco y negro y color de Roversi, que empezó su carrera profesional en París en 1973.La exposición, abierta hasta el 14 de julio, se abre con una diminuta foto, la primera que tomó Paolo Roversi, con 10 años, a su hermana en vestido de gala, que cumplía 18 años.Y se cierra con una serie de desnudos en blanco y negro de conocidas modelos, como Inès de la Fresange. O Guinevere, una modelo que ha trabajado durante más de 20 años con Roversi dijo a la prensa: "Cuando posas para él tienes la sensación de que te está pintando".🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Gómez, que ha pasado dos semanas en la ciudad tailandesa de Chiang Mai retratando a exiliados birmanos, indicó este lunes a EFE que el objetivo de su trabajo es concienciar sobre la situación de Birmania dentro de un proyecto liderado por el colectivo artístico Micro Galleries y la ONG birmana A New Burma.Los retratos del artista colombiano se expusieron en un par de festivales organizados por Micro Galleries y A New Burma entre el 22 y 24 de febrero en Chiang Mai y dos de las fotografías continúan expuestas en dos lugares públicos de la localidad tailandesa, además de en las redes sociales.Uno de los retratos muestra a la estudiante birmana de Ciencias Sociales Phya, de 23 años, cuyo novio se encuentra en la cárcel en Birmania (Myanmar) y que tiene también un hermano exiliado en Alemania."(Phya) vino hace un par de años a Tailandia. No puede volver y no debe volver a su país. Está dedicada a sus estudios y también trabaja dando clases de inglés en Internet", dijo Gómez en conversación telefónica.El artista afirmó que la situación ha empeorado recientemente en Birmania, después de que la junta aprobara este mes el servicio militar obligatorio para los hombres y mujeres jóvenes en medio del recrudecimiento del conflicto en el país.Otros exiliados birmanos son artistas, profesores e incluso guerrilleros prodemocráticos que se encuentran en un limbo legal en Tailandia, ya que este país no es signatario de la convención de la ONU sobre los refugiados."Fue una gran sorpresa para mí porque desconocía la realidad de Myanmar por completo. Ha sido muy fuerte encontrarme con una comunidad grande de jóvenes emprendedores que no pueden regresar a su país", explicó Gómez, que describió la esperanza, preocupación y nostalgia de estos exiliados birmanos.Según el artista, muchos exiliados tienen carreras universitarias y hablan inglés, pero debido a que no entienden tailandés tienen dificultades para encontrar trabajo en Tailandia, donde además deben moverse con cuidado porque pueden ser deportados por carecer de permiso de residencia.Con todo, son privilegiados comparados con los que han huido del conflicto birmano, pero no hablan idiomas ni tienen estudios superiores.Hnin Yee, de A New Burma, explicó a la cadena birmana DVB que el festival 'Can’t Stop Won’t Stop’ celebrado en Chiang Mai busca concienciar sobre la situación de Birmania a través del arte, documentales, la música y la gastronomía, así como promover el talento birmano.El Ejército birmano tomó el poder en un golpe de Estado el 1 de febrero de 2021 y ha usado la fuerza para reprimir violentamente a sus opositores, con más de 4.500 muertos y 20.000 detenidos, según datos de la Asociación para la Asistencia de los Presos Políticos.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Soteras es uno de los pocos que tuvo acceso a la guerra de Tigray desde el primer día, aunque con muchas dificultades: "La primera vez estuvieron a punto de arrestarme y todas las demás incursiones fueron muy difíciles. Vi muchas cosas que no pude fotografiar, porque a menudo no me dejaron sacar la cámara", explica en una entrevista a EFE.A pesar de los obstáculos, su proyecto rompe el bloqueo informativo y demuestra que "esta guerra, que el primer ministro de Etiopía dijo que iba a ser rápida y limpia, fue en realidad larga y salvaje, que las violaciones a mujeres y niñas se usaron como arma de guerra, que hubo fuerzas