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¿Cómo afecta la reforma tributaria al cine colombiano?

En pleno gobierno “de la economía naranja”, la Reforma Tributaria pretende eliminar la Cuota para el Desarrollo Cinematográfico, que es una contribución parafiscal administrada por el Fondo para el Desarrollo Cinematográfico.

Ivan Duque
Colombia's new President Ivan Duque gives his thumb up during his inauguration ceremony at Bolivar Square in Bogota, on August 7, 2018. - Duque has his work cut out for him as he takes office Tuesday amid heightened tensions with neighbouring Venezuela and the lingering difficulties of peace-building with the nation's rebel groups. (Photo by Raul Arboleda / AFP)
RAUL ARBOLEDA/AFP

Los resultados son claros: si en 1997 se estrenaron 2 películas colombianas, el año pasado fueron 42. Y no solo es una cuestión de cantidad, sino también de calidad, pues las cintas se han movido en festivales de cine a lo largo del mundo y algunas, como La tierra y la sombra, de César Acevedo, o El abrazo de la serpiente, de Ciro Guerra, se llevaron aplausos y premios. Esta última, además, logró el hito de ser la primera película colombiana nominada al Óscar.

Todo se logró gracias a la creación de Proimágenes hace 20 años, a la Ley del Cine de 2003 y a la Ley Filmación Colombia (de 2012), que promovió la llegada de productores extranjeros para filmar en el país. Gracias a eso, grandes directores, actores y productoras (como Netflix) han venido a filmar en Colombia y el talento nacional se ha potenciado hacia el mundo.

Pero todo eso podría estar en riesgo por la famosa Ley de Financiamiento que el gobierno presentó al Congreso, y con la que busca llenar el hueco de 14 billones de pesos en el presupuesto para 2019. La alerta la puso la Asociación colombiana de productores de cine independiente (Asocinde), una red de realizadores, compañías, instituciones y asociaciones dedicadas al cine, encargada de promover esa industria en el país. Ana Piñeres, actual presidenta de la asociación, dice que tal y como está redactada, la ley tumbaría algunos de los beneficios que hoy tienen quienes invierten en el cine: "una de las grandes fortalezas de la Ley 814 de 2003, la ley del cine, fue que incentivó a las empresas o personas naturales para que inviertan dinero en el cine, y así obtuvieran grandes beneficios tributarios".

El beneficio es una deducción del 165 por ciento del valor invertido o donado a una película colombiana a la hora de hacer la declaración de renta. Es decir, si una persona (natural o jurídica) invierte 1 millón de pesos, puede deducir alrededor de 1 millón 650 mil pesos de su declaración de renta. Eso -que en plata blanca implica que el inversionista siempre recupere el 52 por ciento de lo que da para hacer una película- disparó la financiación de proyectos cinematográficos en el país.

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Ahora la preocupación de los realizadores se debe a que el proyecto de reforma propone que todos los descuentos tributarios se eliminen. Y aunque la redacción de ese pedazo es un poco ambigüa –pues no diferencia directamente entre descuentos y deducciones–, algunos productores y realizadores creen que podría interpretarse para eliminar esos beneficios.

En otra sección, además, la reforma propone cambiar la metodología para hacer deducciones tributarias, y pone un límite para esas deducciones, del 35 por ciento. Es decir, así no se elimine totalmente el beneficio, la reforma podría limitarlo.

Otra gran preocupación tiene que ver con el Fondo para el Desarrollo Cinematográfico (FDC), un fondo que recoge una parte de la plata que cada colombiano paga por su boleta de cine para luego financiar la filmación de películas colombianas. Como la reforma propone ponerle un IVA a las boletas, algunos creen que eso podría generar que la asistencia a cines se reduzca y que, en consecuencia, la plata del fondo disminuiría. Algunos cálculos iniciales, creen que los ingresos se podrían reducir en un 20 por ciento.

El último tema que preocupa al gremio del cine es el de los productores extranjeros que vienen a filmar a Colombia. El actual estatuto tributario establece que la exportación de servicios está exenta del IVA y contiene un parágrafo que especifica que cuando los productores extranjeros vienen a grabar una película a Colombia, este servicio se considera de exportación, así la película luego se vea en las salas colombianas. Como la reforma propone quitar ese parágrafo, muchos creen que eso podría interpretarse como una eliminación de ese beneficio. "Netflix podría irse de Colombia y dejar de filmar series acá", cuenta Piñeres.

José Daniel López, representante a la Cámara por el partido Cambio Radical, explicó la situación a través de Twitter, a modo de denuncia pública. Para empezar, López explica cómo la Ley del cine ha sido determinante en la creación de cine en el país.

“Desde 2003 y hasta pandemia, el cine colombiano tuvo un boom. En parte, gracias a la Ley del Cine (Ley 814 de 2003). La ‘Cuota para el Desarrollo Cinematográfico’ es una contribución parafiscal administrada por el Fondo para el Desarrollo Cinematográfico. Este fondo se dedica a subsidiar y estimular producción cinematográfica en Colombia. Pero la reforma elimina esta contribución y pone al fondo a depender del Presupuesto General de la Nación, tomando como base el recaudo de 2019”, anotó.

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Así las cosas, la reforma le quitaría financiación y autonomía al FDC.

Además, también se vería afectado el incentivo para promover cortos nacionales, ya que, tal como agregó López, “[con la reforma] eliminan incentivos para la proyección en salas de cine de cortometrajes producidos en Colombia”.

El debate

Como la reforma hasta ahora pasa a revisión a las comisiones de Senado y Cámara de representantes, los productores colombianos están preparando sus argumentos para pedir que estos temas sean aclarados (o revisados) en la ley que se va a aprobar.

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Los realizadores, además, creen que como uno de los pilares del gobierno de Iván Duque es el impulso a la llamada economía naranja (como le dicen a las industrias culturales y creativas, dentro de las cuales está el cine, la literatura, el arte, el diseño, etcétera), el tema podría llegar a revisarse, pues el presidente ha sido muy claro en que quiere que este sector se convierta en uno de los motores de desarrollo de Colombia.

Por ahora, es claro que el cine no es el único sector molesto con la ley propuesta. Los empresarios de conciertos y músicos como Juanes o Santiago Cruz también protestaron porque creen que con la redacción actual de la reforma, se eliminarían los beneficios de la Ley de Espectáculos Públicos, que favorece la realización de conciertos en Colombia. Además, las boletas para este tipo de espectáculos, también se encarecerían.

"Estamos generando una alerta, queremos construir –explica Piñeres–. Nosotros estamos trabajando el tema con los tributaristas, porque queremos presentar una propuesta que sea tenida en cuenta en el estudio del proyecto".