extrajeras involucradas, a pesar de que el gobierno etíope lo niegue, y que el conflicto sigue vivo porque se contagió a las regiones vecinas".Premio Internacional de Fotografía Humanitaria Luis ValtueñaEste trabajo de Soteras, galardonado con el Premio Internacional de Fotografía Humanitaria Luis Valtueña de Médicos del Mundo, se podrá ver en el Centro Internacional de Fotografía y Cine de Madrid (EFTI) hasta el 27 de marzo. Entre las fotografías expuestas está la de una mujer dentro de una casa de chapa agujereada por la metralla de los primeros bombardeos de la guerra de Tigray, en noviembre de 2020.En aquel momento -recuerda Soteras-, el flamante nuevo primer ministro de Etiopía y Premio Nobel de la Paz, Abiy Ahmed, dijo que la recién iniciada guerra civil iba a ser una incursión rápida y sin sangre, pero lo cierto es que soltó la bestia sin saber como volver a atarla, y después no la pudo volver a atar". "A partir de ahí, estallo la violencia en otras zonas", en una cascada de caos que da título al trabajo fotográfico de Soteras.De la esperanza democrática a la violencia más atrozLa palabra 'cascada' es especialmente simbólica en un país que vivió la llegada al poder de Abiy Ahmed como una luz de esperanza porque prometió "una cascada de reformas democráticas, que resultaron ser medidas superficiales y frágiles", mientras que "la cascada de violencia fue mucho más real".El propio Soteras creyó que Etiopía entraba en una nueva etapa de paz y prosperidad cuando llegó a Addís Abeba en 2018, hasta el punto que decidió tener allí su segundo hijo, "convencido que era un buen lugar par crear una familia", pero en los siguientes años el sueño se desvaneció.La mecha prendió en Tigray en 2020 y dos años después, cuando la cifra de muertos ya era de más de 600.000 según la Unión Africana, se firmó un acuerdo de paz que no sirvió para acabar con la guerra civil, porque ahora es en la vecina región etíope de Amhara "donde se están cometiendo atrocidades sin que nadie las documente".Contar lo no contado, tanto en Etiopía como en GazaSoteras abandonó el año pasado Etiopía y se fue a vivir a Kenia, donde decidió retomar un proyecto que inició tiempo atrás en Gaza. "Lo estuve preparando desde Kenia y tenía que haber volado a Gaza en otoño, pero se retrasó y ahora ya no existe nada de lo que quería fotografiar, lo destruyeron todo", lamenta este fotógrafo, cuya familia procede de esta región del mundo y se siente estrechamente ligado a ella."Es importante contar lo no contado -comenta-. En Etiopía hay que estar porque nadie está. Gaza es lo contrario, es uno de los conflictos más documentados, pero hay cosas de las que no se habla, así que no descarto retomar el proyecto, pero no para relatar la guerra. No solo hay que contar guerras", añade Soteras, para quien no fue fácil ser en los ojos del mundo en Etiopía.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
En el vasto mundo de la fotografía documental, pocos nombres resuenan con tanta profundidad y empatía como el de Paz Errázuriz. Esta fotógrafa chilena ha dejado una marca indeleble en la historia del arte visual, gracias a su estilo distintivo y su compromiso inquebrantable con los marginados y olvidados por la sociedad. A través de su lente, Errázuriz no solo captura imágenes, sino que también narra historias de dignidad, resistencia y humanidad.Errázuriz nació en Santiago en 1944, y desde temprana edad mostró un interés por las artes visuales. Sin embargo, su verdadera pasión por la fotografía surgió durante la década de 1970, en un momento crucial de la historia de Chile. Es en este contexto social y político tumultuoso donde encontró su voz como fotógrafa, optando por retratar a aquellos que a menudo eran ignorados o estigmatizados por la sociedad.Lo más notable de la obra de Errázuriz es su estilo íntimo y humanista. Sus retratos tienen la capacidad de penetrar en la esencia misma de sus sujetos, revelando la complejidad de sus vidas y experiencias. En cada fotografía, se puede sentir la conexión profunda que establece con quienes retrata, mostrando una empatía genuina y un profundo respeto por su dignidad.Una de las características más destacadas del trabajo de Errázuriz es su enfoque en las comunidades marginadas y los grupos vulnerables. Desde travestis hasta pacientes psiquiátricos, su cámara no discrimina, sino que busca resaltar la humanidad compartida que une a todos sus sujetos. A través de su mirada compasiva, logra romper estereotipos y desafiar prejuicios, ofreciendo una visión más completa y matizada de la sociedad chilena.Además de sus retratos, Errázuriz también se ha aventurado en la fotografía de escenas cotidianas, capturando momentos efímeros que revelan la belleza y la poesía en lo ordinario. Sus imágenes transmiten una sensación de autenticidad y verdad, invitando al espectador a reflexionar sobre la vida misma y las diferentes realidades que coexisten en nuestro mundo.Otra característica distintiva del trabajo de Errázuriz es su uso magistral de la luz y la composición. Cada imagen está cuidadosamente compuesta, con una atención meticulosa a los detalles y una sensibilidad artística que eleva lo mundano a lo sublime. Su dominio del blanco y negro añade una profundidad y una atmósfera única a sus fotografías, dotándolas de una calidad atemporal y universal.En resumen, Paz Errázuriz es una fotógrafa excepcional cuyo trabajo trasciende las fronteras de la imagen estática para convertirse en una poderosa herramienta de cambio social y cultural. Con su estilo íntimo, su mirada compasiva y su compromiso inquebrantable con los marginados, ha dejado una huella imborrable en la historia de la fotografía contemporánea, recordándonos la importancia de mirar más allá de las apariencias y reconocer la humanidad compartida que nos une a todos.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El propio director del Ballet Nacional de España (BNE), Rubén Olmo (Sevilla, 1980), fue retratado en uno de ellos, también los bailaores Israel Galván, Matilde Coral o Eva Yerbabuena. "Quería sacar al Ballet Nacional de su zona de confort, arriesgar", explica Olmo durante la presentación este miércoles en el Teatro Real que albergará cuatro funciones del 9 al 11 de febrero.Su deseo era conocer hacia dónde podría ir la danza española, el flamenco, con la idea de trabajar con Marcos Morau y con La Veronal -su compañía de danza contemporánea- sin que se perdiera la impronta del BNE.Una propuesta en la que señala que se juntaron dos mundos y cuyo resultado calificó de "un equilibro perfecto".Conocido sobre todo por sus trabajos en el mundo de la moda y como retratista de grandes personalidades, Ruven Afanador (Colombia, 1959) sintió siempre pasión por el flamenco tal y como reflejan sus libros.Premio Nacional de Danza 2013 en el apartado de coreografía, Morau (Valencia, 1982) explica que hacía tiempo que conocía el trabajo de Afanador por su formación como fotógrafo. "Es uno de los mejores del mundo vinculando el cine y las vanguardias".El fotógrafo, afincado en Estados Unidos, "se entregó en cuerpo y alma para ser el motor inspirador de este trabajo", indica Morau, lo que demuestra su "generosidad, al fin y al cabo estoy trabajando con un legado, aunque me he sentido muy libre a la hora de interpretarlo"."He entrado en un lugar que desconozco -continúa-, tengo un gran conocimiento teórico, pero ninguna experiencia en el flamenco", una razón por la que no ha querido hacer un espectáculo de danza contemporánea al uso, pero tampoco de flamenco al uso. "Me he acercado al flamenco sin miedo, pero con respeto", remarca.Un espectáculo coral, con un vestuario en negro, atrevido, que amplía la mirada sobre el flamenco, con el que se proyectan imágenes y una estética transgresoras para el Ballet Nacional.La coreografía trata de dar movimiento, "como en una secuencia", a la fotografía, un elemento estático al que los bailarines dan vida, "una mirada humilde al flamenco -dice Morau-, un mundo que nos fascina y nos cuesta definir".El director de La Veronal detalla que se ha inventado una sesión fotográfica, su dinámica, "nos metemos en una realidad-ficción y poco a poco los personajes cobran vida hasta que se crea una conexión y cuando se cierra el telón hemos presenciado una fascinación alegórica al universo de Afanador".Olmo concluye señalando que se trata de un espectáculo que va a tener mucho recorrido dentro del Ballet Nacional, que dio un nuevo giro a la profesión y en el que "Marcos se convierte en el objetivo de la cámara".No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Una visión irónica ya presente en el origen del nombre artístico que adoptó, fruto de su supuesto nacimiento bajo una col, tal y como le contaba su padre cuando era pequeña.Y que continuaría toda su vida, como da fe la imagen que eligió para ilustrar la biografía que acompaña su archivo fotográfico, en la que aparece con sus perritos Galia, Paquito y Misia sosteniendo un hueso de juguete en la boca.Antes había retratado a Gabriel García Márquez con su libro "Cien años de soledad" como sombrero, a Jorge Herralde con sus dos secretarias agachadas a los pies de la mesa del editor, a un Juan Marsé sentado en su balcón con chancletas o a Quino degustando un plato de sopa.Colita se inició en la fotografía a principios de los años 60, una época en la que los hombres acaparaban la profesión, y se unió a maestros como Xavier Miserachs, Oriol Maspons, Fracesc Català-Roca y Leopoldo Pomès.Comprometida desde sus inicios con sectores de la oposición a un régimen franquista que agonizaba, Colita es considerada la fotógrafa de la denominada "Gauche Divine" barcelonesa, de la que formaban parte intelectuales, escritores, profesionales y artistas de izquierdas.De esta etapa se recuerda especialmente la exposición de amigos suyos que se reunían en la sala Boccacio que agrupó bajo el título "La gauche qui rit" en 1971 en la Galería Aixelà de Barcelona y que fue clausurada por la policía al día siguiente de su inauguración.Entre sus intereses artísticos figuraban corrientes aparentemente tan alejadas como el flamenco y la Nova Cançó catalana, y retrató tanto a Carmen Amaya, La Chunga y Antonio Gades como a Joan Manuel Serrat, Raimon u Ovidi Montllor, o los edificios modernistas de Antoni Gaudí.Aunque es especialmente reconocida como retratista, Colita también se significó por captar el paisaje urbano y la transformación de su querida Barcelona y sus alrededores, mostrando desde la alta sociedad y los ambientes de moda hasta los anónimos bloques del extrarradio o los barrios de barracas más humildes, como el Somorrostro de los gitanos.Colita fue testigo y dio testimonio de acontecimientos importantes, "como la transición democrática, que fue fascinante, entusiasmante, del momento en que se recuperaron las libertades, del despuntar del feminismo", recordaba en una entrevista con EFE en 2015 en la que reivindicaba su condición de "fotógrafa de prensa".Se definía como una "humanista", a la que le gustaba retratar la realidad, desde el punto de vista del ser humano, una realidad que veía diversa y que obligaba al fotógrafo a reflejarla.Cuando en 2014 fue galardonada con el Premio Nacional de Fotografía, el jurado reconoció una destacada trayectoria de más de cinco décadas dedicada al fotoperiodismo, el retrato y el ensayo fotográfico.Un jurado que valoró haber sido "una fotógrafa comprometida con su época, en particular en la defensa de los derechos de la mujer", con unas fotografías en las que "siempre se encuentra humor, inteligencia e ironía".Un premio que Colita agradeció al jurado, pero al que renunció en protesta por lo que consideró "la tóxica política cultural y de educación del Gobierno" y para no tener que hacerse una foto con el ministro de Cultura de entonces, José Ignacio Wert (PP).La fotógrafa justificó su decisión precisamente en uno de los valores que le reconocía el jurado: "el compromiso con su época".No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El jurado estuvo compuesto por el editor Michael Mack (Londres); la comisaria de la Barbican Art Gallery Alona Pardo (Londres); el director de la Virreina Centro de la Imagen, Valentín Roma (Barcelona); y la comisaria jefa y directora de exposiciones y colecciones del Centro Internacional de Fotografía -ICP- (Nueva York), Elisabeth Sherman, además de Carlos Gollonet, conservador jefe de fotografía de Fundación Mapfre.Todos ellos destacaron del proyecto de Romero Beltrán "su aproximación poética a la fotografía documental, así como su búsqueda de una profunda reflexión visual sobre lugares o situaciones de tensión y conflicto".El proyecto, en curso, tiene como protagonista el río Bravo y la importancia que tiene por su doble estatus: es río y frontera al mismo tiempo.El trabajo, que se desarrolla en la aproximación al territorio inmediatamente anterior a la frontera, desde Monterrey hasta el río que marca el límite, presenta el conflicto migratorio de esta frontera, que no es únicamente local, sino que atraviesa todo el centro y sur del continente.Las imágenes hacen hincapié no sólo en el territorio sino también en sus habitantes, que igualmente constituyen una frontera, y en las personas que esperan a cruzarla, algo que puede prolongarse algunos meses o años.Además de la dotación económica de 25.000 euros, el reconocimiento incluye la producción y la organización de una exposición en el centro KBr Fundación Mapfre (Barcelona) y en la sede de la Fundación en Madrid, que mostrará el resultado del proyecto, y la edición de un libro.De carácter bienal, este galardón tiene como objetivo contribuir al reconocimiento y la proyección de autores con una trayectoria profesional ya en curso y cuya obra muestra valores artísticos de especial interés dentro de la tradición de la fotografía documental.Felipe Romero Beltrán (Bogotá, 1992) desarrolla actualmente un programa de doctorado en la Universidad Complutense de Madrid y paralelamente realiza proyectos fotográficos en Colombia, España y México.Su práctica toma elementos cercanos a los campos de la política y la historia social, profundamente influenciado por la tradición fotográfica, abordando casos de estudio que indagan las posibles relaciones entre el documento y la sociedad.El ganador del premio se interesa en territorios que atraviesan o han atravesado procesos de conflicto.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Dudamel llevó al escenario al rapero Common, al guitarrista y exjugador de los Yankees Bernie Williams y a varios estudiantes de música como parte de la celebración de la orquesta.La gala fue un anticipo de la próxima dirección del maestro venezolano en la orquesta más antigua de Estados Unidos, que empezará en la temporada 2026-27, cuando ponga fin a su puesto al frente de la Filarmónica de Los Ángeles tras 17 temporadas."Estoy totalmente convencido de que el futuro de la sociedad comienza con la educación de los jóvenes", dijo Dudamel a los asistentes."Estoy muy emocionado por nuestro futuro juntos", agregó, en referencia a su aterrizaje en Nueva York.Aunque aún no está al frente de la orquesta de la Gran Manzana, ya ha comenzado a trabajar en la configuración de su programación.La incorporación de Dudamel, de 43 años, fue un golpe de efecto para la filarmónica neoyorquina, fundada en 1842 e resuelta en los últimos años a modernizar su imagen.La dirección de la entidad invirtió 550 millones de dólares en la renovación de la sala David Geffen, su sede en el Lincoln Center de Manhattan.Dudamel calificó la música de "derecho humano fundamental" e hizo hincapié en el rol "trascendental" que "puede desempeñar en la vida de los jóvenes". El director invitó a varios estudiantes de música para que tocaran junto a los artistas de la compañía.También subió al escenario la estrella del hip-hop Common, que rindió homenaje a las raíces del género en Nueva York antes de interpretar con la orquesta canciones como Glory, tema que ganó un Oscar con la película Selma.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Bernie Williams, quien jugó 16 temporadas en el equipo de béisbol de los Yankees de Nueva York además de ser un consumado guitarrista, interpretó una composición de jazz.Como muchas instituciones de música clásica, la Filarmónica de Nueva York lleva años intentando renovar su imagen, que algunos críticos han tachado de demasiado elitista.Durante su estancia en Los Ángeles, Dudamel estrechó lazos con Hollywood al tiempo que se catapultaba su fama, acercando la música clásica a oídos quizá poco familiarizados con el género, incluso intimidados por todo lo que lo envuelve.Nacido el 26 de enero de 1981 en Barquisimeto (Venezuela), hijo de un trombonista y una profesora de canto, Dudamel cultivó su talento gracias al programa de educación musical venezolano El Sistema.Cuando se mudó a Estados Unidos, quiso llevar todo ese conocimiento a los más pequeños, y creó la Orquesta Juvenil de Los Ángeles, conocida como YOLA, siguiendo el modelo de El Sistema."Tenemos que educar a la gente, pero de la mejor manera, no poniendo el arte en un pedestal inaccesible", dijo a los periodistas el año pasado en una rueda de prensa en la que se presentó como próximo director musical y artístico de la Filarmónica de Nueva York."Cuando le das un instrumento a un niño, le estás dando belleza, le estás dando la oportunidad de crear su propio mundo", afirmó.Su actuación del miércoles fue una confirmación de esa visión de futuro, con los jóvenes músicos como máxima prioridad.Es una apuesta por crear un "futuro en el que todos nos sintamos seguros, en el que todos nos sintamos escuchados", dijo.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
No obstante, acudirá a ella el propio mandatario, quien presentará el domingo 12 de mayo su última publicación, Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica, según confirmó la Fundación El Libro, organizadora del certamen.Según los datos manejados por la Fundación, las ventas editoriales cayeron en Argentina entre un 20 % y 30 % en el primer trimestre de este año.Para incentivar que el público pueda comprar en esta edición, que se celebra del 25 de abril al 13 de mayo, la Fundación logró del Estado la exención de impuestos para los libros importados que se pongan en venta en el predio de La Rural, en el porteño barrio de Palermo.Será una manera de paliar las contracciones, aunque datos oficiales indicaron que la industria argentina de edición e impresión cayó el año pasado un 3,8 % y en el primer bimestre de este año acumuló una caída del 5,7 %.De acuerdo con el informe anual de producción de la Cámara Argentina del Libro (CAL), durante 2023 hubo 24.690 publicaciones en papel, lo que representa una tirada total de más de 47,9 millones de ejemplares, pero una bajada del 24 % respecto de 2022.En esta oportunidad, la Feria del Libro tendrá como ciudad invitada de honor a Lisboa (Portugal) y contará con el discurso inaugural de la escritora argentina Liliana Heker, de 81 años, que en diálogo con la prensa local ya adelantó que hará alusión "al ataque que se está haciendo a toda la cultura".💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.El presidente de la Fundación El Libro, el escritor Alejandro Vaccaro, ya se había mostrado previamente crítico con el Gobierno nacional, que por primera vez no formará parte de los pabellones de la feria: "Hay en el imaginario colectivo una sensación de que este Gobierno es sumamente hostil a todas las manifestaciones culturales", afirmó en rueda de prensa.Entre las actividades del certamen habrá homenajes a los autores argentinos Adolfo Bioy Casares y Julio Cortázar -por el 110° aniversario del nacimiento de ambos y el 25° de la muerte del primero, y al dibujante Joaquín Salvador Lavado 'Quino' y a su personaje más inolvidable, Mafalda.El predio dispondrá de unos 430 expositores que ocuparán unos 15.000 metros cuadrados, así como participaciones en innumerables actividades, como cuentacuentos, diálogos entre escritores o muestras fotográficas.Entre las presentaciones internacionales estarán el francés David Foenkinos, la ecuatoriana Mónica Ojeda, la china Zhao Si, las españolas Elvira Sastre y Sonsoles Ónega, la uruguaya María Lourdes Ferro o el italo-colombiano Walter Riso.A nivel nacional, estarán presentes los argentinos Eduardo Sacheri, Leila Guerriero, Claudia Piñeiro o Gabriel Rolón, que integrarán distintos paneles y presentaciones de libros.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
“Una toma de la realidad para ciertos horrores, pero finalmente es literatura y al ser literatura se convierte en un espacio seguro donde poder hablar y pensar de lo oscuro, donde poder imaginar lo que nos da miedo y ponerle nombre, sin que nos pase nada”, dijo la autora.Enriquez compartió espacio con la narradora mexicana Liliana Blum para hablar de ‘El horror de la realidad’ y sostener un diálogo con sus lectores que se reunieron en el edificio Arroniz, uno de los sitios históricos de la ciudad mexicana de Guadalajara, capital del estado de Jalisco (oeste de México).La argentina, autora de libros como ‘Nuestra parte de la noche’, afirmó que escribir este género literario demanda de los escritores honestidad, pero también alejarse de la superioridad moral para crear a sus personajes y dejar de pretender que tienen una lección para dar a quienes les leen.“Si hay algo en todo tipo de literatura es la superioridad moral, creer que los personajes que una crea, lo que tiene para decir, etcétera, es de alguna manera mejor que el lector, que les estás dando una lección, que le estás señalando, eso está pasando en literatura y lamentablemente está pasando bastante en literatura escrita por mujeres”, declaró.La mexicana Liliana Blum aseguró que crear literatura de terror es también mostrar el lado oscuro y las perversidades de quien la escribe y que no siempre se puede decir en voz alta.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.“Lo más perturbador de todo es que en el fondo todos somos iguales, claro decidimos actuar o no actuar sobre ciertas cosas. No es difícil meterse adentro de un personaje si aceptas también lo que tú eres y las partes oscuras no tan estimulantes”, afirmó.La narradora de ‘Un descuido cósmico’ afirmó que cuando un escritor acepta su propia humanidad y reconoce su propio lado oscuro logra ser más honesto en la forma de construir sus personajes y cómo los lectores se identifican con ellos”.Ambas escritoras coincidieron en que el género del horror es un buen espacio para hablar del cuerpo y las exigencias de la sociedad ante la belleza, especialmente para las mujeres.“Mis personajes nunca se han sentido a gusto en sus cuerpos, como yo no me he sentido en el mío, por eso tienen siempre eso: o es enana, es demasiado gorda o se están haciendo viejas, mis personajes en este último libro han ido creciendo junto conmigo y eso es un reclamo que yo doy (en mis libros)”, expresó.No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
Aunque aún se desconocen las causas del incidente, el director del Moulin Rouge, Jean-Victor Clerico, declaró que no había indicios de "sabotaje", sino que se produjo por un "problema técnico".Las aspas del decano de los cabarés parisinos --inmortalizado por el pintor Henri de Toulouse-Lautrec a finales del siglo XIX-- se desprendieron hacia la 01H45 de la madrugada, una media hora después de que se fueran los últimos espectadores.Las letras M, O y U de su nombre, situadas en la fachada, también cayeron, pero no hubo heridos ni hay riesgo de otro colapso en la estructura del inmueble, según los bomberos."Es increíble", declaró a Exaucé, que no quiso dar su apellido. Este cocinero del Moulin Rouge descubrió las aspas en el suelo cuando llegó al lugar hacia las 08H00 de la mañana.La entrada del establecimiento se encontraba este jueves en la mañana acordonada, pero la calle no estaba bloqueada, mientras un camión retiraba los elementos desplomados, constató una periodista de AFP."Es extraño. Es como si cortáramos la cabeza de la Torre Eiffel. Me duele. Espero que lo arreglen rápido", declaró Daniel, de 58 años, quien pasa todos los días por delante cuando va camino del trabajo.La empresa propietaria indicó que "es la primera vez que se produce un accidente de este tipo desde la fundación del Moulin Rouge, el 6 de octubre de 1889".💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Templo del cancán"Afortunadamente ocurrió después de la hora del cierre", agregó la empresa, según la cual, "cada semana la dirección técnica del cabaré comprueba el mecanismo de las aspas del molino y no había encontrado ningún problema"."El propio sitio cuenta con vigilancia 24 horas al día, sobre todo en el tejado, con presencia humana. Ya sabemos que no se trata de un sabotaje, sino de un problema técnico evidentemente", dijo a la prensa Clerico.El único incidente grave en el templo mundial del cancán fue un incendio provocado por unas obras en 1915, que obligó a cerrarlo durante nueve años, según el cabaré.La ministra francesa de la Cultura, Rachida Dati, expresó su "emoción particular para el mundo del espectáculo y para todos los enamorados de París", y la alcaldesa de la ciudad, Anne Hidalgo, dijo "esperar" que la estructura estaría reparada antes de los Juegos Olímpicos, del 26 de julio al 11 de agosto.En una mezcla de madera, metal y aluminio, las aspas fueron restauradas como nuevas hace dos décadas para que fueran más ligeras, precisó Clerico, y su estructura y motorización "son controlados cada dos meses por una empresa especializada".Este establecimiento, que cumplirá 135 años el 6 de octubre, está situado a los pies de la turística colina de Montmartre, en el norte de París, y en el corazón del animado barrio de Pigalle.Sinónimo de las desenfrenadas noches parisinas junto al Lido y sus bailarinas de cancán, atrae cada día a miles de visitantes de todo el mundo, que se fotografían ante su fachada.Sus espectáculos de bailarinas en enaguas y volantes, en la estela de leyendas como La Goulue, la Môme Fromage, Nini Pattes en l'air y Mistinguett, hicieron famosa a esta institución.La película musical Moulin Rouge de Baz Luhrmann en 2001, protagonizada por Nicole Kidman y Ewan Mc Gregor, reforzó su interés internacional.El Moulin Rouge acoge a 600.000 espectadores al año, con dos representaciones cada noche, 365 días al año, y emplea a unos 450 trabajadores.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.
El cineasta Laurent Cantet falleció de un cáncer que sufría desde hace un tiempo, y cuyo tratamiento no le impidió estar trabajando en una película que estaba en fase de preproducción, en colaboración con Marie-Ange Lucciani, productora de la aclamada Anatomía de una caída.Dirigió 13 títulos entre largometrajes (diez), cortos (dos) y una miniserie de televisión, y los escribió todos, bien en solitario o bien trabajando en grupo.El reconocimiento internacional le llegó con Entre les murs, que fue el primer filme en francés en ganar la Palma de Oro de Cannes en 21 años.La película impactó por su narración de la vida en un instituto de enseñanza media en un barrio conflictivo de París, donde un profesor lucha para que su mensaje cale entre alumnos adolescentes de distintas razas y de orígenes modestos.💬 Síganos en nuestro canal de Whatsapp aquí.Además de la Palma de Oro de Cannes, recibió otros diez galardones nacionales e internacionales y fue nominada a los Óscar de 2009.Cantat creó un cine de conciencia social y trató la falta de moralidad de la sociedad contemporánea, como mostró sobre todo Resources humaines (1999), que narra la peripecia de un joven de familia obrera que tras unos brillantes estudios empieza a trabajar en las oficinas de una fábrica, donde debe acometer el despido de algunos trabajadores, entre ellos su propio padre.🔴 No olvide conectarse a la señal en vivo de la HJCK, el arte de escuchar.